En
la capital bajacaliforniana, la espiral de crímenes se mantiene, con 63
homicidios violentos -15 de mujeres- en lo que va de este año. El móvil varía
entre pleitos por narcomenudeo, robos, pasional y enfrentamientos entre
pandillas. Cifras oficiales indican un descenso en asesinatos, solo en los
meses de abril, mayo y junio; en julio la jornada homicida recrudeció. Empiezan a surgir
víctimas inocentes
Un
joven comerciante que estaba reportado como desaparecido fue localizado en un
paraje del Valle de Mexicali con dos balazos en la cabeza, a bordo de una
camioneta BMW con placas sobrepuestas el lunes 20 de julio. Esa misma noche,
una pareja fue baleada en su domicilio en Jardines del Lago -el varón murió a
raíz del ataque y la mujer resultó lesionada en una pierna- y, horas después,
otro hombre fue hallado en la Zona Poniente de la ciudad, encobijado, con pies
y manos sujetadas, y la cara destrozada por los golpes.
El
mismo día por la tarde, un individuo irrumpió en un domicilio del
fraccionamiento popular Lomas Altas y baleó a su ex esposa que estaba con su
nuevo novio, los dos quedaron heridos y, ante su inminente detención, optó por
darse un balazo.
Los
hechos aparentemente no tienen relación, pero todos se cometieron en menos de
24 horas y en Mexicali.
De
acuerdo a datos oficiales, hasta lo que va del mes de julio en la ciudad
capital se han suscitado 63 homicidios, 12 de estos durante lo que ha
transcurrido del mes de julio.
La
cifra incluye otros casos, como el de la joven madre de familia acribillada a
balazos la noche del sábado 12 de julio en su casa del fraccionamiento Hípico,
aparentemente para robarle su auto, o el asesinato de un hombre en el
fraccionamiento Valle de Puebla esa misma noche, mientras se encontraba afuera
de su casa y con su familia disfrutando de una carne asada; o lo sucedido el
domingo anterior en la colonia Santa Cecilia, donde un hombre de 32 años fue
ultimado de un balazo en la cabeza.
Pese
a la violencia, las cifras oficiales muestran que los asesinatos en Mexicali
han disminuido, sobre todo en relación a 2014, donde sumaron 76 durante los
primeros siete meses del año. Actualmente, a una semana de que concluya el mes
de julio, la suma siniestra va en 63 cadáveres. El primer trimestre no hubo
diferencia en comparación con el año pasado, 33 muertos en 2014, y 34
homicidios en 2015; la diferencia la marcó el segundo trimestre. Mientras de
abril a junio de 2014 mataron a 34 personas, este año el registro incluyó 17
homicidios en ese período.
En
lo que respecta a julio, en 2013 hubo 13 asesinatos, nueve en 2014 y 12 en lo
que va de 2015.
Según
los investigadores que han seguido estos casos, en algunos de los incidentes sí
hay un móvil relacionado con narcomenudeo, pero hay otros con tinte
pasional -en los cuales la victima
conocía a su agresor, o tenían una relación sentimental o laboral-, y en otros
aparentemente la intención original era el robo.
NOCHE TRÁGICA
La
pistola calibre 9 milímetros utilizada en el crimen de Irene García Durán
-asesinada el 12 de julio, afuera de su casa en el fraccionamiento Hípico- está
relacionada al menos con otros dos delitos. En la escena se localizaron cuatro
casquillos y la joven mujer (sobrina de la procuradora Perla Ibarra) tenía cinco impactos de bala, se presume que
uno fue de entrada y salida.
De
acuerdo a los datos, Irene llegó a su casa ubicada en Argentina y Juan de Dios
Peza, en el fraccionamiento Hípico. Esa noche, su marido, Eloy Germán Moreno
-hijo del ex delegado de turismo en Mexicali, Eloy Moreno- se encontraba fuera
de la ciudad, se había llevado a su hijo mayor y ella se quedó con una bebé de
dos meses.
Al
llegar el marido observó el Toyota blanco que ella utilizaba estacionado dentro
del lote y todo parecía normal, pero
encontró las luces de la casa apagadas, desactivó la alarma, entró a la
residencia y no encontró a su mujer. Las puertas del cerco estaban abiertas.
Al
revisar el entorno se asomó al vehículo y dentro miró a su pequeña hija sentada
en el portabebé, al dar la vuelta al auto, se topó con el cuerpo de su esposa
tirado en el suelo y al revisarla notó las huellas de sangre. Frente a su
domicilio estaba un agente municipal realizando una infracción, le avisó. Entre
los dos revisaron el cuerpo y encontraron los casquillos cercanos. Ella tenía
las llaves del auto apretadas en la mano. El marido desactivó la alarma del
auto y sacó a la menor.
