viernes, 21 de junio de 2013

GRAVE JOVEN VÍTIMA DE "POOL PARTY" EN LEÓN, GUANAJUATO



León, Gto.- José Ignacio López del Toro, uno de los nueve jóvenes intoxicados con químicos en la “pool party” el pasado fin de semana, se encuentra muy grave. Está en coma inducido debido a que su cerebro está inflamado y sus pulmones no responden.

Su familia denunció que ninguna de las empresas que hasta el momento han salido a decir que han pagado todos los gastos médicos, se ha acercado. Y por otro lado, resulta incomprensible que el subprocurador de Justicia de Guanajuato, Manuel Ángel Hernández, haya declarado que José Ignacio se encuentre estable, fuera de peligro y “en piso” de un hospital privado, donde está internado.

Luis Jorge López del Toro, hermano mayor de Nacho –como le llaman cariñosamente- ofreció una rueda de prensa al lado del abogado de su familia, Hugo Valencia García, en uno de los salones del nosocomio, para denunciar lo que llamó una “campaña de mentiras”.

“La única razón por la que estamos dando esta rueda de prensa es para que se dejen de estar dando noticias falsas, porque no es nada agradable estar con todo el dolor y de repente apretar los dientes por lo que están diciendo en la tele. Es falso que está en terapia media, que se han puesto en contacto con nosotros –las empresas-, que nos están ayudando, y nada es cierto”, dijo.

Excélsior ha publicado el caso de la “Pool Party” de León, en donde nueve jóvenes resultaron intoxicados luego de que fueran depositados químicos en la piscina para crear un ambiente de niebla. Pero ocho de ellos se encuentran estables, solamente la salud de Nacho continúa en peligro.

Con un nudo en la garganta, Luis Jorge recordó que la mañana del pasado sábado había quedado con su hermano menor de ir al cine, sin embargo, él tenía la invitación de ir a una fiesta “quién sabe dónde”.

Horas después le fue reportado por su mejor amigo que Nacho se encontraba en una ambulancia camino al hospital, después de haberlo rescatado del agua de la piscina llena de una densa niebla química.

“Eran como las 6.30 de la tarde y mi amigo me dijo que iba con mi hermano en una ambulancia rumbo al hospital y que estaba muy mal. Él vio gente flotando en el agua entre el humo, sacó a una persona, y tres personas más. Óscar Ceballos siempre ha sido mi amigo y salvó a mi hermano. La noche del sábado me dijeron que a lo mejor se moría, ha sido horrible, mi familia está desbaratada. Es una situación muy difícil y si lo ves, mi hermano sigue en terapia intensiva, no nos dan una respuesta de si él va a salir del problema”.

Nacho estudia Organización de Eventos de Entretenimiento en la Escuela Bancaria Comercial, Campus León, es además un asiduo al gimnasio, canta, toca el bajo y pertenece a un grupo de rock.

“Él es un chavo sano. Sí es un accidente, me provoca angustia, en sus lapsos de conciencia creo que no sabe ni qué pasó. Tiene los pulmones muy lastimados, cerebro inflamado, no sé los términos, solo sé que está mal. Todo el tiempo ha estado en coma inducido”.

Y es que no se tiene idea de qué químicos aspiró Nacho.

El abogado de la familia, Hugo Valencia, lamentó que las empresas de entretenimiento y de bebidas que auspiciaron la fiesta, hayan mentido al salir ante la opinión pública diciendo que se están haciendo cargo de todos los gastos médicos, cuando en el caso de Nacho ni siquiera se han acercado.

Asimismo confió en que la justicia de Guanajuato deslinde responsabilidades y se aplique la ley, porque por ahora la PGJ está haciendo sus pesquisas.

 
(ZOCALO/ Proceso/ 20/06/2013 - 10:33 PM)

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