Saltillo, Coah.- Con el cuerpo completamente morado y
visiblemente hinchado los padres recibieron a su hijo Francisco Israel,
quien ingresó a la Clínica 1 del Seguro Social quejándose de un dolor de
estómago. En sólo unas cuantas horas lo declararon muerto.
Sin poder creer el fallecimiento de su pequeño, de tan sólo 9 años, los padres exigen les den una explicación del acontecimiento. “Algo le hicieron, no lo supieron tratar y creemos que lo envenenaron con algún medicamento”, externaron los progenitores.
Con el dolor de ver a su hijo tendido en su pequeño ataúd blanco, Mario Jiménez Hernández no se encuentra conforme con la atención recibida en el Seguro y mucho menos el trato que le dieron a su hijo. “Nos dieron muchos diagnósticos. Primero nos dijeron que lo mordió una garrapata, luego los orines, hasta que dijo el doctor: ‘No sabemos lo que tiene’”.
Denunció la falta de experiencia que tienen los médicos y los pasantes que atienden en la Clínica 1, además del despotismo y la insensibilidad al ofrecer información sobre el estado de salud de los pacientes.
Reprobaron el hecho de aislar al pequeño y no permitir que nadie estuviera a su lado; el no acceso para que lo vieran para los padres resultó muy extraño. Como pudo, Mario logró llegar a la habitación del niño, y ahí notó que los pies estaban sumamente hinchados y su cuerpo morado.
‘A mi hijo nomás le dolía el estómago’
El acta de defunción firmada por el doctor Héctor Garza Martínez, con la cédula profesional 1397735, señala que la causa de muerte de Francisco Israel, el pequeño que muriera en la Clínica 1 del IMSS a pesar de haber sido ingresado por un dolor estomacal, fue desequilibrio ácido base severo, falla orgánica múltiple y probable lectospirosis, frases que no terminan de convencer a Estela Cansino Mariscal, madre del niño de 9 años fallecido.
Sin imaginar que sólo unas cuantas horas más tendría la presencia de Francisco Israel y que hoy estaría pasando uno de los dolores más terribles que pueda sufrir una madre, Estela, entre lágrimas e impotencia, narra la tragedia.
Todo comenzó el pasado jueves por la mañana, cuando el pequeño comenzó a quejarse de dolor de estómago, por lo que Estela decidió llevarlo a consulta. En primera instancia fue recibido en Medicina Continua del IMSS, donde permanecieron hasta las 11 de la mañana.
Posteriormente lo pasaron a urgencias de la Clínica 1, lugar donde pasó otro largo rato, hasta cerca de las 11 de la noche, cuando una cama se desocupó. El menor fue trasladado a piso en donde le colocaron suero y comenzaron a administrarle diversos medicamentos.
Al poco tiempo, Estela y su esposo, Mario Jiménez Hernández, notaron que el niño comenzó a hincharse, ante ello cuestionaron a los doctores sobre el tratamiento que el niño recibía, a lo que el personal médico se limitó a decir “creemos que no le cayó”.
Los doctores y pasantes que atendían a Francisco Israel indicaron que estaban trabajando. Al realizarle ecos y radiografías, éstas no señalaban daño alguno. Ante la incertidumbre, los padres seguían cuestionando mientras observaban cómo su hijo decaía, pues se hinchaba cada vez más y se amorataba.
Relató que toda la noche acompañó a su hijo, y ya por la mañana, ya un poco cansada, decidió salir a tomar un café. Fue al regresar que le prohibieron la entrada; Francisco Israel ya se encontraba entubado.
“Primero me dijeron que lo mordió una garrapata, luego que una chinche, también dijeron que fue un piojo de perro y al final me salieron con que fue una infección lo que le arrebató la vida a mi hijo, no les entendí qué es lo que tenía”, apuntó la madre.
