Se está enrareciendo el
ambiente político en Sonora. Morena, el partido que fue pilar de la colación
victoriosa, junto con el PT y el PES, en la justa electoral pasada, está siendo
trabado, como uno de los efectos de la Ley Veto.
Todo el aparato
pavlovichiano-beltronista opera en contra del designio de los electores y a los
santones morenistas les está faltando colmillo para enfrentar el desafío, como
en el pasado carecieron de olfato para percibir lo que se dejaba venir.
La maquinaria conformada so
pretexto de integrar el sistema anticorrupción estatal con funcionarios a modo
–de origen y militancia priísta-- en las instancias de combatir dicho flagelo,
fue mera simulación y ahora opera en contra de la frágil democracia que dejó la
contrarreforma constitucional claudillera.
MORENA, BAJO FUEGO Y DESGASTE
Por lo pronto se tiene
entretenido al partido pejista sujeto a un desgaste inesperado, mientras la
prensa adicta le tunde de lo lindo.
El Congreso estatal es la
arena elegida para el choque y los exfuncionarios cesados cual peones fueron
utilizados como el arma perversa bien escogida desde los altos mandos de
palacio para abrir fuego.
Un asunto más político que
laboral “creado” y maquinado por Rafael Buelna Clark, anterior presidente de la
mesa directiva de la diputación permanente,
tiene paralizado a la legislatura. El dichoso cese de 16 directivos sin
avisar en el término de 5 días al Tribunal de Justicia Administrativa conforme
a la reforma para que calificara el motivo, fue una artimaña para amarrarle las
manos a la nueva legislatura y
garantizarles su inamovilidad.
El “blindaje” heredado por la
anterior legislatura cual concha de molusco empieza a quebrarse, no sin llevar
al enfrentamiento institucional, en donde el Tribunal de Justicia
Administrativa es usado como ariete en su contra para romper la autonomía del
órgano congresional.
Y cual tablero de ajedrez
vive la entidad los días previos al advenimiento del gobierno de la Cuarta
Transformación de la República.
DE LA DERROTA AL CONTRAATAQUE
La derrota estrepitosa en las
urnas del PRI y PAN, quienes eran las fuerzas hegemónicas en la entidad
permitió una reconfiguración en las fuerzas políticas y la llegada a los
puestos públicos –Congreso del Estado, 18 alcaldías, dos senadurías de mayoría
y 7 diputaciones federales— de los llamados Protagonistas del Cambio Verdadero,
que serán reforzados a partir del primero de diciembre con los Coordinadores de
Programas Federales de Desarrollo, tanto estatal como regionales.
Pero, el caso es que toda esa
aparente y en el papel todopoderosa fuerza de izquierda, está naufragando. Las
razones de tal naufragio es multifactorial, dicen los que saben.
EL ÚLTIMO ESTERTOR DEL PRIAN
Si bien es cierto el
resultado electoral fue adverso para el gobierno del estado y su partido y dejó
noqueada sobre piernas a la gobernadora Claudia Pavlovich, tuvo aliento, junto
a otros mandatarios tricolores como el hidalguense Omar Fayad, para mandar aprobar
una serie de reformas legales con el apoyo de su aliados panistas en la
legislatura para neutralizar a sus futuros opositores.
El saldo de esa andanada fue
impedir cambios de funcionarios en el Congreso del Estado, que responden a la
lógica de mando del gobierno de “La Güerita”, al impedir su despedido por los
nuevos legisladores y poner tal decisión en manos del Tribunal de Justicia
Administrativa, quien sería la instancia que tendría la última palabra.
Con la eliminación del fuero
los diputados, producto de la reforma, dejaron en estado de vulnerabilidad y en
manos de la fiscalía del Rudy Montes de Oca. La maquinación desde un principio
traía jiribilla, pero los operadores pejistas se durmieron en sus laureles. Ni
Alvaro Bracamonte, ni Jorge Taddei Bringas, ni Jacobo Mendoza y menos Alfonso
Durazo, previeron el catastrófico escenario.
Rosa María Manchas Ornelas,
presidenta de la mesa directiva del Congreso, es acusada de abuso de autoridad
por el abogado Gustavo Bustamante,
asesor del personal de confianza removido.
