Es un reflejo
del llamado "narcoestado", que ante la falta de autoridad y Gobierno,
defiende al enemigo, consideró el filósofo español, Carlos Díaz Hernández
CULIACÁN.- La marcha ocurrida el miércoles en defensa de
Joaquín "El Chapo" Guzmán es un reflejo del llamado
"narcoestado", que ante la falta de autoridad y Gobierno, defiende al
enemigo, consideró el filósofo español, Carlos Díaz Hernández.
"Habla de un
'narcoestado', nuestros gobiernos democráticos son tan malos e injustos que no
hacen lo que deben y generan estos monstruos sociales, genera este pueblo
monstruoso, de modo que lo que no era nada se extiende como la pólvora, por el
contagio, y así tenemos Colombia, México y otros países", comentó.
"Si el Alcalde no hace casas, y este malandro sí (refiriéndose a "El
Chapo" Guzmán), entonces la gente diceme quedo con el mal menor.
No lo justifico, lo
estoy describiendo, soy el primero en condenar el narcotráfico, pero también a
los gobiernos que hacen injusticia tras injusticia y desatienden al pueblo. El
pueblo queda desamparado", añadió. Ese panorama, dijo, señala que la
sociedad se encuentra harta de sus gobiernos.
"Cuál es la
imagen del hombre en una sociedad así, que sale a la calle a decir:
"¡vivan nuestros verdugos!", ¿qué compromiso hay de las autoridades y
qué compromiso de los ciudadanos hay ahí?", cuestionó el especialista,
quien estuvo en Culiacán como expositor del Congreso Internacional de Bioética.
El fenómeno,
advirtió, camina hacia su universalización.
"¿A qué le echo
la culpa?
Tendría que ser a
todo el mundo. Evidentemente los narcotraficantes son el último eslabón de una
cadena de culpables y el eslabón más grande, duro y desastroso, pero si no
hubiera consumidores, no ha bría traficantes, por ejemplo", dijo. El
llamado, agregó, es a las autoridades, a que desaparezcan o se reduzcan, y que
la sociedad crezca y se autogobierne.
"Autoridades:
es urgente, váyanse. Cuanto menos mejor. Es mejor que el pueblo se
autogobierne. Habrá siempre necesidad de un Ayuntamiento, pero no de tanta
basura, de tanto parásito. La gente debe crecer, liberarse de tantas
ataduras", aseveró.
La sociedad,
consideró Díaz Hernández, se encuentra harta de discursos, cursos y recursos.
Faltan acciones.
"El mundo
necesita testigos y no meros bustos parlantes, esto se hace si somos capaces de
abrirnos al otro. Tú sola no puedes, es: tú conmigo y yo contigo, esta sociedad
necesita un nosotros, un nosotros comunitario. Somos átomos, cada uno en su isla,
incluso cuando nos unimos, nos unimos atómicamente, no nuclearmente".
La unión que
requiere Sinaloa, añadió, llegaría por contagio y sólo si la sociedad realmente
lo desea. "Esto no solamente se enseña, una vez aprendido se quiere o no
se quiere", añadió.
PERFIL:
Carlos Díaz Hernández
Licenciado y Doctor
en Filosofía por la Universidad Complutense de Madrid
Licenciado en Derecho
por la U.N.E.D., de Madrid
Diplomado en
Sociología Política, Centro de Estudios Constitucionales, Madrid. Profesor
Titular en la Universidad
Complutense de
Madrid y Profesor Visitante Permanente de la Universidad Pontificia de México.
Fundador del Instituto
Mounier de España, México, Argentina y Paraguay.
(NOROESTE/JANNETH
ALDECOA/ 01-03-2014)
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