TIJUANA.- Soy “canonero”, ese
día traía una Canon A1, análoga de rollo -en esa época todavía no había
digitales- hice como diez o quince disparos de un rollo de 36, creo que
la 30 o la 31 fue la buena, es la que salió publicada en El Mexicano, en
periódicos nacionales y en la revista estadounidense TIME, narró Efrén
Mota Cabrera, el único fotógrafo que logró capturar con total claridad
la imagen de Colosio herido de muerte, en brazos de su equipo de
seguridad, hace 20 años.
El candidato a la Presidencia de la República por el Partido
Revolucionario Institucional (PRI), arribó al aeropuerto Abelardo L.
Rodríguez, quise tomarle imágenes desde ahí, pero cuando descendí de mi
Toyota Celica, y crucé la avenida para acercarme a la zona de llegadas,
me di cuenta de que la comitiva ya iba hacía la colonia donde sería su
primer evento programado: Lomas Taurinas.
Así que decidí enfilar a esa colonia, dejé mi unidad a la altura de lo que ahora es la delegación Mesa de Otay, prácticamente llegamos casi iguales. Para cuando saqué mi herramienta y comencé a hacer las primeras “placas”, el candidato ya estaba hablando; recuerdo que prometía cambiar el rostro de esa colonia, pavimentaciones, básicamente, recuerda Efrén Mota.
Me gusta cubrir la fuente policíaca, también los eventos políticos importantes; giras presidenciales, campañas de políticos. Sin duda, éste era uno de esos eventos importantes, no quería perder ningún detalle, y al parecer lo conseguí.
EL ATENTADO
Cuando el candidato a la Presidencia terminó de dar su discurso, quise hacer una secuencia de su salida de esa colonia, porque era impresionante ver las muestras de cariño que recibía de los residentes de Lomas Taurinas.
Me les adelanté, porque también buscaba llegar lo más pronto posible al siguiente evento, una reunión programada con maestros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en el Club Campestre.
De repente, voy caminando, voy caminando, entre la multitud y me topo de frente con el candidato; ya lo llevaban malherido. En ese momento no sabía que le habían disparado, pensé que lo habían descalabrado, que le habían aventado un rocazo, pues era una colonia sin pavimento.
Lo único que recuerdo fue que comencé a disparar mi cámara, no tenía idea de lo que pasaba, antes de que ingresara a la camioneta negra, tipo blazer donde fue trasladado en un principio, se me terminó el rollo. Luego lo pasaron a una ambulancia tipo delta 7. Lo van a trasladar al hospital más cercano de la zona -pensé- así que decidí ir por mi unidad para irme al Hospital General, los volví a topar de frente en la avenida saliendo de la colonia y los seguí, me estacioné frente al hospital, en lo que ellos se dieron la vuelta para ingresar, ya estaba dentro del nosocomio, así que volví a tomar algunas gráficas. Ya ahí dentro del hospital, después el ingreso fue restringido, de los medios de comunicación solo yo estaba dentro, veía a algunos de los compañeros a través de la puerta de vidrio del hospital. El traslado fue muy rápido, todo pasó en cuestión de minutos.
LOS LLAMADOS
En El Mexicano (periódico donde Efrén continúa colaborando), mis jefes ya me estaban esperando, tenían la esperanza de que hubiera logrado una buena imagen, por la relevancia del suceso, porque yo todavía lo recuerdo y siento cierta nostalgia, impotencia.
El ataque ocurrió por ahí de las 5 de la tarde, nosotros traíamos unos radios de comunicación, cuando estaba en el hospital me comuniqué con Alberto Sarmiento, entonces Jefe de Información, para saber si me mantenía en el hospital o iba a revelar el material. Recuerdo que Alberto me preguntó que si traía la foto buena, que me fuera a revelar, que ahí en el hospital ya no había nada.
Recuero que fui a revelar a color a un laboratorio (que ahora ya no existe) ubicado en la calle Once y Ocampo, en el centro. Ahí es donde me entero en la televisión de lo que había ocurrido, Jacobo Zabludovsky, anunciaba que Luis Donaldo Colosio Murrieta, era declarado oficialmente muerto. De inmediato me percaté del valor de mis gráficas, incluso Héctor Hernández, quien se encargó del revelado, me dijo que la imagen valía oro.
De ahí me traslado a las oficinas de El Mexicano, me sorprendí. En las oficinas del periódico estaban decenas de periodistas y fotógrafos, todos estaban esperando que les vendiera alguna imagen del suceso.
El primero que vio las gráficas fue mi jefe Enrique Sánchez Díaz, en aquel tiempo subdirector de EL MEXICANO, él fue quien me dijo que medios internacionales y nacionales querían obtener una foto del atentado, muy respetuoso, Sánchez Díaz lo dejó a mi criterio.
