A un año de los hechos en que agentes del Grupo Élite dispararan
contra niños deportistas, se mantienen las complicaciones legales para
otorgarles el apoyo prometido por el gobernador del estado…
Eleana Carrasco
Aun cuando el Estado ha reconocido su responsabilidad en el caso del
niño Luis Alfonso ‘N’, baleado por ministeriales del Grupo Élite en
Bamoa, Guasave, en julio de 2012, el Congreso del Estado no ha podido
resolver cuál será la figura jurídica para poder otorgarle la pensión
vitalicia.
“Un error o una falta de seguridad jurídica, ¿de qué es exactamente?
¿Cuál es la figura que se le va a dar para poderle dar la pensión al
niño? Porque pensión no puede ser si no existe una relación laboral.
¿Indemnización? No hay un juez que ordene darle una indemnización por
daños, entonces, es lo que se está viendo jurídicamente”, manifestó en
conferencia de prensa la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso
del Estado, Artemisa García Valle.
Igualmente comentó que la Comisión de Hacienda es la que dará el
dictamen a favor o en contra y el Pleno decidirá si se le otorga o no.
A su vez, el presidente de la Comisión de Hacienda, Rafael Uriarte
Quiroz, aseguró que esperan para el próximo martes tener un dictamen
favorable sobre el caso de Luis Alfonso de 13 años, que se enfrenta a
una vida en silla de ruedas, sin control de esfínteres y la falta de un
riñón, por lo que se mencionó que los gastos médicos ascienden a más de
12 mil pesos mensuales.
Los diputados están considerando también el impacto que pueda generar
que se establezca un precedente en el Congreso al otorgar este apoyo
humanitario.
Argumenta Uriarte Quiroz: “En el año 2011 se abrió una ventana de
ayuda a organizaciones, que se les otorgó a 40 organizaciones que
vinieron. ¿Qué pasó en el 2012? Se incrementaron casi a 300 solicitudes
para ayuda a organizaciones. Entonces, ¿esto qué puede ocasionar? Si
sale esta situación del Congreso, una iniciativa, una ley de aquí, ¿qué
es lo que va a pasar? Se va a abrir una ventana para que muchos de estos
casos vengan a pedir ayuda, entonces el Congreso obviamente no tiene
estos recursos, yo creo que es una situación que tiene que ver el
Gobierno del Estado, porque esto es un caso de interés social”.
Sin embargo, Luis Antonio Cárdenas Fonseca, diputado priista y
presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales y Gobernación,
consideró el nuevo Sistema de Justicia Penal con corte acusatorio
mediante la concepción novedosa en México de los Derechos Humanos.
Mencionó que se dio la primera lectura a la “Ley Orgánica del Ministerio
Público” cambiando la denominación planteándose como “Ley Orgánica de
la Procuraduría General de Justicia del Estado”, alineándose de esta
manera en la nomenclatura al sistema federal, que viene proponiendo la
creación de una Subprocuraduría en Derechos Humanos que aumentaría el
nivel de atención y conocimiento de los casos de esta índole, los cuales
actualmente atiende una dirección en la Procuraduría.
“Estamos en los actos preparatorios para que se instale el nuevo
Sistema de Justicia Penal en el estado y que está previsto para el mes
de diciembre de este año”, comentó.
En cuanto al caso de Luis Alfonso y la falta de antecedentes en el
estado sobre ayuda proporcionada, el diputado priista dio una luz al
tema: “Efectivamente este es un asunto atípico, no hay precedente.
Está
planteado de manera indefinida, en algunos párrafos como pensión en
otros como responsabilidad civil por parte del Estado. Nosotros aquí en
el Congreso estamos trabajando en darle el encuadre más preciso posible
en términos jurídicos, y desde luego en cuanto a la atención al tema de
recursos, en el monto que verdaderamente atienda la necesidad, nos está
sirviendo de referencia la recién autorizada Ley General de Víctimas,
que ya plantea una reparación integral a favor de todas las víctimas del
delito, y que por tratarse de una ley general, obliga ya en toda la
República a los tres niveles de Gobierno”.
Ante la consideración al tema de la capacidad del Estado para
responder a Luis Alfonso y otras víctimas, puntualizó que “sin duda que
ese es el mayor reto que va a enfrentar el análisis de este tema, el de
prospectar las consecuencias en el tiempo de otros asuntos similares”.
La familia de Luis Alfonso se presentó al Congreso a plantear su
reclamo, con el cual los diputados mencionaron solidarizarse y tener la
intención de generar a la brevedad una respuesta en relación a la
iniciativa que presentó el gobernador del estado, Mario López Valdez.
Asimismo, se está consultando al Ejecutivo bajo el concepto de una
reparación integral en cuanto a la solicitud de la madre del niño para
que no se le suspenda la ayuda de gastos médicos de autorizarse la
pensión.