INSTITUCIONES COOPTADAS
El detalle es que con
pretexto de conformar el sistema anticorrupción llegaron a cargos de decisión
personajes de pasado dudoso y ligado al grupo de poder beltronista.
Esa maniobra permitió a la
titular del ejecutivo meter mano en el nombramiento de allegados a los
principales cargos del sistema, tocado por la conformación ilegal de un inicio
de la Fiscalía Anticorrupción de Sonora (FAS) a cargo de Odracir Espinoza,
un priísta reconvertido y que tiene al
exgobernador Guillermo Padrés con un pie en la calle.
El rielero Aldo Gerardo
Padilla Pestaño, por su militancia tricolor y compadre de la gober, fue
impuesto como presidente del Tribunal de Justicia Administrativa, que vino a
sustituir al Tribunal Contencioso Administrativo, que durante muchos años
manejó la Tulita Tapia, en connivencia con el gobierno del estado. Ramón Moya
Grijalva, gente de Manlio, pasó a ser el Auditor Mayor del ISAF (Instituto Superior de Auditoría y
Fiscalización). Pedro Pablo Chirinos, en esa jugada, por sus rencores contra
todo lo que huela a panismo fue inventado como Vicefiscal de delitos
electorales.
Esos nombramientos bastaron
para romper el sistema de pesos y contrapesos que debe imperar entre los
poderes públicos y que la mente maestra detrás del gobierno del estado decidió
vulnerar en provecho propio y en detrimento del orden institucional.
En su momento no hubo fuerza con la capacidad
política para contener el agandalle. El
PAN y el PRD, venían de disfrutar las mieles del Pacto por México y se
perfilaban para ir juntos en la contienda presidencial.
El juego se llama: ¡¡tírenle
al negrito!!
NOVATADA DE MORENA
El Congreso de Sonora es uno
de los más costosos del país. El Oficial Mayor gana 3,100,650 pesos anuales; el
Contralor 3,591,162 peso anuales y el Director General de Administración
3,342,079 pesos al año. Otros funcionarios percibían arriba de los dos melones.
El gasto de comunicación sobrepasa los 60 millones de pesos anuales.
Con una votación de 19 a 14
no pasó el nombramiento de nuevos funcionarios del Congreso. La novatada de
Morena y sus operadores fue evidente. Una de las reglas del quehacer
parlamentario es no presentar una iniciativa de urgente y obvia resolución si
no se tienen los votos amarrados y a los traidores bien identificados.
Incluso se dice que todos los
propuestos a los cargos eran gente del Poncho Durazo y que no tenían ni el
perfil.
EL PT ROMPE CON MORENA
Rodolfo Lizárraga, el
diputado local por Guaymas y coordinador de la fracción petista rompió con
Morena al votar junto con el PRI, escudado en estar a favor de la legalidad y
avalando así la contrarreforma claudillera, que impide la gobernabilidad en esa
instancia. “Es honor estar con Obrador, pero con legalidad” y le llovieron
abucheos y gritos de “¡traidor, traidor!”.
Con estos aliados el partido
del Peje para que quiere enemigos. acompañar a los morenos. El PES si apoyó a
los morenos, mientras la bancada petista se dividió.
Se sospecha de amarres de Jaime
Moreno Berry, quien fue hecho a un lado debido a la presión que ejerció sobre
los nuevos alcaldes para meter gente suya a las administraciones municipales,
pero la llegada de la exvelocista Ana Gabriela Guevara, en nada cambió la
naturaleza de rémora de dicha fuerza política y al nepotismo, en entrevista en
Proyecto Puente, le encontró un origen a la falta de capacitación y según ella,
le pidió a Sara Valle, que no pusiera un clavo a su administración, pues AMLO,
personalmente le pidió despidiera al golondrino Santiago “El Cabezón” Luna, de
la tesorería.
Las diferencias internas
actuales en el PT rayan en el enfrenamiento. En Empalme es sabido que el
alcalde Francisco “ Pantico” Genesta, a quien nomas le faltó colocar a la
mascota en la nómina, no traga a la diputada local por el XIV distrito Rosa
María Manchas.
El PT de no enderezar el
rumbo en un descuido podría convertirse en un verdadero lastre para la
locomotora morena. Un replanteamiento de los acuerdos pactados será necesario
ante los tumbos que viene dando.
