....Crimen de Ricardo Guzmán prueba ingobernabilidad de Michoacán Tan sólo en Michoacán, cuatro presidentes municipales han sido asesinados en el actual sexenio federal. Aquella entidad federativa es una de las más violentas, con 638 ejecuciones en lo que va del año. Ya suman 58 mil 070 muertos en la administración actual.
Enrique Mendoza Hernández
En pleno Día de Muertos, el alcalde de La Piedad, Ricardo Guzmán, fue ejecutado.
Eran las 19:30 del miércoles 2 de noviembre cuando el ex edil se encontraba en pleno acto de proselitismo panista en un crucero, cuando de repente, desde una camioneta negra Jeep Liberty, un individuo se acercó para dispararle un tiro a quemarropa.
El presidente municipal yacía bañado en sangre. No sobrevivió. Guzmán era uno de los munícipes azules más cercanos al Presidente de la República, Felipe Calderón.
El día del homicidio, el ex presidente municipal hacía propaganda en aquella localidad junto a unos 20 jóvenes a favor de la hermana del Ejecutivo Federal, María Luisa Calderón Hinojosa, candidata a la gubernatura de Michoacán por la coalición entre el Partido Acción Nacional (PAN) y Partido Nueva Alianza (PANAL). La ejecución del coordinador de los alcaldes panistas en aquella entidad ocurrió a escasos 11 días de las elecciones estatales de Michoacán, a desarrollarse el domingo 13 de este mes.
Estado fuera de control
“Hay gobernabilidad, hay tranquilidad”, se apresuró a decir el presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, al siguiente día del asesinato de Ricardo Guzmán, alcalde de La Piedad, Michoacán.
Apenas un día antes del homicidio, 1 de noviembre, el secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, se aventuraba a asegurar:
“Michoacán pudiera resumir que vive actualmente condiciones de normalidad democrática con un proceso electoral para renovar a sus autoridades, que se desarrolla en un ambiente de orden y de seguridad y con las competencias políticas propias de las diversas fuerzas políticas, un proceso, pues, muy competitivo”.
“Hay condiciones propicias”, decía también antes del asesinato el gobernador perredista Leonel Godoy.
Lo cierto es que la reacción de Calderón hacia al crimen organizado ante el asesinato del alcalde de La Piedad, apenas consistió en lamentar vía Twitter que Ricardo Guzmán había sido “cobardemente asesinado”; “reacción” similar expresó Blake Mora al espetar la consabida aplicación de la Ley “con todo su rigor”.
Por su parte, la licenciada María de los Ángeles Llanderal Zaragoza, presidenta del Instituto Electoral de Michoacán (IEM), fue más mesurada:
“Yo no puedo afirmar que ese lamentable hecho tenga o no vinculación con el proceso; yo creo que no”.
A propósito de los próximos comicios, reconoció a ZETA que el IEM no tiene acceso al 100 por ciento de los poblados de aquel estado:
“Tenemos alguna complicación, Cherán por más bien cuestión comunal, y en el municipio de Atila”.
En ese clima violento electoral, Llanderal explicó que más de 3 millones 300 mil ciudadanos en la lista nominal de Michoacán están en condiciones de votar y esperan superar el 48.3 de participación ciudadana:
“Nosotros esperamos que los ciudadanos participen más y esperamos superar el 50 (por ciento)”.
El asesinato de Ricardo Guzmán se suma a las 27 ejecuciones de presidentes municipales ocurridas durante el sexenio del Presidente Felipe Calderón:
En 2008 sucedieron tres homicidios de alcaldes, cuatro durante 2009, 14 en 2010, y seis en 2011.
De hecho, Michoacán es uno de los estados con más ejecuciones de presidentes municipales; cuatro en lo que va del sexenio federal:
En junio de 2008, un comando hizo descender de su vehículo a Marcelo Ibarra Villa, presidente municipal de Villa Madero, Michoacán, para después recibirlo a tiros.
Luego, Octavio Manuel Carrillo, alcalde de Vista Hermosa, fue ejecutado el 24 de febrero de 2009 por un comando armado que lo esperaba afuera de su casa.
En 2010, Gustavo Sánchez, presidente municipal de Tancítaro, fue encontrado muerto en la parte de atrás de una camioneta en Uruapan.
El cuarto alcalde asesinado de Michoacán fue el de La Piedad, Ricardo Guzmán.
Por si fuera poco, Michoacán es una de las entidades más violentas del país.
De 58 mil 070 homicidios en el país durante el sexenio del Presidente Calderón, tan sólo en ese estado se han suscitado 638 asesinatos en 2011.
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