Se recrudece
violencia en Mexicali
Autoridades
ocultan información
Desde el 10 de mayo
de 2014 se desconoce el paradero de un agente ministerial y un policía estatal,
la Procuraduría clasificó la ausencia como “desaparición”, pero no emitió una
alerta de búsqueda. Existe una versión extraoficial relacionada con droga, mientras
la procuradora Ibarra y el secretario De la Rosa se niegan a hablar del tema
Como mínimo, extraña
la reacción de los miembros del Consejo Estatal de Seguridad de Baja
California.
Dos elementos de las
fuerzas de seguridad desaparecieron desde el sábado 10 de mayo de 2014, y las
entidades a las que pertenecen poco han hecho por encontrarlos, mientras las
familias reclaman justicia y acciones.
Todavía más: la
Secretaría de Seguridad Pública del Estado y la Procuraduría han decidido, en
coordinación, ocultar información.
Se les preguntó si
tenían conocimiento de que los agentes desaparecidos hubieran sido detenidos
por el Gobierno Federal o el de Estados Unidos, pero también se negaron a
responder respecto a esa posibilidad.
Asimismo, se les
cuestionó por qué si solo se les considera como “desaparecidos”, no emitieron
una alerta oficial de “se busca”, como sucede en otros casos de personas
perdidas. Tampoco hubo respuesta.
El tratamiento de
las desapariciones de sus elementos, ha sido sospechosamente distinto a lo
acostumbrado por ambas entidades. Hoy viernes 24 de mayo se cumplen 13 días de
que nadie sabe del paradero de los dos policías.
Por la denuncia de
las familias, sus compañeros de tropa y las primeras indagatorias, se pudo
saber que Juan Ramón Flores Paredes, policía ministerial de 31 años y Carlos
Armando García Ortega, de 35 y policía estatal preventivo, abordaron juntos un
auto Mustang negro, placas BHD1946, propiedad de uno de los agentes, según sus
compañeros del ministerial, mas no precisan la hora.
Cabe agregar que
mientras la familia asegura que desaparecieron el 10 de mayo, las autoridades
manejan que fue el 11 de mayo. Ambos solteros, no informaron a sus padres del motivo
de la reunión y la salida, pero la familia se preocupó por ello y, debido al
trabajo que tienen, decidieron poner la denuncia el lunes 12 de mayo.
Ese mismo día se
supo que las autoridades habían localizado el vehículo Mustang en las
inmediaciones de La Bufadora, en el
Ejido Esteban Cantú. La Policía Municipal reportó que había ordenado levantarlo
con una grúa, una horas antes la madrugada del lunes, con una extraña
eficiencia, ya que el vehículo no tenía ni 48 horas estacionado en el área.
Es todavía más
extraño porque algunos investigadores cuestionados al inicio de la indagatoria,
explicaron que en el auto no se encontraron rastro de violencia o forcejeo, que
todo indica que los jóvenes lo dejaron bien estacionado, lo cerraron y se
fueron. Como parte de la averiguación, se mencionó públicamente que también se
investiga otro vehículo sedán gris con placas de California, pero no informaron
donde lo ubicaron, ni la identidad del dueño.
LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN, DIFUSAS
Residentes de la
zona de donde desaparecieron los dos agentes fueron entrevistados, pero la
respuesta fue que no vieron nada, solo el auto extraño que amaneció en el área.
Las líneas de
investigación que se siguen extraoficialmente:
1. El caso de
ministeriales que recientemente “bajaron 3.4 toneladas de marihuana” -refieren
en la corporación-, la indagatoria se concentra en las últimas acciones del
agente ministerial y su posible participación en tales actos. Sin embargo,
oficialmente para los investigadores, se trata de dichos internos, no existe
ninguna declaración o información adicional que valide las sospechas.
Consultada al
respecto, la madre de Flores rechazó la posibilidad de que su hijo estuviera
metido en problemas de corrupción o drogas.
2. En las primeras
horas de la investigación, personas cercanas al ministerial refirieron el
nombre de un sujeto llamado “Víctor” que había tenido problemas con el agente
Flores y lo había amenazado. Las
autoridades se negaron a proporcionar el nombre completo.
Las corporaciones
estatales fueron alertadas y el hombre fue plenamente identificado e
intervenido para interrogarlo el 12 de
mayo, cuando dieron con él, lo revisaron y encontraron que estaba en posesión
de dos armas de fuego. No se informó del
calibre, solo que fue remitido al Ministerio Público por la posesión.