En
el auto estaba la pañalera y las pertenencias de la joven madre, nada le
robaron, sin embargo, los ministeriales insisten en que el motivo fue
despojarla del auto. Los investigadores presumen que el agresor llegó, forcejeó
por las llaves del vehículo pero -por la presencia de su hija en el asiento posterior
del automóvil- la mujer se negó a entregárselas, y recibió cuatro impactos de
bala.
Horas
después, cerca de las tres de la mañana, en el número de Emergencias 066 se
recibió un reporte por detonaciones de arma de fuego en el fraccionamiento
popular Parajes del Puebla, en la casa marcada con el número 715 de la calle
Cerro Pinto. Ahí quedo herido Gerardo Gutiérrez Vega, de 36 años, y sus dos
hijos, Gerardo de 14 y José Luis de 7 años. Los tres fueron lesionados con
disparos de una pistola calibre 9 milímetros y, de acuerdo con investigaciones,
la misma arma fue utilizada horas antes en el crimen de Irene García.
Los
primeros datos arrojan que Gutiérrez Vega se encontraba en su casa junto con un
conocido consumiendo droga, y en algún momento hubo una desavenencia que derivó
en la agresión a balazos. Hasta el momento Gerardo Gutiérrez -quien tiene
antecedentes por varios delitos- permanece hospitalizado, y el caso sigue sin
avances.
En
el análisis pericial de los casquillos, los investigadores encontraron que esta
arma, usada en los dos ataques, también se empleó en un intento de robo en
marzo de 2015, cerca de una tienda de abarrotes en la carretera que lleva al
Aeropuerto de Mexicali. Ahí, un hombre de origen norteamericano fue baleado al
intentar robarle su auto, un Mitsubishi Lancer 2003. Al verlo herido y
ensangrentado, los violentos ladrones optaron por huir.
HECHO EN MÉXICO
La
mañana del lunes 20 de julio fue localizado el cuerpo de un hombre en la parte
Poniente de Mexicali, cerca de la zona conocida como Los Virreyes. Estaba
envuelto en una cobija, con manos y pies atados con una soga amarrilla y un
calcetín al cuello.
“Tenía
muchos golpes en la cara”, expuso uno de los investigadores que ha seguido el
caso. El cuerpo exhibía varios tatuajes -uno en la pantorrilla izquierda que
decía “Hecho en México”, otro con la leyenda “Maritza” y, según investigadores
de la Procuraduría General de Justicia del Estado, no tiene ningún reporte de
desparecido en esa zona de la ciudad.
Calculan
que tenía cerca de 20 días tirado en el lugar y no hay más datos sobre el
posible móvil, aunque los investigadores presumen podría tratarse de un ladrón
que operaba en la zona.
En
otro incidente, cerca de las 7:30 pm del domingo 19 de julio, en el número de
Emergencias 066 reportaron una camioneta en un solitario paraje de la colonia
Carrancita, en el Valle de Mexicali.
Se
trataba de un BMW X3 2003 con placas fronterizas BHV 3750, las cuales
corresponden a un Dodge Stratus 1996. Dentro del auto estaba el cuerpo sin vida
de quien fue identificado como Jesús Junior Olvera Villanueva, de 34 años,
reportado por su esposa como desaparecido un día antes.
Él
era hijo de un panista conocido públicamente en el puerto de San Felipe, el
profesor Jesús Olvera, ex delegado municipal durante la administración de Jaime
Díaz -2001 a 2004-, incluso fue integrante de la planilla que encabezó el
actual secretario general de Gobierno en el Estado, Francisco Rueda Gómez,
cuando este buscó -y perdió- la candidatura por la alcaldía en 2010, ante Raúl
López Moreno, quien a su vez fue derrotado en la elección externa por el
priista Francisco Pérez Tejada.
El
joven Olvera tenía tres impactos –uno en boquete- en la cabeza que al parecer
fue por sedal, de lado y otro en la nuca. Estaba sentado en el asiento del
piloto y reclinado hacia la derecha, con la puerta abierta. No hay muchos datos
sobre la investigación, aparentemente no hubo robo, ni el occiso tenía
antecedentes penales, y con base en datos aportados por la esposa, se dedicaba
a la venta de vehículos.
Adicionalmente,
la noche de ese domingo una pareja fue baleada cuando se encontraba en su
domicilio -Lago Baikal número 562, Jardines del Lago- cuando de repente entró
un hombre armado, con la cara cubierta con pasamontañas y disparó contra ambos.
El hombre, Saúl Aragón González, de 32 años, quedó gravemente herido, y la
mujer, Mirna García, solo recibió un impacto en la pierna. Horas después el
sujeto herido falleció y el agresor no ha sido detenido. La presunción oficial
es que pudiera tratarse de un móvil de tipo pasional.
