Hidalgo.- María Virginia Ortiz, esposa del alcalde de
Tepehuacán de Guerrero en Hidalgo, Hilario Mendoza Benítez, intentó
retractarse sobre la denuncia penal que interpuso en diciembre del año
pasado en contra de su marido, después de que este le propinará una
golpiza hasta fracturarle la mandíbula, para otorgarle el perdón a su
marido. Las autoridades estatales se lo negaron debido a que se trata de
un delito que se persigue de oficio. Fuente: SDP
La también, presidenta del DIF de Tepehuacán acudió ante el procurador general de Justicia, Alejandro Straffon Ortiz, pero en su lugar, fue atendida por el director de Averiguaciones Previas, Cuauhtémoc Granados, con la intención de otorgarle su perdón legal al agresor.
La Ley de Violencia Familiar del estado de Hidalgo, impide la posibilidad de otorgar perdón o llegar a un acuerdo, porque las lesiones atentan contra la vida de la persona y podrían perjudicar sus facultades físicas.
Los vecinos de la localidad han señalado que el matrimonio ha sido visto paseando por las calles "tomados de la mano”, para encabezar actos públicos, como el del 6 de enero con la entrega de juguetes por el Día de Reyes.
La presidenta del DIF se reintegró a sus labores el 5 de enero; ni el presidente municipal ni su esposa emitieron declaraciones sobre las afirmaciones de los vecinos de la localidad.
El fiscal Straffon Ortiz solicitó al Congreso local un juicio de procedencia en contra de Mendoza Benítez, por los delitos de lesiones dolosas y violencia familiar en perjuicio de su cónyuge, con una pena de hasta 10 años de prisión.
De acuerdo con el Código Penal de Hidalgo, los delitos imputados al alcalde en el caso de las lesiones podrían castigarse con dos a siete años de cárcel y una multa de 30 a 200 días de salario, además de la pérdida del derecho familiar.
El procurador hidalguense aseguró que el alcalde continúa con sus labores, y señaló que no se ha tomado ninguna medida preventiva para evitar que huya para evitar un inminente desafuero.
La también, presidenta del DIF de Tepehuacán acudió ante el procurador general de Justicia, Alejandro Straffon Ortiz, pero en su lugar, fue atendida por el director de Averiguaciones Previas, Cuauhtémoc Granados, con la intención de otorgarle su perdón legal al agresor.
La Ley de Violencia Familiar del estado de Hidalgo, impide la posibilidad de otorgar perdón o llegar a un acuerdo, porque las lesiones atentan contra la vida de la persona y podrían perjudicar sus facultades físicas.
Los vecinos de la localidad han señalado que el matrimonio ha sido visto paseando por las calles "tomados de la mano”, para encabezar actos públicos, como el del 6 de enero con la entrega de juguetes por el Día de Reyes.
La presidenta del DIF se reintegró a sus labores el 5 de enero; ni el presidente municipal ni su esposa emitieron declaraciones sobre las afirmaciones de los vecinos de la localidad.
El fiscal Straffon Ortiz solicitó al Congreso local un juicio de procedencia en contra de Mendoza Benítez, por los delitos de lesiones dolosas y violencia familiar en perjuicio de su cónyuge, con una pena de hasta 10 años de prisión.
De acuerdo con el Código Penal de Hidalgo, los delitos imputados al alcalde en el caso de las lesiones podrían castigarse con dos a siete años de cárcel y una multa de 30 a 200 días de salario, además de la pérdida del derecho familiar.
El procurador hidalguense aseguró que el alcalde continúa con sus labores, y señaló que no se ha tomado ninguna medida preventiva para evitar que huya para evitar un inminente desafuero.
(zocalo/ Agencias /09/01/2014 - 02:31 PM)
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