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Francisco Rodríguez Morales, padre de Everardo Rodríguez Bello: “O sea que
Enrique Peña Nieto sí pone atención, pero la cosa es que lo toma como un juego,
como a él no le pasó nada, a nosotros nos ignora por ser de escasos recursos”.
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Eleucadio Ortega Carlos, padre de Mauricio Ortega: “Como Enrique Peña Nieto
negó aceptar todas las ocho propuestas, pues no hubo nada, nada, ni hizo, ni
dijo algo, no, definitivamente nada; él con eso piensa que nosotros vamos a
dejar de luchar”
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Leonel Gutiérrez, papá de Aldo Gutiérrez: “¿Qué puede hacer uno? No puede hacer
nada, nada más aguantarse”
Dialogar
con los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa el 26 de
septiembre de 2014 es una manera de conocer al México abandonado,
menospreciado, ninguneado no sólo por las autoridades sino también por diversos
sectores de la sociedad mexicana que con mejores circunstancias económicas y de
estudios les piden que continúen su vida normal, que se regresen a sus pueblos,
que liberen las avenidas del Zócalo capitalino de su protesta.
Previo
a la manifestación del sábado 26 de septiembre, entre el miércoles 23 y viernes
25, Semanario ZETA platicó con algunos familiares de los normalistas
desaparecidos mientras realizaban un ayuno simbólico de 43 horas precisamente
en el Zócalo de la Ciudad de México a un año de la tragedia.
Durante
el ayuno que empezó el 23 a las 7:00 pm y terminó el 25 a las 2:00 pm, hubo dos
conferencias de prensa de los padres de familia ante cientos de medios de
comunicación.
Portando
pancartas con las fotografías y nombres de sus hijos, algunos dirigían los ojos
al cielo, otros se mostraban cabizbajos, muchos con la mirada perdida, había a
quienes se les salían las lágrimas, con sus rostros tétricos. En ninguno había
cabida para posar ante las cámaras ni para mostrar la más endeble sonrisa.
Para
dialogar con ellos hay que sortear a las organizaciones civiles, abogados, Cruz
Roja y una diversidad de involucrados que los rodean. En algún momento, al ir
al baño, son abordados para entrevista.
CLEMENTE RODRÍGUEZ MORENO, PAPÁ DE
CHRISTIAN ALFONSO RODRÍGUEZ: “NO VEMOS CLARO QUE PEÑA NIETO NOS QUIERA AYUDAR;
Y NUNCA NOS HA AYUDADO, PUES”
En
su camisa negra, Clemente Rodríguez porta en el pecho una imagen de su hijo
Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, desaparecido el 26 de septiembre de 2014
en Ayotzinapa, Guerrero. Su hijo iba en primer semestre, “apenas tenía dos
meses en la normal”.
Recordó
a su hijo como normalista: “Los estudiantes siempre iban a botear en las
carreteras, eran pacíficos, nunca le hacían nada a la gente y cualquier apoyo
que solicitara la gente, vamos a hablar de los campesinos, cuando solicitaban
un apoyo pues la gente los iba a traer para llevárselos, los estudiantes les
ayudaban en sus tierras, a sembrar, a ayudarles; siempre la gente los iba a
traer de Ayotzinapa cuando se inundó Tixtla, ahí fue un claro ejemplo, cuando
fueron los estudiantes a ayudarles a sacar sus cosas, a ayudarlos, a
protegerlos, y el gobierno por ese lado nunca los ayudó, siempre el Ejército
estaba a las orillas del agua y la gente acarreando sus cosas”, dice Rodríguez
Moreno al reportero.
También
denunció el comportamiento del Ejército en aquella zona: “En los artículos 13,
14 y 16 dice que cuando la sociedad requiera el apoyo del Ejército, el Ejército
debe de acudir, por decirlo así, por un desastre natural, y hacen todo lo
contrario: salen a las calles, salen a las comunidades, tanta policía, tantos
militares en los pueblos no es para protección, es nada más desaparecer, o para
golpear a la gente nada más”.
