martes, 4 de septiembre de 2018

DISPARAN A POLICÍA ENCUBIERTO EN METRO ARAGÓN (VIDEOS)


El agente federal se encontraba encubierto; los sujetos a los que seguía le dispararon en el pecho al descender del vagón.



Foto Especial

Un Policía Federal Ministerial encubierto fue lesionado con arma de fuego en la estación del metro Aragón de la Línea 5.

El Sistema de Transporte Colectivo (STC) informó que alrededor de las 12:40 horas, un agente de aproximadamente 30 años de edad vestido como civil, quien estaba encubierto y daba seguimiento a dos sujetos, fue atacado por los mismos cuando se percataron de su presencia al descender del vagón.


Personal del STC Metro auxilió a Policía Federal Ministerial que fue lesionado en #Aragón #L5. Fue trasladado al hospital para su valoración médica. La PGJ CDMX inicio la carpeta de investigación correspondiente.

— MetroCDMX (@MetroCDMX) 4 de septiembre de 2018

Los individuos le dispararon a la altura del pecho.

A la escena de los hechos llegaron elementos de la Policía capitalina. El herido recibió los primeros auxilios por parte del personal de STC y fue trasladado al hospital Magdalena de las Salinas para su atención.

A bordo de la ambulancia, el lesionado proporcionó sus datos y se identificó como elemento activo de dicha corporación.

 La Procuraduría General de Justicia de la CDMX inició la carpeta de investigación correspondiente.

(ARISTEGUI NOTICIAS/ REDACCIÓN AN/ SEPTIEMBRE 4, 2018 3:49 PM)

“SECUESTRAN” TRANSPORTE PÚBLICO EN SONORA



Desde las 5.30 de la mañana, los concesionarios del transporte agrupados en Sictuhsa determinaron detener 270 unidades y no salir a prestar el servicio; en tanto, la Dirección del Transporte del Estado habilitó el servicio de mil 500 taxis colectivos para disminuir los efectos de este daño arbitrario a la movilidad de los usuarios en Hermosillo, Nogales, Guaymas y Cajeme…

Hermosillo, Sonora (DP).- Mientras que el Estado advierte iniciar con el retiro de concesiones y los empresarios exigen incrementar la tarifa a 15 pesos, el cobro de la “Tarifa técnica” de 11.96 es el motivo del “secuestro” del transporte público que dejó a más de 200 mil usuarios sin este servicio en Sonora.

Desde las 5.30 de la mañana, los concesionarios del transporte agrupados en Sicthusa determinaron detener 270 unidades y no salir a prestar el servicio; en tanto, la Dirección del Transporte del Estado habilitó el servicio de mil 500 taxis colectivos para disminuir los efectos de este daño arbitrario a la movilidad de los usuarios en Hermosillo, Nogales, Guaymas y Cajeme.

Al respecto, el director general de Transporte en Sonora, Carlos Morales Buelna, aseguró que "el Gobierno no está de acuerdo con el ´chantaje´ que está montando esta empresa ya que es un modus operandi que estas empresas han conducido por muchos años”.

Agregó que “ahora pretenden subir a 15 pesos por prestar un servicio ineficiente que no ha respondido a las necesidades del usuario, es decir, en su modus operandi quieren que el Estado y el usuario premien su ineficiencia".

Por su parte, el presidente de Sictuhsa, José Luis Gerardo Moreno, argumentó que “decidimos suspender la prestación del servicio de manera indefinida hasta encontrar una solución que de manera razonable permita la sustentabilidad y confiabilidad que tanto se ha promovido”.

Dijo también que “creemos que los costos del transporte deberían de andar en 15 pesos el pasaje, no estamos pidiendo los 15 pesos pedimos que nos permitan cobrar la tarifa del año pasado, en lo que se actualiza la nueva tarifa".

Las protestas y el enojo social no se hizo esperar por parte de los usuarios que vieron afectadas sus actividades cotidianas, principalmente estudiantes de primaria, secundaria, preparatoria y universidades, así como empleados de comercios y fábricas maquiladoras naves industriales de Hermosillo, Cajeme, Nogales y Guaymas.

(DOSSIER POLITICO/ ALEJANDRO MATTY ORTEGA/2018-09-04)

ENTREGA PGR A SONORA 38.7 MDP DESVIADOS POR PADRÉS


El gobierno estatal recibió un cheque con esa cantidad por reparación de daños; dinero es entregado al consejero jurídico de la entidad, Iván Archundía


El titular de la PGR, Arturo Elías Beltrán (segundo de izq. a der.) y el consejero Jurídico de Sonora, Iván Jaimes Archundia (tercero de izq. a der.). Foto: Especial

CIUDAD DE MÉXICO.- La Procuraduría General de la República entregó a la consejería Jurídica del Gobierno del estado de Sonora, un cheque por 38.7 millones de pesos, por concepto de la reparación del daño, relacionada con el desvío de recursos durante la administración del exgobernador, Guillermo Padrés.

Te puede interesar: Juez absuelve a Guillermo Padrés por 'lavado' y fraude

El dinero fue entregado por el encargado de despacho Alberto Elías Beltrán al consejero Jurídico de esa entidad, Iván Jaimes Archundia.

La PGR informó que otras entidades ya han recibido recursos para reparar el daño derivado de algunas conductas realizadas en contra del patrimonio público.

Iván Jaimes Archundia, Consejero Jurídico del Gobierno del estado de Sonora, reconoció el trabajo de la PGR durante la implementación de Sistema de Justicia Penal.



(EXCELSIOR/ MARCOS MUEDANO/  04/09/2018 12:12)

'¡MATÉMOSLO DE UNA PU#% VEZ!': CUANDO TRUMP QUISO ASESINAR A ASSAD


Presentan un adelanto del libro 'Fear: Trump in the White House', del célebre periodista Bob Woodward, quien también da cuenta de que el presidente de EU llamó una vez 'retrasado' a su fiscal general, Jeff Sessions



Woodward contribuyó a la dimisión del presidente Richard Nixon con sus investigaciones sobre el caso para The Washington Post.

WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, estuvo a punto de ordenar el año pasado el asesinato del líder sirio, Bashar al Assad, y en una ocasión llamó "retrasado mental" a su fiscal general, Jeff Sessions, según un nuevo libro del periodista Bob Woodward del que hoy se conocieron algunos detalles.

Fear: Trump in the White House (Miedo: Trump en la Casa Blanca), que saldrá a la venta el próximo 11 de septiembre, es un análisis del caos en el Ala Oeste a cargo de Woodward, cuyo trabajo en el diario The Washington Post para desentrañar el caso Watergate contribuyó a la dimisión del presidente Richard Nixon (1969-1974).



Entre los detalles adelantados hoy por The Washington Post destaca un episodio de abril de 2017, cuando Trump respondió iracundo a los informes de un ataque químico del régimen de Al Assad contra civiles en Siria.

¡Matémoslo de una puta vez (a Al Assad)! Hagámoslo. Metámonos ahí y matemos a toda esa puta gente", dijo Trump en una conversación telefónica con su secretario de Defensa, James Mattis.

El jefe del Pentágono respondió que se pondría a ello, pero al colgar el teléfono le dijo a un asesor que no harían "nada de eso", sino que organizarían una respuesta "mucho más contenida": el bombardeo contra una base aérea siria que Trump ordenó finalmente.



DOMANDO A LA FIERA

El libro de Woodward retrata varios momentos en los que los asesores de Trump tratan de persuadirlo o incluso engañarlo para que no ceda a sus impulsos más extremos.

Por ejemplo, el que hasta marzo pasado fuera el principal asesor económico de la Casa Blanca, Gary Cohn, robó en una ocasión una carta que Trump tenía en su escritorio y que planeaba firmar para retirar a Estados Unidos de un acuerdo comercial con Corea del Sur, y el mandatario no se enteró, de acuerdo con Woodward.

