Muchos fueron los que a lo
largo de su historia han contribuido a su mote de “manicomio sin bardas”, que
le endilgó el fallecido periodista Diego Matus Félix.
“¡En Guaymas, pasa todo!”,
sostienen con admiración quienes apenas se acercan al conocimiento de su
surrealismo porteño o como aludía el clásico “Y aunque pase, no pasa nada”, del
poblano Francisco “El Muñeco” Sánchez López, exsecretario de la comuna con Bernardino
Cruz Rivas, otro que con sus ocurrencias, cuando se disfrazaba de policía para
participar en los retenes, aportó su granito de arena.
Desde que el genio de
Estagira Aristóteles, acuñó aquello del zoo politikon, se ha asociado a dicho
concepto aspectos que conllevan que el filósofo se refería a que la actividad
política está ligada a la naturaleza humana o de que de plano por sus actitudes
absurdas y autodestructivas en el ejercicio del poder, el homo sapiens, es un
animal, con perdón de esas especies.
Y la lista de quienes
acelerados deshojan la margarita y van en pos de la mano de doña Leonor, se
incrementa día a día en el puerto.
La depredación ha sido la
divisa de algunos políticos una vez entronizados en el poder.
¿EL BELTRONISMO SONORENSE HERIDO DE MUERTE?
Actualmente, cuando la lucha
encarnizada por arrancar la campaña en segundo sitio en pos de la presidencia
de la república está cubriendo de cadáveres el camino al poder y el misil
lanzado desde Chihuahua por el gobernador Javier Corral, que desnudó los
mecanismos de fondeo de dinero público al PRI desde la SHCP y que tambaleó la
campaña de Pepe Toño Meade y el proyecto transexenal de Peña Nieto.
Hasta Enrique Ochoa Reza, va
pa´fuera del PRI ante su inoperancia, pues ni siquiera ha podido parar el rumor
del candidato alterno, al estilo de la campaña de 1994, cuando en un enrarecido
ambiente se hablaba de que Colosio sería sustituido por Manuel Camacho Solís.
Dicen los que saben que
quienes soltaron entonces el “borrego”, son los mismos que enturbian en actual
ambiente. “Los entornos también matan” afirmó entornó el subprocurador Miguel
Montes, cuando investigaba el homicidio del de Magdalena y la conjura que lo
envolvió, la famosa “acción concertada”, primera hipótesis de trabajo del fiscal.
El bombazo cobró a una
primera ´victima de gran calado en la persona de Manlio Fabio Beltrones, quien
se mueve con sendos amparos en la bolsa parece también herido de muerte al
beltronismo sonorense y cuyos con efectos de pronóstico reservados.
Manlio, hombre del sistema y
forjado a vera de Fernando Gutiérrez Barrios y por tanto heredero de su legado,
está a la defensiva, ante la Operación Justicia, que es vista por muchos como
una acción de sanidad política.
El reacomodo de grupos y
perfiles es una de las consecuencias naturales en esa batalla en las alturas.
Por lo pronto detectan una
migración importante de priístas, incluyo antiguos beltronistas y colosistas,
así como empresarios hacía Morena azuzados por Alfonso Durazo, exsecretario
particular de Luis Donaldo Colosio, azuzados por Alfonso Durazo, exsecretario
particular de Luis Donaldo Colosio y con amplias redes y conexiones en la
entidad.
ORIGEN ES DESTINO
Para un político práctico y
teórico como Ernesto “Che” Guevara, no existía duda: “Origen es destino” y fue
consecuente con esa afirmación que solía repetir.
En la política, una actividad
para la cual no existe escuela donde aprenderse como el propio Beltrones
sostiene, tal adagio aplica.
De ahí la importancia de
rastrear en el origen a los actuales cuadros o aspirantes a los diversos cargos
de elección popular en un sano ejercicio de crítica y conocimiento. Sobre aviso
no hay engaño. Veamos:
FORMACIÓN
El proceso formativo de un
político resulta vital, para los resultados que se esperan de él. Ahí sí que
las credenciales y la experiencia que enarbole serán cruciales, a la par
incluso la crianza y su estilo y estilo de vida.
Sabido es que “la escuela no
quita lo pendejo”, repetía don Candelario Flores “El Charraqueado”, cuando
dirigía la Vieja Guardia Priísta, además de empresario de la masa y la tortilla
como se le presentó al dr. Manuel Robles Linares, entonces presidente estatal
del PRI y forjado en la escuela de la vida y junto con “El Cenizo” Leonardo
Dévora, expertos en robos de urnas, operaciones como el ratón loco y tamal, a
la vieja usanza de las burdas mapacherías de antaño.
El Toño Astiazarán, quien
presumía ser egresado de un posgrado en Teoría Política en la Universidad de
Essex en Inglaterra, siendo alcalde terminó entregando la recolección de basura
a la empresa PASA. Nunca ha ejercido la abogacía. Carrera que estudió en la
Universidad de Hermosillo y ha hecho de la política una forma de vida
redituable. Actualmente funge como jefe de la oficina del titular de la
SEDESOL.
