lunes, 30 de septiembre de 2013

SORDERA CRIMINAL DETRÁS DE INUNDACIONES POR EL PASO DE "MANUEL" EN SINALOA

Los responsables del siniestro tras el paso del huracán 'Manuel'...




Con un estudio en la mano, la Conagua advirtió desde hace dos años que el desorden urbano podía provocar inundaciones y propuso medidas correctivas, pero nadie la escuchó

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) había advertido al gobierno municipal hace dos años que el tema de los drenajes pluviales de Culiacán era un asunto urgente. Pero el Ayuntamiento hizo caso omiso.

La delegación de la Cuenca Pacífico Norte le entregó al entonces alcalde, Héctor Melesio Cuen Ojeda, un diagnóstico minucioso de la problemática y le planteó soluciones.

El documento de carácter técnico advirtió de los peligros de una emergencia hidrometeorológica. Los datos eran contundentes. La ciudad solo cuenta con una infraestructura pluvial del 25 por ciento, y el 75 son arroyos naturales, pese a que Culiacán se encuentra dentro de una zona considerada de riesgo severo de inundaciones.

La realidad planteada era que la ciudad carecía de un sistema integral y eficiente de descargas pluviales, así como una deficiente o nula regulación de los asentamientos humanos. Los fraccionadores no consideran las descargas pluviales o presentan un proyecto para conseguir permisos de construcción, sin llevar a cabo la obra comprometida, dice el documento al que Ríodoce tuvo acceso.

El crecimiento urbano sin control de las últimas dos décadas, tiene invadidas las zonas de protección de arroyos y en ocasiones hasta de los cauces, con el riesgo de inundación de viviendas.

La Comisión Nacional del Agua tenía detectadas 45 colonias y 20 vialidades que se encontraban en riesgo de inundación, localizadas en zonas de riesgo en los márgenes de un total de 22 arroyos y de los ríos Tamazula, Humaya y Culiacán.

El estudio que fue entregado por el entonces director del Organismo de Cuenca Pacífico Norte, Luis Javier de la Rocha Zazueta, al Gobierno municipal, era claro en que el crecimiento de la ciudad ya había rebasado la construcción de subterráneos y otro tipo de soluciones para hacer frente a problemas de inundaciones. Por lo que se le catalogó de urgente analizar el drenaje pluvial en dos aspectos: descarga y conducción.

Pese a lo anterior, el Gobierno municipal no emprendió ningún eje estratégico de gran envergadura para atender la carencia de una infraestructura pluvial de la ciudad de Culiacán.

Meses atrás el Plan Municipal de Desarrollo 2011-2013 se había planteado, dentro del eje de Desarrollo Económico Sustentable, la construcción de espacios para los escurrimientos pluviales para prevenir inundaciones, sin embargo, el tema desapareció en los informes de gobierno, primero con el alcalde Melesio Cuen, y posteriormente en el segundo, con el presidente municipal sustituto, Aarón Rivas Loaiza.

Lo único que se incluyó en el Primer Informe de Gobierno fue que se había concluido el Atlas de Riesgo Digital, documento que constaba de 76 mapas interactivos, elaborado con recursos del Fondo para la Prevención de Desastres. No hubo más acciones y todo indica que sirvió para muy poco.

El documento del riesgo latente que tenía Culiacán fue entregado al Gobierno municipal, al igual que al Gobierno del Estado de Sinaloa y al federal, para que se llevaran acciones en conjunto y se hicieran los trabajos propuestos.

Los daños del desorden urbano

Ante la falta de una planeación urbana adecuada, el crecimiento de Culiacán ocurrió de forma anárquica. Las personas, las empresas constructoras de fraccionamiento y el propio Gobierno han violentado las corrientes naturales de los arroyos y ríos, invadiendo parcial y totalmente su cauce original para la construcción de viviendas, centros recreativos y vialidades.

“Encontramos que los arroyos cruzan entre las manzanas sin ninguna área de protección para las viviendas, además que las construcciones invaden y afectan las áreas necesarias al paso de las aguas. Sumamos a esto que los escurrimientos más chicos que vierten sobre estos arroyos también han sido obstaculizados y desviados hacia las calles sin obras proyectadas especialmente para esta función, provocándose un sinnúmero de problemas en todos los rumbos de la ciudad”, puede leerse en el Manual de Inundaciones elaborado por Conagua.

Y pone los puntos sobre las íes: “Los fraccionadores compran terrenos fuera de la reserva urbana sin considerar las descargas pluviales del fraccionamiento al colector o en el mejor de los casos presentan un proyecto de conducción de aguas pluviales con lo que consiguen el permiso de construcción, dando inicio y término a la construcción del conjunto habitacional sin llevar a cabo la obra comprometida”.

Un estudio del Sistema Integral de Drenaje Pluvial de Culiacán, elaborado por el Implan, determinó que en la mayor parte de los ductos subterráneos de zonas pavimentadas no cuentan con subcolectores o líneas de drenaje que capten agua en la cuenca. “El agua se conduce libremente por las calles hasta llegar al colector, presentándose grandes gastos de ellas que provocan daños y molestias al tráfico vehicular”.

Las advertencias

Sobre el dren Bacurimí, que baja desde el surponiente de Mocorito y tiene una de las cuencas más grandes de toda la ciudad, con más de 500 hectáreas, fue reportado que está siendo reducido deliberadamente su cauce porque las empresas desarrolladoras de la zona habían estado depositando en él todo el material que extraen de sus obras y la basura de las mismas.

Es muy importante, advertía Conagua, que personal de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Culiacán realice la supervisión de esos trabajos, ya que al reducir la sección hidráulica de este arroyo no se tendrá la capacidad para desalojar el agua de lluvias, lo que provocará inundaciones y posibles daños por el arrastre de material a los habitantes de la zona.

Y la advertencia se cumplió con la llegada de Manuel, al inundar a cientos de familias del sector, entre ellos el fraccionamiento Valle Alto y Villas del Río.

El arroyo está alojado en tierra, con excepción entonces, hace dos años, de pequeños tramos en el fraccionamiento Acueducto II, pero se señalaba la conveniencia de checar el diseño del arroyo entubado.

El dren Bacurimí cruza la carretera México 15, luego la carretera a Culiacancito, para desfogar en el río Culiacán, pasando por un costado de los fraccionamientos Villas del Río II, IV, Valle Alto y lo que será el residencial Álamo Grande, actualmente en construcción.
Este arroyo desfoga en el río Culiacán aguas abajo del puente de la Unidad de Servicios Administrativos (USE).

El estudio advierte: “Cabe aclarar que la llegada al río fue modificada entrando en contra de la corriente del río Culiacán, lo que podría provocar que al crecer el río no permita la salida de agua de lluvia del arroyo, remansando el agua hacia estas colonias y por consecuencia podría provocar inundaciones”.

Los señalamientos de las deficiencias son múltiples y detalladas. Por ejemplo, se destacó también que la Presa Derivadora localizada sobre el río Culiacán, había sido construida de 1949 a 1951, en las afueras de Culiacán, pero actualmente se encuentra dentro de la ciudad, debido a que no se contó con una planeación del crecimiento urbano.

Esta presa tiene una cortina o vertedor de cresta fija, que ahora genera un remanso en la margen del río Tamazula, por lo que se propone una modernización, para instalarle una cortina variable que pueda ser operada en época de lluvias, evitando con ello inundar colonias aledañas. Incluso se propone una segunda solución: construir más desarenadores para aumentar la capacidad de desfogue durante las grandes crecientes y con ello evitar inundaciones.

La modernización de la presa podría también evitar inundaciones sobre el malecón, el centro de la ciudad, Las Quintas, Quinta Americana y Viñedos, así como evitar los taponamientos de las descargas de los colectores y canales pluviales a las grandes avenidas de los ríos Humaya y Tamazula.

Para resolver la problemática de las aguas pluviales de Culiacán se propone una solución integral que involucre los esfuerzos coordinadores de múltiples instituciones de los tres niveles de gobierno, incluyendo el sector académico, de instituciones como la UAS, Universidad de Occidente y tecnológicos de Monterrey y Culiacán.

El Manual de Inundaciones elaborado por Conagua establece la necesidad de establecer prioridades para la identificación de las zonas de riesgos, así como realizar una serie de acciones mediante un proyecto integral, conforme a las leyes y reglamentos de los tres niveles de gobierno, en donde el responsable directo es el Ayuntamiento de Culiacán.

