El atentado del jueves 27 de octubre en
Comondú confirmó la guerra que existe entre dos grupos del CJNG y uno a cargo
de “Los Dámaso” por el control de la plaza. “Ese era uno de los lugares que
frecuentaba ‘El Gordo Vega’, entonces el ataque fue dirigido para darle un
mensaje a este presunto líder de zona”, expresó un agente de Seguridad Pública.
“Se espera que sigan apareciendo narcomenudistas, no sin antes aparecen los
cabecillas eliminados”, es la advertencia
“Era visto que, al no haber
un acuerdo entre los líderes de la droga en Comondú, era cuestión de que
estallara el pedo”, fueron las palabras de uno de los miembros del Grupo de
Coordinación de Seguridad Pública en Baja California Sur tras concluir el mes
de octubre, el más sangriento para el municipio al norte de La Paz a la fecha.
Era sabido que la guerra que
podría detonar en el municipio de Comondú, era latente, desde el 31 de agosto
de este año habría “un llamado de atención a las autoridades para que hicieran
algo por contener la lucha por venta y el trasiego de la droga”, explicó un
agente de investigación a ZETA.
Y es que de inicio
consideraron como un atentado directo contra uno de los líderes que se
repartirían la plaza en Comondú, es decir, la subdivisión entre tres células,
para el Cártel de Sinaloa, Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) o Cártel
Tijuana Nueva Generación (CTNG).
El atentado ocurrió en la
carretera Ciudad Constitución-Ciudad Insurgentes, Kilómetro 210 +500 y Calle
Pedro María Anaya de la colonia Renero,
a las afueras de la negociación conocida como Auto Zone, allí fueron balaceados
dos carros: un Honda Accord de color blanco y un automóvil KIA de color gris,
donde quedó el cuerpo sin vida de Rafael Arroyo Acosta “El Murciélago”, de 25
años de edad, presunto sicario que eliminaría a Miguel Ángel Vega Ramírez “El
Gordo Vega”, uno de los implicados en la plaza en Comondú; en el ataque armado
resultó lesionado a quien se identificó como Rubén Omar Castañón Nicolat “El
Cheyo” -cabecilla de la célula denominada como “Los Cheyos” o “Los Palapas”-,
por disparo de arma de fuego en ambos muslos; además Luis Alberto Muños Torres
“El Bogar”, de 27 años, ex policía municipal en Comondú y jefe de sicarios al
servicio del “Cheyo”, presentó una herida en brazo, tres en la parte del tórax,
herida en músculo derecho de entrada y salida.
También fue identificado un
lesionado más, Juan López alias “Juan Palapas”, quien desapareció de la escena
y hasta los últimos informes, permanecía en calidad de desaparecido.
En San
José del Cabo la pelea por la plaza cada vez más viva.
Un nuevo atentado reveló la
punta del iceberg en la guerra que ahora es por “la plaza en disputa por los
tres grupos que pretenden el control del trasiego, principalmente”, dijo un
efectivo militar. La balacera dejó cuatro muertos, siendo la noche más
sangrienta en la historia de Comondú.
Los hechos tuvieron origen en
las calles Ciudad Constitución en Ignacio Allende entre Valentín Gómez Farías y
Lerdo de Tejada, Colonia Centro.
De acuerdo al reporte y
algunos testigos, hombres armados dispararon en repetidas ocasiones con armas
de grueso calibre que retumbaron en todos los rincones de Ciudad Constitución.
El ataque fue dirigido contra
de un automóvil Mitsubishi de color negro. Allí se encontraban cuatro
jovencitos, de los cuatro a bordo, se sabe que en el lugar murieron el
conductor, quien en vida respondía al nombre de Luis Fernando Martínez Parra,
de 21 años de edad; Ricardo Alán López Camacho, de 24; así como un menor de 15
años de edad.
Mientras Ángel Castillo
Cipriano, de 18 años, fue trasladado al hospital, donde horas más tarde perdió
la vida.
“Aún estamos identificando
para qué células estaban trabajando, pero lo más seguro es que querían
chapulinear –término usado para quienes quieren cambiar de bando-, todo esto ocurrió desde la caída del
‘Caguamo’ (Martín Gaudencio Avendaño Ojeda, anterior líder de plaza en
Comondú), pensaron que ‘El Tomatito Cherry’ (Juan Murillo Avendaño) iba a dejar
ir la plaza, pero se equivocaron”, afirmó un miembro del Grupo
Interinstitucional.
Horas más tarde, en el poblado de Todos Santos Pueblo Mágico,
fue localizada una camioneta tipo Ford Explorer de modelo reciente envuelta en
llamas, “de acuerdo a versiones que nos han dado, concuerda con una que utiliza
para moverse Miguel Vega (Gordo Vega), sin embargo, solo encontramos la unidad
en llamas, nada se pudo hacer”, finalizó el agente policial.