Ante el féretro de su hijo, quien fue velado y enterrado en Buñuelos, ejido de Saltillo, se preguntaba el por qué murió y repetía constantemente “él no tenía porqué fallecer, tenía un dolor en el estómago y nos fuimos al Seguro, me lo llevé caminado, le sacaron radiografías y ecos y no tenía nada”.
BUSCAN RESPUESTAS
Por su parte, el padre del pequeño Francisco Israel, Mario Jiménez Hernández, rechazó que su hijo falleciera de una mordedura de garrapata, pues en casa, aseguró, no tienen animales, además de que asevera que a su hijo lo mataron en el Seguro Social por envenenamiento o alguna reacción negativa del medicamento.
Dijo que cuando los doctores decidieron internar al niño éstos se preocuparon, a pesar de que Francisco Israel no se veía tan mal. Mario jamás pensó en sacar a su hijo sin vida del hospital.
Señaló que ayer por la mañana ya no dejaron entrar a nadie al cuarto, al tiempo que los doctores indicaron que darían razón de los procedimientos a seguir.
“No me avisaron lo que le iban a hacer, sólo alcancé a ver que mi hijo estaba entubado. Le pregunté a los doctores que qué tenía mi hijo”, pero señala que los galenos no dieron respuesta. A las 12:20 horas del pasado viernes, el pequeño falleció.
La incertidumbre de qué fue lo que pasó estará presente siempre. Mario y Estela no saben la verdadera causa de la muerte de su vástago y desconocen el significado de lo que marca el acta de defunción, siendo con esa gran incertidumbre que enterraron al niño en el pequeño panteón de Buñuelos, de donde son originarios.
REALIZARON ESTUDIOS
Cerca de siete horas permaneció el cuerpo del pequeño Francisco Israel en la Clínica 1 del Seguro Social, pues ante el desconocimiento de las causas de su muerte, se realizaron algunos estudios y recabaron muestras que se enviaron a la Ciudad de México.
Sus familiares exigen a la dependencia de salud les enteren del resultado para así tomar las decisiones correspondientes, además de poder encontrar la paz, sentimiento con el que actualmente no cuentan debido a los hechos tan extraños del suceso.
Será hasta dentro de un mes cuando la familia Jiménez Cansino conozca la causa de la muerte de su hijo Francisco Israel, al tiempo que Mario y Estela puntualizaron categóricamente que si recae en negligencia, demandarán al IMSS.
ADIÓS A UN ANGELITO
El segundo de los hermanos será recordado como un buen hijo, hermano y primo. No era inquieto, estaba muy apegado a su mamá y le gustaba pasar el tiempo viendo la televisión. Cuando era llamado para hacer mandados, sin renegar cumplía con su tarea.
Sus hermanos, de 13 y 2 años, además de una niña de 5, no pueden creer que su hermano ya no estará en casa y no partirán todos juntos a la escuela Patria Nueva, ubicada en la colonia Tanquecito, donde cursaba el segundo año escolar.
Ante la tragedia tan inesperada, familiares de Francisco Israel demandan que los directivos del Instituto Mexicano del Seguro Social pongan más atención en los pacientes, pues en reiteradas ocasiones cuando los pacientes no son atendidos adecuadamente.
Indicaron que de nada sirve el descuento económico que se hace a través de la nómina de trabajo para cubrir esta prestación, pues calificaron el rebaje como un dinero tirado a la basura dado que en realidad apuntaron sólo lo pagan y no reciben la atención debida, además de tener que soportar malos tratos del personal.
Además, la familia Jiménez Cansino pidió a los saltillenses apoyo para cubrir los gastos funerarios del pequeño Francisco Israel, ya que carecen de recursos económicos para hacer el pago.
Por el traslado hasta el ejido Buñuelos y el servicio tendrán que pagar cerca de 7 mil pesos, de los cuales sólo alcanzaron a reunir con sus familiares y amigos una pequeña cantidad, la cual dejaron de depósito, sin embargo, tienen hasta el martes para acudir y pagar la cantidad restante.
