La amenaza que
representa para el estado de Chihuahua el fenómeno de sequía, podría encontrar
en proyectos universitarios una alternativa en busca de salvar las cosechas en
el campo.
Cuando menos eso
creen alumnos y docentes de la Universidad Tecnológica de Ciudad Juárez (UTCJ),
quienes desde hace ocho meses, trabajan en un prototipo de invernadero a escala
que reproduce las condiciones climáticas adecuadas para el cultivo de plantas.
Su perseverancia,
señalan, mantiene actualmente a cinco jóvenes juarenses estudiantes de
ingeniería, compitiendo en un concurso nacional sobre proyectos ecológicos.
Esto, además,
representa una opción para los agricultores chihuahuenses que han visto
devastadas sus cosechas a consecuencia de la falta de agua en la región,
aseguraron especialistas de la Universidad. Bajo el nombre “Invernadero
Automatizado TAG”, el proyecto universitario sostiene su fuerza tecnológica en
un sistema de automatización capaz de regular la temperatura y humedad de un
área de cultivo controlada.
“Con este proyecto
se puede sembrar tomate, chile, fresas y hasta algodón, cualquier semilla que
se preste a la agricultura”, dijo Gerónimo
Sosa, profesor de mecatrónica de la UTCJ y docente encargado de instruir a los
alumnos en su modelo a escala.
De acuerdo con la
Comisión Nacional del Agua (Conagua), la mayoría de los municipios del norte de
Chihuahua enfrentan una sequía “severa” que mina las cosechas ante la falta de
riego. Esto, según el último reporte del Programa Nacional Contra la Sequía,
del Gobierno federal, con fecha de marzo del 2013.
El prototipo de un
metro y medio de largo, 80 centímetros de ancho, por 75 cm de alto, es capaz de
controlar plagas que pudieran representar un peligro para el cultivo como:
mosquitos y bichos; además de regular las cantidades de agua, aire e
iluminación, aseguró Sosa.
“Ecológicamente
hablando es un muy buen proyecto para el aprovechamiento del agua en la región,
aparte de que se pueden aprovechar al máximo las energías artificiales”, dijo
una de las coordinadoras de carrera de la UTCJ.
Vía telefónica desde
la Ciudad de México, la Universidad local fue notificada el viernes pasado
sobre su pase a las rondas eliminatorias que organiza la empresa Cleantech
Challenge México 2013, donde el premio para el ganador asciende a 250 mil
pesos.
“El concurso es un
escaparate para los proyectos, independientemente si se gana el concurso o no,
el trabajo de los jóvenes es observado por empresarios que podrían interesarse
e invertir”, señaló por su parte Luis Acosta Aguirre, coordinador de la
Incubadora de Empresas de la Universidad Tecnológica de Ciudad Juárez.
Lo que comenzó como
un proyecto escolar, ahora se cristaliza en un modelo potencial de “energías
verdes”, añadió.
Uno de los
profesores explica: “el invernadero tiene varias características que le
permiten regular la temperatura de
acuerdo a su entorno; cuando el ambiente
es muy húmedo cierra y abre sus domos.
Además, cuenta con
sistema de irrigación, ventilación, control de humedad, control temperatura y
calefacción automática, detalla.
“Esta tecnología
puede ser de utilidad para una empresa agrícola que se enfrente a las
condiciones áridas de la región, dijo Sosa.
En su última visita
a Ciudad Juárez, el gobernador del estado César Duarte Jáquez, manifestó que
las condiciones climáticas mantienen en alerta a los agricultores. Inclusive,
mandó a la Federación una declaratoria de emergencia para los 67 municipios de
Chihuahua.
Para el equipo de
profesores universitarios el entorno “adverso” obliga a que el gobierno le
apueste a proyectos locales y no gastar en trabajos extranjeros que no
garantizan resultados, señalaron.
Con una inversión de
cinco mil pesos, el prototipo de invernadero busca competir contra 63 equipos
en todo el país, al demostrar sus alcances tecnológicos en la conservación de agua, a través de
sensores que automáticamente identifican las temperaturas idóneas para el
cultivo, dijo Acosta.
Cleantech Challenge
México (CTCM), es un concurso creado para promover la creación de empresas y
“empleos verdes” en México, proveer capacitación para el desarrollo empresarial
y obtener financiamiento para proyectos de tecnología limpia, especifica la
empresa en su sitio de Internet.
Los patrocinadores
de la cuarta edición del certamen pretenden identificar proyectos susceptibles
de inversión nacional y extranjera, por un monto de 20 millones de dólares,
cerca de 240 millones de pesos, refirieron organizadores.
Uno de los
beneficios que obtienen los competidores es la capacitación que recibe los
alumnos de ingeniería sobre los últimos avances de tecnologías, informó la
Incubadora de Empresas de la UTCJ.
El arranque de las
eliminatorias esta pactado para el 6, 7 y 8 de junio en una de las cinco sedes
regionales que son: Monterrey, Guadalajara, Irapuato, Puebla y Ciudad de
México.
En las rondas de
competición se enfrenarán cara a cara los equipos, hasta llegar a cuatro
finalistas. En el concurso también participa un proyecto de la ciudad de
Chihuahua, comunicó personal de la empresa radicada en la capital del país.
Dicho proyecto universitario
consiguió su lugar entre más de mil participantes de todo el país, que
presentaron en marzo sus proyectos sobre energías renovables y que disputarán
la final el 3 de octubre.
Según la Norma
Mexicana para el Diseño y Construcción de Invernaderos, (NMX-E-255-CNCP-2008),
un invernadero es una construcción agrícola de estructura metálica, usada para
el cultivo y/o protección de plantas, que no permite el paso de la lluvia al
interior y que tiene por objetivo reproducir o simular las condiciones climáticas
más adecuadas para el crecimiento y desarrollo de las hortalizas cultivadas en
su interior, con cierta independencia del medio exterior y cuyas dimensiones
posibilitan el trabajo de las personas en el interior.
En diez etapas, los
jueves calificarán el proceso de cada proyecto, así como la sustentabilidad de
su modelo de negocios, explicó la empresa Cleantech Challenge México.
(El Diario/
Francisco J. Chávez/ 2013-05-18 | 23:08)
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