Un nuevo ataque fue dirigido
en contra de presuntos narcomenudistas que pretendían chapulinear.
Los hechos ocurrieron en Calle
José María Morelos y Pavón, entre Bulevar Agustín Olachea y Sebastián Lerdo de
Tejada de la colonia Centro en Ciudad Constitución, en contra de los hermanos
Eduardo y Gabriel Morales Rosales, de 40 y 28 años, respectivamente.
Ambos estaban dentro del taller
de motores de su propiedad, cuando un grupo de hombres armados dispararon en
repetidas ocasiones; según testigos, el mayor de los hermanos perdió la vida
dentro del establecimiento, mientras que Gabriel fue perseguido hasta la
esquina, donde recibió el tiro de gracia.
“Ese era uno de los lugares
que frecuentaba ‘El Gordo Vega’, entonces el ataque fue dirigido para darle un
mensaje a este presunto líder de zona en Comondú”, expresó un agente de
Seguridad Pública.
Y lanzó una advertencia: “Lo
que se espera para arriba es que sigan apareciendo narcomenudistas, no sin
antes aparecen los cabecillas eliminados, y todavía falta que los de más abajo
quieran unirse o alinearse, como dicen”.
Fuerzas militares intensifican
operativos de seguridad para dirimir el conflicto entre cárteles en Comondú
LA DIVISIÓN EN COMONDÚ
De acuerdo al último mapa
delictivo elaborado por fuerzas militares, tres cabecillas se desprenden de
células del crimen organizado en Comondú, los cuales “tenían repartida la
plaza, pero la intención de gente como ‘El Gordo Vega’ fue apropiarse de toda
la plaza y ser líder a través del Cártel de Sinaloa, de la ruta de trasiego,
que al final de cuentas, es por eso que se están peleando los locales”.
De manera que serían dos
cárteles que se disputan la plaza, el de Sinaloa y “lo que aún no definimos,
Cártel Jalisco o Tijuana Nueva Generación”, los tres grupos son:
* Rubén Omar Castañón Nicola “El Cheyo” controlando
principalmente la zona norte de Comondú a la orden del CJNG o CTNG; también se identifica a Juan López “Juan
Palapas”, ambos estarían en disputa por parte del territorio de La Toba y La
Purísima, principalmente.
* Juan Murillo Avendaño “El Tomatito Cherry” o “El
Tomatero”, asumió el control al ser apresado Martín Gaudencio Avendaño Ojeda “El
Caguamo”, al convertirse en uno de los 122 objetivos prioritarios del Gobierno
Federal en la lucha contra el narcotráfico en México; Murillo Avendaño tendría
el control principalmente en Ciudad Constitución e Insurgentes, con el apoyo
del CJNG o CTNG.
* Miguel Ángel Vega Ramírez “El Gordo Vega” que, hasta
el último mapa elaborado, contenía la zona para el Cártel de Sinaloa en Puerto
San Carlos y Adolfo López Mateos.
Justamente en la búsqueda por
dirimir el conflicto entre las tres células, hasta el momento, el Ejército
Mexicano ha desarrollado intensos operativos a través del 17 Regimiento de
Caballería Motorizada con sede en Comondú,
por instrucciones emitidas desde la Tercera Zona Militar; la intención
es detener a todo presunto narcomenudista, sicario o miembros de organizaciones
de la delincuencia en aquella comunidad.
Precisamente el 2 de
noviembre, en el panteón ubicado en la colonia 4 de Marzo de Ciudad
Constitución, se implementó un fuerte dispositivo de seguridad, justo a las
afueras de una capilla, “solo se escuchaba la banda, que cuando llegaron los
efectivos militares siguió tocando mientras detenían a dos personas, de nombres
Ubaldo y Ángel, ambos procedentes de Culiacán, Sinaloa”, expuso el miembro del
Grupo de Coordinación de Seguridad Pública de Baja California Sur.
Se les detuvo a bordo de una
camioneta tipo Caravan de color blanco, en cuyo interior había dos personas del
sexo masculino y, de igual manera, se aseguraron dos armas cortas del tipo
pistola, así como un rifle de asalto denominado R-15.
Los sujetos fueron puestos a
disposición de la autoridad competente. Pero del mismo modo se han implementado
diversos operativos de seguridad, en los cuales militares han solicitado la
revisión de los vehículos y la participación de las corporaciones Federal,
Ministerial, Estatal y Municipal.
“Lo que se espera es que
ocurra lo mismo que hemos venido viendo, van a empezar a caer uno por uno, como
ha sido en La Paz y Los Cabos, lo único que queda es que ‘El Gordo Vega’ se
disculpe y se redima, que esto lo vemos como una salida poco probable”, apuntó
el agente de seguridad.
