Sólo se sabe que se trata de joven desaparecido en étnica comunidad
Sobre
una plancha de descanso del Servicio Médico Forense, permanecía sin
identificar, el cadáver del hombre que fue localizado enterrado
clandestinamente, a la altura de Pueblo Vícam, la medianoche del martes
pasado.
El
hallazgo se realizó alrededor de las 23:25 horas, a cien metros al
poniente de la carretera 29, a la altura del kilómetro 7, al oeste de la
étnica comunidad indígena.
La fosa
clandestina, se localizó entre el monte, después de intenso rastreo en
los alrededores del lugar, al complicarse la búsqueda por la oscuridad
de esa zona.
Se estableció que el ahora occiso era de complexión delgada, estatura regular, su edad fluctuaba entre los 25 y 30 años de edad.
Estaba con el dorso desnudo y vestía pantalón de mezclilla azul y tenis de color blanco.
Tenía la cabeza envuelta con cinta canela, así como los pies y las manos atadas con ese mismo material.
Fue
hallado en posición fetal –con las rodillas y brazos flexionados—en un
hoyo con una profundidad estimada en sesenta centímetros.
A simple
vista se le apreciaron huellas de tortura y de momento se descartó que
presentara un impacto de bala, deduciéndose que murió al ser asfixiado
con la cinta canela que le colocaron sus ejecutores.
Se presume que tenía varios días y se esperaba que los estudios post-mortem arrojaran las causas que le generaron la muerte.
Podría
tratarse de un sujeto apodado el “chirigüero”, quien vive en la
población de Vícam y tiene varios días desaparecido, según autoridades
policiacas.
Las
pesquisas para establecer su identidad, están a cargo de elementos de la
Policía Estatal Investigadora que la noche del martes acompañaron al
Ministerio Público del Fuero Común de Bácum, Jesús Francisco Monroy
Badilla, quien integra la averiguación previa relativa a estos hechos.
(DIARIO DEL YAQUI/
Martín Alberto Mendoza / Miércoles, 14 Mayo 2014 23:03)
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