Cuando, a comienzos de 2017, Trump pidió a su asesor Rob Porter que redactara una carta para iniciar el proceso de retirada de Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), este consultó a Cohn, quien le respondió:

Pararé esto. Le quitaré el papel de su mesa", de acuerdo con el libro.

Woodward también asegura que, en una ocasión, Trump dijo sobre su fiscal general: "

Este tipo está retrasado mentalmente. Es un tonto de los del sur. Ni siquiera le permitirían ser abogado de tercera en Alabama".


Y el jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, llamó "idiota" a Trump durante una reunión, en la que comparó el Ala Oeste con "un pueblo de locos", de acuerdo con el periodista.

Kelly negó hoy en un comunicado haber llamado "idiota" a Trump, y la Casa Blanca acusó a Woodward de haber llenado su libro de "historias inventadas" para "dejar mal al presidente".

(EXCELSIOR/ EFE/ FOTO: REUTERS/ 04/09/2018 15:00)

EL CRIMEN ORGANIZADO FRENTE A ESTADOS DESORGANIZADOS



BOGOTÁ (apro).- A diferencia de México, donde hasta ahora ningún grupo del crimen organizado ha manifestado su intención de entregarse a la justicia, en Colombia hay uno, La Oficina, que busca un acuerdo con el gobierno para desarmarse, desmantelar sus negocios ilícitos y pagar por sus crímenes.

En Colombia ya hay antecedentes de pactos gubernamentales con organizaciones del crimen organizado. El más recordado es el que se hizo con el Cártel de Medellín en los 90, a través del cual el jefe de ese grupo, Pablo Escobar, se sometió a la justicia.

El caso de Escobar salió mal, porque el narcotraficante siguió manejando sus negocios de droga desde la cárcel La Catedral, la cual él mismo mandó a construir. Incluso ejecutó en el interior del penal a sus socios Fernando y Mario Galeano y Gerardo y William Moncada.

El 21 de julio de 1992, cuando el Ejército puso en marcha un caótico operativo para trasladar al capo a una prisión militar, él y sus hombres se fugaron. Un año y cuatro meses después, Escobar fue ejecutado en una casa en Medellín.

La Oficina, la organización armada urbana más poderosa de Colombia, es precisamente una creación de Escobar. La fundó en los 80 para agrupar a todas las bandas de Medellín y fue durante años su brazo armado. Desde entonces, ha mutado y subsistido.

Tuvo una etapa paramilitar en la que colaboró con la policía y el Ejército para exterminar a las células urbanas de las guerrillas que estaban presentes en las comunas de Medellín. Nunca ha sido ajena a ninguna de las rentas criminales que se generan en esa ciudad colombiana y en nueve municipios colindantes.

Hoy La Oficina es una confederación de bandas con una dirección colectiva que establece las reglas operativas del crimen en Medellín y su zona metropolitana y que cobra un porcentaje de todos los negocios ilegales que se realizan en esa urbe: desde microtráfico hasta cobros por deudas de transacciones de drogas.

“Ocho”, un vocero designado por la dirección colectiva de La Oficina, dijo a la revista Proceso (edición 2182) que la organización está dispuesta a acogerse a la justicia, desarmarse y desmantelar sus negocios a cambio de una rebaja de penas para sus integrantes e inversión social y empleo en los barrios donde están sus bases.

Un proceso de esta naturaleza podría generar una reducción significativa de la violencia en Medellín, la segunda ciudad colombiana y donde este año se ha registrado un aumento del 20% en el número de homicidios.

El alcalde de la ciudad, Federico Gutiérrez, reaccionó a la propuesta de ”Ocho” advirtiendo que él no negociará con delincuentes. “La opción con cualquier estructura criminal no es la negociación sino el sometimiento”, aseguró.

Pero en realidad no es el acalde al que le corresponde pactar una salida legal para propiciar la entrega a la justicia de integrantes de grupos armados como La Oficina, sino al gobierno nacional y al Congreso, que es donde se hacen las reformas legislativas que se requieren para este tipo de procesos.

Con frecuencia ocurre que el crimen organizado se enfrenta a Estados desorganizados. No solo cuando estos combaten estructuras ilegales, sino cuando se trata de dar respuestas novedosas a problemas tan complejos como el narcotráfico y la violencia que este fenómeno delictivo produce.

Los gobiernos suelen actuar con medidas coyunturales y no con estrategias de largo plazo frente al crimen.

En los 90, el gobierno de Colombia propició la entrega de Pablo Escobar y de otros jefes del Cártel de Medellín –como los hermanos Ochoa Vásquez– a través de un decreto presidencial que les otorgaba a esos capos un trato judicial benigno: un máximo de ocho años de cárcel y la garantía de no extraditarlos a Estados Unidos.

Los hermanos Jorge Luis y Juan David Ochoa Vásquez, socios de Escobar, se entregaron a la justicia en 1991 en el marco de ese decreto y salieron en libertad cinco años después. El primero aún vive en su finca cerca de Medellín. El segundo murió de un infarto al corazón en 2013.

LA POLÍTICA CRIMINAL, UNA RESPUESTA

El activista humanitario y experto en crimen urbano, Luis Fernando Quijano, piensa que cuando un grupo criminal quiere entregarse a la justicia a cambio de beneficios judiciales hay que tomarle la palabra y darle una salida en el marco de la ley.

Estados Unidos, que tanto presiona a América Latina en materia de lucha contra el narcotráfico, contempla en su legislación beneficios judiciales para quienes cooperen con la justicia.

Tan es así, que muchos narcotraficantes colombianos solicitados en extradición por Estados Unidos prefieren entregarse a la justicia de ese país que hacerlo en Colombia.

A cambio de delaciones y de entregar parte de sus fortunas al Tío Sam, han cumplido unos cuántos años de cárcel y han salido a disfrutar la plata que les quedó de sus años en la ilegalidad. Muchos, incluso, se quedan en Estados Unidos con sus familias con permisos de residencia pactados de antemano.

Cuando una organización criminal quiere acogerse a la justicia a cambio de rebajas de penas al menos hay que ver si las legislaciones nacionales tienen respuestas y, si no, debatir la pertinencia de legislar al respeto.

Los incentivos legales para propiciar justicia siempre han existido.

En Colombia, hay legisladores de diferentes corrientes políticas dispuestos a expedir una ley para la entrega de los integrantes de La Oficina.
El asesor legal de la dirección colegiada de La Oficina, Ricardo Andrés Giraldo, considera que “es necesario darles a estas organizaciones salidas legales para romper el ciclo de violencia” y afirma que la actual estrategia para combatir el delito no está dando resultados.

Giraldo plantea impulsar una ley que permita a todos los “actores del conflicto armado urbano” de Colombia acudir a la justicia, confesar sus crímenes, abandonar sus negocios ilícitos y recibir, a cambio, penas de entre cinco y ocho años de prisión, en el caso de delitos comunes, y hasta de 10 años en los casos de crímenes de lesa humanidad, como secuestro, ejecuciones y tortura.

Propone, además, incentivos como que los condenados puedan cumplir sus penas en granjas agrícolas, y que se limite la admisión de solicitudes de extradición a Estados Unidos a los delitos que se hayan cometido después de que haya entrado en vigor la eventual legislación.

Él cree que con este marco legal se propiciaría que en Medellín y otras ciudades de Colombia con alto niveles de criminalidad haya un “acogimiento” a la justicia, individual y colectivo, de integrantes de estructuras delincuenciales que generan violencia y terror entre la población.

La experiencia colombiana puede ser un referente del proceso que se ha echado a andar en México para buscar la paz del país con estrategias de combate al crimen alternativas a las tradicionales.