Ante los ataques armados
registrados recientemente, las fuerzas del orden esperan escenarios que
pudieran presentarse: el recrudecimiento de la violencia entre las células, en
la búsqueda por tomar el control de la venta y trasiego de la droga; que los
recientes hechos sangrientos puedan llevar a una verdadera negociación y haya
repartición de territorio, como se venía realizando en Comondú y Loreto; y uno
de los escenarios que se esperaba, pero que no se ha dado, es que uno de los
grupos desista y ceda territorio para su posterior exilio.
Inmediato a la violencia
registrada en días anteriores, que dejó seis muertos en la última semana, el
Regimiento de Caballería con sede en Comondú y que ahora cuenta con base en
Puerto san Carlos, territorio del “Gordo Vega”, principal en discordia en la
guerra, el Ejército salió a combatir y asegurar más encuentros de armas.
Dos ejecutados y un comensal
herido en taquería “La Caperucita”, en un ataque armado perpetrado, al parecer,
contra el dueño del local y un trabajador.
Dámaso en Los Cabos A finales
de septiembre en Sinaloa, seis militares perdieron la vida y diez más resultaron seriamente lesionados por
sicarios pertenecientes al grupo criminal denominado Fuerzas Especiales Dámaso,
al mando de Dámaso López Serrano “El Mini Lic”; el convoy castrense trasladaba
a Julio Óscar Ortiz Vega “El Kevin” o Aureliano Guzmán Loera “El Guano”,
hermano de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
Según el informe rendido,
decenas de mercenarios armados con rifles automáticos de asalto, incluso de
grueso calibre como Barrett calibre 50 y lanzagranadas, abrieron fuego contra
las fuerzas militares para rescatar al hermano del “Chapo”, lo cual trajo
consigo una lucha frontal de las Fuerzas Armadas contra células del Cártel de
Sinaloa, en particular “Los Dámaso”, los cuales se presume fueron los
encargados de la logística y rescate del apodado “El Guano”.
Precisamente con el fin de
librar esta batalla, efectivos de la Secretaría de Marina (SEMAR) con base en
Sinaloa, detuvieron en el tramo carretero de Mazatlán-Culiacán, al considerado
como presunto jefe de plaza por parte del Cártel de Sinaloa en dicha entidad y
en Baja California Sur.
Se trata de un hombre llamado
Rey David, alias “El Oso”, presunto líder de plaza de Los Cabos y parte de La
Paz, por parte de la célula denominada “Los Dámaso”, así fue presentado por las
Fuerzas Armadas.
Conforme a la información
obtenida, el 28 de octubre el detenido circulaba por la Carretera 10 con rumbo
a Bachigualatito, “fue cuando marinos le pusieron cola, pero aquí lo que sale a
resaltar de la detención, es que no opuso resistencia e iba solo”, confió un
agente.
Los marinos mantenían un
dispositivo de seguridad para el control de acceso de droga y armas, sin
embargo, cuando esta persona cruzó el retén e intentó darse a la fuga, se
desplegó un intenso operativo y le dieron alcance a la altura del Ejido San
José de Guanajuato, Sinaloa, allí se detuvo al vehículo en que viajaba.
Al “Oso” se le aseguró una
pistola calibre nueve milímetros de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, con
cargador abastecido, así como diversas identificaciones falsas, con las que
podía burlar a las autoridades y entrar y salir sin ser molestado entre ambos
Estados.
De acuerdo al mapa delictivo,
Rey David comandaba la venta y distribución de estupefacientes en Los Cabos y
parte de La Paz.
“No tenemos registro de su presencia en Los
Cabos ni otro punto de Baja California Sur, pasó desapercibido o se trata de un
señuelo; aquí se ha dado mucho, al capturar a un presunto sicario te dicen que
es ‘El 28’, ‘El Grande’, ahora ‘El Oso’, hemos detenido a varios con ese
seudónimo, hay algo que no estamos viendo y se está investigando, porque la
lucha en Los Cabos sigue, y de acuerdo a los últimos informes que hemos
rendido, parece que es el propio Cártel de Sinaloa que se pelea la zona de San
José del Cabo tras la caída del ‘Javier’”, confesó una de las piezas clave en
el Grupo Interinstitucional de Seguridad Pública.
“El Oso” asumió el control desde la caída de
Guadalupe Acosta López “El Javier”, ocurrida en julio de este año en Culiacán,
Sinaloa, sin embargo, en los archivos de ZETA se ha constatado la presencia de
otros sicarios y jefes de sicarios bajo ese apodo, incluso uno de ellos
desaparecido.
