LA IMPUNIDAD GALOPANTE

Afirman que grupo armado que secuestró y atacó a familia que viajaba a Mazatlán habría sido el mismo que perpetra balaceras y “levantones”

Para algunos elementos de las diversas corporaciones policíacas, el secuestro  y ataque sufrido durante dos horas, por una familia sinaloense en la carretera México 15, en las inmediaciones de El Quelite, se suma a la lista de atentados criminales perpetrados por un grupo armado que protagonizó la balacera en El Recreo, el pasado 17 de enero.

Aseguran que desde diciembre de 2015 a la fecha, en esa zona controlada por dicho grupo delictivo “levantaron” (privación ilegal de la libertad) al menos a tres personas, que hasta el momento no se ha sabido si están vivas o muertas.

Sostienen no tener conocimiento si las familias de los desaparecidos pusieron denuncia formal, pero dos de los “levantados” respondían a los apodos del güero y el angelito, mientras que del tercero sólo se conoce que trabajaba en un expendio de cerveza.

“Ese grupo armado no nomás llegó a armar un desmadre en El Quelite y El Recreo con sus balaceras y ‘levantones’ sino que ahora atacó a una indefensa familia sinaloense”, dijo uno de los elementos policiacos consultados.

Otro de los policías aseguró que por el tipo de preguntas (“¿para quién trabajas?”) que los secuestradores encapuchados hicieron a los hombres integrantes de la familia atacada, las sospechas recaen directamente en los “cuidadores”, también conocidos como “halcones” y “punteros” que vigilan esa plaza.

“Son los que cuidan esa plaza para que no se les meta a su territorio gente de otros grupos delictivos foráneos”, dijeron.

CONTEXTO

La semana antepasada, una madre de familia denunció ante el diario Noroeste que la noche del 24 de marzo, un grupo armado había atacado a su esposo, y a un primo de éste, y que a su hija de 22 años la habían violado, mientras ella protegía llorando y con impotencia a su otra hija pequeña.

La afectada relató que con motivo de Semana Santa viajaban en su camioneta rumbo al puerto de Mazatlán, cuando un grupo armado los atacó en las inmediaciones del El Quelite, en la carretera libre Culiacán-Mazatlán.

“Salimos como a las seis de la tarde de la casa, pasamos por el primo de mi esposo. Yo iba atrás con mis dos hijas, una es menor; estaba dormida, pero me desperté porque la camioneta se detuvo. Vi que había un restaurante y una gasolinera, me dijo mi esposo que su primo iba a orinar y en ese momento nos llegaron, salió un grupo de cinco hombres, dispararon, todos estaban armados y encapuchados”, narró la señora al diario.

La víctima dijo al periódico Noroeste que a su esposo lo subieron a la camioneta, y a su primo le dispararon, a él lo creyeron muerto, pues quedó tirado al pie de la carretera.

“Yo me puse arriba de mis hijas para protegerlas, y ahí aventaron a mi esposo; los hombres se subieron en la parte de adelante y se dieron vuelta en ‘u’. Nos metieron a un camino”, contó la mujer al periódico.

“Siempre nos apuntaron con sus armas largas, a mi esposo lo separaron, le detuvieron las manos y le taparon la cabeza, a mi me arrebataron a mi hija y se la llevaron atrás, abusaron sexualmente de ella…”, detalló.

La damnificada describió al periódico local cómo habían llegado al poblado de El Quelite a pedir ayuda, pero no encontraron  solidaridad sino miedo.

“En la madrugada recibieron ayuda en una tienda en la entrada de Mazatlán, y más tarde denunciaron en la Subprocuraduría Regional de Justicia en la Zona Sur, donde la averiguación previa está abierta”, pero hasta la fecha, según ha dicho el titular Jesús Antonio Sánchez Solís, todavía no hay detenidos.

BANDAZO DE FELTON

“No sé qué pueda haber pasado, algún tipo de gavilla que pueda andar operando por ahí, pero nada de qué alarmarse”,  dijo el 1 de abril el alcalde Carlos Felton González, al referirse al secuestro y ataque sufrido por la familia sinaloense.

Al preguntarle a los policías consultados sobre qué pensaban del “nada de qué alarmarse” del presidente municipal, opinaron que seguramente así habría dicho Felton González, cuando un mando policiaco tuvo que salir de El Quelite, porque el grupo armado que controla la plaza pretendía ordenarle cómo trabajar a partir del año 2016, que inició en medio de cruentas balaceras.

Afirmaron que los altos mandos policíacos están informados de que camionetas con hombres fuertemente armados y en motocicletas circulan en pleno día por las calles de El Quelite, y que cualquier día los policías asignados en dicha sindicatura van a repetir la corrida del video de Cristo Rey, Escuinapa.

“Los policías nomás son espectadores, no pueden hacer nada, ni con una ‘bazuca’ que llevaran, porque los malandrines son más de cien”, argumentan.

La semana antepasada en Mazatlán, el gobernador Mario López Valdez fijó su posición ante los diarios locales, sobre el hecho criminal donde la joven de 22 años fue agredida sexualmente: “lo estamos investigando, así como aclaramos el asesinato de uno de los extranjeros en uno de los condominios privados, seguro estoy que vamos a dar con ellos.

“Estamos cuidando todos los rincones de Sinaloa, y más rincones especiales como es El Quelite, hace unos meses tuvimos ahí la presencia de un grupo armado, después hubo otras cosas, se presenta ahora esto. La verdad que todos los días nosotros no paramos, la gente no descansa en su trabajo de buscar mejores condiciones de seguridad”, dijo el ejecutivo estatal.

HECHOS Y DICHOS

31 de marzo. El diario Noroeste Mazatlán publica el secuestro y ataque sufrido por una familia sinaloense, perpetrado por un grupo delictivo que controla dicha zona, en las inmediaciones del poblado El Quelite, donde una joven de 22 años fue violada.

1 de abril. Carlos Felton González, alcalde de Mazatlán, al ser cuestionado al respecto, dijo: “nada de qué alarmarse…”

(RIODOCE/ Cayetano Osuna/ 10 abril, 2016)