Carlos Zataráin, quien hoy
labora como director general de Concertación Social de la SEDATU, salió de
panzazo del CBTIS 40 de donde venía procedente de la prepa del Tec de Monterrey
y como abogado el único asunto por el cobro de unas llantas que litigó lo
terminó empatado con Alfonso Rentería, quien en desagravio exigió la dirección
de Vendedores Ambulantes en su administración.
Le tocó la nada honrosa
pérdida del municipio en 1991 ante el PAN, siendo presidente del PRI municipal
y hacer rico durante su mandato a Jesús Fajardo, de la Constructora Gema. Su
ideología política es nula y es identificado como un prianista.
Manuel Villegas, dice su
presentación como congresista, tiene carrera de ingeniero trunca y al parecer
ni a la escuelita del PRI asistió. Si algo lo caracteriza es su olfato para
pegárseles a los políticos del momento o cuya estrella brilla, base sobre la
cual ha fincado su carrera en la grilla.
Sara Valle, estudió una
licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la UNO y una maestría en
Educación, era maestra del Cet del Mar antes de desempeñarse como alcaldesa y
luego de la revocación de su mandato, regresó a las aulas preparatorianas,
donde se ha mantenido. Se desconoce su verdadera ideología más allá del
discurso público que tararea. Es apadrinada por el Grupo Padilla.
Sergio García, es empresario
restaurantero y laboró mucho tiempo como docente en el ITSON, en donde no pocos
alumnos lo recuerdan como de mano dura. Tiene buena formación académica y
buenas intenciones, pero el equipo no le ayuda.
VIDA PARTIDISTA
Aunque no es indispensable
este tipo de experiencia, con mayor razón cuando los partidos naufragan en el
desprestigio social, resulta aleccionador el desempeño del político en un sistema
democrático.
A diferencia de Fidel Castro,
Salvador Allende, se propuso obtener el poder vía los procesos electorales con
competencia política y todo. De ahí que el tránsito de dos sociedades como la
Cubana y la Chilena, haya sido tan diverso, la primera bajo control del Partido
Comunista Cubano y la segunda con un vigoroso pluralismo político.
El caso de José Ramón Uribe,
marcó época, pues sin ninguna experiencia partidista acabó con la hegemonía
municipal del PRI en 1991, aunque al final fue vendido en canal por el Jefe
Diego ante Manlio.
Otro caso, es el de Sara
Valle, quien desde El Barzón, se hizo de la candidatura a la alcaldía en el PRD
desplazando al grupo del profesor José Guzmán y Antonio Torreblanca, hoy en
Morena, y luego de la presidencia municipal, producto de una estrategia milimétricamente
diseñada desde Hermosillo para llevar en 1997 a la gubernatura a Armando López
Nogales.
Lo que sea, pero Bernardino
Cruz, luego de dirigir al PAN en el municipio fue alcalde, de ahí su militancia
partidista esté fuera de toda duda.
German Uribe Corona, también
es todo un caso. Priísta de toda la vida aspiró en múltiples veces a la
candidatura a la alcaldía y la buscó infructuosamente. El detalle es que al
Chimpitas, identificado con Beltrones Marco Antonio Llano, no lo quiere, aunque
ahora que se compadre Alfonso Navarrete Prida, llegó a la secretaría de
gobernación la suerte podría cambiarle.
Pedro Romano, una de los más
apegados a Germán, está por integrarse a la Segob, junto al Chimpitas.
Al interior del PRI fue
tradicional que los jóvenes se iniciaran en el FJR. Así lo hicieron Carlos
Zataraín, quien buscó dirigirlo y perdió ante el profesor Alberto Figueroa.
Miguel Salas Mariscal y los morros que lo seguían, pasaron por esa
organización. En cambio Jimena Jaramillo, Rubén Contreras y Alfonso Uribe, se
transformaron en priístas por generación espontánea.
En los 80´s a todos esos
nobeles políticos tricolores se les llamó bebesaurios, para diferenciarlos de
los viejos dinosaurios.
LEALTAD Y PROBIDAD POLÍTICA
Manuel Villegas, fue priísta,
regidor con Carlos Zataraín y secretario de la comuna con Antonio Astiazarán,
después coordinó la campaña del panista Max Othón, en el sur de la entidad,
pasó por la oficina de Roberto Romero López, cuando fungió como secretario de
gobierno con Memo Padrés y ganó la diputación local por el XIII distrito local
por primera vez por el PAN, una encomienda en donde antes había fracasado
Alfredo Ortega López, quien fue diputado priísta y luego intentó la posición
por Acción Nacional en 2009 y fue derrotado por Otto Claussen.
Hoy Villegas, fue abandonado
por el grupo de los 40´s, la disidencia panista que le era adicta y que volvió
al redil en apoyo de Paco Bueno Ayub. Solo “El Goyo” Cota Almodóvar, se
mantiene firme a su lado.
