PRACTICAN HASTA BRUJERÍA EN CONGRESO DE SINALOA

CULIACÁN._ En el Congreso todo empezó el miércoles en la mañana cuando un elemento de seguridad se acercó hacia un desconocido que mediante una pala escarbaba a un lado de un árbol ubicado en el área del estacionamiento. 

Ese día el agente de seguridad de la institución que hacía un rondín, se acercó y preguntó al extraño qué hacía, teniendo como respuesta que era curandero, buscaba raíces. 

El trabajador del Poder Legislativo se quedó observando cómo la persona seguía escarbando hasta que vio cómo salió de la tierra una pequeña muñeca con vestido negro y listón rojo como especie de cinto. 

Cuando el agente de seguridad vio la muñeca de cara muy blanca y un especie de adorno en la cabeza de colores fuertes, regresó a la sede del Poder Legislativo e informó a su jefe inmediato. 

El superior pidió se le llevara lo que había encontrado, sin embargo, el agente no se atrevió a tocar la muñeca y utilizando un cinto que encontró tirado en los alrededores movilizó el objeto que después fue colocado en un cartón. 

Cuando el jefe de seguridad del Congreso vio la muñeca se comunicó rápidamente con su superior jerárquico, quien al darse cuenta de lo que era pidió se quemara. 

Antes de proceder el agente con la quema del objeto, optó por tomarle una fotografía para registrar el hecho, pero en el primer intento, la cámara se le bloqueó y tuvo que quitarle la pila, el chip y acomodarlo nuevamente. 

En el segundo intento, narra el trabajador, quiso tomar la fotografía y no podía, hasta que optó por utilizar el video de su celular, que registró las características de la muñeca que batalló para quemarse a pesar de la gasolina que se le echó encima. 

Mientras procedía la quema, el agente vio que en la panza de la muñeca había dos pequeñas réplicas, y un pedazo de pelo. 

Personal del Congreso narró que no es la primera vez que en el estacionamiento, donde hay dos ceibas, calificados como árboles sagrados de Los Mayas, han encontrado elementos de brujería. 

Hace como dos años encontraron que debajo de las ceibas que están a poca distancia del río varias veladoras negras, rojas y lilas.

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