- No hubo ni secuestro ni rapto
- Todo derivó de un problema familiar
- El caso movilizó a ejército y policía
La
Paz, B.C.S.- Tal y como les adelantamos vía Reporteros Sin Fronteras la
noche del sábado, la supuesta desaparición de la joven mujer de 20 años
de edad de nombre NIEVES JAQUELINE LÓPEZ DURÁN, no se trató de un
secuestro ni de un rapto. Todo derivó de un problema familiar del que no
quiso abundar, sino que manifestó a las autoridades “deseo tratarlo y
buscar refugio con mis padres”.
La supuesta desaparición de la joven, que ocurrió a las 7:50 de la
noche del viernes pasado en la esquina de Colima y bulevar J. Múgica,
donde “bajó de un pesero y aviso a su familia que se sentía mal”,
movilizó a Policías Ministeriales, Estatales, Municipales, Federales y
hasta las fuerzas armadas, todos en su búsqueda.
Lo anterior fue revelado a los medios de comunicación por el Subprocurador de Investigaciones Especiales Isaí Arias Famanía, debido a que hubo mucho interés de la sociedad en conocer en realidad qué había ocurrido en este caso y su desenlace, dada la preocupación que levantó la repentina “desaparición” de una joven que además es madre de un bebé que dejó encargado con su familia.
Lo anterior fue revelado a los medios de comunicación por el Subprocurador de Investigaciones Especiales Isaí Arias Famanía, debido a que hubo mucho interés de la sociedad en conocer en realidad qué había ocurrido en este caso y su desenlace, dada la preocupación que levantó la repentina “desaparición” de una joven que además es madre de un bebé que dejó encargado con su familia.
La muchacha todavía la noche del sábado inventó a su madre que había
sido raptada por sujetos desconocidos que la mantuvieron incomunicada
todo el día sábado e incluso que le daban el chip de su celular para que
“se lo tragara pero ella no quiso”.
“oía voces de plebes, no sabia quienes eran, no le dieron nada, sólo
comió una galleta, después le dijeron que se habían equivocado, y la
dejaron en Bodega Aurrera como a las 7:45. Lo bueno que no la tocaron”,
dijo su mamá cuando Jaqueline regresó.
Ahora se ha revelado de parte del Subprocurador Isaí Arias Famanías
que al momento, las investigaciones les han confirmado que no se trató
de ningún secuestro ni de ningún rapto, “todo esto deriva de un problema
estrictamente familiar”.
Agregó el funcionario que el domingo la joven Nieves Jaqueline López
Durán no quiso rendir declaración sobre lo sucedido y prefirió la opción
de “buscar el refugio con sus padres y tratar con ellos el problema”.
De la misma forma también rechazó la ayuda sicológica que se le ofreció.
Sobre los mensajes que se recibieron desde su teléfono celular, donde
se lanzaron supuestas amenazas como NUNCA LA VOLVERÁS A VER, Arias
Famanía mencionó que ese teléfono está en poder de las autoridades, pero
“los mensajes los pudo haber enviado un amigo de ella o la misma NIEVES
JAQUELINE”.
De igual forma se revisaron las cámaras de vigilancia en la zona
donde supuestamente la jovencita narró que había sido raptada y no se
encontró nada.
Por esa razón se está descartando tajantemente que se haya tratado de un rapto o secuestro.
Recalcó el subprocurador que la dependencia siempre está abierta a
cualquier denuncia sobre desaparición de personas, “nosotros atendemos
todos los casos que se nos presentan y los investigamos (…) la gente
debe sentirse con toda la confianza de que cualquier hecho parecido
puede ser denunciado con nosotros y los vamos a investigar”.
Colectivo Pericú con información de REPORTEROS SIN FRONTERAS
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