lunes, 25 de junio de 2018

DAN 49 AÑOS DE PRISIÓN A LA ‘BARBIE’, MIENTRAS LOS JEFES NEGOCIAN



LA ‘BARBIE’. Edgar Valdez sin pacto.

Edgar Valdez Villarreal, la Barbie intentaba negociar con la fiscalía estadounidenses para entregar a Arturo Beltrán Leyva o a Joaquín Guzmán Loera el Chapo, e integrarse al programa de Testigos Protegidos, cuando se le cayeron ambas negociaciones y terminó siendo sentenciado a 49 años y un mes de prisión, revelan documentos del Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ).

Según se lee en el expediente 1:09-cr-00551-WDS-JFK-1, fue a mediados de 2009 cuando la Barbie sentía que las autoridades le seguían los pasos muy de cerca, incluso, el gobierno de Estados Unidos había ofrecido una recompensa de 2 millones de dólares por información que condujera a su captura, por lo que el narcotraficante contactó a agencias de gobierno de ese país, y empezó a negociar su entrega además de ofrecerles información que condujera a la captura del Barbas o del Chapo; todo a cambio de una sentencia menos severa.

La fiscalía estadounidense, sin embargo, quería que la cooperación de la Barbie ayudara a capturar a ambos capos, con quienes tenía relación, a lo que Valdez Villarreal se opuso, ya que él estaba dispuesto a entregar uno o al otro, pero no a ambos.

Fue cuando, el 15 de diciembre de 2009, la Armada de México localizó y mató a balazos a Arturo Beltrán Leyva, y entonces las negociaciones de la Barbie con la fiscalía estadounidense se cayeron, y se quedó sin el principal elemento con qué negociar.



LA MUERTE DE ARTURO BELTRÁN. Por la Marina.

Para entonces Héctor Beltrán Leyva, hermano y socio del Barbas, recibió información de que Valdez Villarreal intentaba negociar con el gobierno de Estados Unidos, y lo mandó matar, por lo que la Barbie empezó a pelear contra las fuerzas del H.

Siete meses después, y tras andar a salto de mata huyendo del gobierno y de los sicarios del H, Valdez Villarreal fue arrestado cerca del Desierto de los Leones, en el Estado de México, y recluido en el penal de máxima seguridad del Altiplano.

En los años posteriores, la Barbie intentó de nuevo negociar con la fiscalía una nueva estrategia: dar información sobre el Chapo a cambio de una sentencia menos severa, a lo que los fiscales ésta vez accedieron, pero el proceso de extradición fue prolongado durante varios años por el gobierno de México, y fue entonces que en febrero de 2014 el Chapo fue arrestado en Mazatlán tras una larga investigación conducida por Andrew Hogan, agente de la DEA; esta vez la negociación de la Barbie se cayó de forma definitiva.

Con el Chapo en prisión, Valdez Villarreal fue extraditado a Estados Unidos en agosto de 2015, pero ya era demasiado tarde, pues ya no tenía nada que negociar para lograr una sentencia menos severa, y sin esos elementos el juez William S Duffy Jr, lo condenó a 589 meses de prisión (49 años) en una cárcel de máxima seguridad.

Además, el magistrado ordenó que se le decomisaran 192 millones de dólares, y pagara una multa por 100 mil dólares, luego de ser encontrado culpable por tráfico de drogas, asociación delictuosa y lavado de dinero.

Esta sentencia en contra de la Barbie, sólo es superada por la sentencia de cadena perpetua que recibió Alfredo Beltrán Leyva el Mochomo, en abril de 2017, y es sumamente mayor que la recibida por otros capos del Cártel de Sinaloa, como Héctor Güero Palma, Víctor Emilio Cázares Salazar, Javier Torres Félix, entre otros, que fueron sentenciados a menos de 15 años de prisión.

Para la fiscalía estadounidense, la sentencia en contra de la Barbie fue la más adecuada, dado el grado de su peligrosidad, y por toda la cocaína que importó hacia Estados Unidos mientras operaba para el Cártel de los hermanos Beltrán Leyva.

