NACE OTRA GUERRA ENTRE NARCOTRAFICANTES

El lunes pasado aparecen siete cuerpos desmembrados en Tamaulipas y junto a los miembros una manta firmada por un tal Chapo.  Horas después, cinco jóvenes son ejecutados y mutilados de la misma forma en Culiacán y abandonados en la colonia 10 de Abril. Junto a cabezas, dorsos y brazos, los asesinos dejaron una manta en contra de un tal Chapo y firmada por un tal Z-40.  Un capítulo que puede ser el anuncio del recrudecimiento de la guerra entre el cártel de Sinaloa y el cártel de Los Zetas. Lo que podría llamarse la nueva guerra del narco empezó en Nuevo Laredo, Tamaulipas, el pasado 26 de marzo, cuando alguien que firma como el Chapo retó abiertamente a Los Zetas, sobre todo a sus cabecillas: Heriberto Lazcano; Miguel Ángel Treviño Morales, alias el Z-40, así como su hermano, Omar Treviño. Supuestamente, Guzmán Loera entró al territorio de Tamaulipas y ordenó que varios miembros del cártel rival fueran descuartizados. Con los restos fueron dejados tres mensajes donde podía leerse el reto lanzado por el Chapo a Los Zetas, en su propio territorio. En uno de los mensajes podía leerse:  “Mira pinche 40 y L 42 estas manos se las pongo porque son unos pendejos peidos y culos, porque las veces que han hecho tregua ustedes las han tronado y ya se acabaron los basureros de juntar gente y que son una bola de basura y ratas… Nuevo Laredo, Tamaulipas es mío… Atte. El Chapo”. Junto con las cabezas de siete sujetos descuartizados aparece otra manta dirigida a Miguel Ángel Treviño Morales, alias el Z-40, donde se hace referencia a que para controlar a un cártel se necesita inteligencia. “Para ser cabecilla de un cártel se usa la cabeza pendejo y además eres un peido y repugnante piojoso, por eso has llegado por lame huevos de Lazcano y serás siendo para mí un lava carros… Atte. El Chapo”, dice. Por último, fue encontrado un tercer mensaje que venía acompañado de varias partes del cuerpo, en el cual el Chapo advierte que les va a enseñar al cártel rival cómo dirigir a una organización criminal, pues supuestamente los jefes de Los Zetas han llegado hasta su posición porque han traicionado a su propia gente. “Así es como se debe de acabar con gente pendeja, descuartizándola, todos esos ratas que roban y se la pasan secuestrando y matando gente inocente, yo te voy a enseñar cómo manejo mi cártel que tiene 30 años, no como ustedes que eran unos boleros y lava carros y llegaron a donde llegaron por traidores… Atte el Chapo”, puede leerse en el otro mensaje. La respuesta sangrienta Dos días más tarde, en una escuela ubicada en la colonia 10 de Abril de Culiacán, en las calles Obrero Mundial y Cuarta, fueron encontrados cinco cuerpos completamente desmembrados, que también fueron encontrados con un mensaje pero ahora dirigido a Joaquín Guzmán Loera, y firmado por el Z-40, apodo con el que es conocido el narcotraficante y uno de los máximos líderes de Los Zetas, Miguel Treviño Morales. Esto ocurrió durante las primeras horas del miércoles, a tres días de que los sujetos que aparecieron desmembrados fueran levantados por un comando mientras jugaban futbol en una cancha ubicada en las cercanías del Fovissste Diamante. Los levantados fueron identificados como Eduardo Flores Zazueta, alias el Pinocho; Marco Josué Barrañaga Verdugo, de 20 años; Jahir Ernesto Noriega Loaiza, de 17; José Cruz Castillo González, alias el Cucho, de 30, y Javier Alejandro Higuera Cruz. Esto lo confirmó la Procuraduría General de Justicia del Estado. La fiscalía estatal indicó en conferencia de prensa que está trabajando en coordinación con la PGJE de Tamaulipas por el vínculo que pudiera existir entre los hechos por ser de la misma naturaleza. Además, por el contenido de las mantas, la Procuraduría sinaloense está trabajando coordinadamente también con la PGR. Huellas