Se dice que hasta los morenovallistas
le dieron la espalda a Manuel, quien apoyado por la “izquierda tomatera”
encarnada por Víctor Marín y algunos de la corriente de “Los Diablos” como
Oliver Flores Bareño y los suyos, han traído a Miguel Ángel Armenta, líder
estatal del PRD hasta la casa del legislador en donde “cochupean” como hacerlo
candidato a la alcaldía a sabiendas que por el lado del PAN, Movimiento
Ciudadano y la mayoría de las tribus perredistas como Nueva Izquierda lo
rechazan.
Por lo pronto la petición de
Armenta de dejarle Guaymas al PRD fue bateada.
Al Villeguitas, lo persigue
además del fantasma de la China, el hecho de que a pocos meses de asumir como
legislador ya su voto lo tenía comprometido con Epifanio “Pano” Salido,
coordinador del grupo parlamentario priísta en el Congreso del Estado. Por eso
el estigma de traidor y convenenciero lo trae tatuado a flor de piel.
Pero, Villegas, no es el
único espécimen con conflicto de identidad y lealtad, en 2009, la clica del
Bebo Zataraín, leáse Enrique “Lito” Bueno, Oscar “El Pañal” Barragán, etc. se
volcaron en apoyo a la candidatura de Memo Padrés, desencantados ante el
fracaso de Ernesto “Borrego” Gándara, de obtener la candidatura a la
gubernatura ante el “Zurdo de Arizpe” Alfonso Elías, en una operación parecida
a la de “Los Diablos” del PRD de Oliver Flores, Santiago Margarito y Eva
Languré.
Y crisis similar padeció Otto
Claussen, quien en 2015 acordó la entrega del municipio al PAN con Roberto
Dagnino.
GRUPO Y EQUIPO
La pertenencia de un político
a un grupo, al igual que el equipo que lo acompañará en su gestión, es
importante para que la ciudadanía sepa a lo que le tira al escogerlo en las
urnas.
Y aunque por lo regular el
político una vez acomodado en el sillón, hace lo que le bien en gana, sin
controles, ni contrapesos, se ha buscaba evitar eso y por eso es obligación de
los partidos registrar ante la autoridad electoral, el INE, sus documentos
básicos y su plataforma política. En el caso de las coaliciones o alianzas
deben de presentar los convenios que las rigen. Pero, hasta la fecha, no
existe, una acción eficaz para obligar a cumplir a los partidos o coaliciones
con lo registrado y avalado en el INE, ni mucho menos las promesas de campaña.
Bernardino Cruz Rivas, igual
que Sara y Carlos “Bebo” Zataraín, fueron impulsados políticamente por Julio
Ramón Luebbert Duarte, un beltronista y colosista con pedigrí. Esa fue su
magia.
Antonio Astiazarán, César
Lizárraga, Otto Claussen y Lorenzo De Cima, caminaron bajo el padrinazgo del
Morroño Marco Antonio Llano Zaragoza, pilar fundamental del PRI porteño. Ahí
está el truco.
De los actuales sonantes la
mayoría provienen del grupo del Toñito: Manuel Villegas, Susana Corella, Otto
Claussen y Lorena Garibay Ulloa.
Y como segunda generación
están Jimena Jaramillo y “El chamaco pendejo” Rubén Contreras, los dos de
herraje ottista. Solo el Chuy Garza, por su origen campirano y cenecista se
salva.
Incluso los emecistas Marcos
Ulloa y Sergio García, tienen un claro pasado priísta y hoy la juegan de
izquierdosos, en el baile de máscaras que es la política actual.
Otto Claussen, perdón Ernesto
Uribe Corona, quiere ser candidato independiente a la alcaldía, pero no
convence, mientras Leonardo “Gallo” Rodríguez, a quien la base del sindicato
petrolero echó fuera de la dirigencia, “sobradón” afirma que está a la espera a
ser llamado por algún partido para encabezar la lucha por la alcaldía.
Un tirador solitario lo es el
verde Daniel Cardozo, quien se siente la carta alterna de la gober, con eso de
que el tricolor pasa por malos momentos como marca.
UN CANDIDATO EN CADA HIJO TE DIO
En Guaymas las candidaturas
han perdido seriedad. Actualmente cualquier acelerado se siente con los méritos
de gobernar el puerto. Lo que sobran son candidatos. Si uno se anima a caminar
por la avenida Serdán lo más seguro es que se tropiece con algún aspirante.
La propia experiencia explica
que primero ha sido el hombre, luego el programa o si no, pues no hay pex.
Aquello de que el político
perfecto era una mezcla de zorro y león, como sostenía Maquiavelo, ha ido
quedando en una vacilada…
(EL PORTAL DE LA NOTICIA/ LA VIÑA DEL SEÑOR/ 11 ENERO
2018)
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