Miami.-
Una masiva marea roja tóxica acaba con la vida de peces, tortugas y toda la
vida marina en el noreste del Golfo de México y amenaza las costas y playas que
son el motor de la economía de Florida.
Pescadores
reportan la muerte de vida marina, mientras que analistas anticipan que causará
un daño considerable a la pesca y a la economía turística en los próximos meses
y las autoridades buscan formas de anticipar su llegada.
Esta
marea roja está formada por la especie Karenia brevis, unas algas microscópicas
que se expanden en grandes números formando enormes racimos, según la Comisión
de Fauna y Vida Silvestre de Florida (FWC, por sus siglas en inglés).
Este
tipo de algas también emiten unas elevadas concentraciones de toxinas inodoras
que pueden ser perjudiciales para los seres humanos y fatal para la vida
marina, de acuerdo con la dependencia.
En
la actualidad la marea se encuentra entre ocho y 25 kilómetros de la costas de
San Petersburgo y los condados de Taylor y Pasco en la costa noroeste de
Florida. Su amplitud es de unos 90 kilómetros de ancho por 160 de largo.
La
Comisión reporta hasta el momento la muerte de peces cerca de la playa de
Horseshoe, en el condado Dixie y cerca de la playa Keaton en el condado Taylor.
No
hay reportes de problemas de irritación respiratoria en la costa oeste de
Florida, señaló la dependencia en su último boletín sobre el movimiento de la
marea.
“Es
espeluznante”, fue la descripción del pescador Brad Gorst tras navegar su barco
cerca de la marea esta semana, según publicó la prensa de Florida.
Además
de peces, la marea roja mata a los manatíes y otra vida marina a través de una
toxina que paraliza su sistema nervioso central. Las toxinas también contaminan
los mariscos.
Estas
toxinas también afectan a las personas al viajar en el aire, especialmente a
aquellas con problemas de asma u otras afecciones respiratorias.
En
el 2005 una fuerte marea roja aniquiló arrecífes dejó contaminadas las playas y
generó perdidas millonarias a la economía del estado, mientras que una débil
marea roja en el 2013 mató a 276 manatíes al infectar el alimento de estos
mamíferos.
Heyward
Mathews, profesor del Colegio de San Petersbiurg, quien ha estudiado por
décadas el tema, vaticinó que esta marea ocasionará “daño considerable” a la
vida marina y al turismo en los próximos meses.
Pese
a años de estudio no hay nada que se pueda hacer para frenar la marea roja.
En
1950 funcionarios de Vida Silvestre trataron de eliminar la marea con sulfato
de cobre, pero eso causó un problema mayor y algunos investigadores están
trabajando para tratar de encontrar una defensa.
El
poder predecir cuando una marea roja va a hacer especialmente fuerte, puede
ayudar a los pescadores y a los negocios de playa a estar mejor preparados.
Hasta
el momento la mayoría de la información proviene de imágenes de satélite.
Robert
Wesiberg, oceanógrafo de la Universidad de Florida, prepara junto a otros
científicos un modelo de predicción con base en información de las corrientes
marinas en lugar de las imágenes de satélite.
Utilizando
este método Weisberg pronosticó en marzo pasado la actual marea y funcionarios
estatales pudieron emitir una alerta desde el pasado 25 de julio.
Este
proyecto recientemente recibió fondos de la Administración Nacional de Océanos
(NOAA) que envió un robot marino para recoger información sobre las algas.
Los
pescadores estiman que un mejor método de pronóstico puede ayudarles a ahorrar
tiempo y dinero.
"Si
hubiéramos tenido esta información mucho antes... podríamos haber planeado
donde ir a pescar ahora, dijo Mike Colby, capitán de un barco de pesca en
Clearwater, de acuerdo con el canal del tiempo Weather Channel.
(ZOCALO: Tomado de: Notimex/ 21/09/2014
- 08:30 AM)
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