IRONÍAS DE LA VIDA
Efrén Mota es originario de Jalapa, Veracruz, curiosamente, este día se cumplen 23 años de que vive en esta ciudad fronteriza. Salí de Veracruz un 20 de marzo de 1991, el día 23 ya estaba arribando a Tijuana, ya sabes, en busca del sueño americano.
En Jalapa, me inicié como socorrista de Cruz Roja, pero conocí esta profesión gracias a mis amigos: Hugo Cruz Ojeda, Miguel Ángel Salgado Peralta y José Antonio Luna, actualmente ellos siguen laborando en los medios, Hugo, dirige el portal Rotativo Veracruz; Salgado es corresponsal de televisa y Luna trabaja en RTV más Jalapa. Es gracias a ellos que yo me inicio en el fotoperiodismo, por eso el agradecimiento.
SENTIMIENTOS ENCONTRADOS
En la actualidad, paso por Lomas Taurinas, y tengo sentimientos encontrados. De hecho, es una colonia que evito, voy solo por cuestiones de trabajo, para retratar alguna imagen. Cuando tomé esa foto del atentado, tenía unos 21 años; ya son 20 años del suceso, y sigo sintiendo impotencia.
Los premios:
Efrén Mota Cabrera, fue ganador de la Primera Bienal de Fotoperiodismo 1993-1994 en la categoría “fotonoticia”, por la imagen titulada: “Colosio, herido, es cargado después del atentado”.
Participaron 167 personas en diferentes categorías.
Lugar de exposición, Museo Mural Diego Rivera: nov-dic 1994
CURIOSIDADES
La cámara A1 que Efrén Mota, utilizó hace 20 años para captar la imagen de Colosio malherido, le fue robada luego de un año en la colonia Gabilondo.
“Sentí mucha nostalgia cuando me la robaron, me abrieron el carro y se la llevaron, duró conmigo cinco años, me tuve que comprar otra para seguir trabajando, otra Canon”.
Creo que Colosio iba a ser un buen presidente, con tristeza veo que en la política no hay nadie que siga su legado. “Tengo muy gravada la imagen de ese mitin, cuando Colosio suelta una paloma blanca, recuerdo mucho ese momento”.
El New York Times, fue quien compró en Estados Unidos las imagen de Colosio, ningún otro medio norteamericano las obtuvo. En nuestro país la imagen se publicó en la mayoría de los periódicos nacionales.
Una de las experiencias que me quedaron desde esa vez es que uno como reportero gráfico, debe ser el primero en llegar y el último en irse. Esa imagen que le dio la vuelta al mundo me dejó mucha satisfacción laboral.
Efrén Mota es casado y tiene una hija, actualmente sigue cubriendo para El Mexicano la policíaca.
(EL MEXICANO/ Adán MONDRAGÓN/ 23 de Marzo 2014)
Así que decidí enfilar a esa colonia, dejé mi unidad a la altura de lo que ahora es la delegación Mesa de Otay, prácticamente llegamos casi iguales. Para cuando saqué mi herramienta y comencé a hacer las primeras “placas”, el candidato ya estaba hablando; recuerdo que prometía cambiar el rostro de esa colonia, pavimentaciones, básicamente, recuerda Efrén Mota.
Me gusta cubrir la fuente policíaca, también los eventos políticos importantes; giras presidenciales, campañas de políticos. Sin duda, éste era uno de esos eventos importantes, no quería perder ningún detalle, y al parecer lo conseguí.
EL ATENTADO
Cuando el candidato a la Presidencia terminó de dar su discurso, quise hacer una secuencia de su salida de esa colonia, porque era impresionante ver las muestras de cariño que recibía de los residentes de Lomas Taurinas.
Me les adelanté, porque también buscaba llegar lo más pronto posible al siguiente evento, una reunión programada con maestros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en el Club Campestre.
De repente, voy caminando, voy caminando, entre la multitud y me topo de frente con el candidato; ya lo llevaban malherido. En ese momento no sabía que le habían disparado, pensé que lo habían descalabrado, que le habían aventado un rocazo, pues era una colonia sin pavimento.
Lo único que recuerdo fue que comencé a disparar mi cámara, no tenía idea de lo que pasaba, antes de que ingresara a la camioneta negra, tipo blazer donde fue trasladado en un principio, se me terminó el rollo. Luego lo pasaron a una ambulancia tipo delta 7. Lo van a trasladar al hospital más cercano de la zona -pensé- así que decidí ir por mi unidad para irme al Hospital General, los volví a topar de frente en la avenida saliendo de la colonia y los seguí, me estacioné frente al hospital, en lo que ellos se dieron la vuelta para ingresar, ya estaba dentro del nosocomio, así que volví a tomar algunas gráficas. Ya ahí dentro del hospital, después el ingreso fue restringido, de los medios de comunicación solo yo estaba dentro, veía a algunos de los compañeros a través de la puerta de vidrio del hospital. El traslado fue muy rápido, todo pasó en cuestión de minutos.