Al ser entrevistado,
“Víctor” reconoció haber tenido problemas con el oficial de la PGJE, con quien
salió mal por algunos malentendidos, pero aseguró que no lo había visto recientemente, ni le había
hecho daño.
3. En internet, la
familia remitió un mensaje al programa de la presentadora Laura Bozzo,
asegurando que habían dado con el lugar donde los tenían privados de la
libertad, pero como informaron a la Policía, los presuntos delincuentes
abandonaron el sitio, donde solo encontraron sangre.
EXPEDIENTES Y AMISTADES
Una semana después
de la desaparición, desde la Procuraduría General de Justicia del Estado sale
la versión de que Ramón Flores no tiene un historial del todo limpio; la Visitaduría
investiga algunas denuncias en su contra, sin embargo, se niegan a especificar
el tipo de falta o delito del que se le acusó, los cuales no tienen que estar
ligados a crímenes o corrupción, pueden ser faltas administrativas.
En el caso del
policía estatal preventivo, García Ortega, ni tiene ni ha tenido pendientes
abiertos con Asuntos Internos, solo lleva poco más de un año en la corporación
y está asignado al área de Investigación Preventiva, Inteligencia. No había
participado en casos recientes de impacto porque apenas regresaba de un curso.
Sin embargo, el área
de Inteligencia es la que trabaja en la búsqueda, ubicación y captura de los más de 60 objetivos que tiene la
Secretaría de Seguridad Pública del Estado,
hombres y mujeres involucrados con el crimen organizado.
Este joven era
calificado como serio en el trabajo, pocos de sus compañeros pudieron hacer
referencias “porque socializa lo mínimo al interior de la PEP”.
De hecho, sus
primeros puntos negativos los empezó a recibir a partir de la desaparición,
pues pese a la denuncia interpuesta por su familia, el área de administración
está levantando actas por cada una de las faltas que el elemento ha tenido a su
servicio desde el lunes 12 de mayo, ausencias
que pueden provocar que cause baja. Es decir, no lo buscan oficialmente, le
ubican las inasistencias para darlo de baja.
Respecto a su
relación con el ministerial, existen versiones diversas, desde que eran amigos
de la infancia, hasta los que aseguran que se reunían poco a tomar una cerveza
de vez en cuando porque el PEP “no era parrandero”.
En cuanto a las
amenazas, García no comentó nada, ni a familias ni a compañeros de trabajo, y
Flores solo tenía el antecedente de “Víctor”, el hombre que salió libre bajo
fianza por las armas.
ANGUSTIOSA ESPERA DE FAMILIARES
Días eternos, es lo
que dicen vivir familiares de los dos agentes desaparecidos en Ensenada, luego
de que han transcurrido 12 días desde su desaparición.
El hermetismo de las
autoridades estatales, y la poca información de avances en la localización de
sus propios elementos, ha mantenido a las dos familias entre el sufrimiento, la
desesperación y la molestia.
Sin información
sobre su paradero, sus familiares imprimieron lonas que fueron colocadas en
distintos puntos de la ciudad, pagadas por ellos, y que hasta el jueves 22 de
mayo, han sido la única referencia pública con sus rostros.
Otros familiares
cercanos buscaron dar a conocer el caso a través de las redes sociales.
Dirigieron mensajes a programas de televisión, como el de Laura Bozzo en
Televisa, el 19 de mayo. En su página de Facebook aparece lo siguiente:
“Laura Bozzo por
favor ayúdanos somos una familia Muy desesperada por encontrar a mi primo Juan
Ramón Flores Paredes de 31 años agente ministerial Quien desapareció el día 10
de mayo 2014 A la 1 am ... junto con su compañero Carlos Armando Gracias Ortega
de 35 años Quien era policía estatal preventivo Ya fuimos con medio mundo Hasta
con el gobernador Kiko Vega y hemos sido ignorados las investigaciones van
demasiado lentas y muy misterioso todo al parecer el mismo levantón se lo
dieron los compañeros .. Ya va 1 semana 2 días en Ensenada Baja California y no
nos han sabido dar respuesta de nada sarita. Laura por favor ayúdenos estamos
desesperados ayúdenos y si fuera su hija hoy por mi familia mañana por la suya
se lo pido de corazón ayúdenos no podemos más con este sufrimiento no sabemos
si vive o muere sólo dimos con donde los tenían y la misma policía esta columna
por que les avisaron llegamos y no estaban sólo había sangre y cosas con los
que los están torturando!!”.
