sábado, 12 de noviembre de 2011

"EL JOSESON":SUCESOR DE "EL GUERO LAYO" EN LA PAZ

El nuevo líder de la organización criminal nació el 31 de octubre de 1981 en Culiacán, Sinaloa, y huyó de Estados Unidos luego de haber enfrentado cinco cargos en Maricopa, Arizona por los delitos de venta de mariguana, portación de arma de fuego y de unidad vehicular para traficar droga. Las confesiones y pruebas encontradas a “El Güero Layo” ya están en la SIEDO, donde enfrentará cuatro procesos penales federales y un proceso del fuero común.

Investigaciones ZETA
Domingo Ruelas del Val, Domingo Valdés Rosales o Domingo R. Valdés, alias “El Josesón”, aparece en el nuevo mapa delictivo, elaborado por autoridades federales y militares, como el jefe de la plaza de narcomenudistas de La Paz y sucesor automático de Adelaido Soto Aguilar, Heraclio Soto Portillo o Eduardo Salas Martínez, alias “El Güero Layo”.

El delincuente asumió el mando criminal de la organización delictiva de “Los Layos”, luego de que el 1 de noviembre fuera dictado el auto de formal prisión al originario de Badiraguato, Sinaloa, quien fue detenido en un operativo militar el 23 de octubre en la carretera Transpeninsular de La Paz hacia Pichelingue.

La captura del líder narcomenudista, es el segundo golpe de importancia que se le asesta a esta organización delictiva, pues el 19 de diciembre del 2010, fue arrestado Sergio Contreras Rodríguez alias “El Queco”, quien estaba en el tercer nivel jerárquico de importancia, debajo de “El Güero Layo” y “El Josesón”.

Datos recabados por ZETA expusieron que el nuevo líder de esta organización criminal nació el 31 de octubre de 1981 en Culiacán, Sinaloa, y salió huyendo de Estados Unidos, después de haber enfrentado cinco cargos en la corte de Maricopa, Arizona en el año del 2004 por los delitos de venta de mariguana, venta de drogas peligrosas, portación de arma de fuego y portación de unidad vehicular para traficar droga, según expediente criminal numero S-0700-CR-2004017477 con fecha del 24 de junio del 2004.

Por estos antecedentes criminales, “El Josesón” es considerado un tipo de peligro, que ya está en la mira de autoridades federales y militares. Sin embargo, la investigación está en curso.

Desde el 2005, y durante todo el sexenio del ex gobernador del PRD, Narciso Agúndez Montaño, el ex líder de “Los Layos” gozó de total impunidad –y según sus primeras confesiones— pagaba 100 mil pesos semanales a los ex titulares de la Procuraduría General de Justicia del Estado y de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública de Baja California Sur, asimismo tenía comprados a decenas de agentes y comandantes de la Policía Municipal de La Paz, de la Policía Ministerial, de la Policía Estatal Preventiva, de la Agencia Federal de Investigaciones y de la Procuraduría General de la República.

El proceso
Ahora el criminal enfrentará tres procesos penales federales y uno más del fuero común por la triple ejecución del Fraccionamiento “Villas del Encanto”, donde fue asesinado Miguel Enrique Atondo Gastélum, alias “El Sinaloense”.

El proceso de “El Güero Layo” será largo y tedioso, sobre todo porque enfrentará a la justicia tras de las rejas. Según opinión de algunos abogados se estima que cuando menos cada proceso penal durará poco más de 6 meses.

Durante el operativo de captura, Adelaido Soto Aguilar, Heraclio Soto Portillo o Eduardo Salas Martínez fue detenido sin necesidad de que hubiera un solo disparo. Ninguna autoridad local fue avisada por parte del Ejercito Mexicano.

Aunque no se dijo, se sospecha que todo esto se debió a los vínculos criminales del narcomenudista con policías. En un par de ocasiones, cuando el delincuente estuvo a punto de ser detenido, fue alertado, y por ende, logró escapar sin problemas.

En el 2009, las fuerzas militares ya habían conseguido dos órdenes de cateo para capturar al líder de “Los Layos”; usaba dos casas como guarida.

La primera se encontraba en el fraccionamiento Villas del Encanto, y la segunda, en la exclusiva zona de Fidepaz. Sin embargo, cuando las autoridades llegaron y tomaron las viviendas, ya estaban vacías.

En esa ocasión, los vecinos que delataron al narcomenudista relataron a militares que el criminal había contratado dos camiones de mudanzas para llevarse sus pertenencias, y cuando se comenzó la investigación, ninguna autoridad supo dar razón de hacia dónde se había transportado la mudanza, en una ciudad en donde era notaria la movilización de ese tipo por su bajo número de habitantes.

Ante historias como la fuga de “El Güero Layo”, el Ejército Mexicano entonces entró de lleno en su búsqueda y captura, pero se volvió escurridizo gracias a sus nexos con policías y a los miles de pesos que pagaba para recibir pitazos de funcionarios de primer nivel del pasado sexenio.

La red criminal
Desde su llegada, Adelaido Soto Aguilar logró establecer una red bien organizada de criminales que incluía el trasiego de drogas desde Sinaloa a Baja California Sur, y que, de acuerdo con sus propias declaraciones, funcionaba a través de lanchas rápidas que descargaban la mercancía en playas del municipio de La Paz.

 De ahí eran trasladadas a bodegas, para empezar a sacar el enervante en operaciones hormiga hasta llegar a la comercialización que estaba a cargo de decenas de narcomenudistas que abastecían al mercado local de cocaína, mariguana y crystal, principalmente.

En su detención, el líder del narcomenudeo reconoció que la droga incautada el 9 de septiembre en la población de El Sargento.

Entonces fueron detenidos cuatro criminales: Martín Guadalupe Caraván Castorena, Jorge Palomares Ramírez, Víctor Alfonso Contreras González y Alfonso Zamora Hernández, todos originarios de Sinaloa.
El delincuente explicó a sus captores que había ordenado a sus trabajadores resguardar el cargamento consistente en 377 paquetes de mariguana que pesaban 892 kilogramos. A ellos les entregó dos campers para que metieran la mercancía, y una camioneta blanca tipo Bronco para que se desplazaran en el área.

Cargamentos como éste fueron interceptados y decomisados, y aunque los poseedores, decían que pertenecían a “El Güero Layo”, el capo nunca aparecía en esos lugares porque tenía una red criminal de más de doscientas personas que se encargaban de mover y comercializar la droga.

Lo anterior no hubiera sido posible sin la cooperación de las autoridades locales que a través de la Policía Municipal y de la Policía Ministerial brindaron una amplia protección a la red criminal del “Güero Layo”, en la que por cierto, ya estaba acordado que si llegaba a ser detenido, el sucesor sería Domingo Ruelas del Val, Domingo Valdés Rosales o Domingo R. Valdés, alias “El Josesón”.

La investigación de la SIEDOAl momento se sabe que los nombres de los policías, comandantes y ex titulares de la PGJE y de la SESP, Fernando González Rubio Cerecer, Francisco Karim Martínez Lizárraga y Lenin Giovanni Rodríguez Aguilar, ya fueron entregados en un expediente a la Subprocuraduría de Investigación en Delincuencia Organizada (SIEDO) para que se encargue de las investigaciones.

Dentro de todos estos procesos penales, se esperan careos entre el delincuente y policías, comandantes y ex titulares de la PGJE y de la SESP, como un primer paso para deslindar responsabilidades en contra de quienes están o estuvieron vinculados con el líder del narcomenudeo en La Paz.

Todo esto a raíz de que en el operativo e –independientemente de las confesiones del criminal– se encontró y se decomisó una decena de libretas y una larga lista de personas que recibían dinero del delincuente como pago de sobornos para proteger las actividades criminales.

De hecho, en las manos de las fuerzas castrenses están algunas computadoras y teléfonos celulares con información muy importante que está siendo analizada, y donde se supo, por algunas grabaciones y conversaciones telefónicas en poder de “El Güero Layo”, que había nexos con jefes policiacos y ex funcionarios del sexenio del ex gobernador del PRD, Narciso Agúndez Montaño.

La costumbre de este criminal –y así lo confesó— era grabar conversaciones telefónicas para tener un archivo y evitar traiciones. El detalle es que nunca esperó ser detenido, mucho menos que toda esa información cayera en manos de militares, que inmediatamente enteraron de esta situación a la SIEDO.

Los procesos penales que hoy enfrenta Adelaido Soto Aguilar son cinco. Las autoridades lo acusan de lo siguiente:

1.- Ser propietario de 46 bolsas de crystal y 20 dosis de mariguana, incautadas en una operación de la policía estatal preventiva el 3 de abril del 2010, y halladas dentro de un vehículo de su propiedad en las calles Manuel Torre Iglesias y Félix Ortega de La Paz.

2.- Ser el autor intelectual de la ejecución de Miguel Enrique Atondo Gastélum, alias “El Sinaloense”, Miguel Atondo Ramírez, un hijo del narcomenudista de 14 años y Édgar o Ricardo Alán Ortega Álvarez, alias “El Gordo”, registrada el 9 de mayo del 2010 en el Fraccionamiento Villas del Encanto de La Paz.

3.- Ser dueño de  377 paquetes de mariguana que dieron un peso de 892 kilogramos, y de tres vehículos, decomisados en una operación militar el pasado 9 de septiembre en la población de “El Sargento”.

4.- Ser el propietario de 466 kilogramos de crystal y 9.793 kilogramos de mariguana, incautados el pasado 23 de octubre, cuando fue detenido.

5.- Ser propietario de 139 paquetes con un peso de 466.19 kilogramos de mariguana, 1 piedra de cocaína de 1.04 kilogramos, 16 bolsas de crystal de 6.74 kilogramos, 22 envoltorios de crystal con 4 gramos, 3 envoltorios de cocaína con 12 gramos, dos bolsas con 0.894 kilogramos de cocaína, 5 armas largas, 2 pistolas, 9 cargadores, 337 balas de diferentes calibres y 6 mil 680 pesos, producto de la venta de droga.
 

1 comentario:

  1. QUE MAL ENTERADOS ESTAN ESE JOSESON ES UN PUCHADOR MAS DE TANTOS SI LO QUIEREN ENCONTRAR BUSQUENLO EN SINALOA

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