Redacción
MONTERREY, N.L., (proceso.com.mx).- Las autoridades de Nuevo León reportaron esta
tarde el hallazgo de tres cuerpos más –aún no identificados– en el municipio de
Mina, con lo que suman 17 los cadáveres rescatados.
Horas antes
elementos forenses habían sacado 14 cadáveres de los integrantes del grupo
musical Kombo Kolombia, quienes fueron secuestrados y ejecutados la madrugada
del viernes, al norte de esta capital.
Familiares identificaron
en total a nueve de las víctimas rescatadas de una noria de 15 metros de
profundidad en el rancho abandonado “Las Estacas”, en Mina, a 50 kilómetros de
Monterrey.
Se presume que los
encontrados recientemente correspondan a los tres integrantes que aún no son
localizados.
Los cinco cadáveres
que fueron identificados hoy son los de: Saúl Reynoso Sánez, segunda voz;
Javier Flores, trombonista; Mario Alberto Beltrán; Edgar Dimas Montes, de 31
años; Reyes Alejandro Mendoza Rodríguez, de 25 años; y Ricardo Alfonso
Verduzco, percusionista.
Ayer fueron dados a
conocer los nombres de otras cuatro víctimas ya reclamadas por sus familiares:
José Antonio Villarreal, de 39 años, corista originario de Monterrey; Heimer
Iván Cuéllar Pérez, de Colombia, tecladista; José Baudelio Santos López, de 38,
saxofonista de Monterrey; y Víctor Ángel Santamaría Cruz, de 43,
Los parientes de los
integrantes de la agrupación de música de vallenato esperaban este día en el
exterior del anfiteatro del Hospital Universitario, de esta ciudad, para
recibir los cadáveres.
Entrevistada en el
exterior del servicio médico forense, María Sagrario Sáenz Contreras, madre de
Ricardo Alfonso, señaló que su hijo no tenía relación con actividades ilícitas.
“Es un muchacho
sano, veterinario, titulado en Cuatitlán. Fue percusionista de La Tremenda
Korte, era maestro de percusión del Instituto de la Juventud del DF y no tiene
nada qué ver. Si lo quieren vincular con cosas que no son, mi hijo es un
muchacho sano. La mera verdad, me siento deshecha”, señaló la mujer.
Esta mañana
continuaban los trabajos de rescate en el rancho ubicado a un costado del
kilómetro 92 de la carretera Monterrey-Monclova.
Elementos del
Ejército y Fuerza Civil resguardaban el perímetro mientras trabajadores forenses
se auxiliaban con una bomba para retirar el agua del pozo buscando más
cadáveres de los integrantes de la agrupación que fueron secuestrados a las
00:30 horas del viernes del salón de baile La Carreta, en Hidalgo, 40
kilómetros al norte de Monterrey.
Se esperaba que los
trabajos de rescate continuaran hasta el miércoles.
(PROCESO/Redacción/ 29 de enero de 2013)
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