Para recibir cualquier tipo de apoyo la familia puso a disposición de la ciudadanía el teléfono celular 844 1461941, con la esperanza de que el corazón de la gente se apiade y los ayude a dejar atrás el amargo dolor.
Sin poder creer el fallecimiento de su pequeño, de tan sólo 9 años, los padres exigen les den una explicación del acontecimiento. “Algo le hicieron, no lo supieron tratar y creemos que lo envenenaron con algún medicamento”, externaron los progenitores.
Con el dolor de ver a su hijo tendido en su pequeño ataúd blanco, Mario Jiménez Hernández no se encuentra conforme con la atención recibida en el Seguro y mucho menos el trato que le dieron a su hijo. “Nos dieron muchos diagnósticos. Primero nos dijeron que lo mordió una garrapata, luego los orines, hasta que dijo el doctor: ‘No sabemos lo que tiene’”.
Denunció la falta de experiencia que tienen los médicos y los pasantes que atienden en la Clínica 1, además del despotismo y la insensibilidad al ofrecer información sobre el estado de salud de los pacientes.
Reprobaron el hecho de aislar al pequeño y no permitir que nadie estuviera a su lado; el no acceso para que lo vieran para los padres resultó muy extraño. Como pudo, Mario logró llegar a la habitación del niño, y ahí notó que los pies estaban sumamente hinchados y su cuerpo morado.
‘A mi hijo nomás le dolía el estómago’
El acta de defunción firmada por el doctor Héctor Garza Martínez, con la cédula profesional 1397735, señala que la causa de muerte de Francisco Israel, el pequeño que muriera en la Clínica 1 del IMSS a pesar de haber sido ingresado por un dolor estomacal, fue desequilibrio ácido base severo, falla orgánica múltiple y probable lectospirosis, frases que no terminan de convencer a Estela Cansino Mariscal, madre del niño de 9 años fallecido.
Sin imaginar que sólo unas cuantas horas más tendría la presencia de Francisco Israel y que hoy estaría pasando uno de los dolores más terribles que pueda sufrir una madre, Estela, entre lágrimas e impotencia, narra la tragedia.
Todo comenzó el pasado jueves por la mañana, cuando el pequeño comenzó a quejarse de dolor de estómago, por lo que Estela decidió llevarlo a consulta. En primera instancia fue recibido en Medicina Continua del IMSS, donde permanecieron hasta las 11 de la mañana.
Posteriormente lo pasaron a urgencias de la Clínica 1, lugar donde pasó otro largo rato, hasta cerca de las 11 de la noche, cuando una cama se desocupó. El menor fue trasladado a piso en donde le colocaron suero y comenzaron a administrarle diversos medicamentos.
Al poco tiempo, Estela y su esposo, Mario Jiménez Hernández, notaron que el niño comenzó a hincharse, ante ello cuestionaron a los doctores sobre el tratamiento que el niño recibía, a lo que el personal médico se limitó a decir “creemos que no le cayó”.
Los doctores y pasantes que atendían a Francisco Israel indicaron que estaban trabajando. Al realizarle ecos y radiografías, éstas no señalaban daño alguno. Ante la incertidumbre, los padres seguían cuestionando mientras observaban cómo su hijo decaía, pues se hinchaba cada vez más y se amorataba.
Relató que toda la noche acompañó a su hijo, y ya por la mañana, ya un poco cansada, decidió salir a tomar un café. Fue al regresar que le prohibieron la entrada; Francisco Israel ya se encontraba entubado.
“Primero me dijeron que lo mordió una garrapata, luego que una chinche, también dijeron que fue un piojo de perro y al final me salieron con que fue una infección lo que le arrebató la vida a mi hijo, no les entendí qué es lo que tenía”, apuntó la madre.
Ante el féretro de su hijo, quien fue velado y enterrado en Buñuelos, ejido de Saltillo, se preguntaba el por qué murió y repetía constantemente “él no tenía porqué fallecer, tenía un dolor en el estómago y nos fuimos al Seguro, me lo llevé caminado, le sacaron radiografías y ecos y no tenía nada”.