Los familiares de
los desaparecidos no han querido proporcionar más detalles públicamente. Temen
que ello pueda poner en riesgo su vida, y mantienen la esperanza de que puedan
aparecer. Esperan, y tienen fe en ello.
“La vida de mi hijo
pende de un hilo, no te puedo decir más”, explicó la señora Eloína Paredes, madre
del agente ministerial, cuando ZETA intentó entrevistarla al respecto.
“Solo le pido a la
gente que vean las lonas, que si los ven en la calle nos avisen... de la
autoridad, qué te puedo decir...”, comentó.
La angustia que ella
mismo dijo sentir, como madre, era evidente en su rostro.
Los padres del
policía estatal son muy religiosos, y lo único que han manifestado es su fe en
que Dios cuide a su hijo porque “…es un muchacho bueno y Dios lo va a cuidar”.
Las dos familias
tienen miedo de hablar, ya que piensan que cualquier dato que den a la prensa,
arriesgaría la vida de los agentes.
De la negativa
Durante la primera
semana, la investigación estuvo a cargo de la Subprocuraduría de Zona en
Ensenada, y la única información pública que se dio, fue reconocer que los
agentes estaban desaparecidos, la ubicación del auto y los antecedentes
negativos en la Visitaduría del ministerial Flores Paredes.
Contrario a lo que
ha sucedido en otros casos relevantes,
como los homicidios del ejidatario Pablo Francisco Arce Mayoral y el empresario
Jaime René García Arteaga en Rosarito, y a pesar de tratarse de un elemento de
su corporación y otro de la Secretaría de Seguridad del Estado, la procuradora Perla Ibarra no instruyó a la
Subprocuraduría contra la Delincuencia Organizada que acompañara el caso desde
el principio.
El expediente pasó a
esta área hasta el martes 20 de mayo, diez días después de la desaparición, a
donde llegó porque en la Subprocuraduría porteña no avanzaba. Y empezaron de
cero, regresaron a entrevistar a los familiares.
ZETA solicitó
entrevista con la procuradora Ibarra y con el secretario de Seguridad, Daniel
de la Rosa Anaya, para que respondieran por la forma extraña en que se ha
llevado la investigación por denuncia de la desaparición de los miembros de sus
corporaciones, pero ambos se disculparon.
Se preguntó cómo era
posible que elementos a su cargo estuvieran desaparecidos sin que hicieran un
posicionamiento, pero ambos funcionarios solo contraargumentaron, a través de
sus áreas de prensa, que estaban trabajando activamente desde el principio en
el caso, y que el sigilo de la indagatoria no les permitía aportar mayores
datos.
REGRESA VIOLENCIA A LA CAPITAL DEL ESTADO
A estos actos
violentos suscitados en el puerto bajacaliforniano, se suma una jornada
sangrienta que a partir del viernes 16 de mayo sucede en Mexicali. Se trata
de homicidios y agresiones hacia
taxistas, quienes no descartan la llegada de un nuevo grupo delictivo a la
capital del estado.
Destacan que entre
el sábado 17 y el domingo 18 de mayo, fue agredido otro agente de la Policía
Ministerial cuando se encontraba degustando en un bar de la localidad, de
manera extraoficial se apunta que los hechos pudieran estar relacionados con el
tema pasional, aunque la autoridad no ha informado al respecto.
El agente notificó
que su vehículo oficial, un pick-up color gris, fue incendiado, por lo que
actualmente se encuentra baja investigación; de manera extraoficial, al hombre
se le señala como escolta del comandante de la Policía Ministerial.
Pero la estela de
sangre reinició durante las primeras horas del viernes 16 de mayo, cuando fue
localizado el cuerpo de una persona identificada como Édgar Misael Pacheco, de 20
años de edad, quien se encontraba tirado en un lote baldío de la colonia
Huertas de la Progreso, al Poniente de la ciudad.
Pacheco tenía
historial delictivo relacionado al robo de autos en la zona, su cuerpo
presentaba al menos dos heridas de bala calibre .32 y huellas de violencia en
el cuello.
Según testigos
entrevistados por la Procuraduría estatal, el joven se encontraba amenazado de
muerte por un mal negocio en la compraventa de vehículos robados, a lo que
supuestamente se dedicaba.