Al mismo tiempo, lo que ocurra en México en materia de pacificación también puede aportar elementos a considerar en Colombia.

Los dos países –junto con los centroamericanos—son los que más alto precio han pagado en la lucha global contra el narcotráfico. Por eso tienen toda la autoridad para ensayar fórmulas novedosas, y siempre en el marco de la ley, para combatir ese y otros fenómenos delictivos.

Lo que se haga en ese sentido es parte de la política criminal que cada país decida diseñar y poner en marcha. La política criminal es un principio de organización del Estado frente a las diferentes conductas delictivas. El jurista argentino Alberto Binder la define como “una forma de violencia estatal organizada”.

La Corte Constitucional de Colombia definió en 2001 la política criminal como “el conjunto de respuestas que un Estado estima necesario adoptar para hacerle frente a conductas consideradas reprochables o causantes de perjuicio social con el fin de garantizar la protección de los intereses esenciales del Estado y de los derechos de los residentes en el territorio bajo su jurisdicción”.

Las respuestas, señala la Corte, pueden ser sociales, jurídicas, policiacas, penales, económicas, culturales, administrativas, tecnológicas y, desde luego, políticas.

El sociólogo y abogado italiano Alessandro Baratta consideraba que la política criminal es una herramienta de los Estados para prevención y enfrentar el delito, y hacer frente a sus consecuencias.

México y Colombia pueden echar mano de todas las herramientas que sus legislaciones les permitan –y que se enmarquen en el derecho y la normatividad internacionales– para dar respuesta a fenómenos criminales que no han podido resolver con estrategias convencionales.
(PROCESO/ RAFAEL CRODA /3 SEPTIEMBRE, 2018)

ELLA ES ROSALINDA, LA ESPOSA DE 'EL MENCHO' Y LA ENCARGADA DE BLANQUEAR DINERO PARA EL CÁRTEL JALISCO NUEVA GENERACIÓN



Foto: Tomada de Internet

En 1996 Rosalinda González Valencia se casó con el que se convertiría en el hombre fuerte del Cártel Jalisco Nueva Generación, Nemesio Oseguera Cervantes 'El Mencho'

Rosalinda González Valencia pertenece a una familia originaria de Aguililla, Michoacán, y es conocida como La Jefa dentro del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Reportes de autoridades federales han identificado que los 16 hermanos que conforman esa familia son los fundadores de esa organización criminal. En total son seis varones y seis mujeres, la mayor de ellas es Rosalinda.

Entre los hermanos figuran Édgar, Arnulfo, Elvis, Mauricio, Ulises, Gerardo, Luis Ángel y José. Además de María Elena, Érika, Berenice, Marisa Ivette y Noemí, estas últimas señaladas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos como responsables en el trasiego de drogas a ese país.

En 1996, Rosalinda González Valencia se casó con el que se convertiría en el hombre fuerte del Cártel Jalisco Nueva Generación, Nemesio Oseguera Cervantes, considerado por el Departamento del Tesoro como un “fugitivo” de las autoridades estadounidenses desde abril de 2015.

Los hijos de la pareja son Jessica Johanna y Rubén Oseguera González. Rubén, El Menchito, fue detenido en enero de 2014 en Zapopan, Jalisco, en posesión de 25 millones de pesos y armas de fuego. En ese año fue liberado en dos ocasiones: la primera en octubre, luego de la intervención de un juez, quien determinó su libertad del penal federal ubicado en el Altiplano, ante falta de pruebas en su contra. Tras su recaptura y envío al Cereso de Puente Grande, fue liberado en diciembre de ese año.

A poco más de 20 años, aún queda la duda sobre la muerte de Amado Carrillo, el 'Señor de los Cielos', líder del Cártel de Juárez

LA JEFA

Rosalinda González Valencia conoció a Nemesio Oseguera Cervantes, su actual esposo, antes de que se convirtiera en el capo más buscado por los gobiernos de los Estados Unidos y México.

Pero la mujer vivió y se involucró en el tráfico de las drogas desde su infancia, ya que el patriarca de 'Los Cuinis' , Armando Valencia Cornelio 'El Maradona', fue uno de los fundadores del Cártel del Milenio.

Al llegar a la cima del Cártel Jalisco Nueva Generación, 'El Mencho' fue el foco de atención de todas las corporaciones de seguridad, pero al ser un blanco difícil de atrapar se decidió que era mejor detener uno a uno a los familiares integrantes del grupo criminal.

Varios de sus hermanos, cuñados, su hijo Rubén y ahora su esposa Rosalinda están en penales federales acusados de tráfico de drogas y blanqueo de dinero.

La última en ser arrestada por la PGR fue precisamente Rosalinda, quien es conocida como 'La Jefa' por los sicarios pertenecientes al CJNG.

Durante varios años vivió en una de las zonas residenciales más lujosas de Guadalajara sin ser molestada por las autoridades, a pesar de que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos la señaló junto a sus hermanas María Elena, Érika, Berenice, María Ivette y Noemí, de ser responsables en el trasiego de drogas a ese país.

'La Jefa' vio como en mayo de este año su suerte cambió al ser detenida afuera de una tienda de conveniencia por elementos de la Marina, por lo que no tuvo otras más que pedir ayuda a  su acompañante para poder contactar a su abogado.

Rosalinda de inmediato fue trasladada al Penal de Almoloya, en el Estado de México; donde un Juez la vinculó a proceso por blanqueo de dinero y la mandó al Reclusorio de Morelos.

En este momento la esposa del Mencho espera inicie el proceso penal en su contra y conocer su sentencia.

(EL MAÑANA DE REYNOSA/ REDACCION/ 04 DE  SEPTIEMBRE 2018)

ASESINAN EN PENAL DE TAMAULIPAS A 'LA YEGUA', OPERADOR DEL CÁRTEL DEL GOLFO



Llevaba nueve días de haber sido ingresado al penal de Altamira

El líder regional del Cártel del Golfo, Héctor Adrián Lució Benavides, alias "La Yegua", fue asesinado a puñaladas por dos internos del penal de Altamira en Tamaulipas, a nueve días de haber sido ingresado y trasladado del estado de Nuevo León, donde autoridades federales y estatales lo capturaron.

Héctor Adrián de 39 años recibió múltiples heridas en el pecho y de acuerdo a informes de autoridades estatales dos internos quedaron bajo investigación al sorprenderlos en flagrancia del delito.

Su muerte se registró a las 20:00 horas de ayer lunes y de acuerdo a la versión de uno de los guardias, los hechos se registraron cuando él ahora reo regresaba a su celda después de haber sido llevado al área médica del centro penitenciario.

Lucio Benavides era llevado de manera diaria a curación debido a una lesión que tenía en la pierna derecha.

Aparentemente, al ingresar a una de las secciones un reo sorprendió y sometió de un golpe al custodio que lo traía mientras que otro cómplice tomaba a Héctor Adrián y con cuchillo lo apuñaló.

El médico del penal recibió la llamada de auxilio, acudiendo a atenderlo, pero al revisarlo confirmó que ya no tenía signos de vida, por lo que llamaron a elementos de la unidad General de investigación de la Procuraduría General de Justicia del Estado para que tomaran cartas en el asunto.

Trascendió que los presuntos asesinos responden al nombre de José Manuel "N" y Maximiano "N", por lo que ya son investigados.

Héctor Adrián "La Yegua" tenía apenas nueve días de haber sido ingresado al centro de sanciones y ejecuciones de Altamira, luego de haber sido capturado en Monterrey por elementos de estatales y gendarmería de la Policía Federal.

Debido a que no era un objetivo prioritario la Federación procedió a dejarlo en estado de Tamaulipas, ya que en Tampico tenía pendiente una orden de aprehensión por el delito de secuestro agravado.

