Malos tratos
y prepotencia del director
Trabajadores
dan su mejor esfuerzo
Pero no son
correspondidos
La Paz,
B.C.S.- Los peritos de la Procuraduría general del estado. Conformado por la
parte científica de la procuraduría –químico, criminalistas, médicos-
considerados personal de confianza, llevan cerca de una década con el mismo
sueldo, un salario que ha perdido desde entonces, casi la mitad de su poder
adquisitivo.
Desde el primer gobierno perredista (1999) empezaron a recibir un
bono semestral (irregular, de cantidades variables) que de alguna manera
ayudaban económicamente no obstante el estancamiento de los sueldos. Sin
embargo, al entrar el gobierno panista actual,
por medio del procurador Gamil Arreola anunció que tal bono sería retirado.
Cuando los peritos se entrevistaron con el procurador para protestar por la
pérdida del bono, el procurador les prometió que el valor del bono semestral se
incluiría en el salario a lo largo de todo el año. No fue así. Ha pasado más de
un año de esa promesa que sigue incumplida. Cuando los peritos reclamaron al procurador su incumplimiento,
ha respondido con presiones al personal.
En octubre
de este año, los peritos se entrevistaron con el Secretario general de Gobierno
para dar a conocer el olvido que ha tenido el gobierno parta actualizar su
salario y la pérdida del bono señalado, el procurador montó en cólera
(consideró que se había saltado, quizás, su autoridad) y como parte de las
represalias, amenazó con cambiar de adscripción a químicos, médicos y
criminalistas y enviarlos a los rincones más apartados dela geografía estatal.
Para eso, trajo desde Tabasco a un Director de los Servicios Periciales de
nombre Juan Valdivia, según esto, mucho más preparado técnica y académicamente
que el personal adscrito, el tal director resultó un tipo con formas
autoritarias, grosero y pendenciero que amenaza a los empleados y que hasta
ahora no ha demostrado su preparación técnica pero si sus malos modales y su
talante autoritario.
Sin muestras
de resolución del asunto económico, los peritos solicitaron de nuevo, en el mes
de noviembre otra reunión con el Lic. Armando Martínez Vega, Secretario General
de Gobierno, en la que también estuvo el
procurador, en esa reunión el procurador externó sus dotes autoritarias que
sorprendió tanto al Lic. Martínez Vega como al subsecretario de Gobierno, el
Sr. Isidro Ibarra que no entendían las posiciones del Procurador quien insistía
en modificar las guardias y en cambiar
de adscripción a médicos y químicos, sin argumentos, sin ningún sustento.
Cuando se contaron, de parte de químicos, médicos y criminalistas, las diversas
anécdotas que mostraban el carácter rijoso y burdo del Sr. Valdivia, actual
Director de los Servicios Periciales, el procurador aceptó que ignoraba el
comportamiento de su subalterno pero que en lo sucesivo, dicha conducta sería
diferente, algo que no ha sucedido, pues el Sr. Valdivia insiste en ser un tipo
desagradable y grosero con el personal, auspiciado –obviamente- por el Procurador.
Ante la
inminencia de los peritos de llevar a cabo un paro laboral por la falta de respuesta a sus pretensiones
económicas, el Lic. Martínez Vega medió para que se dejara en suspenso el paro
mientras se buscaba la forma administrativa para satisfacer dichas pretensiones
y que además, cesaría de parte del Procurador Gamil Arreola las amenazas de
cambio de adscripción y cambio de guardias a médicos y químicos; igualmente,
que el Sr. Valdivia, tendría, mejor trato con el personal y que en el mes de
enero del próximo año, se evaluarían los compromisos aceptados por todos.
Este es en
resumen, el estado actual de las cosas. Es evidente que los compromisos no se
han cumplido por parte de la Procuraduría pues Valdivia sigue haciendo de las
suyas sin que nadie -ni el procurador-
pueda evitar que el Jefe de los Servicio Periciales, Juan Valdivia, se
convierta en un brazo ejecutor de amenazas y faltas de respeto al personal de
Servicios Periciales de la PGJE.
Nunca
imaginaron los peritos de la Procuraduría que la petición de mejores
condiciones de vida, la solicitud de mejoras en el trabajo, terminara por enfrentarlos al procurador quien no consiente
“rebeliones” en su feudo. Así las cosas, solo queda esperar que el gobierno,
como ya ha sucedido en evidentes ocasiones, actúe, medie, cuando las cosas han
tomado otro cariz como el de los paros, huelgas o plantones.
Colectivo
Pericú atiende DENUNCIA CIUDADANA
No hay comentarios:
Publicar un comentario