El
campesino recordó la tarde en que junto a los demás padres de familia se reunió
con el presidente el jueves 24 de septiembre:
“Yo
tuve enfrente a Peña Nieto, le dije muy claramente que él como representante
que supuestamente nos gobierna que nunca ha hecho nada para encontrar a los
muchachos; hay muchísimas desapariciones en el territorio mexicano; en su
mandato Peña Nieto ha hecho nada más desaparecer gente, matar gente”.
Originario
de Tixtla, Guerrero, enfatizó: “No vemos claro que Peña Nieto nos quiera
ayudar; y nunca nos ha ayudado pues, porque al principio cuando nosotros le
pedimos la ayuda pues nunca hizo nada”.
Luego
de la desaparición de su hijo Christian Alfonso Rodríguez, don Clemente
Rodríguez asegura que le cambió la visión del país:
“Yo
no sabía, por ejemplo, que al caminar en esta lucha desde el 26 y 27 de
septiembre de 2014 hasta la fecha, yo no sabía que el gobierno estaba
desapareciendo gente, entrenando policías, entrenando militares, policías que
se los llevaban a Estados Unidos, la entrenaban y se las traían para acá, yo no
sabía todo eso; yo no sabía que el gobierno estaba vendiendo el territorio, no
sabía que estaba vendiendo minerías, estaba privatizando el agua, no sabía que
el gobierno le quería quitar territorios a varias gentes para poner
aeropuertos; pero al caminar en esta lucha me he dado cuenta de muchas cosas, y
eso es lo que le duele al gobierno; eso es lo que hacen los muchachos, estarse
manifestando y lo que hace el gobierno, por eso el gobierno quiere desaparecer
a las normales, y es lógico que lo quiera hacer, porque eso es lo que le está
doliendo a él.
Finalmente,
advirtió: “Nosotros siempre hemos hecho marchas pacíficas, y con esto de
andarse manifestando, yo le dije a Peña Nieto, que si algo le pasaba a mi
familia, si algo le pasaba a los padres de familia, toda la culpa va a ser para
él”.
Francisco
Rodríguez Morales: “Al platicar con uno Peña Nieto luego, luego se ve
sospechoso”
“Vivos
los llevan, vivos los queremos”, es la leyenda que porta Francisco Rodríguez
Morales en el frente de su camisa gris.
Papá
de Everardo Rodríguez Bello, desaparecido el 26 de septiembre, Francisco
Rodríguez expresa que la consigna a un año de la tragedia es la misma:
“Que
nos los entreguen ya, lo más rápido que se pueda, porque ya es mucho tiempo,
los desaparecieron y no (hay) ninguna respuesta hasta ahorita”.
Refiere
que el presidente no ha cumplido las diez exigencias un año después: “Enrique
Peña Nieto nos había firmado 10 propuestas que le pusimos y hasta la vez no ha
cumplido ninguna”.
Un
día antes de la conclusión del ayuno, el jueves 24 de septiembre, papás de los
normalistas desaparecidos se reunieron con Enrique Peña Nieto para entregarle 8
peticiones entre ellas “que sean cumplidas las principales recomendaciones del
Grupo de Expertos Independientes (GIEI), debe darse un replanteamiento general
de la investigación y deben mantenerse los procesos de búsqueda”.
Participante
en la reunión con Peña Nieto el jueves 24, Francisco Rodríguez asegura: “Las
ocho propuestas son casi las mismas: Reforzar la búsqueda con los policías, que
ampliara más a otros lugares donde no se ha buscado, no nos aseguró nada, nada
más dijo a ver si se podía hacer. Hoy quisimos plantearle de nueva cuenta,
tomarlo en cuenta y plantearle ocho propuestas, pero salió con lo mismo de
anteriormente, no nos resolvió ninguna hoy. No nos firmó nada, de ninguna
propuesta que le llevamos se hizo responsable de resolver”.
Se
le pregunta a Rodríguez cómo es la actitud de Peña Nieto frente a los padres de
Ayotzinapa y contesta contundente: “O sea que Enrique Peña Nieto sí pone
atención, pero la cosa es que lo toma como un juego, como a él no le pasó nada,
a nosotros nos ignora por ser de escasos recursos, pero pues nosotros tenemos
todo el derecho de reclamar por (los) nuestros porque es la obligación de
nosotros, como mexicanos tenemos toda la responsabilidad de reclamar, son
nuestros derechos.