Según la Comisión Nacional de seguridad Héctor Adrián " N" era considerado como un líder regional que tenía influencia en los estados de Tamaulipas, Nuevo León y Veracruz en los delitos de secuestro, extorsión y robo de hidrocarburo.

Aseguraron que pertenecía al grupo denominado “Los ciclones”, que operan en la ciudad de Matamoros y la cual es considerada como el bastión del Cártel del Golfo.

(EL MAÑANA DE REYNOSA/ REDACCION/ 4 SEP 2018)

VIOLENCIA DEL NARCO DEJA ACÉFALO EL MUNICIPIO DE BUENAVISTA, EN MICHOACÁN (VIDEO)


La periodista Dalia Martínez informa que Morena prepara la propuesta de la persona que ocupará la presidencia municipal de Buenavista Tomatlán, luego que el ganador de los comicios fue asesinado y la síndica electa fue amenazada.

(ARISTEGUI NOTICIAS/ REDACCIÓN AN/ 04 DE SEPTIEMBRE 2018)

CORRUPCIÓN EN CHIHUAHUA: HAY 44 ÓRDENES DE APREHENSIÓN, 15 SON CONTRA DUARTE (#ENTÉRATE)


El gobernador Javier Corral detalló que la Operación Justicia para Chihuahua ha logrado 46 vinculaciones a proceso y 7 sentencias condenatorias; dos de ellas tienen que ver con el caso por el que acaba de ser exonerado Alejandro Gutiérrez.

(ARISTEGUI NOTICIAS/ REDACCIÓN AN/ 04 DE SEPTIEMBRE 2018)

#ARISTEGUIENVIVO 04/09/18: TRIFULCA EN CU; ANÁLISIS DEL VI INFORME DE EPN; Y CIDH SOBRE AYOTZINAPA…


Además, conversamos con el futuro titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda en el gobierno de AMLO, Santiago Nieto.

(ARISTEGUI NOTICIAS/ REDACCIÓN AN/ 04 DE SEPTIEMBRE 2018)

LA COMISIÓN DEL SALARIO RECIBIÓ 238 MILLONES EN ESTE SEXENIO: 65% SE LE FUE EN… GASTOS PERSONALES



La crisis salarial que vive la clase trabajadora en México es una realidad y ha puesto en el blanco al órgano encargado de fijar año con año el salario mínimo: la Conasami que, de acuerdo con lo expuesto por líderes de Morena, podría tener las horas contadas, de cara al próximo Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Durante los últimos tres años, la sociedad civil ha insistido en que esa entidad debe desaparecer. Se le ha criticado su opacidad en cuanto a los informes con los que dice fija el salario; también la perpetuidad de su presidente, Basilio Gonzáles Núñez, quien es el funcionario más vetusto en su puesto del país.
En los últimos seis años, el presupuesto que se le asignó a la Comisión se mantuvo estable y absorbió más de 200 millones de pesos. Lo que también se mantuvo constante fue el modo en el que gastó, ya que la mayoría fueron para servicios personales y una menor parte a gasto operativo.

Ciudad de México, 4 de septiembre (SinEmbargo).- La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), recibió un presupuesto de 238 millones 583 mil 833 pesos de 2013 a 2018, de los cuales el 64.8 por ciento lo utilizó para “Gastos Personales”, y el resto se destinó para “Gastos de Operación”.

De acuerdo con las Cuentas Públicas, la Conasami destinó, de 2013 a 2017, 154 millones 741 mil 814 pesos a gastos personales y sólo 38 millones 676 mil 833 pesos a gastos de operación. De acuerdo con el Portal de Obligaciones de Transparencia (POT) el directorio de la Conasami, entidad de control indirecto de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), está conformado por 23 personas.

El presupuesto de la Comisión se mantuvo estable durante toda la administración de Enrique Peña Nieto, a pesar de ser, desde al menos los últimos tres años, un organismo del que se exige su desaparición: en 2013 recibió 40 millones 545 mil 860 pesos y para 2018, quedó con 39 millones 615 mil 367 pesos.


La polémica Comisión Nacional de los Salarios Mínimos es un “organismo público descentralizado”, pero depende de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS). Se creó luego de la reforma al artículo 123 constitucional en la década de los 60, del siglo pasado.

Su objetivo principal, de acuerdo con la Ley, “es fijar los salarios mínimos con congruencia entre lo que establece la Constitución con las condiciones económicas y sociales de México, cuidando la equidad entre los factores de la producción, así como el respeto a la dignidad del trabajador y su familia”.

Actualmente, la Conasami es encabezada por Basilio González Núñez, quien fue nombrado en 1991 por el entonces Presidente Carlos Salinas de Gortari; es, por tanto, el funcionario más veterano en la alta burocracia mexicana. Además, percibe como salario al mes 173 mil 620 pesos brutos, lo que un trabajador con el mínimo alcanzaría sólo si laborara mil 486 días.

Además, González Núñez, quien que ha negociado con cinco Presidentes de la República, 11 Secretarios del Trabajo, que trabajó durante el salinismo y luego con el zedillismo al tiempo de la crisis financiera de 1995; el contemporáneo de los asesinatos del candidato y secretario general del PRI, Luis Donaldo Colosio y Francisco Ruiz Massieu, respectivamente, así como la muerte del octogenario dirigente de la Confederación de Trabajadores de México, Fidel Velázquez Sánchez, jamás ha aceptado hacer públicos sus bienes patrimoniales.



El salario mínimo 2018 en México es actualmente de 88.36 pesos diarios. Trabajadores, académicos e incluso empresarios han exigido que ese rango aumente para así acelerar la economía. La Conasami, fundada en los años 60 del siglo pasado, y el Gobierno de Enrique Peña Nieto se han negado. Foto: Galo Cañas, Cuartoscuro

EL GASTO DE UNA ENTIDAD EN VILO

Las huellas del gasto interno de la Conasami durante el sexenio peñista, de acuerdo con la cuenta pública, se han cargado visiblemente en el rubro de Gastos y Servicios Personales.

En 2013 reportó a la Cuenta Pública un gasto en Servicios Personales por 30 millones 061 mil 947 pesos y un Gasto en Operación por 10 millones 483 mil 913 pesos, dando en total el monto que le fue asignado.

Para 2014, 29 millones 971 mil 255 pesos los reportó como dinero pagado en Servicios Personales y 6 millones 392 mil 985 pesos en Gastos de Operación.

En 2015, la historia se repite: fueron 32 millones 422 mil 970 pesos para Servicios Personales y 8 millones 299 mil 409 para Gastos de Operación. A eso se le sumaron 85 mil 840 pesos de “Inversión Física”.

En 2016 fueron 31 millones 836 mil 807 para Servicios Personales y 7 millones 195 mil 061 pesos para Gastos de Operación, a pesar de que se tuvo un mayor presupuesto ese año.

Para 2017, baja de nueva cuenta el presupuesto, pero el modo de gastar es el mismo: 30 millones 448 mil 833 pesos en Servicios Personales y 6 millones 305 mil 465 pesos en Gastos de Operación.

La Conasami fija año con año el salario mínimo. Cada año, se instala una sesión ordinaria en la que, con base en estudios se debate cuál debe ser la remuneración mínima de los trabajadores. En los últimos quince años, el salario se ha fijado de acuerdo con la inflación estimada por el Banco de México (Banxico).

El pasado 26 de agosto, Mario Delgado Carrillo, coordinador de los diputados del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), anunció que desde el Congreso se lanzaría la propuesta de desaparecer a la Conasami por su eficacia es “nula” y porque y ha contribuido a la pérdida del poder adquisitivo de la ciudadanía.