En noviembre de 2011 hubo otro hecho que las autoridades atribuyeron a luchas entre los grupos del crimen organizado que se “pelean la plaza”, según el gobernador Mario López Valdez. Fueron encontrados 16 cuerpos calcinados, los cuales fueron esparcidos por diferentes puntos de Culiacán. El procurador general de Justicia, Marco Antonio Higuera Gómez, señaló que en estos hechos fue asesinado el comandante de la Policía Municipal de Angostura, Santos Cárdenas, así como dos agentes. Los cuerpos fueron localizados en camionetas incendiadas, por lo que el personal de bomberos acudió a los puntos donde se encontraban para mitigar el fuego. La radiografía del Z-40 Datos de inteligencia revelados en México y Estados Unidos señalan a Miguel Ángel Treviño Morales como el narcotraficante más sanguinario y violento de que en este momento se tenga conocimiento. Dado ese alto grado de peligrosidad que incluso ha cobrado la vida de al menos cinco ciudadanos estadounidenses, la DEA ofrece desde el 23 de julio del 2009, 5 millones de dólares por información que permita su captura, sea vivo o muerto. El Departamento de Justicia abrió en esa fecha dos causas judiciales —una en la Corte Federal del Distrito de Columbia, en esta capital, y otra en la Corte Federal del Distrito Este del estado de Nueva York— en contra del que considera ‘líder principal’ de esa organización criminal por delitos relacionados con el tráfico de drogas, lavado de dinero “y otras actividades delictivas”. “El acusado, Miguel Ángel Treviño Morales, también conocido como Z-40, L-40 y Toño, es el líder principal de Los Zetas”, sostiene el proceso abierto en la Corte Federal de Nueva York el pasado 19 de julio, y registrado con la clave 2009R01080/OCDETF/NYNYE-613, según publicó entonces la revista mexicana Proceso. “Miguel Ángel Treviño Morales es tal vez el criminal más sanguinario y desalmado de México, y por eso se abrió una causa judicial especial contra él en Nueva York. En los estados de Texas y California están en marcha otros procedimientos en su contra”, subrayó el funcionario del Departamento de Justicia. Esos mismos días, Treviño Morales, Ezequiel Cárdenas Guillén, Jorge Eduardo Costilla Sánchez y Heriberto Mariano Lazcano Lazcano fueron colocados en la lista de los 20 criminales más buscados por el Gobierno estadounidense. Según datos publicados en la página de la DEA, Treviño Morales, el Z-40, nació el 28 de junio de 1973 en Nuevo Laredo, Tamaulipas, aunque según expedientes del Departamento de Justicia y de la DEA, también se han encontrado registros que afirman que nació el 18 de noviembre del 1970, el 25 de enero de 1973 y el 17 de julio de 1976. A él se le atribuyen muertes en Tamaulipas, Sinaloa, Jalisco, Zacatecas y varias partes de la república mexicana, además de acusársele de terrorista y de lanzar retos abiertos a los gobiernos de México y Estados Unidos. Respecto a esas acusaciones, el 18 de diciembre del 2011 aparecieron varias narcomantas en México y Tamaulipas, presuntamente firmadas por el Z-40, deslindándose de todas esas acusaciones. Aun cuando ha trascendido que Treviño Morales perteneció al Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano (GAFE), la Secretaría de la Defensa Nacional ha revelado en repetidas ocasiones que no existen documentos oficiales que demuestren que así sea. Otras historias señalan sin embargo que Treviño Morales sí perteneció al Ejército y que en 1999 desertó y empezó a trabajar para Osiel Cárdenas Guillén, creándose el brazo armado del cártel del Golfo: Los Zetas. Pero en agosto de 2008 Los Zetas dejaron de ser el brazo armado del cártel del Golfo y crearon su propio cártel y al poco tiempo pactaron con los hermanos Beltrán Leyva. Esa rivalidad ha puesto a Treviño Morales de frente al cártel de Sinaloa, con quienes mantienen una guerra a muerte.