CIUDAD Precipitación en milímetros por año
Los Mochis 254-584
Guasave 254-711
Culiacán 432-686
Mazatlán 686-1194

Fenómenos hidrometeorológicos registrados en Culiacán
19 de septiembre de 1886 Inundación de Culiacán. Pérdida total de 60 casas, planta   de agua e instalaciones del ferrocarril.
18 y 19 de septiembre de 1896 Inundaciones en la ciudad, destrucción de casas y daños en   siembras.
1907 Aumentó la corriente de los ríos provocando las pérdidas   de vidas humanas y carretas cargadas de verduras.
1917 Se inunda la ciudad.
Enero de 1950 Se presenta una avenida de agua de 5,230 metros cúbicos   por segundo durante la construcción de la presa Sanalona.
Septiembre de 1953 Se presenta una avenida de agua de 3,175 metros cúbicos   por segundo.
Enero de 1955 Se presenta una avenida de 3,175 metros cúbicos   por segundo.
Agosto de 1959 Bomberos desalojan a familias que vivían en la margen   izquierda del río Tamazula.
Enero de 1960 Una avalancha de agua junto al malecón poniente solo deja   visible los techos de las casas.
4 de octubre de 1962 Precipitación que dejó árboles derribados, cristales rotos   y cientos de familias a la intemperie.
10 de diciembre de 1963 Las torrenciales lluvias provoca el desborde del río   Tamazula. Se inundó gran parte de las colonias Tierra Blanca, Las Vegas,   Mazatlán y Ruiz Cortines.
El 9 de agosto de 1966 El pluviómetro marco más de 204 milímetros y   se consideró el más fuerte de los últimos 17 años.
23 de septiembre de 1974 Huracán Orlene.
Septiembre de 1981 Huracán Norma.
7 de octubre de 1981 Huracán Lidia.
1982 Huracán Paúl.
1983 Huracán Rosa.
1985 Huracán Waldo.
1986 Huracán Roslyn.
1988 Precipitación que provoca que decenas de carros sean   arrastrados por la caudalosa corriente formada por la avenida Aquiles Serdán.
1992 El fenómeno El Niño   inunda el malecón, la Campiña y Las Quintas.
1993 Huracán Lidia.
1995 Huracán Ismael.
1998 Huracán Isis.
Septiembre de 2006 Huracán Lane.
Octubre de 2006 Huracán Paúl.
Agosto 2007 Lluvias intensas provocan lluvias en Alamitas e Infonavit   Humaya.
Septiembre de 2007 Huracán Henrriete.
Agosto de 2008 Lluvias provocan inundaciones en colonia San Rafael.
Agosto de 2009 Lluvias provocan inundaciones en las colonias Alamitos y   Chulavista.
Julio de 2010 Lluvias inunda malecón Niños Héroes a la altura de la   avenida Obregón. Un alcantarillado se tapa.
Agosto de 2010 Lluvias provocan inundaciones en Bachigualato y se inunda   Asilo de Ancianos.

Posibles zonas de afectación por creciente de los ríos Humaya, Tamazula y Culiacán.
Río Tamazula al oriente Fraccionamiento Viñedos secciones Amapa, Burdeos, la   Rioja, Vascos. Residencial Tamazula
Residencial La Isla
Residencial La Amapa
Escuela Sebec
Residencial Quinta Americana
Residencial Quinta del Real
Condominio La Herradura
Río Humaya al oriente Fraccionamiento Los Lirios Fraccionamiento Los Lagos
Fraccionamiento Los Cisnes
Privada Rincón Alameda
Río Humaya al poniente Residencial Bonanza Privada La Rivera Plus
Universidad de San Miguel
Estadio Banorte
ZONAS DE ALTO RIESGO
Río Tamazula al norte Fraccionamiento Paseo del Río Fraccionamiento Santa Teresita
Río Culiacán al norte Colonia Valle del Río Colonia Valle del Río I
Fraccionamiento Valle del Río Élite
Fraccionamiento Villas del Río


Cronología de la Conagua:

Martes 17
21:40
La Conagua emite un comunicado que precisa que la depresión tropical Manuel se localizó a 135 kilómetros al oeste-suroeste de Mazatlán. Prevé que se registren lluvias muy fuertes y hasta localmente intensas especialmente en Jalisco, Nayarit y Sinaloa.
El informe destaca especialmente que las lluvias de los últimos días han superado los promedios mensuales anuales entre un 200 y 300 por ciento en estados como Guerrero, Michoacán y Guerrero
El organismo pide estar atentos de los llamados de Protección Civil y extremar precauciones en el mar y los ríos cercanos a los
fenómenos. En zonas urbanas advierte que pueden registrarse inundaciones y encharcamientos.