“Estamos proponiendo que para el año que entra nos deshagamos de la Conasami, como parte del paquete de austeridad. No tiene ningún sentido que exista este organismo”, afirmó.

El Senador propuso que las funciones actuales de la Conasami las realice una comisión integrada por funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), del Banco de México y representantes del sector patronal y obrero.

También planteó la necesidad de aumentar el salario mínimo de 88 pesos a al menos a 108 pesos para el próximo año, “para reactivar la economía” del país.

¿EN QUÉ GASTA LA CONASAMI?

Las compras de la Comisión reportadas en el POT son variadas; van desde cuatro pagos por mantenimiento del elevador del edificio en un mismo año hasta la compra de monedas precolombinas.

De acuerdo con la revisión de 221 contratos, durante este último sexenio, la Conasami ha pagado por vales de despensa, botas para personal, planos arquitectónicos, cursos de ortografía y redacción básica, cursos de coaching, servicios de lavandería, servicios para la realización de programas recreativos vacacionales, cursos de control y combate, vestuarios, alimentos y uniformes.

Está el registro de la compra de una cartulina de importación color azul por 9 mil 999 pesos.

También el “diseño, organización y desarrollo del programa vacacional de verano 2013”, que tuvo un costo de 63 mil 336 pesos; cada año hay un pago realizado con ese fin.

Hay un contrato por 35 mil 999 pesos para la compra de “botas de protección”, aunque se desconocen qué labores de la Comisión requieran de ese tipo de material.

Hay incluso compras, como una de 2018, por 273 mil 051 pesos para “Artículos de papelería y escritorio” y 39 mil 400 pesos para el mantenimiento del elevador.

Y están sus constantes adquisiciones de monedas. En 2018, la Comisión pagó 132 mil 070 pesos por ocho monedas y cinco cápsulas de acrílico.

En 2017, hay un contrato por 57 mil 352 pesos para la compra de vestuario para personal; 41 mil 552 pesos por el suministro de bienes perecederos y no perecederos; 37 mil 800 pesos por “vales de despensa y restaurante a través de tarjetas electrónicas”; 37 mil pesos para el “Servicio de Programa Recreativo Vacacional 2017” y 179 mil 346 pesos por el “suministro de monedas y cápsulas de acrílico”.

Para 2016, se pagaron 72 mil pesos por un servicio de impresión; 21 mil 479 pesos para el mantenimiento de su planta de luz; 75 mil 531 pesos para el aseguramiento de bienes patrimoniales; 280 mil 656 pesos para el suministro de artículos de papelería y escritorio; 11 mil 020 pesos por un servicio de jardinería y 67 mil 925 pesos para el suministro de bienes perecederos y no perecederos.

Durante 2015 hay contratos para la adquisición de cuatro monedas precolombinas por 83 mil 559 pesos; publicidad en El Sol de México por 81 mil 200 pesos; 42 mil 228 pesos por el suministro de materiales de limpieza; 18 mil 480 pesos por agua; 15 mil pesos por un curso de coaching; otra compra de 15 monedas y 12 cápsulas de acrílico por 94 mil 946 pesos y por un curso en Desarrollo del Potencial Humano y Organizacional por 8 mil 350 pesos.

En 2014, las compras son similares: 56 mil 689 pesos por vestuario y uniformes; 96 mil 628 pesos por material de limpieza; 191 mil 928 pesos para monedas y cápsulas de acrílico; 27 mil 999 pesos para comprar “prendas de protección personal”; 19 mil 024 pesos por servicio de lavandería, limpieza e higiene; 9mil 935 pesos por impresión de documentos; 14 mil 300 pesos por otro curso de Coaching; 248 mil 134 pesos para el suministro y colocación de persianas para el inmueble y 8 mil 038 pesos para fumigación.

Finalmente, en 2013, la Conasami realizó compras de 734 mil 258 pesos por la elaboración y diagnóstico “energético integral” de la Conasami; 69 mil 480 pesos para alimentos para el personal; 259 mil 200 pesos de servicios de impresión; 1 millón 243 mil 404 pesos por la renta de dos vehículos y una camioneta; 8 mil 580 pesos por el curso “Creciendo Juntos”; 25 mil 520 pesos por impresiones; 19 mil 400 pesos para servicios de “lavandería, limpieza e higiene” y 12 mil 180 pesos para el lavado de vidrios.

(SIN EMJBARGO/ DANIELA BARRAGÁN/ 04 DE SEPTIEMBRE 2018)

EL ‘MAYO’ ZAMBADA Y SUS 40 AÑOS EN LA CLANDESTINIDAD



ISMAEL ZAMBADA. Un negociador bajo las sombras.

Muy pocos narcos en México han tenido la audacia de vivir por casi 40 años en medio de la persecución y la muerte, las drogas, las lealtades y las traiciones, las guerras internas y entre cárteles, los excesos y la soledad que conllevan el poder, la fama y la clandestinidad. Todo esto sin pisar la cárcel. Ismael Zambada García, el Mayo, es uno de ellos.

De las organizaciones del Golfo, Juan Nepomuceno Guerra murió en su casa a los 86 años, aunque estuvo preso por periodos cortos en varias ocasiones. De los capos sinaloenses, solo Eduardo, Lalo Fernández no pisó nunca la cárcel y también murió de viejo. Todos los demás fueron asesinados y, los que no, pagaron o están pagando con cárcel sus delitos. Son los casos de Pedro Avilés, asesinado en 1978 yendo para el poblado de Tepuche, muy cerca de Culiacán. Inés Calderón, que llegó a tener un poder inmenso, fue muerto por la Policía Federal en su casa de La Campiña, en marzo de 1988. Rafael Caro Quintero, vigente aún, estuvo 28 años en la cárcel acusado de narcotráfico y de haber participado en el crimen del agente de la DEA, Enrique Kiki Camarena. Don Ernesto Fonseca Carrillo y Miguel Félix Gallardo, coacusados del mismo delito que Caro, siguen todavía en la cárcel, don Neto cumpliendo condena en una casa por cuestiones “humanitarias”.

De la familia Cázarez, el más importante es Víctor Emilio y está preso en los Estados Unidos. De los Beltrán Leyva, Arturo fue “cazado” por la Marina en diciembre de 2009 y sus hermanos Alfredo y Héctor están presos; de los Esparragoza, Juan José, el Azul, se ha dicho que murió de un paro cardíaco en un hospital, aunque eso no se ha comprobado todavía. Estuvo preso. Los Coronel se derrumbaron luego de la muerte de Nacho, cazado en Guadalajara por el Ejército. Los Carrillo han sido una historia de dramas familiares a partir de la muerte de Amado Carrillo, el Señor de los cielos. Y de los Guzmán ni se diga: Joaquín Guzmán, el más célebre, está siendo procesado en una corte federal de Brooklyn, en Nueva York.

¿Por qué el Mayo no ha pisado nunca la cárcel? Tiene casi 40 años delinquiendo y, de esos, casi 30 en la cúspide, prácticamente desde que detuvieron a Miguel Félix en 1989. Una de las claves, sin duda, es su capacidad logística. Otra es la relación que ha mantenido, durante décadas, con la fuerzas del gobierno de todos los niveles. No hay ninguna carpeta del fuero común abierta en su contra. Muchas veces ha estado a punto de ser atrapado por el Ejército o la Marina pero siempre ha logrado escapar. No ha ocurrido lo mismo con sus socios más cercanos. Cuando mataron a Inés Calderón estuvieron juntos días antes y al ver que se les venía encima la policía Inés optó por quedarse en Culiacán y él por tomar una avioneta e irse al monte, su guarida principal. No ha ocurrido lo mismo con sus hijos, casi todos en la cárcel aquí y en los Estados Unidos. Igual que su hermano Reynaldo Zambada, extraditado en 2012. Y esto es tal vez su mayor pérdida, el costo más caro por estar donde está. Sobre todo la ausencia de Vicente, su primogénito, ahora testigo protegido de la justicia norteamericana.

Pero hay otra razón para que no haya sido tocado él en lo personal a pesar de los golpes a su estructura y a su familia, y es que ha sido un factor de equilibrio, un puente entre el gobierno y el cártel de Sinaloa. Y también con los gringos. No es gratuito que su hijo haya impuesto sus condiciones en el juicio que se le siguió en Chicago al grado de que, a pesar de que fue sentenciado —se desconoce la sentencia porque el caso se selló—, puso a la justicia norteamericana contra la pared obligándola a un acuerdo.

Pero la historia sigue abierta y no se sabe qué pasará, si seguirá protegido o se desatarán operativos para atraparlo. Lo dudo con la visión que trae el nuevo gobierno federal. Más aún porque hay muchos elementos para pensar que el Mayo jugó con “el viejito”.

Ahora tal vez no con dinero para los candidatos de Morena, como lo ha hecho históricamente con los del PRI en muchas partes de Sinaloa. Pero sí con la consigna girada a través de sus radios generales. ¿Se hubiera ocupado más?

BOLA Y CADENA

LA SEMANA PASADA CIRCULÓ la versión de que el Mayo Zambada estuvo a punto de ser atrapado en un rancho cercano al poblado Limón de los Ramos. La noticia, que en horas circuló por todo el país, fue desmentida por la Secretaría de Seguridad Pública. Cierto o falso, no se esperaba que confirmaran la nota, menos que lo hicieran ellos. ¿El Mayo en el Limón de los Ramos? Extraño. En todo caso es una raya más al mito.

SENTIDO CONTRARIO

LA FISCALÍA FEDERAL QUE INVESTIGA el crimen de Javier Valdez solicitó tiempo para obtener la declaración de Dámaso López Núñez —extraditado recientemente a los Estados Unidos—, quien dijo ya extraoficialmente que la célula que perpetró el crimen pertenecía a su organización, pero que él no lo ordenó. Y entonces las preguntas son quién fue, quién se enojó con las notas de Javier, quién dio a orden, al mando de quién quedaron sus huestes.

HUMO NEGRO

LA IGNORANCIA ES LA CAUSA DE muchos males, y si se combina con desinformación o notas dolosamente falsas, suele ser criminal, como ha ocurrido recientemente en estados como Puebla e Hidalgo, donde fueron linchados tío y sobrino en un caso y una pareja en otra, bajo la creencia de que eran “robachicos”. Me hace recordar el episodio de San Miguel Canoa en 1968, unos días antes de la matanza del 2 de octubre. Hace 50 años, aquella vez instigados por un cura enfermo y ahora por las fake news. Qué triste.

Columna publicada el 2 de septiembre de 2018 en la edición 814 del semanario Ríodoce.

(RIODOCE/ ISMAEL BOJÓRQUEZ/ 4 SEPTIEMBRE, 2018)

MALAYERBA ILUSTRADA: EL BORRACHO


Ellos pisteando. Él con su bote de aluminio blanco, sudoroso y helado, junto a la yelera. Los botes resistían: jugaban con los cilindros transparentes y el agua, nadaban, peleaban, parecían pedir auxilio, gritaban tómame, repartían codazos, se zambullían y luego asomaban para tomar aire.

Sus amigos malandrines lucían cansados y relajados. Parecían competir por acumular botes junto a ellos, arrugados como buñuelos, en señal de sequía y de que era tiempo de abrir otra y otra y otra. La mesa blanca de plástico temblaba ante cualquier movimiento de sus moradores.

El sol ya no estaba en la bóveda superior pero todavía calaba. Presencia de fantasma: se siente y está, pero no se ve. Siete de la tarde. Pardea el firmamento. La noche viene pero no guarece. Todavía está caliente el piso y las hojas de los árboles y las sillas y paredes. El verano y sus cuarenta grados se quedan aún de noche, en la ciudad.

Uno de ellos sacó una caja de madera. Vibraron las piezas de plástico blanquinegras del dominó en la superficie de la mesa. Una mujer, esposa de uno de ellos, sacó la botana. Churrumaiz, papitas, chicharrones con sal y limón, jocoque, trozos de salchichas y aceitunas sin intestinos, totopos.

La danza ruidosa al batir las piezas. Los cuatro pares de manos desplegados para seleccionar las siete. Y entonces a él le dieron ganas de mear. Se asomó sin levantarse y le pareció ver a la mujer que había traído la botana sentada frente a la tele. Un niño de acaso dos años en su regazo. Un llanto lejano le llegó. No quiso moverse. Le pareció una grosería pasar al baño de la vivienda y se sintió incómodo.

Cerró las piernas. Luego las abrió, desesperado. Y cerró y abrió, cual abanico desnaturalizado. Pinche desesperación. Y él era meón, de vejiga impertinente que se llenaba con poco. Aguanta, aguanta. Vio las fichas. Para acabarla de chingar le habían tocado varias mulas, incluida la de seis.

Disimuló su ansiedad con dos bromas y un torpe movimiento de fichas. Mala jugada. Expresó un chingada madre y se refugió de nuevo en el aleteo de piernas. Tomó salchichas y luego queso y aceitunas y embarró un totopo con jocoque. Cuando terminó el juego avisó que iba a asomarse a su carro. Lo ignoraron.

Cinco pasos y ya estaba afuera. La fila de cuatro carros estaba a su derecha. Pasó y escuchó gemidos. Uno de los carros se movió pero pensó que era su imaginación. Se fue hasta el final: bajó el cierre y evacuó líquidos. Ah, dijo. Y escuchó otro ah y otro más.

De regreso se asomó: cuatro hombres estaban atados, con sangre, uno sobre otro, jadeando, en el piso de uno de los carros. No aguantó más ni quiso saber. Se regresó entre escalofríos y pidió una bien helada para volver a comenzar.

Columna publicada el 2 de septiembre de 2018 en la edición 814 del semanario Ríodoce.

(RIODOCE/ JAVIER VALDEZ/ 4 SEPTIEMBRE, 2018)

‘A LOS JÓVENES LOS ESTÁN MATANDO Y DESAPARECIENDO’, EL RECLAMO SOCIAL



EDGAR HERNÁNDEZ. Juventud vulnerable.

Los datos del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas publicó en abril de este año, que aproximadamente la mitad de los mexicanos reportados como desaparecidos son menores de 29 años. Es decir, son jóvenes. El aumento no puede permanecer desapercibido.

Ese fue el razonamiento de los jóvenes estudiantes Édgar Francisco Hernández Cervantes y Jorge Iván Chavarín Montoya, en una ponencia entregada en el Foro de Participación y Seguridad Ciudadana.

“Decidimos participar con una ponencia a la que titulamos ‘La juventud de México y de Sinaloa frente a la espiral de la violencia criminal’. Nos llamó mucho la atención de que a 10 años de haberse iniciado la guerra contra las drogas en México, hubo un aumento del 193 por ciento de los homicidios cometidos contra jóvenes en México con respecto a los registros de 2007”, explica Hernández Cervantes.



El Foro, realizado el pasado jueves 30, justo en el marco del día internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, contó con organismos civiles y ciudadanos que presentaron alrededor de 20 ponencias.

En el evento se instalaron cuatro mesas de trabajo con los temas de sociedad, violencia y grupos vulnerables, desaparición forzada, legislación vigente y seguridad ciudadana, así como violencia, impunidad y justicia.

Cada mesa elaboró una relatoría, destacando los puntos más relevantes de cada una de las ponencias presentadas. El ejercicio es organizarse, es la participación ciudadana.

