PUEBLA.- Los cárteles de la
droga controlan 90% de la ordeña de ductos de Pemex con pérdidas anuales
calculadas en 25 mil millones, de acuerdo con Asael Nuche González, director de
Análisis de la consultoría Etellekt.
Según el analista, la
estrategia contra el narcotráfico en el país provocó la fragmentación de los
cárteles del Golfo, Zetas, Pacífico y Jalisco Nueva Generación y que entraran
al negocio de la ordeña de ductos de Pemex, lo que ha traído una escalada del
delito en los últimos años.
Nuche González aseveró que en
lo que va del sexenio ha crecido 260% el número de tomas clandestinas en el
país, la mayoría de ellas controladas por el crimen organizado.
De acuerdo con un análisis de
Etellekt, las pérdidas económicas para Pemex son cuantiosas, pues durante 2014
ascendieron a 9.8 millones de barriles sustraídos ilícitamente, que
representaron una pérdida superior a 19 mil millones de pesos. Adicionalmente,
durante 2013, la empresa reportó que el costo por la reparación de la
infraestructura afectada alcanzó la cantidad de seis mil 543 millones de pesos,
una inversión superior en 1,135% a la realizada en 2008.
En estados donde
anteriormente no destacaban los grupos delictivos ahora ya están presentes,
como Puebla y Guanajuato. Los estados más afectados fueron Tamaulipas,
Guanajuato, Sinaloa, Jalisco, Puebla y Tabasco, en los cuales se detectó 65% de
las tomas a nivel nacional, según Etelleckt.
El fiscal general de Puebla,
Víctor Carrancá Bourget, admitió la presencia de ordeña por parte de Los Zetas.
El funcionario reconoció que este grupo está dedicado al robo de hidrocarburos
y trabaja en la zona del llamado Triángulo Rojo, que comprende los municipios
de Acatzingo, Tepeaca y Palmar de Bravo.
“Es un delito (robo de
combustible) complicado de combatir porque, en este caso, el tramo (del ducto
que corre de Veracruz a la Ciudad de México) atraviesa todo el estado,
normalmente en la noche es cuando se hacen las perforaciones”, dijo.
Al ser interrogado sobre
quiénes son los presuntos responsables de este delito, Carrancá Bourguet dijo:
“Los Zetas. Lo tenemos muy claro. Tuvimos la detención de dos líderes
importantes”.
Sobre el particular, cabe
recordar que en diciembre pasado, elementos de la Secretaría de la Defensa
Nacional (Sedena) y de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) catearon dos
inmuebles vinculados con el grupo de Los Zetas, en la capital de Puebla.
CONCENTRACIÓN
De acuerdo con datos de
Pemex, las tomas clandestinas en ese
estado aumentaron de 49 en 2010 a 825 al cierre de 2015, y están concentradas
en los municipios que cruzan los ductos que van de Veracruz a la Ciudad de México,
donde los municipios de Tepeaca, Quecholac, Acatzingo, Palmar de Bravo y
Tecamachalco han concentrado casi 70% de las 825 tomas clandestinas registradas
en la entidad.
En 2016, la tendencia sigue
al alza, de acuerdo con estadísticas de la paraestatal referentes a enero, pues
en ese mes fueron descubiertas 76, cantidad casi 50% superior a las registradas
el año anterior.
La cuenca del Pacífico y los
ductos por los cuales corre el combustible hacia los centros urbanos han sido
escenario de disputas entre grupos criminales. En Tamaulias, hasta 2014 líder
en tomas clandestinas, el cártel del Golfo y Los Zetas se disputan municipios
como Altamira y Reynosa.
Nuche González afirmó que
dentro de los mismos cárteles hubo escisiones, y ahora bandas independientes
también se llevan su tajada de ordeña: “Son grupos que no responden a un mando
central como los cárteles, surgen del narco, son más violentos y están
disputando esté ilícito”.
De acuerdo con el
especialista, más de 90% de la ordeña pertenece al narco, pero como una forma
de legitimación social dejan las tomas clandestinas al descubierto, en algunos
casos, para que vecinos de las
localidades puedan realizar su propia ordeña, pero el responsable es el crimen
organizado.
TIERRA BLANCA
En Veracruz, los principales
municipios donde se ha suscitado la disputa por la ordeña de hidrocarburos son
Juan Rodríguez Teapa y Tierra Blanca, justo donde el pasado 11 de enero cinco
jóvenes desaparecieron a manos de policías, que los entregaron al crimen
organizado.
En enero pasado, el
gobernador veracruzano Javier Duarte advirtió que la lucha entre los grupos
delictivos en la entidad se da por el control del robo de hidrocarburos y que
la mayor confrontación se registra en la zona centro-sur, ya que genera una
cuantiosa cantidad de ingresos para los criminales.
En Tabasco, el año pasado el
gobernador de la entidad, Arturo Núñez, dijo que detrás del incremento de robo
de gasolina en el poliducto Minatitlán-Villahermosa están los cárteles de la
delincuencia organizada, en particular Los Zetas, que han hecho su imperio en
estas dos entidades, con ganancias millonarias.
“(En el robo) están
involucrados los cárteles, especialmente el de Los Zetas”, afirmó, en una
región dominada por José María Guízar Valencia, el Z 43, y su primo Mauricio
Guízar Cárdenas, el Z 200, El Amarillo, o el Color, jefe de plaza en Guatemala,
Veracruz y el Sureste.
En agosto de 2015 fue
detenido Sergio Meza Flores, El Soruyo,
quien fue considerado como líder de la principal banda del robo de
combustible que opera en la región de La Chontalpa y que pertenece a Los Zetas.
Dos semanas después fue liberado bajo caución gracias a un amparo que le
concedió un juez de distrito.
AUMENTAN OPERACIONES
Sin embargo, el crimen
organizado no se ha conformado con ordeñar ductos. Ricardo Calderón Larios,
presidente de la Unión de Expendedores de Pemex en el estado de Tabasco, Norte
de Chiapas y Poniente de Campeche A.C. (Unexpetab) acusó que las mafias han
optado por robarse las pipas “20 pipas hurtadas tenemos contabilizadas hasta
hace como 15 días”.
El problema se agudiza en la
zona de la Chontalpa, donde hay “230 kilómetros de ductos y éstos tienen 225
piquetes, los cuales Pemex no puede reparar todavía”, acusó.
Explicó que, debido a esto,
el producto tiene que ser trasladado vía terrestre, y es en esos recorridos que
las pipas son hurtadas.
El tema de la inseguridad en
el sector se ha abordado con todas las autoridades “estamos cansados,
desilusionados, hablamos al Ejército para que nos favoreciera, y estuvo nada
más 15 días con nosotros en el robo de pipas y se retiraron”, añadió.
Dijo que, además de la ordeña
de ductos y el secuestro de pipas, el sector está golpeado por los asaltos a
las estaciones, un problema que los tiene contra la pared.
Tan sólo en el primer
bimestre, acusó, se han registrado 600 asaltos “de las 220 estaciones en toda
la región, al menos 200 han sido atracadas hasta tres veces al día”, señaló el
empresario.
En el caso de Oaxaca, la Unión
de Gasolineros del Sureste advirtió la presencia de la delincuencia organizada
dedicada al robo y ordeña de pipas en la ruta de Oaxaca a Salina Cruz.
El presidente del comité
directivo de esa organización de empresarios, Antonio Vera Carrizal, recordó que
en enero de 2015 el atraso en la entrega de la gasolina hizo crisis, cuando
concesionarios de 200 gasolinerías reventaron contra Pemex y las corporaciones
de seguridad, por la falta de garantías a las pipas privadas contratadas para
el flete del combustible.
En esa fecha, el empresario
denunció el robo de tres pipas cargadas de combustible entre los tramos de
Nejapa de Madero a Tlacolula de Matamoros, jurisdicciones correspondientes a
las regiones del Istmo y Valles Centrales.
En Guanajuato, el Cártel Jalisco
Nueva Generación (CJNG) domina. Dicha entidad pasó de 165 a 546 tomas
clandestinas en 2014, un incremento de 231%.
El aumento de tomas
clandestinas en Jalisco y Guanajuato está asociado al control que tiene el CJNG
sobre el ducto de Salamanca-Guadalajara, donde sumaron 907 tomas clandestinas
durante el 2014, 21.5% de las tomas a nivel nacional.
A DONDE VA A PARAR
Asael Nuche González aseveró
que mientras el número de estaciones de servicio va al alza, la venta de
gasolina de Pemex se mantiene estancada. Por ejemplo, en 2010 la empresa
estatal vendía 118 millones de litros de gasolina magna, mientras que para 2013
la cifra bajó a 106 millones. En tanto, en 2010 había nueve mil 232 estaciones
de servicio, y para 2013 ya eran diez mil 485.
Nuche González dijo que estos
datos apuntan a que las estaciones de servicio están siendo presionadas para
recibir parte del combustible robado, lo que configuraría el blanqueo de
recursos por parte del narco en expendios.
El especialistas urgió a
resolver estos temas y recordó que en parte de los ilícitos contra Pemex están
involucrados trabajadores de la misma empresa.
(EXCELSIOR/ FERNANDO PÉREZ, LOURDES
LÓPEZ, PATRICIA BRISEÑO Y FABIOLA XICOTÉNCATL/ CORRESPONSALES/11/04/2016 05:53)
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