A la altura del vaso de La Presa.
TIJUANA.- Estaba inconsciente en el interior del maletero del auto Aveo, sus agresores creyeron moriría rápido al ser consumido por el fuego.
Automovilistas que circulan a diario por el Bulevar 2000, avisaron al número de emergencias 066, el incendio del vehículo compacto a la altura del vaso de La Presa.
Eran apenas las seis de la mañana. Llegó personal del Cuerpo de Bomberos y de rescate.
Al sofocar las llamas encontraron cadáveres, solicitaron ayuda entonces a la Policía Municipal.
Al revisar los cuerpos de los hombres, descubrieron uno estaba semicalcinado de la cintura a los pies.
El otro estaba mojado, sin movimiento, tapado también del rostro con cinta adhesiva, color gris, igual que sus manos atadas.
Notaron tenía signos vitales, por eso llegaron paramédicos de la Cruz Roja, quienes lo reanimaron.
"Se salvó de una muerte segura", confió un policía.
Pero al paso de las horas decidió hablar con las autoridades para delatar a sus victimarios.
Les explicó a detalle en qué casa lo mantuvieron privado de la libertad y en la casa en dónde estaban las personas que pretendieron quemarlo vivo.
Tras la revelación, las autoridades detuvieron a ocho personas, entre mujeres y hombres, quienes presuntamente asesinaron a decenas de personas desde el año pasado.
(EL MEXICANO/ Said BETANZOS / miércoles, 30 de abril de 2014 11:59 a. m.)
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