Y de manera paralela, la sociedad culiacanense se solidarizaba con el caso de Eleazar Guadalupe Hernández, el Rayito artista urbano local que desapareció en diciembre de 2017 en Ciudad Guzmán, Jalisco.

El caso por sí solo ilustra la preocupación de Édgar Francisco y su colega: a los jóvenes los están desapareciendo y los están matando.

“En primer lugar hacer notar este incremento, que no puede pasar desapercibido, de homicidios contra la población juvenil, o sea, la vulnerabilidad en que nos encontramos los jóvenes mexicanos”, señala.

Y dicha vulnerabilidad se encuentra de inicio a fin en el caso de Eleazar. Conocido como el Rayito, el artista de 22 años acudió a Jalisco a un concurso de baile, donde fungiría como juez del certamen. Desapareció el 16 de diciembre, su cuerpo fue encontrado el 19 de ese mismo mes, pero transcurrieron ocho meses y 12 días para que fuera identificado.

La señora Reyna Torrecillas, madre del bailarín, se ha cansado de pedir ayuda a las autoridades. La falta de coordinación entre las fiscalías de Jalisco y Sinaloa quedó en evidencia con los ocho meses de espera: ni las muestras de ADN ni otras periciales pudieron evitarle la prolongada espera.

Estaba en las instalaciones del Servicio Médico Forense en Guadalajara, a donde llegó el 19 de diciembre. Es decir, tres días después de haber desaparecido. Su familia y amigos vivieron poco más de ocho meses de incertidumbre. Y no fue la autoridad quien dio con su cuerpo, sino Sabuesos Guerreras AC, un colectivo de rastreadoras con base en Culiacán.



REYNA TORRECILLAS. La incertidumbre.

Y Édgar no se lo explica. Ni los asesinatos ni las desapariciones. Lo intenta mediante su ponencia donde revela cifras de jóvenes desaparecidos o asesinados. Por ello acudió al Foro junto con decenas de personas preocupadas por el entorno de inseguridad en la entidad.

“Entonces nos entra la interrogante del porqué nos está pasando a personas que aparentemente no tienen un nexo directo con el crimen. Creo que es un fenómeno, que es una trampa que tiene dos caras: por un lado el desempleo y la desigualdad social hace que muchos jóvenes, al no tener oportunidades de empleo busquen su supervivencia en actividades ilícitas y esas actividades los lleven al crimen organizado.

“Entonces ahí ya hay un peligro que corren los jóvenes que son reclutados en las filas del crimen, pero al mismo tiempo esos jóvenes pueden convertirse de victimarios a víctimas y es un fenómeno que también va creciendo a otras capas de jóvenes, que como te comentaba recién, no se dedican a actividades ilícitas y son víctimas de estas tragedias”.

El Foro fue encabezado por Óscar Loza Ochoa, integrante de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos en Sinaloa (CDDHS), y quien se dará a la tarea de integrar y ordenar cada una de las propuestas recabadas.

Otra de las ponencias fue la llevada por la Comisión de Seguimiento del Caso Javier Valdez, a cargo de la periodista María de los Ángeles Moreno. El documento contiene seis compromisos por la libertad de expresión y la protección a periodistas.

“No hay acceso a la justicia ni para las víctimas ni para sus familias, cuando existen tantos obstáculos que parecen no encontrar salida, dos de ellos, la incapacidad de las instituciones públicas para crear e implementar políticas que resuelvan de fondo el problema, y la insuficiente voluntad de los dueños y directivos de medios de comunicación para construir alianzas en un escenario donde priva la desconfianza y la impunidad”, señala el documento.

Y en medio de ponencias y propuestas, la sociedad culiacanense comienza a sumar esfuerzos. La espiral de violencia criminal los alcanza a todos por igual.

Artículo publicado el 2 de septiembre de 2018 en la edición 814 del semanario Ríodoce.

(RIODOCE/ AARON IBARRA/ 4 SEPTIEMBRE, 2018)

JAPÓN, GOLPEADO POR EL TIFÓN JEBI, EL MÁS FUERTE EN 25 AÑOS

(RI

RIODOCE/ RT EN ESPAÑOL/ 04 DE SEPTIEMBRE 2018)

PEP EN LA MIRA POR HOMICIDIO DE VÍCTIMA QUE HABÍA DENUNCIADO AMENAZAS


Dos semanas antes que Raúl Hernández Macías declarara contra una de dos agentes de la Policía Estatal Preventiva, a quienes había denunciado por amenazas, fue asesinado en su negocio de vidrios. El hombre había sido acosado durante dos años y a pesar de las intimidaciones, continuaba con la denuncia ante la Procuraduría, con la queja ante Derechos Humanos e incluso solicitó medidas cautelares

A Raúl Hernández Macías lo mataron de un disparo en la espalda cuando salía de su negocio, la vidriera Glas en el Ejido Valle de Puebla en Mexicali, el 15 de agosto de 2018. El ataque fue directo y detrás del crimen parecen estar involucrados agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP), a quienes la víctima había denunciado por amenazas y contra quienes declararía en una audiencia a celebrarse en dos semanas.

Precisamente el 15 de agosto, pero dos años antes, el hombre acudió ante la Subdelegación de Procedimientos Penales “B” de la Procuraduría General de la Republica (PGR), ubicada en Mexicali, para presentar una denuncia por hostigamiento, amenazas y extorsión por parte de dos agentes de la PEP.

Según un relator que se acercó a ZETA, quien decidió permanecer en el anonimato, la ahora víctima había intentado interponer denuncia penal ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y en la PGR, pero ésta no había sido admitida.

Finalmente acudió al cuartel de la II Región Militar, donde le entregaron un escrito con el cual finalmente aceptaron su denuncia en la PGR, abriendo el expediente FED/MXLI/0000410/2016.

Fue atendido por el agente del Ministerio Público Federal, José Ángel Álvaro Vázquez Amador, ante quien señaló a los agentes estatales Edna Carolina Montoya Gaxiola y a Manuel Gabriel Guerrero.

Hernández Macías cumplió con todo el proceso de la denuncia, aportó pruebas, estuvo pendiente del seguimiento del caso, solicitó medidas de protección, presentó una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos, identificó y señaló a sus agresores e incluso presentó testigos.

HOMICIDIO

Al mediodía del miércoles 15 de agosto, una patrulla de la Policía Municipal llegó al Hospital Arce Quiñonez, ubicado en la colonia González Ortega, para atender el reporte de un hombre que había sido ingresado con una herida de arma de fuego.

Se trataba de Raúl Hernández Macías, de 48 años de edad, quien fue declarado sin vida al llegar el centro hospitalario. La causa de muerte, según consta en el informe de la necropsia, fue por heridas penetrantes de tórax y abdomen producidas por proyectil de arma de fuego.

Ya en el lugar, los agentes entrevistaron a la esposa de la víctima, quien señaló como presunta responsable a una mujer con quien su esposo mantenía una deuda por un préstamo.

Explicó que la mujer, de nombre Bertha Alicia Guerrero Gutiérrez, le exigía más dinero de lo que le había prestado y, a partir de ello, lo había amenazado. Los hechos ya habían sido denunciados bajo el Número Único de Caso 0202/2018-14131 por el delito de amenazas.

Por tal motivo, Hernández Macías contaba con una medida de protección emitida el 2 de julio de 2018, la cual prohibía a la señora Guerrero Gutiérrez realizar conductas de intimidación en contra del hombre.

Sin embargo, el propio Raúl contaba con nueve averiguaciones previas abiertas entre los años 2000 y 2001 por los delitos de administración fraudulenta, fraude, fraude procesal, despojo de cosas inmuebles o de aguas y falsedad ante la autoridad.