“Nosotros,
por lo que lo notamos, que el presidente sí sabe del problema este; sí sabe
porque al llegar, al platicar con uno luego, luego Peña Nieto se ve sospechoso,
por eso le digo que de todas sus mentiras que anda sacando en contra de
nosotros no se las vamos a creer, ninguna se las vamos a creer, precisamente
como los chavos que quiere entregar que dizque fueron quemados los dos,
Alexander Mora y Jhosivani Guerrero, que les dijimos que no, porque no nos han
entregado las pruebas; cada vez que uno le saca sus verdades ellos tratan de
defenderse con mentiras pues, para que uno ya no le siga moviendo”.
Don
Francisco Rodríguez adelantó que “nosotros después de la marcha, comoquiera nos
vamos a seguir movilizando, a como dé lugar vamos tener que tomar otras
decisiones para tratar de localizar a los chavos donde los tengan, los tenemos
que encontrar”.
—
¿Usted tiene la seguridad de que los estudiantes desaparecidos el 26 de
septiembre de 2014 en Ayotzinapa están vivos o en alguna parte?
“O
sea que nosotros tenemos la seguridad de que así como ha sacado puras mentiras
para nosotros están vivos ellos. Hemos tenido mucha información que sí están
vivos. Muchos apuntan al Ejército 57 Batallón de Iguala, y precisamente son los
batallones que cuando vamos a querer entrar no nos dejan entrar los militares;
yo pienso que si no ocultan nada ahí pues no tienen por qué ponerse molestos,
para nosotros ir allá a investigar ahí adentro pues; precisamente queremos
investigar ese cuartel, revisarlo, porque los militares intervinieron esa
noche”.
Para
concluir la entrevista, Francisco Rodríguez comparte su reflexión sobre cuando
algunos sectores de la sociedad les piden que acepten que sus hijos están
muertos:
“Nosotros,
comoquiera, toda la gente que nos está apoyando está bien, la que no, pues
depende a su conciencia de ellos pues, cada quien, no los podemos obligar
porque la responsabilidad de buscarlos es de nosotros, porque son hijos de
nosotros”.
ELEUCADIO ORTEGA CARLOS: “NO CONFIAMOS
EN EL GOBIERNO MEXICANO, PORQUE ES MUY MENTIROSO”
Eleucadio
Ortega es productor de café en Ayutla de los Libres, Guerrero, sus manos
negras, tostadas por el trabajo en el campo, recuerda que su hijo Mauricio
Ortega terminó la preparatoria en aquella localidad; su hijo iba en primer año,
tenía dos meses en la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa.
Don
Eleucadio recordó cómo ha sido este año luego de la desaparición de los
normalistas de Ayotzinapa:
“Murillo
Karam (ex procurador general de la república) dijo que se quemaron todos, pero
nosotros no creemos, y otra vez nos exigía recibir los cuerpos de 28 de jóvenes
normales de Ayotzinapa, dijeron que eran nuestros hijos, nosotros dijimos que
no, gracias a los argentinos, hicieron el estudio y todos (los) cuerpos que se
encontraron ahí eran de otras personas, no es el hueso de los jóvenes normales
de Ayotzinapa, por eso ahorita ya no creemos, por eso nosotros en pie de lucha,
nosotros ahorita en este momento estamos exigiendo al gobierno mexicano que nos
entregue vivos a los 43 estudiantes”.
Eleucadio
Ortega Carlos también participó en la reunión con Enrique Peña Nieto el jueves
24 de septiembre de 2015:
—
¿Creen en la propuesta de Enrique Peña Nieto de una fiscalía especial para
desaparecidos?
