Los homicidios de tres conductores de
transporte público y el intento de asesinato de uno más guardan relación con la
disputa de grupos delincuenciales por la venta de droga en las calles de
Tijuana. Todos conducían sus unidades al momento de los ataques, en dos casos
con pasajeros a bordo. Autoridades identifican a una célula del Cártel Jalisco
Nueva Generación en la delegación Los Pinos como la responsable de estos
ataques
Choferes que utilizan las
unidades de transporte público para transportar droga de un punto a otro en la
ciudad, así como se dedican al consumo o a la venta de cristal en los sitios de
abordaje, fueron blanco de ataques armados que, en un lapso de tres días,
dejaron tres conductores muertos, uno herido de bala y una pasajera lesionada
en Tijuana.
Tres de estos hechos se
dieron en la delegación Los Pinos y los choferes laboraban no solo para la
misma empresa, sino que compartían ruta, por lo que autoridades ubican el
origen de estos asesinatos en el intento de homicidio que sufrió un conductor
de calafia el 4 de julio.
Alrededor del mediodía de ese
jueves, Isaías Zepeda Vázquez conducía la unidad con número económico 43 de la
empresa Autotransportes Tijuanenses, asignada a la ruta Tres de Octubre, en la
colonia Villa Floresta.
Con varios pasajeros consigo,
el joven de 23 años de edad circulaba sobre el Bulevar Díaz Ordaz cuando un
sujeto descendió de una camioneta para caminar sobre la vialidad en medio de
vehículos, llegar hasta el costado de la víctima y accionar un arma corta.
Isaías recibió varios
disparos. Pisó el acelerador de la unidad, impactándose con carros al frente,
lo cual no desmotivó a su agresor, quien corrió a un lado del vehículo para
continuar disparando, hasta huir corriendo.
Isaías perdió el control de
la unidad, la cual invadió el carril en sentido contrario del bulevar y terminó
golpeando cinco vehículos más, pero no se registraron heridos colaterales.
El conductor fue trasladado
de emergencia a un hospital donde salvó la vida, pese a la gravedad de las
heridas.
Aunque en el momento no se
reportaron a los responsables detenidos, información compartida con ZETA indica
que horas más tarde se logró la detención de un grupo de hombres armados,
quienes buscaban asesinar al agresor del conductor de la calafia, para vengar
el ataque que había sufrido.
Hans Rodrigo, Alberto, Jesús
Adrián y Jesús Alfredo viajaban en una camioneta Ford Expedition de color verde
sobre la calle 15 de Septiembre en la colonia Tres de Octubre cuando se
encontraron de frente con una patrulla de la Policía Municipal.
El conductor se dio a la fuga
después de intentar fallidamente impactar la unidad de los policías, pero
cuadras después chocó contra un vehículo estacionado, por lo que los hombres
descendieron del carro para emprender la huida.
Antes de que lo lograran, los
agentes les dieron alcance y les decomisaron dos armas cortas calibre 9
milímetros, cada una abastecida con ocho tiros útiles y un cargador.
Los detenidos confesaron que
se dirigían a asesinar al sujeto que había intentado ejecutar a Isaías ese
mismo día, a quien ya tenían identificado.
El ataque había sido ordenado
por una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), la cual buscaba
retomar el control en la zona de Los Pinos, y como parte de ello, asesinarían
al conductor por dedicarse al narcomenudeo para un grupo contrario.
Los agentes ubicaron al
presunto homicida, a quien encontraron con varias dosis de droga, por lo que lo
turnaron a la agencia especializada en Narcomenudeo de la Procuraduría General
de Justicia del Estado (PGJE).
Debido a que el intento de
homicidio había ocurrido varias horas antes, no pudieron comprobar la
flagrancia del delito.
TRAS HOMICIDIO FALLIDO, CJNG TOMA REPRESALIAS
Pasaron dos días de ese
primer ataque y un segundo conductor de la misma línea de transporte fue
atacado a balazos. A diferencia de Isaías, Fernando Rivera Romero perdió la
vida.
El sábado 6 de julio,
alrededor de las 2:00 pm, fue encontrado muerto en el asiento del conductor de
una calafia con número económico 90, perteneciente a la ruta Tres de Octubre.
“El Zurdo”, como era conocido
el conductor, transitaba sobre esa misma ruta, en la Avenida Punta Arenas de la
colonia Tres de Octubre, cuando fue asesinado de un disparo en la cabeza.
Según información recabada
por investigadores a cargo del caso, el hombre de 44 años había sido testigo
del homicidio de uno de sus amigos, suscitado en junio. Además, familiares
confirmaron que consumía la droga conocida como cristal.
En este caso, más que haber
sido testigo de un asesinato, las autoridades sospechan que el móvil del crimen
fue el consumo de metanfetaminas y su probable relación con actividades de
narcomenudeo.
Al día siguiente, domingo 7
de julio, otro conductor de la misma ruta fue asesinado, pero a diferencia de
los casos anteriores, en el ataque resultó lesionada una pasajera de alrededor
de 20 años.
