La mujer a la que iba dirigido el paquete que contenía
un aparato explosivo que detonó en manos de un trabajador de limpieza que lo
hurtó de un buzón público en Tlalpan, tiene dos años que no reside en la ciudad
de México
MÉXICO (UNIV).-
Lilia Botello, la mujer a la que iba dirigido el paquete que contenía un
aparato explosivo que detonó en manos de un trabajador de limpieza que lo hurtó
de un buzón público en Tlalpan, tiene dos años que no reside en la ciudad de
México.
De religión Testigo
de Jehová, madre de familia y comerciante de chácharas, su familia no sabe
quien tiene la intención de causarle daño.
El paquete iba
dirigido a ella, con la dirección de calle independencia, colonia San Andrés
Tetepilco, en Iztapalapa, donde viven algunos de sus familiares, pero no Lilia
Botello de 42 años.
Antier, en el cruce
de calzada de Tlalpan y Huipilco, José Luis "N", empleado de la empresa
Eumex, sustrajo el sobre amarillo con esa dirección y lo abrió a bordo de la
camioneta que usa para su trabajo.
Allí en el vehículo
se dio la detonación que le fracturó una mano.
Berenice, hermana de
Lilia, indicó que su familia esta temerosa con el hecho, del cual primero se
enteraron por las noticias y luego por policías de investigación que a las
pocas horas acudieron a su casa a buscar a su consanguínea.
Los agentes no les
refirieron los datos sobre el remitente, ni dejaron algún citatorio para Lilia,
quien ahora reside en Sinaloa. "Estamos impactados con esta situación. ¿Se
imagina si hubiera llegado allí el paquete y si un niño lo hubiera llegado a
abrir?", preguntó preocupada.
"La verdad no
sabemos quien pudiera haber sido. Nosotros somos Testigos de Jehová, nuestra
actividad siempre ha sido tranquila con las personas de la comunidad, y la
predicación con las personas que tratamos", narró.
De Lilia dice que
tiene dos años que se fue de allí. "Ella tiene mucho que ya no vive aquí.
Se fue para el norte del país. Tiene hijos, se dedica al comercio, ella vende
chácharas, pero en realidad se fue de aquí porque a su esposo le ofrecieron
trabajo en otro lado".
En entrevista con
este medio dijo que cuando le informaron a su hermana lo que había sucedido, se
sorprendió mucho.
"Le comentamos
y está impactada, no sabemos nada ni de dónde pudo venir el sobre ni porqué.
Los policías que vinieron a buscarla sólo preguntaron por ella, pero no nos
informaron nada más", enfatizó Berenice Botello.
(NOROESTE/UNIV/ 23-02-2013| 03:49 PM)
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