Otro
caso se dio el lunes 20 de julio, cerca de las tres de la tarde, en el
fraccionamiento popular Lomas Altas – al sur de la ciudad-, hasta donde
llegó un empleado del Ayuntamiento de
Mexicali, Francisco Adrián Ramírez, a la casa de su ex esposa, Dulce María
Ríos, de 39 años, quien se encontraba con su nueva pareja sentimental, Juna
Rafael Rodríguez, de 23. Sacó una pistola y los baleó, para luego salir en
huida.
En
el intento de escape se topó con una patrulla del grupo SWAT -el C4 ya había
sido avisado de los disparos-, el carro del agresor y el vehículo oficial
tuvieron una pequeña colisión y el presunto responsable en fuga se impactó de
nuevo contra el auto de un civil. Al verse copado se suicidó. Una de las
versiones apunta que el agresor estaba enojado con la pareja, debido a que era
objeto de burla.
DROGA
Un
caso presumiblemente relacionado con narcomenudeo fue el de un sujeto abatido
en mayo en la zona del Parque Juventud 2000 -al sur de Mexicali-, no han
avanzado en la indagatoria, pero asumen el móvil porque el hombre tenía
antecedentes por narcotráfico en Tijuana. “Se presume que venía huyendo, lo
ubicaron, le pegaron y abandonaron el vehículo y los agresores -a bordo de un
Grand Marquis- huyeron”, explicó uno de los investigadores.
El
incidente fue en plena mañana, el miércoles 27 de mayo cerca de las 7:00 am,
por la calle Laguna Viesa, de acceso al concurrido parque deportivo ubicado en
la zona de Villas del Rey; hasta ahora no ha habido detenidos. La víctima fue
identificada como Jesús Armando Pérez Cortez, de 35 años y originario de
Tijuana, donde tenía un largo historial delictivo.
RECHAZAN POSIBLE LIBERACIÓN DE DOBLE
HOMICIDA
Ante
la posibilidad de que un joven que hace cinco años asesinó primero a su padre y
posteriormente a una jovencita de 15 años que había sido su novia, los
familiares de esta rechazan la posibilidad de que el precoz criminal sea puesto
en libertad.
“Él
no está bien” considera Adriana Meraz, madre de la joven Andrea Berrelleza, una
de las víctimas de Eduardo, quien en el momento de la agresión contaba con 17
años de edad. Ella dice temer por su familia, por sus hijas, y considera
injusto que el joven homicida pueda obtener la libertad con apenas cinco años
de internamiento. “Yo veo que aquí los criminales tienen más derecho que
nosotros los civiles. Tengo mucho coraje, mucha indignación”, refiere la
señora.
Esto
ante el anuncio de una audiencia en el Juzgado de Adolescentes en Mexicali
programada para el lunes 27 de julio, donde el punto principal tiene que ver
con la llamada adecuación de medida, un beneficio incluido en la Ley de
Justicia para Adolescentes que implica que al cumplirse las tres quintas partes
de la sentencia –impuesta por nueve años-, se analice la posibilidad de que los
cuatro años que le restan los lleve en libertad, fuera del llamado Centro de
Ejecución de Medidas, antes conocido como la Escuela Granja.
La
audiencia ha sido programada para efectuarse cerrada, donde solo podrán
ingresar las partes involucradas y sin acceso a la prensa.
“No
es una decisión ya tomada, la audiencia no implica que necesariamente vaya a
obtener el beneficio”, explica el juez de adolescentes, Álvaro Castilla Gracia.
De
acuerdo a Castilla Gracia, corresponde al Cuerpo Técnico disciplinario mostrar
los resultados del programa personalizado que esta instancia elaboró para el
joven, hoy de 22 años. Al preguntar si se diera el caso de la liberación, quién
se haría cargo del joven, Castilla expone que es uno de los puntos principales
a analizar en la audiencia.
El
joven está sentenciado por dos asesinatos que en su momento atrajeron la
atención de la opinión pública en Mexicali. El miércoles 17 de febrero, Andrea
Berrelleza, de apenas 15 años y estudiante de secundaria, fue encontrada muerta
en la recámara de su casa, en el fraccionamiento El Lienzo. Estaba severamente
golpeada.
Sospechaban
de su ex novio, Eduardo, de 17 años, Al buscarlo en su domicilio en Villas del
Rey, encontraron el cadáver del padre del joven, el doctor Eduardo Robinson
Romo. Le asestaron 39 puñaladas (ZETA 26 de febrero de 2010).
(SEMANARIO
ZETA/ REPORTAJEZ/ Sergio Haro Cordero /
Cristian Torres/ 27 de Julio del 2015 a
las 12:00:41)
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