Los hechos del 6 de julio de 2012
Elementos del Grupo Élite de la Policía Ministerial, acompañados de
una patrulla del Ejército, abrieron fuego a las 16:15 horas del viernes 6
de julio de 2012 contra una camioneta en la que se transportaban seis
menores y una madre de familia, lesionando a tres de ellos: Adal Saúl,
de 14 años; Luis Alfonso de 13 años y Efraín de 17 años, quienes
formaban parte del equipo de futbol apoyado por Eleno Flores, director
del Instituto Municipal del Deporte.
Se dictó auto de formal prisión a José Ángel Reyes León y a Érick
Hernández Rentería, como los agentes que provocaron las lesiones de los
menores, los cuales se encuentran libremente amparados.
La señora Elda Lizbeth Beltrán Castro relata lo sucedido tras doce
meses: “Lo que pasó ese día fue que yo iba llegando y mis hijos me
estaban esperando para llevarlos a jugar futbol. Nos subimos al carro y
al dar vuelta en la primera cuadra, vemos que dan vuelta las camionetas
muy recio. En ese momento mi hijo Juan Humberto llevaba la camioneta y
le pido que se orille para dejar la calle libre, para no estorbarles,
pero lo que pasó fue que nos rodearon, nos cerraron el paso y por más
que nosotros hacíamos señas o les gritábamos que qué pasaba, pues no, no
nos atendían. De ninguna manera, por ninguna razón ellos tuvieron
alguna agresión por parte de nosotros, al contrario, los niños ya se
estaban espantando.
Lo que pensamos es que entre ellos traían una riña, fue lo que
nosotros pensamos en ese momento, porque los soldados se quedaron un
poquito más atrás de donde nos habían cerrado el paso los ministeriales y
eso fue lo que creímos, que el problema era entre ellos, pero cuando se
empiezan a oír los disparos una cuadra antes, nosotros queremos tratar
de salir y ellos nos atacan, nos empiezan a tirar a nosotros. Se dan
cuenta que le dan a los niños. Yo en eso tumbo al niño, tumbo a todos y
agarro el volante, veo por el retrovisor que todavía van detrás de mí,
me paro y otra vez así encañonados, me bajan, pero yo ya llevaba a los
niños balaceados, a los niños heridos.
Por más que les pedí ayuda, auxilio. Yo les grité que los niños los
llevaba heridos, ellos me dicen: “¿Cuáles niños?”, y ya van y los ven, y
ahí fue cuando yo les pedí auxilio, que me ayudaran para darles,
brindarles apoyo porque los niños iban mal y no, ahí me dejaron tirada y
ellos se fueron. Así nada más, ellos nunca me dieron apoyo, sabiendo
que ellos habían sido. No, al contrario, me dicen: “¿A dónde fueron,
señora?”, fue cuando voltee y los vi y otro me mira y dice: “Ya valimos
ver…”, sabían que la habían regado pues, y como que me querían hacer que
cayera en otra cosa, no sé, porque me dicen: “Señora, y pa’donde
agarraron? ¿Quiénes fueron?”, pero se fueron.
“Ellos no me dieron apoyo en nada, por más que les grité y vieron los
niños y sabían que ellos lo habían hecho, ellos volvieron a subirse a
sus camionetas y salieron bien recio, ahí me dejaron tirada
ministeriales y soldados, de ninguna de las dos corporaciones tuve
apoyo. Tres camionetas de ministeriales y una de soldados”.
Yo me volví a subir a la camioneta y llegué hasta el Centro de Salud,
lo que quería era buscar un doctor, pero no, estaba cerrado y en eso ya
llegan los municipales y todo, que fueron los que me empezaron a
brindar apoyo. Seis niños y yo, eran dos mis hijos y cuatro niños que
llevaba. No era la primera vez que los llevaba al estadio, era una tarea
que yo tenía diario, porque era muy fuerte el calor a las cuatro de la
tarde que iba y los dejaba, ya ellos de allá se venían a pie.
“Luis Alfonso fue el niño que salió más perjudicado, pero también
Saúl, pues al parecer tiene un pulmón colapsado. Se está dando atención
médica al parecer, pero pues no sé qué seguimiento más le lleven al niño
a futuro, no sé cómo lo vayan a seguir atendiendo.
“Estoy de acuerdo en que el Congreso le dé apoyo vitalicio que se
requiera para él. Otra de las cuestiones que quisiera que se tomara en
cuenta es una beca que les dieron a los niños de mil 200 pesos al mes.
No quisiera en que nada más mientras esté el gobierno de Malova, me gustaría que lo tomaran en cuenta, que los seis niños que estén estudiando después de que Malova termine su periodo de gobierno.
En cuanto a las acciones contra los ministeriales. Esa es otra, ¿qué
puedo yo pensar? Todos llevaban la cara tapada. ¿Dos nada más
dispararon? Increíble, yo nunca lo he creído, que dos personas nomás
hayan disparado a la camioneta. Yo digo “esto no es cierto” y esas dos
personas nunca les vimos las caras para haber dicho “sí, es cierto,
ellos fueron”. No, eso yo lo veo muy ilógico, nunca le pusieron como
debería haber sido, ellos sí aceptaron que fue un error, “señora
disculpe, fue un error”, que fácil”.
(RIODOCE/ Eleana Carrasco /julio 21, 2013)
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