CUNEROS DEL IMSS.
Versiones públicas de actas
de defunción de bebés recién nacidos durante diciembre de 2014 y octubre de
2015 en el Hospital General Regional número 1 del IMSS, revela que durante
septiembre fueron 10 los fallecidos por choque séptico o sepsis.
La solicitud, elaborada por
Francisco Javier Cortez Mora, padre de uno de los recién nacidos fallecidos
durante ese mes, confirma la cifra publicada por esta casa editorial (Ríodoce
666) en noviembre de 2015.
FAMILIARES. En espera de justicia.
La historia se remonta a la
versión por parte del IMSS del deceso de únicamente dos neonatos en septiembre
de 2015, reiterada por el entonces delegado estatal del instituto, Adalberto
Castro Castro.
Pero, según los archivos de
Cortez Mora, con folio 0064100857116, durante el mes de septiembre ocurrieron
15 decesos de bebés, 13 de ellos neonatos y 10 a causa de una sepsis en los
cuneros, diagnosticadas bajo el numeral “P369”.
La solicitud, emitida el 19
de mayo, es para bebés con un rango de edad entre una hora de nacidos hasta 12
meses, indicando a su vez las áreas donde ocurrieron los decesos.
“copia LEGILBLE de los CERTIFICADOS DE DEFUNCIÓN DEL
HOSPITAL GENERAL REGIONAL NÚMERO 1 DEL IMSS, EN LA CIUDAD DE CULIACÁN, DE LOS
MESES DE DICIEMBRE 2014, ENERO 2015, FEBRERO 2015, MARZO 2015, ABRIL 2015, MAYO
2015, JUNIO 2015, JULIO 2015, AGOSTO 2015, SEPTIEMBRE 2015, OCTUBRE 2015. SE
DEBE ESPECIFICAR LAS CAUSAS DE MUERTE EN CADA CERTIFICADO DE DEFUNCIÓN” (sic).
El lunes 22 de febrero,
peritos de la PGR comenzaron con las exhumaciones de los bebés neonatos
fallecidos en los cuneros del HGR 1 en busca de las causas de los decesos. En
total fueron 10 exhumaciones las que se llevaron a cabo, y a seis meses de
distancia, la autoridad continúa sin revelar la información.
Para principios de este mes,
Jesús Gerardo Rodríguez Prado, delegado de la PGR en Sinaloa, señaló que el
informe de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) sería
determinante para el futuro de la investigación y, en su caso, fincar
responsabilidades.
En conferencia de prensa
celebrada el lunes 15, Cortez Mora y un grupo de madres afectadas, manifestaron
su preocupación ante la dilatación del resultado en las investigaciones de la
Procuraduría General de la República (PGR).
“Ante esta importante afirmación
hoy necesitamos manifestar nuestra postura como afectados respecto a la
participación que tendrá la Conamed en la investigación y en la emisión del
dictamen referente al expediente donde se acumularon las denuncias que
presentamos”, dijo Cortez Mora.
El temor tanto de Francisco
Cortez como de las demás familias afectadas es que la Conamed les patee la
investigación, por lo que la presión ante la PGR así como a la Comisión
Nacional de Derechos Humanos, quienes aún no emiten recomendación, continúa.
En total son 19 denuncias
penales las que esperan por una resolución, y a casi un año de destapada la
tragedia al interior de los cuneros del HGR 1 del IMSS, la justicia aún no
llega.
DETRÁS DEL RASTRO DE LA MUERTE
La primera muerte de un bebé
neonato por sepsis durante septiembre de 2015, ocurre el día 2, dicho bebé
nació a la 01:00 horas y a las 10:00 de ese mismo día fue declarado muerto.
Para el día jueves 10, el
área de cuneros presentó una anormalidad, según informaron fuentes oficiales,
por lo que a partir de entonces se comenzó con una serie de protocolos, mismos
que terminaron con la clausura temporal y reasignación de los pacientes a otra
zona del hospital.
A partir de ahí el bombardeo
oficial fue de que todo estaba bajo control, y que únicamente dos bebés habían
sido diagnosticados con sepsis, sin embargo, los hechos fueron poco a poco
superando a las versiones oficiales.
Para el 18 de septiembre los
cuneros patológicos fueron cerrados, por lo que autoridades comenzaron con
medidas de higiene y seguridad al interior del hospital, pero el daño ya estaba
hecho.
El 15 de octubre de 2015,
Francisco Javier Cortez Mora decide emprender la búsqueda de respuesta por su
cuenta. La versión oficial por el deceso de su bebé nacido el 30 de agosto de
ese año en el HGR 1 y fallecido el día tres de septiembre, lo puso tras el
rastro de la muerte.
Desde esa fecha emprendió la
búsqueda de la verdad, y de manera paralela, todas las versiones oficiales han
dilatado resultados, sin embargo, cada día se suman más familias a la búsqueda
de Francisco.
La primer cabeza en rodar fue
la del entonces director del HGR 1, el doctor Manuel Antonio Padilla Loera, y
posteriormente la del mismo delegado, Adalberto Castro Castro.
Y a cuenta gotas y por medios
propios, para Francisco Cortez y su familia las respuestas comienzan a brotar.
A un año de la tragedia que laceró a familias, el dolor de sepultar por partida
doble al hijo perdido y la ausencia de lógica en las explicaciones, no detienen
el camino que emprendieron en busca de la verdad.
La demanda de los deudos es
clara y sin segundas interpretaciones: el resultado del estudio forense que
arrojen las exhumaciones les dirá qué sucedió en los cuneros del HGR uno del
IMSS.
A casi un año de la tragedia
y a seis meses de las exhumaciones, las causas de los decesos en los bebés
neonatos del IMSS siguen dilatadas, igual que la justicia.
(RIODOCE/ AARÓN IBARRA/ 21 AGOSTO, 2016)
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