jueves, 6 de febrero de 2014

RELATA SU 'AVENTURA' EN MAZATLÁN


El cineasta revela que un criminal lo amenazó mientras filmaba en la colonia Francisco I. Madero

MADRID._ La jaula de oro, dirigida por el cineasta español, Diego Quemada-Diez, naturalizado mexicano, buscará este domingo ganar el Goya, antes ya fue premiado en Cannes por el mejor elenco en la categoría Una Cierta Mirada, sin embargo, el filme, cuya trama se centra en la travesía de los migrantes centroamericanos a Estados Unidos, por poco no sale a la luz, pues el director fue amenazado de muerte.

El cineasta contó que tras varios viajes a Mazatlán, volvió a Sinaloa en 2005 para filmar el documental La Morena.

Dijo que durante el rodaje de una escena en la colonia Francisco I. Madero, un criminal le puso un arma en la cabeza.

"La última vez que fui a Mazatlán tuve un problema bastante grave con un narcotraficante", conto a medios españoles.

"Yo estaba grabando a unos niños jugando en la calle, cuando de repente se para una troca gigantesca y un hombre me puso en la cabeza un pistolón increíble. Me quitó la cámara y empezó a gritar", reveló el cineasta en entrevista.

Quemada-Diez tiene una relación especial con la Perla del Pacífico, pues en 2003 conoció a Toño Arellano, un taxista que lo hospedó en su casa durante 2 meses, mientras él entrevistaba a los migrantes para el guión de La Jaula de Oro.

Toño vivía frente las vías del tren con su pareja e hijos. A ese lugar llegaban los indocumentados a pedir agua y comida.

Por esa razón, nunca antes tuvieron problemas con la gente de la colonia; Toño era conocido por todos, hasta por el sujeto que los amenazó: "El Vitamina".

"Le quitó las llaves del carro a Toño, le empezó a pegar y llegaron cuatro carros con cuernos de chivo y nos dijo 'Ya se van a la chingada', les dijimos que no, pero no nos escuchaba"

"Estaba totalmente encocado", confesó Quemada-Diez.

Tanto el mazatleco como el español intentaron convencer a los sujetos de que sólo grababan a unos niños.

"Nos dijeron 'ya se van a la ve...' y nos llevaron a un descampado, ya nos iban a matar porque se pensaba que éramos de otro cartel", aseguró.

Si se salvaron fue porque al madrileño se le ocurrió mostrarle a "El Vitamina" las escenas de la cámara.

"Me dijo que no había problema, pero que la próxima vez fuéramos con él, 'no pueden andar aquí sin haber hablado conmigo, éste es mi territorio y no jueguen con esto'", confesó.

Quemada-Diez señaló que esa persona fue asesinada hace algunos años, no obstante, el suceso le marcó la vida.

(NOROESTE/REDACCIÓN/ 06-02-2014

No hay comentarios:

Publicar un comentario