BUSCAN RESPUESTAS
Por su parte, el padre del pequeño Francisco Israel, Mario Jiménez Hernández, rechazó que su hijo falleciera de una mordedura de garrapata, pues en casa, aseguró, no tienen animales, además de que asevera que a su hijo lo mataron en el Seguro Social por envenenamiento o alguna reacción negativa del medicamento.
Dijo que cuando los doctores decidieron internar al niño éstos se preocuparon, a pesar de que Francisco Israel no se veía tan mal. Mario jamás pensó en sacar a su hijo sin vida del hospital.
Señaló que ayer por la mañana ya no dejaron entrar a nadie al cuarto, al tiempo que los doctores indicaron que darían razón de los procedimientos a seguir.
“No me avisaron lo que le iban a hacer, sólo alcancé a ver que mi hijo estaba entubado. Le pregunté a los doctores que qué tenía mi hijo”, pero señala que los galenos no dieron respuesta. A las 12:20 horas del pasado viernes, el pequeño falleció.
La incertidumbre de qué fue lo que pasó estará presente siempre. Mario y Estela no saben la verdadera causa de la muerte de su vástago y desconocen el significado de lo que marca el acta de defunción, siendo con esa gran incertidumbre que enterraron al niño en el pequeño panteón de Buñuelos, de donde son originarios.
REALIZARON ESTUDIOS
Cerca de siete horas permaneció el cuerpo del pequeño Francisco Israel en la Clínica 1 del Seguro Social, pues ante el desconocimiento de las causas de su muerte, se realizaron algunos estudios y recabaron muestras que se enviaron a la Ciudad de México.
Sus familiares exigen a la dependencia de salud les enteren del resultado para así tomar las decisiones correspondientes, además de poder encontrar la paz, sentimiento con el que actualmente no cuentan debido a los hechos tan extraños del suceso.
Será hasta dentro de un mes cuando la familia Jiménez Cansino conozca la causa de la muerte de su hijo Francisco Israel, al tiempo que Mario y Estela puntualizaron categóricamente que si recae en negligencia, demandarán al IMSS.
ADIÓS A UN ANGELITO
El segundo de los hermanos será recordado como un buen hijo, hermano y primo. No era inquieto, estaba muy apegado a su mamá y le gustaba pasar el tiempo viendo la televisión. Cuando era llamado para hacer mandados, sin renegar cumplía con su tarea.
Sus hermanos, de 13 y 2 años, además de una niña de 5, no pueden creer que su hermano ya no estará en casa y no partirán todos juntos a la escuela Patria Nueva, ubicada en la colonia Tanquecito, donde cursaba el segundo año escolar.
Ante la tragedia tan inesperada, familiares de Francisco Israel demandan que los directivos del Instituto Mexicano del Seguro Social pongan más atención en los pacientes, pues en reiteradas ocasiones cuando los pacientes no son atendidos adecuadamente.
Indicaron que de nada sirve el descuento económico que se hace a través de la nómina de trabajo para cubrir esta prestación, pues calificaron el rebaje como un dinero tirado a la basura dado que en realidad apuntaron sólo lo pagan y no reciben la atención debida, además de tener que soportar malos tratos del personal.
Además, la familia Jiménez Cansino pidió a los saltillenses apoyo para cubrir los gastos funerarios del pequeño Francisco Israel, ya que carecen de recursos económicos para hacer el pago.
Por el traslado hasta el ejido Buñuelos y el servicio tendrán que pagar cerca de 7 mil pesos, de los cuales sólo alcanzaron a reunir con sus familiares y amigos una pequeña cantidad, la cual dejaron de depósito, sin embargo, tienen hasta el martes para acudir y pagar la cantidad restante.
Para recibir cualquier tipo de apoyo la familia puso a disposición de la ciudadanía el teléfono celular 844 1461941, con la esperanza de que el corazón de la gente se apiade y los ayude a dejar atrás el amargo dolor.
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