León, Gto.- Una joven acudió a una oficina a buscar trabajo y
fue recibida con golpes de martillo por su supuesto empleador, al que
contactó en un sitio de internet. Fuente: am.com.mx
La profesionista, de 23 años, entró a la página computrabajo.com y ahí vio una opción que le gustó, como recepcionista de medio turno.
Llamó a la supuesta empresa, de la que se desconocen datos, y un hombre de nombre César le concertó una cita a las 12 de la tarde del jueves. Le pidió que fuera puntual.
La víctima, Sandra, llegó a la hora indicada a la oficina ubicada en el bulevar Juan Alonso de Torres, en la colonia León I.
En el edificio fue recibida por César, quien le indicó que pasara a la oficina que se encontraba en la parte alta.
Cuando iban subiendo la joven se dio cuenta de que en el lugar no había muebles, y además observó que el supuesto entrevistador llevaba un martillo.
Sandra volteó y recibió un golpe en la cabeza, no se desmayó y forcejeó con su agresor.
El hombre cedió y se tranquilizó, y permitió que la joven limpiara sus heridas, luego la dejó ir.
La afectada salió del edificio y algunas personas que la vieron sangrar llamaron a Emergencias.
Paramédicos de la Cruz Roja llegaron a atenderla, presentó fractura de nariz y escoriaciones en manos y brazos.
No fue necesario que la llevaran al hospital.
Sandra acudió al Ministerio Público para presentar su denuncia.
Hasta ayer, según las autoridades, el agresor no se había presentado a declarar.
La navajean en asalto
Al oponerse a entregar su teléfono en un asalto, una joven terminó con un navajazo de un centímetro de profundidad y cuatro de largo, que estuvo muy cerca de perforarle un riñón.
La víctima, de nombre Liz, el martes pasado salió de su casa a las 7 de la mañana para correr por el camellón del bulevar Morelos, a la altura del bulevar Alonso de Torres.
Mientras corría escuchaba música en su teléfono, se detuvo un momento para retirar piedras y unas espinas, y un hombre se le acercó.
“Al enderezarme un chavo como de 23 o 24 año, delgado, alto y moreno me dijo que le diera mi celular y yo le dije que no, que por qué, y de inmediato me tiró el golpe (con la navaja) y yo le aventé la piedra que traía y se fue”, explicó Liz.
Pidió ayuda en una gasolinera cercana y ahí llamaron a la Cruz Roja y a la Policía.
“Hicieron un rondín los de la gasolinera y los policías pero no lo encontraron, deberían de aumentar la seguridad pues mucha gente va hacer deporte ahí”, señaló la joven.
La profesionista, de 23 años, entró a la página computrabajo.com y ahí vio una opción que le gustó, como recepcionista de medio turno.
Llamó a la supuesta empresa, de la que se desconocen datos, y un hombre de nombre César le concertó una cita a las 12 de la tarde del jueves. Le pidió que fuera puntual.
La víctima, Sandra, llegó a la hora indicada a la oficina ubicada en el bulevar Juan Alonso de Torres, en la colonia León I.
En el edificio fue recibida por César, quien le indicó que pasara a la oficina que se encontraba en la parte alta.
Cuando iban subiendo la joven se dio cuenta de que en el lugar no había muebles, y además observó que el supuesto entrevistador llevaba un martillo.
Sandra volteó y recibió un golpe en la cabeza, no se desmayó y forcejeó con su agresor.
El hombre cedió y se tranquilizó, y permitió que la joven limpiara sus heridas, luego la dejó ir.
La afectada salió del edificio y algunas personas que la vieron sangrar llamaron a Emergencias.
Paramédicos de la Cruz Roja llegaron a atenderla, presentó fractura de nariz y escoriaciones en manos y brazos.
No fue necesario que la llevaran al hospital.
Sandra acudió al Ministerio Público para presentar su denuncia.
Hasta ayer, según las autoridades, el agresor no se había presentado a declarar.
La navajean en asalto
Al oponerse a entregar su teléfono en un asalto, una joven terminó con un navajazo de un centímetro de profundidad y cuatro de largo, que estuvo muy cerca de perforarle un riñón.
La víctima, de nombre Liz, el martes pasado salió de su casa a las 7 de la mañana para correr por el camellón del bulevar Morelos, a la altura del bulevar Alonso de Torres.
Mientras corría escuchaba música en su teléfono, se detuvo un momento para retirar piedras y unas espinas, y un hombre se le acercó.
“Al enderezarme un chavo como de 23 o 24 año, delgado, alto y moreno me dijo que le diera mi celular y yo le dije que no, que por qué, y de inmediato me tiró el golpe (con la navaja) y yo le aventé la piedra que traía y se fue”, explicó Liz.
Pidió ayuda en una gasolinera cercana y ahí llamaron a la Cruz Roja y a la Policía.
“Hicieron un rondín los de la gasolinera y los policías pero no lo encontraron, deberían de aumentar la seguridad pues mucha gente va hacer deporte ahí”, señaló la joven.
(ZOCALO / Agencias /12/10/2013 - 08:15 AM)
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