*Perece un estudiante de Ingeniería
CARLOS HERNANDEZ
El exceso de velocidad cobro anoche la vida del estudiante de la facultad de Ingeniería, Alfonso Bautista González, quien murió prensado al volante del automóvil que conducía sobre el boulevard Manuel Ávila Camacho, a la altura del hotel “Fiesta Americana” del fraccionamiento Costa de Oro, donde impactó contra un transformador de luz de piso, para volcar de forma aparatosa acompañado de una amiga, que hasta el cierre de ésta edición, permanecía grave en el Hospital General.
De acuerdo a los datos recabados por NOTIVER, el ahora occiso manejaba un coche marca Peugeot, tipo 207, color rojo, modelo 2007, con placas de circulación YHJ-2663 del estado, sobre el carril de norte a sur de la citada arteria costera, pero entre las calles de paseo Caracol y paseo Costa de Oro, perdió control en la semi-curva y no pudo enderezar la dirección.
El vehículo chocó de lleno del costado izquierdo, por el lado del conductor, para después salir proyectado dando volteretas varios metros adelante, generando un estruendo que alcanzaron a escuchar pasajeros de otros automóviles que pasaban por el lugar, así como taxistas y jóvenes que acudían a los centros nocturnos de la zona, que corrieron para brindar ayuda.
Las llamadas de emergencia no se hicieron esperar, y en seguida llegaron paramédicos de ambulancias de la Cruz Roja, la unidad 595 de Rescate Urbano de la Benemérita Institución, así como oficiales de la Policía Naval, y personal de la Delegación de Tránsito y Vialidad, para prestar auxilio y acordonar la zona.
Empleando las pinzas hidráulicas, o quijadas de vida, los socorristas lograron sacar de entre los fierros retorcidos a la joven copiloto, que presentaba múltiples lesiones en cuerpo y cabeza, y la canalizaron de inmediato a la sala de urgencias del Hospital General de Alta Especialidad, ya que la reportaban como muy delicada.
Sin embargo, el estudiante de ingeniería ya no presentaba signos vitales cuando lo rescataron, por lo que tuvieron que dar parte al personal de la Agencia Investigadora del Ministerio Público de Boca del Río, para que hiciera acto de presencia y realizara las diligencias de ley, junto con detectives de los Servicios Periciales y del Servicio Médico Forense.
El exceso de velocidad cobro anoche la vida del estudiante de la facultad de Ingeniería, Alfonso Bautista González, quien murió prensado al volante del automóvil que conducía sobre el boulevard Manuel Ávila Camacho, a la altura del hotel “Fiesta Americana” del fraccionamiento Costa de Oro, donde impactó contra un transformador de luz de piso, para volcar de forma aparatosa acompañado de una amiga, que hasta el cierre de ésta edición, permanecía grave en el Hospital General.
De acuerdo a los datos recabados por NOTIVER, el ahora occiso manejaba un coche marca Peugeot, tipo 207, color rojo, modelo 2007, con placas de circulación YHJ-2663 del estado, sobre el carril de norte a sur de la citada arteria costera, pero entre las calles de paseo Caracol y paseo Costa de Oro, perdió control en la semi-curva y no pudo enderezar la dirección.
El vehículo chocó de lleno del costado izquierdo, por el lado del conductor, para después salir proyectado dando volteretas varios metros adelante, generando un estruendo que alcanzaron a escuchar pasajeros de otros automóviles que pasaban por el lugar, así como taxistas y jóvenes que acudían a los centros nocturnos de la zona, que corrieron para brindar ayuda.
Las llamadas de emergencia no se hicieron esperar, y en seguida llegaron paramédicos de ambulancias de la Cruz Roja, la unidad 595 de Rescate Urbano de la Benemérita Institución, así como oficiales de la Policía Naval, y personal de la Delegación de Tránsito y Vialidad, para prestar auxilio y acordonar la zona.
Empleando las pinzas hidráulicas, o quijadas de vida, los socorristas lograron sacar de entre los fierros retorcidos a la joven copiloto, que presentaba múltiples lesiones en cuerpo y cabeza, y la canalizaron de inmediato a la sala de urgencias del Hospital General de Alta Especialidad, ya que la reportaban como muy delicada.
Sin embargo, el estudiante de ingeniería ya no presentaba signos vitales cuando lo rescataron, por lo que tuvieron que dar parte al personal de la Agencia Investigadora del Ministerio Público de Boca del Río, para que hiciera acto de presencia y realizara las diligencias de ley, junto con detectives de los Servicios Periciales y del Servicio Médico Forense.
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