“Valdez Villarreal fue un narcotraficante que traficó toneladas a nuestro país, destrozando vidas y generando violencia en las comunidades de Estados Unidos, pero ahora pagará por eso e irá a una prisión federal por casi el resto de su vida”, consideró Byung J. Park, fiscal del Distrito Norte de Georgia.

UNA HISTORIA CRIMINAL

Valdez Villarreal nació en Laredo Texas, hijo de una familia de migrantes mexicanos. Tenía apenas 16 años cuando empezó a vender droga en las escuelas secundarias de Laredo High School, donde él era el jugador de ataque del equipo, y uno de los chicos más populares de la escuela.

Pero como todo distribuidor de droga escolar, rápido fue creciendo y pronto se conectó con otros traficantes del Cártel de Sinaloa que movían droga desde Texas, hasta Nueva York, Chicago, Massachusetts y Georgia.



EL ‘CHAPO’. Joaquín Guzmán extraditado.

Cuando se graduó de Bachillerato ya estaba ubicado por la fiscalía estadounidense, y en 1999 el Distrito Sur de Texas le giró una orden de aprehensión, pero justo antes de que lo arrestaran, la Barbie huyó a México, según se lee en la acusación.

Gracias a sus contactos del Cártel de Sinaloa que traficaban droga de México a Estados Unidos por la frontera de Texas, logró conectarse con la gente de Sinaloa, y trabajar con ellos durante algunos años, y según los documentos, fue por esos años que adquirió el sobrenombre de la Barbie, por su complexión delgada y alta, su pelo rubio, y sus ojos azules, que contrastaba con el del resto de los pistoleros, que por lo regular eran morenos y gordos.

En el expediente se explica cómo la Barbie empezó a ganar notoriedad por lo decidido que era para matar Zetas y organizar emboscadas, y lograr información para sus entonces jefes: el Chapo y el clan de los Beltrán Leyva: Arturo, Alfredo y Héctor.

Algo vio en él el Barbas, que inmediatamente lo jaló a su bando, y lo asignó como su jefe de seguridad para coordinar al ejército de sicarios que los Beltrán Leyva tenía, no sólo en Tamaulipas, sino en el resto del país donde tenían presencia, aunque terminaría asentándose en Acapulco.

A partir de ese momento, la Barbie empezó a tener mayor confianza por parte de Arturo Beltrán, y entonces empezó a coordinar cargamentos de hasta 2 toneladas cada mes, que movía desde Guerrero a la frontera, para luego cruzarlos por Texas hasta Georgia, Mississippi, Alabama, Louisina y otros estados de la costa Este del país.

Era tanto el dinero que llegó a manejar la Barbie, que tuvo que comprar cinco tráileres para moverlo de Estados Unidos a México, y Valdez Villarreal empezó a comprar propiedades en los alrededores de Ciudad de México, y en Acapulco, pues había llegado al punto en que no supo qué hacer con tanto dinero.

La debacle de la Barbie inició con el arresto de Alfredo Beltrán Leyva, el hermano menor del Barbas, en 2008, pues la organización Beltrán Leyva se separó del Cártel de Sinaloa, y terminó declarando la guerra a los de Sinaloa.

La violencia alcanzó su máximo nivel en 2009, y la Barbie supo entonces que aquello no terminaría bien, y fue entonces que contactó a agentes de la DEA para negociar su salida.

La muerte del Barbas, sin embargo, arruinó aquellos planes, y la Barbie se enfrascó en una guerra a muerte con Héctor Beltrán Leyva por el control de la organización, que concluyó con el eventual arresto y extradición de Valdez Villarreal.

Uno de sus abogados, Michael McCrum, dijo al diario New York Times que otra de las cosas que afectó a la Barbie para recibir una sentencia tan severa, fueron una serie de vídeos que la fiscalía tenía, y donde se mostraba a Valdez Villarreal torturando y ejecutando a pistoleros de bandas enemigas.

“Eso perjudicó mucho”, reveló McCrum.

Valdez Villarreal permanece preso en una prisión federal del estado de Georgia, y hasta el momento la defensa no se ha pronunciado si van a apelar la sentencia del juez, o la van a aceptar.

Artículo publicado el 17 de junio de 2018 en la edición 803 del semanario Ríodoce.

(RIODOCE/ MIGUEL ÁNGEL VEGA/19 JUNIO, 2018)

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