Elsa Leticia Romero Romero
Gritos,
improperios, ofensas y hasta señales obscenas con las manos a menos de
50 centímetros de distancia, fue a lo que llegó la situación en el
Congreso del Estado por parte del diputado Abel Murrieta Gutiérrez y el
presidente de la mesa directiva,
Humberto Robles Pompa, ambos de la
bancada priísta, tras que este último declarara la falta de quórum para
continuar con la sesión y realizar un posicionamiento acerca del
conflicto que en este momento se desarrolla en el sur del Estado.
Parecía un día cualquiera en el Pleno,
hasta que los ánimos se caldearon entre los compañeros de partido y se
dijeron de todo, porque Murrieta Gutiérrez le exigió al presidente
volver a pasar lista y éste le contestó: Sí, pero no me grites!
Dicho punto en el orden del día se sumó
una vez iniciada la sesión, a la cual faltaron siete diputados, una vez
que Murrieta Gutiérrez se había situado en el pódium se anunció la falta
de mayoría en el Pleno, por lo que el presidente debía finalizar la
ceremonia y transferir el tema para el próximo martes 25 de junio.
Ofuscado, adusto, Murrieta Gutiérrez
exigió al presidente de la LX Legislatura el realizar un nuevo pase de
lista y sancionar a aquellos diputados que hayan salido del pleno.
Al final, se contaron 21 diputados
presentes, uno menos de los necesarios para llevar a cabo la sesión,
durante el transcurso de ésta, los diputados del Verde Ecologista,
Karina Gutiérrez y Próspero Ibarra salieron de la sala, siguiéndoles
Gildardo Real Ramírez y Raúl Silva Vela, ambos del PAN.
Murrieta Gutiérrez
expresó su inconformidad con los presentes y aseveró que era una
vergüenza como los diputados, sin importar su color, no están tomando en
serio el conflicto en Obregón y salen de la sala cuando es más
necesario el plantear posturas.
Y hablándole directamente a Robles Pompa
exigió que se castigaran a los que no estuvieran presentes; así se vio
terminada la sesión, sin embargo, una vez levantados de sus curules,
ambos diputados se encontraron, Robles Pompa deslindándose de la culpa
ante la falta de los diputados y el otro demandando se tomen cartas en
el asunto.
Aunque la discusión podría haber llegado
a mayores, compañeros de la bancada priístas intervinieron en la
discusión y separaron a aquellos que con gritos desarrollaban una
discusión, ambos diputados se negaron a dar declaraciones.
Parecía que se iban a agarrar a golpes, pero sus compañeros de partido los separaron.
(DIARIO DEL YAQUI/ Elsa Leticia Romero Romero/Jueves, 20 Junio 2013 23:5)
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