El sábado 17 de mayo
perdió la vida Raúl Alexis González Medina, de 19 años, luego de que fuera
atacado por varios hombres cuando se dirigía a comprar cerveza a un
autoservicio de la colonia Hacienda de los Portales.
Pese a que en
diversos medios de comunicación responsabilizaron a un grupo autodenominado
como “Los Quemados”, la información pericial, así como las investigaciones de
la PGJE, señalan como robo la línea más fuerte en torno al homicidio, incluso
un testigo refirió esta situación.
Fue en ese momento
luego de una pequeña discusión que uno de los presuntos pandilleros le disparó
al menos en tres ocasiones, según las versiones preliminares, posteriormente
dejaron el cuerpo ensangrentado para tomar la Avenida Colegio Militar.
Luego de un
operativo policiaco fueron detenidos los de nombre Juan Ramón “N”, Raúl “N” y
Juan José “N”, a quienes se vincula con el homicidio de González Medina.
Datos recabados por
la autoridad señalan que el occiso no contaba con antecedentes ni
investigaciones pendientes.
Ese mismo día se
localizó el cuerpo de Gerardo Vega Nolacea, de 47 años, quien se encontraba
trabajando como taxista cuando al terminar su jornada laboral, se fue a su casa
en la colonia El Cóndor, ahí se percató que dos personas de aspecto “cholo”
-según la referencia de la autoridad- intentaron robar el vehículo.
Vega Nolacea fue
recibido con una piedra en el rostro, misma que calló dentro del vehículo,
luego de avanzar algunos metros, otro de los agresores los golpeó con otra
piedra en la nuca, que fue la causa de muerte.
Un investigador de
la PGJE afirma que se trató de un robo de vehículo, sin relación con otros
ataques a choferes de taxis.
Durante el sábado 17
y el domingo 18 de mayo, otros tres taxistas de diferentes compañías de
transporte fueron agredidos en la colonia Los Olivos.
El primer hecho se
presentó cuando el conductor de radiotaxi de la unidad 270 de la empresa
TaxiCom, terminó de dar el servicio a dos sujetos, quienes lo amarraron y
golpearon en repetidas ocasiones, para dejarlo abandonado sin la unidad.
El vehículo se encontró
incendiado a las pocas, en un lote abandonado de la colonia Los Olivos.
Al día siguiente,
otro conductor de radiotaxi, de la empresa TaxiPlus, fue atacado por tres
sujetos que previamente le habían solicitado un servicio cerca de la Línea
Internacional con Estados Unidos, al Norte de la ciudad.
El joven de 20 años
de edad recibió varios golpes, sin embargo, logró escapar de sus agresores y
cruzó hacia Estados Unidos para pedir apoyo, pero fue detenido por la Patrulla
Fronteriza. Nuevamente el vehículo se localizó a las pocas horas en el mismo
lote baldío donde se localizó la unidad 270 de TaxiCom.
Aún se encontraba el
operativo policiaco de vigilancia cuando otro chofer de la empresa Taxi Sol fue
agredido por las mismas tres personas, el vehículo se encontraba en los
alrededores de la misma colonia.
Un líder de
radiotaxistas no descarta que se trate de un intento de algún nuevo grupo
delictivo que intente cobrar piso, la persona indicó que en ninguno de los
ataques les retiraron pertenencias a los choferes, más bien fue un aviso.
Indicó que mandaron
hacer una lona, la cual pretenden colocar en el Ayuntamiento de Mexicali para
presionar a las autoridades a investigar los hechos, además de que les
proporcionen seguridad.
Afirmó que el jueves
pasado se presentó un intento de asesinato de otro de sus compañeros, de la
empresa de radiotaxis Ecotaxis, en Plaza Galerías, por lo que en menos de cinco
días quemaron tres vehículos sin robarles nada.
Asimismo, el
consultado señaló que hace cuatro años un jefe de la Policía Federal, quien
había llegado recientemente de Tamaulipas, intentó cobrar piso a los
radiotaxistas, sin embargo, en ese momento el diputado local Marco Antonio
Vizcarra fue notificado de los hechos y pudo evitarse.
Por su parte, el
titular del Sistema Municipal de Trasporte, Rafael Morgan, se limitó a lamentar
los hechos de violencia contra los conductores, pero se deslindó de las
investigaciones, al argumentar que a la dependencia solo le corresponde
“regular el servicio de transporte”.
