“No llores mi niña”, le dijo el depravado a una de sus víctimas
MEXICALI.- La jovencita de 13
años de edad que era abusada sexualmente por el director de una escuela
primaria, el cual está detenido, dijo al Ministerio Público no estar
enojada con este individuo y señaló que el mismo sujeto abusó de otras
niñas del mismo plantel.
“Yo no estoy enojada con él porque no me obligó, no le guardo
rencor”, manifestó la jovencita, refiriéndose al maestro Edgar Benjamín
Rodríguez Díaz, director de la escuela Venustiano Carranza.
“Quiero que sí pague – lo que hizo-, pero a la vez no, porque tiene hijas y necesitan de él”,
“Yo no sé si lo que hizo está bien o mal, no sé como sentirme, lo que quiero es que otras personas no cometan el error que yo cometí y menos que le crean a él porque es muy mentiroso”, enfatizó.
“Me dijo que era la única y no es cierto, yo lo miraba que tocaba a otras niñas ahí en la escuela. También tocaba a mi amiga......y además sé que tuvo relaciones sexuales con una que se llama.... Yo la conozco porque ella iba a la primaria, pero ahorita ya va a la prepa, ella me lo dijo; y la verdad no quiero que eso pase con alguien más, porque sigue – el maestro- trabajando en la escuela de la Carbajal, ahí trabaja de una a cinco”.
La jovencita expresó que en quinto año el mencionado profesor empezó a hacerle caricias y que fue en sexto grado cuando la empezó a besar en la boca.
Dijo también la muchachita al Ministerio Público:
“El me decía que estaba bonita, que estaba hermosa, que tenía bonito cuerpo; yo sentía bonito porque estaba enamorada de él en ese entonces, yo le creía que me amaba porque me lo juraba por sus hijas que amaba”.
Señaló que la primera ocasión que sostuvieron relaciones sexuales fue en el Motel Los Reyes, ubicado rumbo al aeropuerto, sitio que visitaban con frecuencia y en esa visita recordó que le dijo “no llores mi niña”
Señaló que en su primer encuentro con el maestro a quien comenzó a frecuentar tras inocentes conversaciones en la red social Facebook, pero conforme pasaba el tiempo, la jovencita le otorgaba confianza.
Llegó el momento en que platicaban por webcam, y en alguna ocasión, expresó, ella le mostraba su cuerpo semidesnudo, a petición de él.
La niña expresó que el profesor Rodríguez también la citaba en la escuela, a la cual llegaba poco después de las siete de la mañana porque a esa hora no había nadie y usaban de cama el escritorio de una aula.
(EL MEXICANO/ Redacción/ 30 de Noviembre 2013)
“Quiero que sí pague – lo que hizo-, pero a la vez no, porque tiene hijas y necesitan de él”,
“Yo no sé si lo que hizo está bien o mal, no sé como sentirme, lo que quiero es que otras personas no cometan el error que yo cometí y menos que le crean a él porque es muy mentiroso”, enfatizó.
“Me dijo que era la única y no es cierto, yo lo miraba que tocaba a otras niñas ahí en la escuela. También tocaba a mi amiga......y además sé que tuvo relaciones sexuales con una que se llama.... Yo la conozco porque ella iba a la primaria, pero ahorita ya va a la prepa, ella me lo dijo; y la verdad no quiero que eso pase con alguien más, porque sigue – el maestro- trabajando en la escuela de la Carbajal, ahí trabaja de una a cinco”.
La jovencita expresó que en quinto año el mencionado profesor empezó a hacerle caricias y que fue en sexto grado cuando la empezó a besar en la boca.
Dijo también la muchachita al Ministerio Público:
“El me decía que estaba bonita, que estaba hermosa, que tenía bonito cuerpo; yo sentía bonito porque estaba enamorada de él en ese entonces, yo le creía que me amaba porque me lo juraba por sus hijas que amaba”.
Señaló que la primera ocasión que sostuvieron relaciones sexuales fue en el Motel Los Reyes, ubicado rumbo al aeropuerto, sitio que visitaban con frecuencia y en esa visita recordó que le dijo “no llores mi niña”
Señaló que en su primer encuentro con el maestro a quien comenzó a frecuentar tras inocentes conversaciones en la red social Facebook, pero conforme pasaba el tiempo, la jovencita le otorgaba confianza.
Llegó el momento en que platicaban por webcam, y en alguna ocasión, expresó, ella le mostraba su cuerpo semidesnudo, a petición de él.
La niña expresó que el profesor Rodríguez también la citaba en la escuela, a la cual llegaba poco después de las siete de la mañana porque a esa hora no había nadie y usaban de cama el escritorio de una aula.
(EL MEXICANO/ Redacción/ 30 de Noviembre 2013)
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