LOS LLAMADOS
En El Mexicano (periódico donde Efrén continúa colaborando), mis jefes ya me estaban esperando, tenían la esperanza de que hubiera logrado una buena imagen, por la relevancia del suceso, porque yo todavía lo recuerdo y siento cierta nostalgia, impotencia.
El ataque ocurrió por ahí de las 5 de la tarde, nosotros traíamos unos radios de comunicación, cuando estaba en el hospital me comuniqué con Alberto Sarmiento, entonces Jefe de Información, para saber si me mantenía en el hospital o iba a revelar el material. Recuerdo que Alberto me preguntó que si traía la foto buena, que me fuera a revelar, que ahí en el hospital ya no había nada.
Recuero que fui a revelar a color a un laboratorio (que ahora ya no existe) ubicado en la calle Once y Ocampo, en el centro. Ahí es donde me entero en la televisión de lo que había ocurrido, Jacobo Zabludovsky, anunciaba que Luis Donaldo Colosio Murrieta, era declarado oficialmente muerto. De inmediato me percaté del valor de mis gráficas, incluso Héctor Hernández, quien se encargó del revelado, me dijo que la imagen valía oro.
De ahí me traslado a las oficinas de El Mexicano, me sorprendí. En las oficinas del periódico estaban decenas de periodistas y fotógrafos, todos estaban esperando que les vendiera alguna imagen del suceso.
El primero que vio las gráficas fue mi jefe Enrique Sánchez Díaz, en aquel tiempo subdirector de EL MEXICANO, él fue quien me dijo que medios internacionales y nacionales querían obtener una foto del atentado, muy respetuoso, Sánchez Díaz lo dejó a mi criterio.
IRONÍAS DE LA VIDA
Efrén Mota es originario de Jalapa, Veracruz, curiosamente, este día se cumplen 23 años de que vive en esta ciudad fronteriza. Salí de Veracruz un 20 de marzo de 1991, el día 23 ya estaba arribando a Tijuana, ya sabes, en busca del sueño americano.
En Jalapa, me inicié como socorrista de Cruz Roja, pero conocí esta profesión gracias a mis amigos: Hugo Cruz Ojeda, Miguel Ángel Salgado Peralta y José Antonio Luna, actualmente ellos siguen laborando en los medios, Hugo, dirige el portal Rotativo Veracruz; Salgado es corresponsal de televisa y Luna trabaja en RTV más Jalapa. Es gracias a ellos que yo me inicio en el fotoperiodismo, por eso el agradecimiento.
SENTIMIENTOS ENCONTRADOS
En la actualidad, paso por Lomas Taurinas, y tengo sentimientos encontrados. De hecho, es una colonia que evito, voy solo por cuestiones de trabajo, para retratar alguna imagen. Cuando tomé esa foto del atentado, tenía unos 21 años; ya son 20 años del suceso, y sigo sintiendo impotencia.
Los premios:
Efrén Mota Cabrera, fue ganador de la Primera Bienal de Fotoperiodismo 1993-1994 en la categoría “fotonoticia”, por la imagen titulada: “Colosio, herido, es cargado después del atentado”.
Participaron 167 personas en diferentes categorías.
Lugar de exposición, Museo Mural Diego Rivera: nov-dic 1994
CURIOSIDADES
La cámara A1 que Efrén Mota, utilizó hace 20 años para captar la imagen de Colosio malherido, le fue robada luego de un año en la colonia Gabilondo.
“Sentí mucha nostalgia cuando me la robaron, me abrieron el carro y se la llevaron, duró conmigo cinco años, me tuve que comprar otra para seguir trabajando, otra Canon”.
Creo que Colosio iba a ser un buen presidente, con tristeza veo que en la política no hay nadie que siga su legado. “Tengo muy gravada la imagen de ese mitin, cuando Colosio suelta una paloma blanca, recuerdo mucho ese momento”.
El New York Times, fue quien compró en Estados Unidos las imagen de Colosio, ningún otro medio norteamericano las obtuvo. En nuestro país la imagen se publicó en la mayoría de los periódicos nacionales.
Una de las experiencias que me quedaron desde esa vez es que uno como reportero gráfico, debe ser el primero en llegar y el último en irse. Esa imagen que le dio la vuelta al mundo me dejó mucha satisfacción laboral.
Efrén Mota es casado y tiene una hija, actualmente sigue cubriendo para El Mexicano la policíaca.
(EL MEXICANO/ Adán MONDRAGÓN/ 23 de Marzo 2014)
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