Respecto al homicidio, el subprocurador de Justicia del Estado en Mexicali, Fernando Ramírez Amador, señaló que se trató de un ataque directo contra Hernández Macías, ya que no intentaron robarle. En el lugar se encontraron cuatro casquillos de arma 9 milímetros, pero no la marca de la bala.

“Es propietario de un negocio tipo vidriera, estaba a punto de cerrar las puertas del negocio cuando lamentablemente recibe los disparos de arma de fuego. Fue un ataque directo, llegó una persona, desciende de un vehículo, realiza las detonaciones y se da a la fuga” explicó el funcionario estatal.

Desde el homicidio, ni la familia ha sido vista en su hogar ni la vidriería ha vuelto a abrir. Un vecino del local declaró que a los días llegaron familiares de la víctima, se llevaron algunas cosas y no volvieron a abrir el negocio.

Aunque los investigadores no han dado con testigos del crimen, un establecimiento cercano cuenta con cámaras de seguridad que podrían brindar una pista sobre el responsable y el vehículo que utilizó.

ANTECEDENTES

El 15 de noviembre de 2017, Raúl Hernández presentó una ampliación de denuncia ante la PGR, allí mencionó que el 20 de junio de 2016, alrededor de las 6:00 pm, la señora Bertha Guerrero acudió a su domicilio en el fraccionamiento Valle de Puebla.

Según el informante, la mujer le había prestado 30 mil pesos a Hernández Macías con un interés mensual de 5 mil pesos, éste los había aceptado y al mes le saldó 35 mil pesos.

Posteriormente Guerrero le ofreció un préstamo de 100 mil pesos a cambio de 9 mil pesos, pero el hombre solo aceptó un préstamo por 30 mil pesos.

Sin embargo, en esa ocasión Guerrero intentó cobrarle un 85 por ciento de interés por los 30 mil pesos que le había prestado un mes antes, según la declaración ministerial de Hernández Macías.

Ya que las condiciones del préstamo se fijaron solo de manera oral y no por medio de un documento de por medio, el hombre se quejó de que el cobro era superior al pactado.

La denuncia indica que la señora Guerrero se molestó y le dijo que no sabía con quién se estaba metiendo, ya que ella tenía el suficiente dinero para comprar “en kilos” a la gente y tenía un sobrino policía estatal preventivo que se encargaba de cobrar sus deudas e incluso hacía “levantones”.

Al día siguiente, 21 de junio de 2016, Raúl Hernández acudió al Centro Estatal de Justicia Alternativa (CEJA) para pedir asesoría, por lo que le requirieron citar a la mujer para aclarar la situación. Allí le dieron un citatorio que él tuvo que entregar personalmente a la señora Bertha.

Cuando le entregó el documento, la mujer lo amenazó diciendo que no la anduviera citando con la Policía y que se atuviera a las consecuencias para él y su familia.

Al día siguiente, una mujer que se identificó como trabajadora de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) llegó a la casa de Hernández Macías para informarle que sus hijas habían obtenido becas. Después se supo que se trataba de Edna Carolina Montoya Gaxiola, agente de la PEP.

Para poder recibir las becas, la mujer pidió a Hernández Macías que le respondiera preguntas como nombres completos, la hora en que sus hijas entraban y salían de la escuela, sus edades, cuáles eran los nombres de los profesores, así como su situación financiera.

Cuando Hernández Macías comenzó a sospechar que no se trataba de una empleada de Sedesol, le pidió una identificación, pero ella le dijo que aún no le daban gafete, por lo que le solicitó credencial de elector o alguna otra identificación para saber con quién había hablado.

En ese momento, la mujer dijo no llevar cartera consigo y se levantó de la silla donde estaban conversando para caminar hacia el patio, del otro lado del cerco de la casa, se encontraba un hombre que le dijo a la mujer algo en clave, ésta, respondiendo que todo estaba bien. Fue cuando Hernández le pidió a una de sus hijas que grabara con un celular sin que se dieran cuenta.

El hombre, quien después fue identificado como Manuel Gabriel Guerrero, también agente de la PEP y sobrino de la señora Bertha, se percató que estaban siendo grabados, por lo que caminó hacia un automóvil tipo pick-up Nissan doble cabina con número de matrícula AN48331 para estacionarlo en la esquina.

Hernández Macías lo siguió con un celular grabando con el fin de tomar las placas del vehículo, cuando lo alcanzó finalmente la persona se identificó verbalmente como policía estatal, en eso sacó algo de su cintura y lo guardó en el vehículo; al ver la acción, Hernández decidió regresar a su casa y alertar a su familia que se trataba de policías estatales, incluso hablo al teléfono de Emergencias 066 y pidió ayuda, pero nadie acudió.

Por su parte, la agente, quien aún seguía en el domicilio, cubrió su rostro y salió corriendo hacia el vehículo para entonces huir del lugar.

Luego de intentar comunicarse en una segunda ocasión con el número de Emergencias, informaron a Hernández que el vehículo pertenecía a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), por lo que no podían acudir.

Ante esta situación, Hernández tomó el vehículo y condujo hasta las instalaciones militares en Mexicali para pedir apoyo, por lo que le recomendaron acudir a la PGR.

También se presentó en la PGJE, donde le levantaron una carta de derivación en la cual se declaraban no competentes y finalmente lo remitieron a Asuntos Internos de la SSPE.

El 23 de junio del mismo año, la PGR lo canalizó al cuarto piso de la PGJE, ya que supuestamente ellos eran los competentes para la denuncia.

Luego de varias vueltas, el hombre fue atendido en Asuntos Internos de la SSPE por Luis Eduardo Garza Matus, quien tomó la denuncia y le pidió cinco copias del video que había tomado, el primero para Asuntos Internos, otro para la Comisión Estatal de Derechos Humanos, donde se levantó la queja 197/16 con número de folio 117292.

Acerca de la queja, en la CEDH informaron que no podían compartir mayor información debido a que la investigación se encontraba en proceso de integración.

De igual manera, la SSPE informó que el expediente en Asuntos Internos se concluyó, por lo que fue enviado en junio de 2017 como procedente a la Comisión de Desarrollo Policial.

La misma dependencia afirmó que ninguno de los agentes se encuentra suspendido por el momento, ya que la Comisión está en fase de desahogo de pruebas.

Fue precisamente en Asuntos Internos que Hernández Macías y dos testigos identificaron en el Libro de la Policía Estatal, hoja 66, foto 247, a Edna Carolina Gaxiola y en la foto marcada con el número 569 a Manuel Gabriel Guerrero Larios como elementos de la corporación.

El 15 de noviembre de 2017, la victima presentó una ampliación de denuncia, ya que la señora Bertha Guerrero nunca se presentó ante el CEJA, además, siguió recibiendo amenazas. Dijo que lo seguían en vehículos, cuando iba manejando le presionaban el claxon, se le emparejaban, le gritaban “Quita la demanda. hijo de tu chingada madre, si no lo haces, no te la vas a acabar”.

También en esa declaración señaló que Manuel Gabriel Guerrero era sobrino de la señora Bertha y vivía cerca de donde tenía su negocio de ventanas, los domingos en el Ejido Tecolotes.

“Manifiesto que si algo llegara a suceder en mi perjuicio o de mi familia, haga responsable a los imputados Manuel Gabriel Guerrero y Edna Carolina Montoya”, finalizó Raúl Hernández Macías su declaración.

Según una fuente cercana a la investigación, Manuel y Bertha Guerrero no fueron sujetos a procesos penales por el delito de amenazas e intimidaciones.

(SEMANARIO ZETA/ EDICIÓN IMPRESA / INVESTIGACIONES ZETA LUNES, 27 AGOSTO, 2018 01:00 PM)