¡Ah, cómo les gusta hacerle al pendejo! Ayer
fui a una casa de cambio a comprar mil dólares canadienses para enviarle a mi
hija que vive en Vancouver. Me hicieron llenar y
firmar un formato, y
permitir que sacaran copia a mi credencial del IFE, quesque para cumplir con las
medidas para evitar el lavado de dinero.
¡Pero si el lavado de dinero se
sigue haciendo a todo trapo, aquí en México, en EU y en todas partes,
por cientos de miles de millones de dólares, no por mugres mil! Remember
el escándalo hace unos meses del banco Wachovia, perteneciente a
Wells Fargo (se calculó el borlotito en 378.4 mil millones de dólares,
el 33 por ciento del PIB de México).
Ahora sabemos que hasta la
DEA practica esa divertida actividad, desde hace años. Ah, pero eso sólo
lo pueden hacer los poderosos y/o los delincuentes grandes. Las prohibiciones y los obstáculos burocráticos son sólo para las
hormiguitas como yo y tú, no para los peces gordos.
Las leyes están
diseñadas para atrapar sólo charalitos; los tiburones y
cachalotes se van siempre por otras vías y/o pagan con brillantes sus
pecados.
En fin, las casas de cambio sólo sirven para que hagan como que hacen; la única verdadera casa de cambio en el País se llama
Los Pinos, ¡y vaya que sí los cambia! Son unos cuando entran, y otros
muy distintos cuando salen, seis años después.
Ayer y hoy
Escenario: El niño Juanito se cae mientras echaba una carrera y
se araña en la rodilla. Su profesora, María, se lo encuentra llorando al borde del camino. María lo abraza para confortarlo.
Año 1969: Al
poco rato, Juan se siente mejor y sigue jugando. Año 2009: María es
acusada de perversión de menores y se va al paro (desempleo). Se
enfrenta a tres años de cárcel. Juan se pasa cinco años de terapia en
terapia por el tremendo estrés sufrido a manos de un adulto
malévolo. Sus padres demandan al colegio por negligencia y a la
profesora por trauma emocional, ganando ambos juicios. María, en paro y endeudada, se suicida tirándose de un edificio. Cuando
aterriza, lo hace encima de un coche y también rompe una maceta. El
dueño del coche y el dueño de la planta demandan a los herederos
de María por destrucción de la propiedad. Ganan. Tele cinco y Antena 3
producen juntos la película y definitivamente el plató de los
informativos ya queda emplazado en medio de la calle.
Morbosos
Como era de esperarse, varios querido lectoras me preguntaron
sobre el imeil ofensivo que mencioné hace un par de días. El siguiente texto de un contertulio de los jueves, es típico:
"¿Y contra
quién es el imeil de marras? Compló contra los tertulianos del María
Cristina... ¡sólo eso nos faltaba! Habría que difundir un boletín defendiendo nuestra RACHA (Red Ácida de Chismosos
Anónimos), miembros honorarios del CICM (Círculo Internacional de Componedores del Mundo), para que no nos cuelguen sambenitos
inmerecidos. ¡Yo protesto formalmente!".
Establo
La
realidad no es la imagen romántica que nos presentan en los nacimientos
y los villancicos. Un verdadero establo, como el que alojó el
alumbramiento de Jesucristo, es otra cosa: un lugar sucio y apestoso,
con algunas briznas de paja vieja en el suelo, regadas con orines y mierdas de animales. El Hijo del Hombre escogió llegar en un
sitio "prole" como los que le molestan la nariz a la hijita de Peña
Nieto. Algún mensaje importante debe de haber en esto, ¿no crees? Un mensaje que NO QUEREMOS VER.
Hueconomía
Hoy
viernes a la 1:40 del mediodía pasa mi capsulita en Canal 40. La mega
crisis sistémica global se pone cada día más calientita, ríspida y acelerada, rumbo al precipicio de la economía planetaria. El
desastre universal ya no lo para nadie, pero algunos inconscientes nos divertimos perversamente con esta hecatombe
histórica en proceso
(si no ríes, no podrías evitar llorar)... y hasta decimos una que otra cosita tangencial en el breve espacio de un minuto que duran las
cápsulas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario