Enfrentados
a muerte en su tierra, ahora se verán las caras en una corte de Chicago
El
Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ), tendrá en Vicente Zambada
Niebla el Vicentillo y en Jesús Reynaldo Zambada García, el Rey, a dos de sus
testigos protegidos para que se careen con Alfredo Beltrán Leyva, el Mochomo,
una vez iniciado el juicio, el cual se espera que se defina el próximo 28 de
septiembre en una corte federal de Chicago.
Sería
la primera vez que dos capos de alto rango del Cártel de Sinaloa se vean las
caras en una corte estadunidense, y las acusaciones que tendrían que confirmar
los Zambada ante el Mochomo van desde su forma de operar cuando estaba a cargo
de la plaza de Culiacán, lo mismo que la forma en que sobornaba a altos mandos
policiacos del estado, incluyendo un ex gobernador de Sinaloa, además de una
serie de ejecuciones dirigidas por el acusado en la capital de esa entidad.
Andrea
Goldbarg, asistente de la Sección de Antinarcóticos del USDOJ, aseguró en un
carta dirigida al juez Richard J. León que no sólo cuentan con los testimonios
de los testigos protegidos que incluye a Juan Carlos Ramírez Abadía, el
Chupeta, y otros capos del Cártel del Norte del Valle de Colombia, sino que
también se tienen llamadas grabadas, fotografías y vídeos.
Eduardo
Balarezo, abogado de Beltrán Leyva, dijo que ellos no temen a los testigos
protegidos que tiene el USDOJ, porque tendrían que probar cada acusación, y que
evidentemente, desean intimidar a la defensa con pruebas que no tienen.
“Ellos
(los fiscales), están basando todas sus acusaciones en testimonios, pero si
dicen tener todo eso, que inicie el juicio; en cambio siguen retrasando el
inicio del proceso judicial”, expuso Balarezo, en entrevista telefónica con
Ríodoce.
La
últimas dos audiencias preliminares han sido pospuestas a petición de la
fiscalía, liderada por Goldbarg, según consta en documentación del USDOJ, y se
prevé que el motivo de esa demora es juntar más evidencias contra Beltrán
Leyva, y posiblemente incluir a más
testigos protegidos para que se careen contra el acusado.
Entre
ellos podrían estar Serafín Zambada Ortiz, Rodrigo Aréchiga Gamboa el Chino
Ántrax, incluso, Ismael Zambada Imperial, el Mayito Gordo, quien está próximo a
ser extraditado.
DE COLOMBIA A SINALOA
El
narcotraficante colombiano Ramírez Abadía, Chupeta, era uno de los principales
traficantes de droga en Colombia al momento de ser detenido en Sao Paulo
Brasil, en agosto de 2007, pocos meses antes de que el Mochomo también fuera
arrestado en Culiacán por elementos del Ejército Mexicano.
Según
la fiscalía estadunidense, el Chupeta será pieza clave en el juicio contra
Alfredo Beltrán, ya que el primero le proveía fuertes cargamentos de cocaína al
segundo, que a su vez coordinaba para que llegaran a Estados Unidos.
En
abril del 2008, el Chupeta fue sentenciado a 30 años de cárcel en EU, pero gracias
a una serie de negociaciones y de testificar contra otros capos colombianos,
Ramírez Abadía logró que le redujeran la sentencia cinco años; ahora que el
Mochomo iniciará juicio, logró una nueva negociación con Andrea Goldbarg y el
resto de los fiscales para testificar contra él, y reducir nuevamente su
condena.
Vicente
Zambada Niebla, otro de los testigos protegidos que el USDOJ empleará para
declarar contra Alfredo Beltrán Leyva, se declaró culpable en abril de 2014, y
a partir de ese día fue removido del sistema penitenciario de Estados Unidos.
El
Vicentillo habría entrado a un nuevo nivel, y en vez de declarar la guerra a
Estados Unidos, llegó a acuerdos con ellos que, en teoría, no perjudicaban a
nadie: seria testigo protegido y residiría en una casa de seguridad en Estados
Unidos, pero a cambio, tendría que estar listo para cooperar con la DEA y
carearse con otros capos del Cártel de Sinaloa que fueran extraditados.
Se
desconoce si anteriormente cooperó con los fiscales y con la DEA, a quienes les
habría soltado todo tipo de información respecto a la forma que opera el Cártel
de Sinaloa, aunque según publicó Proceso en su edición de noviembre de 2014,
filtró información para que la Marina detuviera a Joaquín Guzmán Loera en
febrero de 2014, en Mazatlán.
Otro
de los capos que testificarán contra Alfredo Beltrán, según fuentes de Ríodoce,
es Reynaldo Zambada García, quien con su declaración robustecería los
testimonios que hagan el Chupeta y el Vicentillo.
A
diferencia de Zambada Niebla, el Rey Zambada se cree que nunca cayó a prisión
al momento de ser extraditado, en abril de 2012, sino que inmediatamente fue
puesto en la lista de testigos protegidos, lo cual vendría a fortalecer una
teoría de que Estados Unidos hizo acuerdos con él, desde que se encontraba
preso en una prisión de máxima seguridad, en Matamoros, Tamaulipas.
Hay
un testigo protegido que colabora con la fiscalía estadunidense de quien se
desconoce el nombre, y quien aparentemente tenía un contacto muy estrecho con
un alto mando policiaco de Sinaloa, a quien el Mochomo habría sobornado en
repetidas ocasiones.
Según
asegura el expediente número CR-12-184-01, el acusado llegó a sobornar a un ex
jefe de la Policía Municipal de Culiacán, a un jefe de la Policía Ministerial
del Estado, y a un ex gobernador de esta entidad, así como el intento de
soborno hacia un general asignado a la Novena Zona Militar de esta ciudad.
Mientras
el abogado Balarezo dijo desconocer quiénes eran los testigos protegidos, y
menos quienes es el ex gobernador de quien se habla, la fiscalía dijo por su
parte que no daría más información de la que estaba escrita en los expedientes,
aunque adelantó que todo ello saldría a la luz pública una vez iniciado el
juicio.
Además
del Rey Zambada y del Vicentillo, otros integrantes del Cártel de Sinaloa que
han logrado acuerdos con el gobierno de Estados Unidos a cambio de una
sentencia menor son Rodrigo Aréchiga, Humberto Loya Castro y Ovidio Limón,
entre otros.
Alfredo
Beltrán Leyva es acusado de introducir drogas a Estados Unidos, y de una serie
de homicidios ocurridos fuera de su territorio jurisdiccional, incluso el de
Julio Cesar Beltrán Quintero, el cual la misma fiscal Goldbarg había acusado
previamente a Ismael el Mayo Zambada, y al Chapo Guzmán.
Ciertamente
la defensa del Mochomo explicó que todo eso sería tomado en consideración, y
que ellos estaban ya dispuestos a iniciar el juicio.
“Queremos
iniciar ya porque mi cliente tiene ya desde el 2008 en prisión, y consideramos
que es mucho tiempo el que se le ha castigado, y queremos ver eso ante un juez
lo más pronto posible”, sostuvo el abogado.
Tras
la detención de Alfredo Beltrán Leyva, el gobierno de Estados Unidos solicitó
la extradición, misma que fue concedida por México el 26 de noviembre de 2013,
según documentos de la PGR.
Beltrán
Leyva trató de evitar ser enviado a Estados Unidos tramitando un juicio de
amparo, pero éste le fue negado en octubre pasado.
(RIODOCE/
Investigaciones Ríodoce en 20
septiembre, 2015)
No hay comentarios:
Publicar un comentario