Según Morgan,
existen diversas denuncias de que pudieran existir 100 taxis clonados
trabajando por la ciudad, aunque muchos de éstos pertenecen a la zona Valle, y
se aprovechan de que la numeración es idéntica a la que se utiliza en la
ciudad. Hasta el momento solo se han localizado dos unidades con estas
características.
El lunes 19 de mayo
continúo la violencia, cuando Alicia Méndez Villegas, de 32 años, fue ejecutada
después de una supuesta riña con varias mujeres
por una pequeña cantidad de droga.
Méndez presentaba
varios impactos de bala en la cabeza y pecho, fue localizada aún con vida en la
colonia Flores Magón, e inmediatamente se le trasladó al Hospital General de
Mexicali. Sin embargo, por la gravedad de las heridas falleció antes de llegar
al lugar. Entre sus pertenencias se localizaron varias dosis de la droga
denominada cristal.
La mujer falleció
por disparos de arma de fuego calibre .25, utilizada principalmente por
mujeres, informó uno de los investigadores del caso.
Méndez Villegas
tenía varias actas por narcomenudeo, principal línea de investigación en su
asesinato.
OTRO TAXISTA EN TIJUANA
Pasadas las siete de
la noche del miércoles 21 de mayo, en la Avenida de Las Rosas en Colonia
Colinas de Agua Caliente, Manuel Lorenzo Cisneros Leyva, de 31 años y chofer de
un taxi libre, fue atacado a balazos, presuntamente desde un auto sedán rojo,
mientras ambos iban en circulación.
El ataque fue
directo y sin intención de robo, los homicidas se dieron a la fuga
inmediatamente después de la balacera, mientras el taxi con el conductor muerto
continuó en movimiento hasta impactarse. Los hechos iniciaron un operativo de
la Policía Municipal de Tijuana, que concluyó con la captura de dos sospechosos
sobre el Bulevar Cucapah.
Los detenidos son
Eduardo Briseño Morales, ex policía municipal de Tijuana que también tiene los
alias de Pablo Eduardo Salinas y Pedro Gutiérrez Silva, presunto autor
intelectual del ataque; además de Manuel Villanueva Medina, presunto autor
material.
Los dos fueron
remitidos al Ministerio Público del Fuero Común, en posesión de un arma.
Conforme a los
reportes periodísticos, Villanueva había sido detenido en febrero de 2010 por
elementos del Ejército Mexicano en Tijuana, quienes lo presentaron como parte
de una célula criminal de siete hombres que delinquían para Manuel García
Simental “El Chiquilín” e Israel Cruz
“El Tomate” .
Sin embargo, los
expedientes de las áreas de Inteligencia del Grupo Coordinación, lo
ubicaban hasta la balacera de abril de
2008 en El Cañaveral, como parte de la guardia del Cártel Arellano Félix.
Al cierre de esta
edición de ZETA, la PGJE no había confirmado si los detenidos tenían relación
con el homicidio.
RETIRAN CERTIFICACIÓN CALEA
Por falta de pago,
la Comisión de Acreditación para Agencias de Aplicación de la Ley (CALEA, por
sus siglas en inglés) retiró la certificación la Dirección de Seguridad Pública
de Mexicali, pese a que se encuentra avalada hasta 2016.
El retiro se dio por
el incumplimiento de contrato, el cual especifica que se debe cubrir una cuota
anual por la certificación.
Sin abundar
detalles, Lorena P. Singer, mánager regional del programa, corroboró esta
información en un escrito directamente enviado de su correo electrónico: “En
respuesta a su solicitud para información en el presente, la DSPM de Mexicali
no está en proceso con CALEA”.
Una fuente de la
propia DSPM de Mexicali afirmó que durante 2013, la corporación policiaca no
cumplió con el pago correspondiente de la cuota a la organización
estadounidense, por lo que en los primeros meses del año fueron advertidos de
la situación.
El ex director de la
corporación policiaca, José Ramírez Cardoso, habría terminado la relación con
CALEA, sin embargo, luego de que Alejandro Monreal asumiera la titularidad de la
dependencia, se reinició el diálogo con la acreditadora; sin embargo, el
funcionario habría pedido tiempo para poderlo integrar al Plan de Desarrollo
Municipal y así presupuestar 2013.
(SEMANARIO
ZETA/ Investigaciones ZETA/ 28 de Mayo del 2014 a las 20:00:00)
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