Con base en los archivos, en
los cuales no hay registro de Rey David, sí los hay de otros miembros que han
llegado a Baja California Sur a delinquir y que en algunos casos han sido
detenidos y puestos a disposición, entre ellos:
* Alejandro Carrasco Torres
“El Oso”, detenido el 2 de mayo de 2015 en Padre Kino, entre Encinas y Legaspy.
Iba acompañado por Everardo García Silva, ambos fueron puestos a disposición de
la autoridad federal; horas más tarde los dejaron libres.
El último fue ejecutado al
interior de una vivienda en Los Olivos; del “Oso” no se supo más.
* Hugo Omar Soto Durán “El
Oso”, de 34 años, fue detenido el 2 de septiembre de 2015 junto con Jesús
Armando Salazar Velázquez “El Gasparín”, de 19 años y Francisco Javier Mendoza Pérez
“El Chivo”, de 31, todos oriundos de Sinaloa.
Este grupo perteneció a las
fuerzas comandadas por Melissa Margarita Calderón Ojeda “La China”, detenida
días después de que cayera parte de su organización.
Otro de los miembros de la
organización para “Los Dámaso” es Oswaldo Pastrana Zacarías “El Oso”,
identificado en la lista criminal de las Fuerzas Armadas cojo brazo armado para
“El Javier” y que a su caída pudo ingresar a la parte alta por el control de
San José del Cabo.
Este último, identificado tras
las declaraciones de Jovanny Núñez Espino “El Loco” a mediados de mayo de 2015;
y es que el presunto sicario fue detenido tras una persecución al robarse una
camioneta Ford Raptor.
Según detalló un oficial que
participó, “El Loco” “agarró un camino vecinal y se metió por la terracería que
atraviesa de la carretera a Los Planes a Forjadores, sale por Mezquitito, pero
perdió el control de la camioneta y se estrelló”.
Luego del choque, el presunto
delincuente, accionó en varias ocasiones una pistola nueve milímetros en contra
de los oficiales y, una vez que quedó sin balas, fue detenido.
El presunto sicario dijo
haber estado “bajo el mando de ‘La China’, pero en ese tiempo era buscada y se
escondió”, comentó un agente, ahí les dio “luz”: “Mientras ella estaba
escondida, operaba con ‘El Oso’, el cual había llegado recientemente a reforzar
a la organización de ‘Los Dámaso’”, expresó la fuente.
De acuerdo a los datos que se
han obtenido, cuando la guerra estaba en un momento álgido, este sujeto ingresó
como jefe de sicarios.
Las investigaciones apuntan a
que, mientras “El Oso” permaneció como líder de la célula de “Los Dámaso” en la
entidad, la ola de violencia incrementó en La Paz y Los Cabos. “Aún está
operando”, concluyó el entrevistado.
La lucha y la violencia por
establecer un control en el trasiego de sustancias ilícitas, prevalece en Los
Cabos. Cuatro muertos, fue el saldo de un atentado en la noche del 28 de
octubre en la colonia Centro de Ciudad Constitución.
LOS ÚLTIMOS MUERTOS
Desde el jueves 28 de octubre al cierre de
esta edición, se tenían contabilizados nueve muertos en menos de una semana en
La Paz, Los Cabos y Comondú; el último ataque armado ocurrió en San José del
Cabo, donde sicarios dispararon al interior de la taquería La Caperucita.
Según el reporte preliminar,
dos personas perdieron la vida y un comensal resultó lesionado de gravedad, por
lo cual fue trasladado al Hospital General de San José del Cabo.
De manera extraoficial, los
fallecidos respondían a los nombres de Kener Esteban Rodríguez y Exau Soto
Pérez, empleados de la taquería, incluso se habla que uno de estos pudiera ser
“El Caperuzo”, dueño del negocio.
El lesionado permanece en
calidad de desconocido y al cierre de esta edición, se debatía entra la vida y
la muerte, a lo que podría ser el primer daño colateral en la lucha por el
control de la plaza de San José del Cabo.
Sin embargo, los eventos
iniciaron desde el 28 de octubre, con tres ejecutados en Ignacio Allende, entre
Valentín Gómez Farías y Lerdo de Tejada de la colonia Centro de Ciudad
Constitución, en Comondú.
Un lesionado perdió la vida
al día siguiente; en aquella comunidad dos más resultaron muertos, luego que un
comando armado disparara en contra de los hermanos Eduardo y Gabriel Morales
Rosales.
En La Paz, el 30 de octubre
fueron localizados los restos de una persona del sexo masculino con una cortada
en el cuello, muy cerca de la colonia El Palmar II y, el 2 de noviembre, Jesús
Francisco Carrillo Lizárraga “El Biyo”, de 28 años de edad, recibió un disparo
en la nuca dentro de su domicilio.
(SEMANARIO ZETA BCS/ Investigaciones
Zeta /Martes, 8 noviembre, 2016 12:28 PM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario