Pulso
| Ciudad de México.- En las oficinas de Ecología en un caso para especialistas
de lo paranormal, el llanto de un niño puso a temblar a los trabajadores, ya
que en una abertura del piso se escucha el llanto de un bebé, como si estuviera
atrapado entre el piso, pero tras minuciosa revisión nada se pudo localizar.
Hasta
la tarde de ayer viernes los ruidos aún no tenían una explicación congruente,
aunque curiosos se acercaban al sitio para verificar el área, ya que el caso se
volvió “viral” entre la población. Los lloriqueos de un niño pequeño que se
escuchaba debajo de una grieta en la sede de la dirección de Ecología, movilizó
a los trabajadores de Limpieza, que a su vez avisaron al Alcalde y hasta a la
Policía Municipal.
Fue
durante la madrugada de ayer, alrededor de las cinco horas, que empleados del
departamento de Ecología dieron parte a la policía acerca de un fenómeno que
horas antes les había provocado un susto, y es que de acuerdo a Benito Flores
Martínez, velador del edificio, la noche del jueves al filo de las 21:00 horas
había escuchado el llanto de un bebé en el lugar.
Con
la llegada de los empleados del departamento de limpieza, a las cinco de la
mañana de ayer, trataron de investigar el caso, al lugar también se hicieron
presentes los uniformados, pero no localizaban al presunto bebé que lloraba,
llantos que provenían de un esquina del edificio, debajo del concreto, en una
abertura.
Justo
en esos momentos escucharon nuevamente al niño, fue Antonio Pérez, empleado de
limpieza, quien grabó un video desde su celular, en el material, que fue
facilitado a este medio de información, claramente se escuchan los gritos de un
menor recién nacido.
Ante
el desconcierto de los policías y empleados de Ecología, que no daban crédito a
lo ocurrido, dieron parte al departamento de Protección Civil para que
inspeccionara el lugar en busca del menor.
Al
lugar llegaron el director Alejandro Molinero, así como el titular de la
Policía Municipal, Gelasio Arellanos, quienes tras revisar el sitio, no
encontraron ninguna abertura o sistema de conducción de algún drenaje por donde
pudiera haber ingresado algún menor.
El
propietario del inmueble es el alcalde César Torres Mendioza, quien giró
órdenes a la Policía Municipal y Protección Civil de revisar minuciosamente el
sitio, ante el temor de que algún niño estuviese atrapado en algún resquicio,
pero durante el día los llantos no volvieron escucharse.
(ZOCALO/
AGENCIAS/ 30/08/2015 - 10:32 AM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario