Un día antes de que Fitch tomara las
medidas que tomó Octavio Romero, director de Pemex, acudió junto con la
Secretaria de Energía, Rocío Nahle, a comparecer a la Cámara de Diputados para
explicar la crisis de desabasto que siguió a la implementación de la estrategia
del gobierno federal contra el robo de combustible. Cuestionado por la
posibilidad de una rebaja en la calificación de Pemex, Romero se mostró
optimista: “sería incongruente que ahora que (Pemex) va a tener inversión,
cambien la calificación o la bajen”, aseguró.
Es precisamente la falta de credibilidad
que tiene el Gobierno corporativo de Pemex una de las razones señaladas por
Fitch para bajarle la calificación.
Ana Gabriela Jiménez Cubría y Monserrat
Gómez
Ciudad de México, 30 de enero
(EconomíaHoy/SinEmbargo).- La calificadora Fitch Ratings asestó un duro golpe a
Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la administración de Andrés Manuel López Obrador
este jueves al degradar la nota crediticia de la petrolera a BBB-, a un escalón
del bono basura, algo que refleja la pérdida de confianza de los inversionistas
internacionales y que requiere de la actuación inmediata del gobierno para que
no haya un efecto contagio a la calificación soberana de México.
La mala situación de Pemex no
puede atribuirse a la nueva administración, dijo a EconomíaHoy.mx Gonzalo
Monroy, consultor de energía y director de Grupo GMEC “esto no se gestó hace 40
días”. No obstante, la empresa “estaba sostenida con alfileres y el gobierno
(de AMLO) se los quitó”.
Monroy se refiere al plan de
negocios para Pemex que sus directivos y funcionarios de Hacienda encabezados
por el Secretario Carlos Urzúa presentaron en el centro de Manhattan a
principios de enero, episodio al que ya muchos se refieren como “el fiasco de
Nueva York”.
Tras aquella reunión el
cotitular de inversión de Stone Harbor Investment Parners, Jim Craige, aseguró
Alberto Velázquez, director financiero de Pemex “no mostró entendimiento de la
compañía y no impresionó para nada (…) el problema es de AMLO porque él lo
eligió”.
Antes ya había sorprendido el
nombramiento de Octavio Romero como director general de la petrolera, por
tratarse de un ingeniero agrónomo sin experiencia en el sector energético,
aunque su currículum sí expone una gran cercanía con López Obrador al haber
fundado con él el partido Morena en 2010.
Todavía un día antes de que
Fitch tomara las medidas que tomó Romero acudió junto con la Secretaria de
Energía, Rocío Nahle, a comparecer a la Cámara de Diputados para explicar la
crisis de desabasto que siguió a la implementación de la estrategia del
gobierno federal contra el robo de combustible. Cuestionado por la posibilidad
de una rebaja en la calificación de Pemex, Romero se mostró optimista: “sería
incongruente que ahora que (Pemex) va a tener inversión, cambien la calificación
o la bajen”, aseguró.
Es precisamente la falta de
credibilidad que tiene el Gobierno corporativo de Pemex una de las razones
señaladas por Fitch para bajarle la calificación. Más aún los cambios
legislativos propuestos por el Gobierno, que pretenden dar más poder a AMLO
para nombramientos de altos cargos hasta dos escalones por debajo del director
general, con lo cual el Ejecutivo tendría control de la dirección estratégica y
decisiones sobre precios en la compañía.
Opina que López Obrador necesita hacer
cambios en la alta dirección de la petrolera. Foto: Isaac Esquivel, Cuartoscuro
URGE UN CAMBIO EN EL GOBIERNO CORPORATIVO DE PEMEX
“Tienen que empezar a hacer
cosas ya” asegura Monroy, y explica que el Gobierno de México aún tiene margen
de maniobra para prevenir mayores desastres. “Principalmente porque el gobierno
es el único accionista de Pemex y tiene mayoría en el Congreso”.
Opina que López Obrador
necesita hacer cambios en la alta dirección de la petrolera, y que sería
necesaria una comitiva de representantes en camino a Nueva York para hablar con
Moody’s y Standard & Poor’s de cara a sus revisiones de calificaciones, que
ocurrirán en febrero y marzo próximos, respectivamente.
Aunque aún es muy pronto para
saber qué pasará en el mediano plazo, existe la posibilidad de un contagio
hacia la calificación soberana de México, que tiene grado de inversión, pero
que podría perderlo -en un escenario catastrófico- si los costos de Pemex se
elevan demasiado y el gobierno deja de estar en posibilidad de respaldarlos.
Hoy, tras la rebaja de nota,
la empresa productiva del Estado ya enfrenta un escenario de encarecimiento de
su deuda, que es la más alta del mundo para una petrolera, con 83,900 millones
de dólares en bonos en circulación.
Otra consecuencia será un
aumento de los gastos no programables de Pemex, lo cual a su vez presionará los
ingresos del gobierno. Así, hay un riesgo alto de que la empresa entre en “una
espiral de costos altos”.
El actual es un momento
clave, dijo Monroy, para que el gobierno actúe. “Se tienen que poner las pilas
ya”.
PODRÍA AFECTAR FUTUROS DEBUTS EN LA BOLSA: BIVA
La baja en la nota a Pemex
anunciada este martes por la agencia calificadora Fitch Ratings genera
volatilidad y condiciones de alerta entre los inversionistas y podría retrasar
dos colocaciones de títulos de nuevas empresas en la Bolsa Institucional de Valores
(BIVA), señaló María Ariza, directora de dicha institución.
En conferencia de prensa con
motivo del lanzamiento de la plataforma Mei- Presval y la inauguración del
auditorio de BIVA, Ariza comentó que la institución tiene en puerta dos OPIs
(Oferta Pública Inicial), de las cuales esperan que al menos una se concrete
durante el primer semestre del año. También esperan alrededor de 50
colocaciones, entre todo tipo de instrumentos, para 2019.
No obstante, “los mercados
dictan los momentos en que se hace una colocación y en estos momentos hay
incertidumbre y que no se prestan tanto para que haya salidas públicas”, y
agregó que “estas coyunturas afectan el apetito de los inversionistas”.
La directora de la Bolsa
Institucional de Valores se abstuvo de adelantar los nombres de las empresas
prospectas para ser listadas, pero cometa que son compañías medianas, mexicanas
y que buscan financiamiento en el mercado de capitales para expandir sus
operaciones en México, lo que beneficia al país.
Al evento asistió el
subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien comentó que los inversionistas
ya habían descontado la baja de calificación de Petróleos Mexicanos y que esto
no necesariamente afectará a la calificación crediticia del país, pues la misma
depende de otras cosas como el repago de deuda, que es mayor al que se tenía el
año pasado. Además señaló que esperan que esta calificación no se mantenga en
los próximos años.
ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR SINEMBARGO CON
AUTORIZACIÓN EXPRESA DE ECONOMÍA.HOY.
(SIN EMBARGO/ Redacción / 30 DE ENERO 2019)
No hay comentarios:
Publicar un comentario