La Policía Municipal
realiza una investigación interna para establecer si el anterior secretario de
Seguridad Pública, Julián Leyzaola Pérez, tenía un grupo especial de agentes y
ex militares para “levantar” a presuntos delincuentes y entregarlos a agencias
de Estados Unidos o a autoridades estatales y federales mexicanas.
El caso que detonó
las indagatorias es el de Manuel Gerardo Velásquez Mascorro, un mexicoamericano
que enfrenta un proceso por narcotráfico en una Corte estadounidense, pero
alega que fue “secuestrado” por elementos municipales que al parecer lo
entregaron a oficiales extranjeros, quienes finalmente se lo llevaron a El Paso
por la Línea Exprés del puente Zaragoza el 16 de agosto de 2013, todo sin
cumplir con algún protocolo legal.
Los abogados del
fronterizo, Federico Solano Jurado y Federico Solano Rivera, interpusieron
denuncias o quejas por ese hecho ante la Fiscalía General del Estado (FGE), la
Procuraduría General de la República (PGR), la Secretaría de Seguridad Pública
Municipal (SSPM) y la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Además solicitaron
la intervención de las comisiones estatal y nacional, así como de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos.
Ante la acusación,
el actual secretario de Seguridad Pública, César Muñoz Morales, afirmó que se
encuentra realizando una investigación para tratar de establecer si en la
corporación están los elementos que participaron en el supuesto operativo para
privar de la libertad a Velásquez Mascorro.
Indicó que la
dependencia local ha colaborado con la PGR cuando se requiere alguna acción
derivada de los acuerdos binacionales, pero desde que él tomó el cargo no se le
ha requerido alguna participación de esa naturaleza.
Como prueba de la
versión de que su representado fue detenido en Ciudad Juárez por elementos de
un grupo especial identificado con la clave “Jaguares”, los litigantes
presentaron un video tomado de la caseta de seguridad del fraccionamiento
Quintas San José, donde se observa el arribo de dos pick up con los colores y
la leyenda “Policía Municipal” a los costados, pero no cuentan con número de
identificación ni placas de circulación.
En las imágenes se
puede observar cómo poco después de las 8 de la mañana de ese día arriban al
fraccionamiento Quintas San José –que tiene acceso controlado– dos unidades de
la Policía Municipal, pero no se les aprecia el número de control que las
patrullas tienen a los costados, ni las placas de circulación.
Los elementos –alrededor
de 12, según el testimonio de los abogados que estuvieron presentes en el
lugar–, dieron una primera vuelta y luego salieron del sitio. Minutos después
regresaron y fue cuando entraron a la vivienda de Velásquez Mascorro, lo
aprehendieron, le cubrieron la cabeza con una bolsa de plástico y se lo
llevaron a bordo de una de las pick up que tripulaban los policías.
Los defensores
fueron llamados por su cliente antes de ser detenido, por lo que alcanzaron a
llegar al lugar y observar lo que estaba pasando, dijeron.
Aseguraron que todos
los elementos tenían el rostro cubierto, aunque portaban el uniforme táctico, y
no traían sus identificaciones.
De la casa del
arrestado los policías se llevaron varios objetos que subieron a una unidad
Dodge Avenger con matrículas texanas, propiedad de Velásquez Mascorro, que uno
de los agentes se llevó manejando.
Afuera del
fraccionamiento, dijeron, había otros dos vehículos con placas diplomáticas de
Estados Unidos que siguieron a las unidades de la SSPM.
Debido al movimiento
y al escándalo, varios vecinos llamaron a los teléfonos de Emergencia, por lo
que minutos después arribaron al sitio más patrullas de la Municipal, éstas con
su número de identificación y placas según se observa en el video, así como
unidades de la Policía Estatal y de la Ministerial para verificar el llamado de
auxilio. Luego se retiraron sin más.
Mientras, los
elementos locales que habían arrestado a Velásquez Mascorro lo llevaron a la
Estación Sur, antes Babícora, donde luego fue subido a un vehículo con placas
diplomáticas para transportarlo hasta el puente Zaragoza, a donde ingresaron
por la Línea Exprés.