Cristian Anaya Chavarría
conducía la calafia azul y blanco con el número 4248 designada para la ruta
Tres de Octubre, sobre Avenida Manuel Contreras de la colonia Jardines de la
Mesa, después de las diez de la noche, cuando fue atacado a balazos.
La unidad terminó
estrellándose contra una vivienda, cerca de un puesto de tacos. Para el arribo
de policías y paramédicos, el conductor de 29 años ya no contaba con signos
vitales, pero la mujer que viajaba como pasajera fue atendida en el lugar por
heridas en brazo y pierna, ambas producidas por el ataque armado.
Personal de Servicios
Periciales de la PGJE recogió ocho casquillos calibre 40 del lugar y, según
testigos, el responsable abordó una camioneta blanca y huyó rumbo a la colonia
Tres de Octubre.
Según refirieron familiares,
Cristian tenía cinco años trabajando como taxista y negaron que se dedicara a
otra actividad.
Al igual que en el primero de
los ataques, en el cual el conductor salvó la vida, agentes localizaron cámaras
de videovigilancia que captaron el momento del ataque.
Estos dos homicidios fueron
entendidos desde las corporaciones policiacas como represalias que tomó el CJNG
tras su intento fallido por asesinar al primer conductor, ya que los choferes
asesinados laboraban en la misma área.
TAMBIÉN ASESINAN A TAXISTA
Minutos antes de las ocho de
la noche del sábado 6 de julio, policías respondieron a un reporte de
detonaciones de arma de fuego en la delegación Sánchez Taboada.
Al llegar a la Avenida
Internacional de la colonia de los Maestros, observaron un taxi libre blanco
con franjas naranjas. En el asiento del conductor se encontraba un hombre sin
vida, con varias heridas producidas por arma de fuego y el cinturón de
seguridad todavía colocado.
Fue identificado como Eduardo
Valdés, de 45 años, quien vestía una camiseta tipo polo blanca con el logotipo
de Súper Taxis Libres, el cual pertenece a la Unión de Permisionarios de Taxis
de Tijuana, Asociación Civil.
Los familiares del conductor
no aportaron información respecto a las actividades que realizaba ni refirieron
tener alguna sospecha sobre los responsables.
Sin embargo, por la mecánica
del crimen, autoridades descartan que se
haya tratado de un robo.
MÁS ATAQUES ARMADOS EN UBER Y TRANSPORTE DE PERSONAL
El lunes 8 de julio, dos
homicidios más se registraron en los que el transporte público se vio
involucrado. Poco después de la medianoche, un hombre que estaba abordando una
unidad Uber fue acribillado.
Alrededor de las 12:45 am, un
conductor a bordo de un Nissan Versa color guinda, se trasladó a la Avenida
Ignacio Zaragoza de la colonia Chihuahua en la delegación San Antonio de los
Buenos para brindar el servicio a un usuario.
La víctima recibió disparos
con tres armas de calibre distinto. Cuatro impactos fueron producidos por una
pistola calibre 9 milímetros, dos más con un rifle de asalto y una más con un
arma larga calibre 223.
Al momento en que los agentes
acudieron al sitio, solo encontraron a la víctima sin vida, pero no al conductor
de la unidad, por lo que sospecharon un vehículo robado, lo cual resultó
negativo al revisar la unidad.
La plataforma de transporte
colabora con la PGJE para revisar qué usuario había solicitado el servicio, ya
que hasta el martes 9 de julio, el hombre asesinado no había sido identificado
ni reclamado por sus familiares.
Alrededor de las cinco de la
mañana, policías municipales respondieron al reporte de una persona lesionada
por proyectil de arma de fuego en el Bulevar Cucapah de la colonia Buenos Aires
Norte.
Al llegar al lugar, ubicado
en la delegación Cerro Colorado, localizaron a un hombre, quien se identificó
como Antonio Mata, de 21 años. Había recibido un disparo en la costilla y se
encontraba dentro de un autobús para el traslado de personal.
El joven fue llevado a un
hospital y, conforme a lo declarado por testigos, los responsables huyeron en
una camioneta Jeep blanca.
TAXI LIBRE, USADO PARA ROBAR Y TRANSPORTAR CRISTAL
El jueves 4 de julio,
policías municipales en el Distrito Centenario detuvieron al conductor de un
taxi libre blanco con franjas naranjas, sin placas, pero con el número 7998 en
la colonia Las Torres parte baja.
Antonio fue aprehendido con
una bolsa de plástico transparente tipo Ziploc con cristal, la cual llevaba en
el automóvil Honda Civic, encontrado en la calle Las Torres esquina con San
Francisco.
Tras tomar los datos del
vehículo, los agentes reconocieron al taxista y al vehículo como reportado en un
robo perpetrado el 29 de junio al mediodía en la colonia Maestros
Universitarios.
Al levantar el reporte de un
robo a cuentahabiente ese día, los agentes recabaron imágenes del asaltante y
el vehículo en que se cometió el atraco, por lo que además de turnar al taxista
por delitos contra la salud, informaron al Ministerio Público de su probable
participación en el otro crimen.
(SEMANARIO ZETA/ EDICIÓN IMPRESA / INÉS GARCÍA RAMOS/
LUNES, 15 JULIO, 2019 01:00 PM)
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