* Militar retirado se pega un tiro
* Vivía agobiado por una enfermedad
* Vivía agobiado por una enfermedad
FEDERICO GARCÍA
Un militar retirado se suicidó pegándose un balazo en la cabeza en su casa del Fraccionamiento La Tampiquera, municipio de Boca del Río, la PGJE investiga las condiciones en que ocurrió la tragedia.
A las 15:40 horas de este viernes, la Central de Emergencias C-4 reportó un incidente en una residencia de la calle Paseo Boca del Río número 37 entre Catemaco y San Andrés Tuxtla, Fraccionamiento La Tampiquera.
Cuando los marinos de la Policía Naval arribaron al inmueble donde opera una ferretería con razón social “La Tampiquera”, fueron notificados que se trataba de un suicidio con arma de fuego.
A pesar del hermetismo de las corporaciones policíacas, se estableció que el suicidio había ocurrido en el baño de la residencia y que la víctima había sido un hombre de 75 años, enfermo.
Se confirmó que la víctima fue identificada como Eduardo Antonio Bravo y Peredo, Teniente de Navío retirado, quien agobiado por una enfermedad se pegó un balazo en la cabeza mientras estaba en el baño de la residencia.
Autoridades de la PGJE, que acudieron para realizar el levantamiento del cadáver, habrían asegurado el arma que usó el militar retirado para quitarse la vida pero se desconocen las características.
Un militar retirado se suicidó pegándose un balazo en la cabeza en su casa del Fraccionamiento La Tampiquera, municipio de Boca del Río, la PGJE investiga las condiciones en que ocurrió la tragedia.
A las 15:40 horas de este viernes, la Central de Emergencias C-4 reportó un incidente en una residencia de la calle Paseo Boca del Río número 37 entre Catemaco y San Andrés Tuxtla, Fraccionamiento La Tampiquera.
Cuando los marinos de la Policía Naval arribaron al inmueble donde opera una ferretería con razón social “La Tampiquera”, fueron notificados que se trataba de un suicidio con arma de fuego.
A pesar del hermetismo de las corporaciones policíacas, se estableció que el suicidio había ocurrido en el baño de la residencia y que la víctima había sido un hombre de 75 años, enfermo.
Se confirmó que la víctima fue identificada como Eduardo Antonio Bravo y Peredo, Teniente de Navío retirado, quien agobiado por una enfermedad se pegó un balazo en la cabeza mientras estaba en el baño de la residencia.
Autoridades de la PGJE, que acudieron para realizar el levantamiento del cadáver, habrían asegurado el arma que usó el militar retirado para quitarse la vida pero se desconocen las características.
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