Una vez en las
oficinas del Gobierno norteamericano lo hicieron firmar documentos en los que
se establecía que él mismo se estaba entregando a las autoridades de Estados
Unidos sin mayor trámite.
Los litigantes
declararon que su cliente identificó a Javier Barraza como un elemento de la
Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) que
participó en el operativo de su captura del lado mexicano. Christopher Shary,
otro elemento de la DEA, fue quien hizo el papeleo de su ingreso al país del
norte y tuvo conocimiento de que la detención se había realizado en Ciudad
Juárez.
Días después, el
procurador federal en el suroeste de Texas, Robert Pitman, y el agente especial
a cargo de la DEA en El Paso, Joseph M. Arabit, hicieron público que el
mexicoamericano fue acusado ante un gran jurado federal por conspirar para
distribuir, junto con otras 15 personas, más de mil kilos de mariguana a través
de varios estados de Norteamérica.
Ahora, sus abogados
luchan por comprobar que su detención fue ilegal, tanto aquí como en Estados
Unidos, ya que se realizó sin los protocolos establecidos entre ambos países
para ese efecto.
“Hemos tenido
conocimiento de que han ocurrido otros casos similares al de nuestros clientes,
en los que agentes municipales detienen a personas para entregarlas a otras
autoridades mexicanas o a Estados Unidos”, dijo Solano Jurado.
Añadió que a través
de sus propias investigaciones recibieron testimonios acerca de que Leyzaola
Pérez, quien fungió como jefe de la Policía Municipal de 2011 a octubre de
2013, tenía a ese grupo especial equipado con camionetas sin identificar e
integrado por elementos que laboraban encapuchados para realizar este tipo de
acciones.
Datos extraoficiales
indican que en la actualidad la SSPM realiza al menos 40 indagatorias en torno
a actuaciones irregulares de sus elementos, entre las que se encuentra el caso
de Velásquez Mascorro.
Muñoz Morales dijo
que la Secretaría de Seguridad Pública está colaborando en el caso para tratar
de determinar si hubo esa detención ilegal por parte de oficiales preventivos.
Sin embargo, afirmó,
cualquier contribución que la SSPM pueda dar a autoridades extranjeras se tiene
que realizar a través de la PGR.
“No hay otro medio,
no podemos hacerlo, ninguna autoridad norteamericana puede solicitar de forma
directa el apoyo de Seguridad Pública, forzosamente tiene que hacerse un
trámite a través de las autoridades federales y si ellos no tienen elementos
suficientes para poderlos apoyar, entonces nosotros lo hacemos, pero todo por
medio de instancias de la Federación”, explicó
Básicamente, indicó,
“apoyamos a la PGR porque no pueden respaldar a los estadounidenses
directamente si no es a través de un procedimiento, porque legalmente no se
puede hacer otra cosa, mucho menos hacer detenciones y entregar a los detenidos
a extranjeros”.
“Si yo tengo a una
persona aquí en Ciudad Juárez, que tenga alguna orden de aprehensión del lado
norteamericano, tengo que hacerlo del conocimiento de la PGR para que hagan los
trámites correspondientes para su extradición a ese país”, enfatizó.
Del caso de
Velásquez Mascorro, dijo, están tratando de obtener y otorgar toda la información
con la que se cuenta, luego que instancias de Derechos Humanos le solicitaron
establecer si se realizó esa actuación o no.
“Estamos tratando de
entregarles todo lo que hay en torno a ese hecho, a esa posible detención
ilegal, pero la verdad yo lo desconozco por completo el hecho”, indicó.
El secretario de la
Policía local dijo que desde que asumió el cargo, hace casi tres meses, ni la
PGR ni ninguna otra instancia han solicitado su colaboración para detener a
personas con fines de extradición a Estados Unidos.
(Martín
Orquiz /El Diario | 2014-01-08 | 23:35)
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