LA DOBLE MORAL DE LA IZQUIERDA
San Luis Río Colorado,
Nogales, Navojoa, Guaymas y no se diga Hermosillo y Empalme, son los municipios
que han dado que hablar del 16 de septiembre a la fecha.
En la Ciudad Jardín el
ayuntamiento está tomado por exfuncionarios y exempleados del Kiriki que exigen
liquidación, mientras en la capital ya son varios los funcionarios dados de
baja y la alcaldesa Célida López anda pidiendo fiado para sacar adelante el
trabajo.
Por rumbos de Cajeme, Sergio
Pablo Mariscal, analiza echar abajo el contrato de alumbrado público heredado
por el Tinito Faustino Félix y en Navojoa Chayito Quintero Borbón, no haya por
dónde empezar ante el tiradero que recibió. En Nogales, según el nuevo alcalde
Jesús Antonio Pujol, andan perdidos 200 millones de pesos.
MEA CULPA DE JACOBO MENDOZA
El voto en varios cabildos
sonorenses a favor del nepotismo de sus alcaldes, como en Guaymas y Empalme, ha
puesto en entre dicho el compromiso de muchos militantes morenistas con el
discurso de su presidente electo y líder máximo, quien en su gira por la
entidad habló de que los ayuntamientos no era el DIF y de que el que quisiera
un puesto que fuera al mercado.
Los señalamientos sobre las
arbitrariedades de nuevos dueños del poder municipal está dañando la marca, que
se suponía inmaculada, por lo que Jacobo Mendoza, en un acto de malabarismo
hizo un llamado a los alcaldes a corregir el camino y apegarse a la norma
estatutaria.
Jacobo, peca de ingenuo,
parece nuevo en las lides y su llamado difícilmente hará recapacitar y permeará
en gentes como “La mamá Chola”, como llamaban a Sara, sus alumnos del CET del
Mar y que el caudillo Santiago Luna, dejará la tesorería, si a eso vinieron él
y sus seguidores en la administración.
Un mea culpa de quienes la
pusieron de candidata, hubiera sido lo correcto en su llamado a la
regeneración.
El agravio social –burla,
grosería, etc.-- de haber llevado como candidatos a personajes de la calaña
como se están exhibiendo varios alcaldes, ni siquiera pudiera ser saneado con
el deslinde. En 1997 el PRD, incluido López Obrador, su líder nacional, se
deslindaron de su alcaldesa y eso no frenó del desgarriate.
Ernesto Uribe, el edil
independiente dio al clavo cuando en sesión de cabildo mostró el expediente de
su revocación de mandato y aclaró que lo que se está viendo es la repetición a
ritmo acelerado de “El Gobierno de Ciudadanos”.
Desde hace rato los cargos
públicos son vistos como una forma de ascenso social, más por esa izquierda
fifí (AMLO dixit) de café y de escritorio, ajena a persecuciones y represiones
(Movimiento Ferrocarrilero, Aguiluchos de la UNISON 1967, Tlatelolco 68, 10 de
Junio del 71, Lucio Cabañas, Ayotzinapa).
Tal actitud de doble moral de
algunos pejistas ha venido restando fuerza al partido, que difícilmente podría
encajonarse como de izquierda por su variopinta composición y su carencia de
una mística política clara.
El problema radica en que, la
inconsistencia de sus miembros y el extravió ideológico, pudiera transmitirse a
sus líderes mayores –Alfonso Durazo, Lily Téllez, Jorge Taddei, Jacobo Mendoza,
Álvaro Bracamonte y demás-- con el consecuente debilitamiento de su capacidad
de influencia en el rebaño morenista, fenómeno que ya empieza a darse
aceleradamente en ciertos lugares.
Si no se pone orden interno
en Morena y sus aliados y se alcanza la cohesión de quienes conformaron la
coalición “Juntos Haremos Historia”, difícilmente permeará el mensaje de
consenso que irremediablemente tarde o temprano tendrá que lanzarse al exterior
del corpus social y que es necesario para ejercer el poder en un sistema
democrático.
A cómo va la cosa, vamos a
concluir que la Cuarta Transformación no tiene transformadores, casi como hacer
un equipo de beisbol con tenistas, ciclistas y patinadores.
Ni hablar con esas mulas hay
que arar…
(EL
PORTAL DE LA NOTICIA/ LA VIÑA DEL SEÑOR/ 03 OCTUBRE 2018)