Cada año desertan en promedio 19 mil 500 alumnos del subsistema de
educación básica indígena, mientras que cerca de 72 mil 800 no logran
acreditar el año académico. Rosalinda Morales Garza, titular de la
Dirección General de Educación Indígena (DGEI), destacó que entre los
principales factores de riesgos para el abandono escolar están la
migración por razones laborales, el embarazo precoz y la lejanía para
acudir a los planteles.
En entrevista, detalló que a partir del próximo ciclo escolar
2013-2014 se buscará fomentar la retención del mayor número de
estudiantes de primaria indígena mediante el incremento del número de
escuelas de tiempo completo, donde se garantizará el servicio de
alimentación para los estudiantes.
Asimismo, se dará un fortalecimiento de los apoyos a la equidad e
inclusión educativa, así como a los programas destinados a madres
adolescentes y a estudiantes con sobre edad, que por razones de
migración laboral no han podido concluir su primaria.
Actualmente, dijo, la matrícula del subsistema asciende a 1.3
millones de menores indígenas, aunque se estima que existe una cantidad
igual de inscritos en las diversas modalidades de la educación básica.
Morales Garza reconoció que la mayoría de los planteles de educación
indígena se ubican en las comunidades con menor índice de desarrollo
humano en el país, las cuales son expulsoras de población por razones
laborales.
De acuerdo con cifras de la DGEI, actualmente cuentan con 9 mil 778
planteles de prescolar indígena, donde se atiende en promedio a poco más
de 383 mil menores, y 10 mil 200 escuelas primarias, con una matrícula
de 841 mil 151 alumnos.
Sin embargo, su tasa de deserción es de 1.51 por ciento, mientras que
la de reprobación alcanza 5.6 por ciento, y el nivel de eficiencia
terminal se estima en 88.8 por ciento. En cuanto a su cuerpo docente, el
subsistema cuenta con cerca de 60 mil maestros en todo el país.
La funcionaria de la Secretaría de Educación Pública (SEP) destacó
que también se reforzará el apoyo a los niños jornaleros migrantes ,
pues uno de los mayores índices de deserción escolar se presenta en este
sector de la población.
Muchos de los menores indígenas migran para buscar oportunidades
laborales, lo que genera que no en pocos casos tengan extra edad, porque
ellos van y vienen de los campos agrícolas, y desertan porque no
teníamos un sistema para verificar cómo iban avanzando en los distintos
módulos de aprendizaje.
Destacó que a partir del próximo ciclo escolar se buscará fortalecer
el seguimiento de los cerca de 59 mil niños jornaleros agrícolas
matriculados en el sistema educativo nacional, pero también incluir a
aquellos cuyas condiciones socioculturales también requieren de un apoyo
especial, como los que viven en comunidades de pescadores y aquellos
que se dedican a la industria de la construcción y a los servicios
turísticos.
La Jornada
(RIODOCE/ Redacción/ julio 6, 2013)
No hay comentarios:
Publicar un comentario