“No,
nada de eso, porque es fiscalía del gobierno, por eso no creemos; se le dijo
ayer que muchas mentiras ha venido diciendo, ya no le creemos, son puras
mentiras, aquí en México no hay justicia para los pobres, para los mexicanos;
ahora estamos exigiendo que el gobierno nos entregue a nuestros hijos, sabemos
que es muy mentiroso el gobierno mexicano, por eso estamos en pie de lucha
hasta que caiga el gobierno mexicano, porque no es justo que nos sigan
engañando, nos sigan pisoteando, nos sigan haciendo maldades en este país, por
eso ahora estamos en pie de lucha hasta que nos entreguen vivos a los 43
estudiantes”.
También
evocó la actitud de Enrique Peña Nieto frente a los familiares de los
normalistas:
“Como
Enrique Peña Nieto negó aceptar todas las ocho propuestas pues no hubo nada,
nada, ni hizo, ni dijo algo, no, definitivamente nada; él con eso piensa que
nosotros vamos a dejar de luchar, no; nosotros vamos a exigir que presente a
los 43 estudiantes.
“Nosotros
le dijimos que son ocho puntos, pero como él no dijo nada, no dio la respuesta,
por eso así quedó. No confiamos en el gobierno mexicano, porque es muy
mentiroso y así quedó, salimos y luego de salir nos pusieron a esos cabrones
(Estado Mayor Presidencial), no nos dejaban pasar”.
Al
final solicitó: “No dejen de apoyar a los 43 padres de familia y con el apoyo
de ellos encontraremos a nuestros hijos”.
LEONEL GUTIÉRREZ: “ESTO VA PA’LARGO”
El
campesino Leonel Gutiérrez muestra al reportero una pancarta como de metro y
medio por unos ochenta centímetros. Luego de desplegar la manta, aparece la
foto de su hijo Aldo Gutiérrez, de 20 años de edad, con la leyenda: “Herido de
bala por la policía de Iguala, el 26 de septiembre de 2014”.
“Él
fue agredido ahí en Iguala el día 26, quedó mal, le dieron un balazo en la
cabeza y está inconsciente, está todavía en estado de coma, vegetativo pues;
ahí lo están atendiendo en un hospital aquí en México, en el Hospital Nacional
de Neurología, y estamos viniendo a verlo, ahí está internado pues”, expresa al
reportero don Leonel Gutiérrez.
Aunque
sí puede ver a su hijo, obviamente no puede hablar con él, por eso expresa al
reportero cómo se siente luego de un año:
“Yo
cuando vengo voy a visitarlo al hospital, en la noche me quedo allá. Tanto como
él como nosotros estamos aguantando porque estamos acompañándolo, y él un año
sufriendo en cama”.
Se
le pregunta al campesino cómo le está haciendo para cubrir algunos gastos luego
del estado vegetativo de su hijo:
“Nosotros
ni sabemos quién se está haciendo cargo de todo eso, ahí lo trajimos pero no
sabemos quién se está haciendo cargo de todo eso, le hicimos de encargo a ellos
que cubrieran los gastos pues, porque esto de mi hijo es muy tardado, no es una
cosa de unos meses ni un año, son varios años para que él se pueda recuperar,
pues no sabemos”.
Por
eso solicitó apoyo: “Lo que diría pues a Enrique Peña Nieto que se hiciera
cargo de curar a mi hijo, lo que cueste, lo que vaya a costar la curación o el
tiempo que vaya a ser”.
“Nosotros
somos gente campesina pues, que no tiene recursos para eso, ahí en los
hospitales son muy costosos, se le ha dicho que ellos se hagan cargo, pues,
porque nosotros no tenemos recursos; pues yo lo que pediría es que lo sigan
apoyando para que él pueda permanecer en el hospital”.
Leonel
Gutiérrez concluye sobre lo que seguirá después de este primer aniversario:
“Pues no sabemos ahorita qué vaya a seguir, porque ya ve que esto va pa’largo,
pues, no sabemos qué dirección podamos agarrar, ahí lo que venga; se siente
duro, da coraje, da tristeza, está sufriendo, se siente uno indignado por eso,
pero ¿qué puede hacer uno? No puede hacer nada, nada más aguantarse”.
(SEMANARIO
ZETA/ REPORTAJEZ/ Enrique Mendoza Hernández / Fotos. Enrique Mendoza/ 05 de Octubre del 2015 a las 12:00:20)
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