Los hechos acontecieron en la colonia J. R. Mijares en el callejón de la Esperanza, según Voceros, el menor Miguel Ángel de 13 años se localizaba solo en su vivienda cuando se disparó en el ojo derecho con una pistola calibre .38 mm.

El Departamento de Homicidios dijo que el caso es considerado como suicidio pero por los indicios que se dejaron cerca del cuerpo aparentemente fue un accidente ya que al parecer el menor intentaba desarmar la pistola ya que tornillos fueron localizados sobre la cama.

La pistola tenía poco tiempo de haber sido adquirida por la familia para seguridad de la misma, ésta antes de que el adolescente la tomara permanecía debajo de una cama.

El jovencito era estudiante de una escuela secundaria; Voceros comentaron que Miguel no dejó una nota póstuma, otro dato que puede ayudar a descartar la posibilidad de un suicidio planeado.