Hay condiciones para reformar la Constitución y crear la figura de gobierno de coalición, para que esto aplique luego de los comicios presidenciales de 2012, y haya certidumbre y estabilidad en la administración pública federal, afirmó Jesús Zambrano, dirigente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
“Un gobierno de coalición permitirá que haya acuerdos entre todas las fuerzas políticas, incluida la del partido de quien gane la presidencia, se suscriban acuerdos claros, de frente a la nación, para dar certidumbre al ejercicio de gobierno, y alcanzar un régimen parlamentarista, que le gane terreno al presidencialismo”, manifestó.
Estas reformas legales, agregó, pueden realizarse antes de los comicios presidenciales del año próximo y aplicarse una vez que el triunfador asuma la titularidad del gobierno, para que tenga “esa herramienta constitucional e institucional, y dé estabilidad al desarrollo del país”.
El líder nacional perredista estuvo en Culiacán acompañado de Heriberto Arias Suárez, dirigente de este partido en Sinaloa, para reunirse con la dirigencia estatal y con el gobernador Mario López Valdez, Malova, a quien su partido apoyó, a través de una alianza opositora junto con PAN, Convergencia y el Partido del Trabajo, en los comicios locales de julio de 2010.
Zambrano manifestó que está convencido que en los comicios presidenciales nadie va a arrasar, como lo ha planteado insistentemente Enrique Peña Nieto, aspirante a la postulación del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y su dirigente nacional Humberto Moreira; “ellos tienen ese viejo sueño, pero no va a pasar”, dijo.
La pelea en los próximos comicios, aseguró, será entre el candidato del partido del sol azteca y el del tricolor, ya que mientras Peña Nieto es “el enemigo a vencer, el candidato del PAN va a irse al tercer lugar (en preferencias)”.
Señaló que promoverán entre la ciudadanía el voto útil, tanto para que no regrese el dinosaurio priista, representado por el ex gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, y que no permanezcan en el poder los gobiernos panistas, por no haber sabido atender y resolver los grandes problemas nacionales.
El perredista descartó que haya división en su partido a la hora de elegir entre Marcelo Ebrard, actual jefe de Gobierno del Distrito Federal, y Andrés Manuel López Obrador, llamado el presidente legítimo y dirigente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
“Quienes quieren eso, la división, se van a quedar frotándose las manos, porque eso no va a suceder”, sostuvo.
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