23:15

Informan que la depresión tropical Manuel se convertirá en las próximas horas en tormenta tropical, previéndose su impacto en las cercanías de La Paz, Baja California durante el jueves.

Miércoles 18

5:25

La depresión tropical Manuel se localiza a 145 kilómetros al oeste de Mazatlán. Los pronósticos indican que se seguirá desplazando hacia el noroeste con trayectoria hacia la bahía de La Paz.

10:00

Manuel se localizó a 115 kilómetros al suroeste de La Cruz con movimiento lento de 6 kilómetros por hora hacia el noroeste. Se espera que en la tarde-noche se ubique a 95 kilómetros al sur-suroeste de Altata.

13:30

Aumentan la fuerza de los vientos de Manuel y podría convertirse en huracán en las próximas horas. Se establece una zona de alerta por efectos del huracán desde La Cruz hasta Topolobampo.

16:30

Manuel cambia de trayectoria hacia el norte de Sinaloa. Se pronostica se acercaría a la zona que incluye Topolobampo, Los Mochis, Guasave y Guamúchil. Está muy cerca en convertirse en huracán.

19:30

La tormenta tropical Manuel incrementó sus vientos y se convirtió en huracán categoría I, por lo que se estableció una zona de alerta por sus posibles efectos desde La Cruz hasta Topolombampo. Se localizó a 30 kilómetros al suroeste de Altata con vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora y rachas de 150 kilómetros por hora.

Se prevé que la muralla que rodea al centro del huracán Manuel comience a afectar el norte de Sinaloa en el transcurso de la noche de hoy.

22:30

El huracán Manuel se localizó a 10 kilómetros de la línea de la costa de Sinaloa y a 115 del suroeste de Guasave.

Advierte sobre el potencial de lluvias torrenciales mayores a 150 milímetros en Sinaloa, con valores que pueden alcanzar los 250 mm y por efectos orográficos se pueden registrar hasta 375 mm de lluvias.

Jueves 19

5:25

La depresión Manuel se seguirá desplazando hacia el noroeste con trayectoria hacia la bahía de La Paz.

12:00

El huracán Manuel se ubicó a 145 kilómetros al oeste-noroeste de Culiacán, por lo que persisten lluvias torrenciales en Sinaloa e intensa en Nayarit. El índice de peligrosidad se mantiene como fuerte, la zona de alerta por efectos del huracán abarca de La Cruz a Topolobampo.

De acuerdo con modelos matemáticos de trayectoria, el ciclón seguirá moviéndose muy lentamente, al mismo tiempo que bordea la costa de Sinaloa.

En la tarde noche se espera que Manuel se localice a 75 kilómetros al nor-noroeste de Culiacán, y a 15 kilómetros al oeste —noroeste de Badiraguato.

14:20

El huracán Manuel se degradó a tormenta tropical a 65 kilómetros al nor-noreste de Altata.

Se prevé lluvias torrenciales en Sinaloa con valores que puedan alcanzar entre 300 a500 mm, y en la zona montañosa de 600 mm.

16:30

La tormenta tropical Manuel se debilita. Se localizó a 10 kilómetros de Cieneguita y a 190 kilómetros al este de Los Mochis.

19:30

Manuel se debilitó a depresión tropical, ubicándose a 210 kilómetros al este de Los Mochis y a 20 kilómetros al sureste de Guadalupe y Calvo, Chihuahua.

Se prevé que los remanentes de Manuel ocasionarán el día de mañana fuerte propagación de nublados densos con precipitaciones intensas en Sinaloa.

Viernes 20

10:30

Los remanentes de Manuel se ubicaron en el este de Chihuahua.

septiembre 29, 2013

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