MÉXICO, D.F.
(apro).- La zona del Ajusco, una de las zonas de reserva de esta capital, se
convirtió en la tumba de Anayeli Bautista Tecpa, una destacada estudiante de la
UNAM.
Elementos de la
Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) encontraron su
cadáver en ese lugar el pasado fin de semana.
La joven
universitaria de 23 años fue plagiada a fines de noviembre y sus captores
pidieron un millón de pesos a sus familiares por su liberación.
Con trabajos, la
familia solo logró reunir 100 mil pesos, cantidad que no satisfizo a los
plagiarios que terminaron asesinando a Anayeli. El cuerpo de la estudiante fue
encontrado el pasado domingo 7 de diciembre, tirado en un terreno de la
delegación Tlalpan, en la zona del Ajusco.
Anayeli ingresó a la
Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con 114 aciertos en su examen de
admisión, logro que fue destacado en la gaceta universitaria al tratarse de la
alumna con mayor número de reactivos correctos.
En los últimos
meses, la zona del Ajusco ha sido escenario de varios sucesos delictivos. En
octubre pasado, ocho ciclistas fueron plagiados durante un entrenamiento, entre
ellos la triatleta Fabiola Corona y su entrenador Carlos Probert.
Todos fueron
liberados después de pagar el rescate y a la intervención de un grupo de
expertos en negociación y manejo de crisis de la Policía Federal.
Por instrucción del
comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido, un grupo de élite de
la División de Investigación de la Policía Federal se encargó de la
indagatoria, una vez que se confirmó que los ciclistas habían sido privados de
la libertad.
Ayer, el grupo
parlamentario del PAN en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF)
pidió a las autoridades capitalinas implementar el Operativo Escudo Centro en
la zona media y alta del Ajusco.
El diputado Héctor
Saúl Téllez expuso:
“Lamentamos los
casos de inseguridad que se están presentando en esa zona, por eso preguntarles
si ustedes tienen algunos resultados ya tangibles sobre personas que hayan sido
detenidas, sobre bandas delictivas que hayan sido desmembradas o bien, las
acciones reales que se estén llevando a cabo en esa zona”.
El año pasado fueron
reportados en el Ajusco seis personas asesinadas. Algunas de ellas primero eran
secuestradas y luego ultimadas. En al menos dos casos, los cuerpos fueron
desmembrados.
Y en lo que va del
año se han contabilizado cuatro plagios que terminan en el asesinato de las
víctimas.
(PROCESO/ LA
REDACCIÓN/ 10 DE DICIEMBRE DE 2014)
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