Carlos Garmiño González o Edgar Navarro Águila,
"El Karateka"
Con la captura de “El
Karateca” el Consejo Estatal de Seguridad pretende frenar la reestructuración
del Cártel Arellano Félix y forzar la visibilidad de “El Piloto” para
capturarlo.
Asimismo frenar la ola de
homicidios por el control territorial. Las autoridades aseguran que Garmiño
habló de sus socios que incluyen policías que están siendo investigados.
Carlos Garmiño González “El
Karateca”, miembro del cártel Arellano Félix y detenido hace unos días,
confirmó lo que ya se sabía y en este espacio se había publicado, pero que
algunas autoridades se rehusaban a reconocer:
El CAF está siendo comandando
–en su reestructuración– por un joven de apodo “El Piloto” y de apellidos
Arellano Corona.
Por tanto, ahora sí, asumen
en las corporaciones de Baja California y nacionales, se trata de uno de los
hijos de Benjamín Arellano Félix.
La información recabada por
ZETA, da cuenta de la administración criminal de “El Piloto” en una estructura
similar a la que tenían su padre y su tío Ramón.
Incluso con hombres y mujeres
de negocios locales dedicados al lavado de dinero. Células para el trasiego de
la droga y un brazo armado para la ejecución de rivales. El delator de “El
Piloto”, Carlos Garmiño, no es nuevo en el organigrama criminal de los
Arellano.
La justicia federal lo tuvo
en la mira antes que el Consejo Estatal de Seguridad Pública de Baja
California, al incluirlo, con orden de aprehensión, en un expediente abierto
por secuestro, cometido por la célula criminal encabezada por Pedro Ignacio
Zazueta y/o Rubén Ríos Estrada “El Pit”, capturado en mayo del 2012 y
convertido en testigo protegido en el sexenio del presidente Felipe Calderón.
Alan Fernando Garmiño Moreno de 25 años; Juan Alberto Juarez Cabrera, “El
Bananas”, de 30 años
La información revela que
previo a la captura de “El Karateca”, su ascenso dentro del CAF fue a partir
del asesinato de Esaúl Sahagún Pelayo “El Ruso” y/o “el Primo”, ejecutado el 9
de abril de 2015 junto a su mano derecha, Luis Manuel Toscano Rodríguez “El
Mono”, identificado como controlador del tráfico de enervantes en la zona norte
de Tijuana.
Para dimensionar el poderío
criminal, uno de los investigadores refirió a ZETA:
“Es la demarcación en la que
se mueve más droga; desde donde se hace distribución, y clave en el trasiego a
Estados Unidos, por eso controlarla es importante para los cárteles”.
A la muerte de “El Mono”
–completa–, los delincuentes de Garmiño iniciaron enfrentamientos contra
parientes de “El Mono” que intentaban repartirse y quedarse con la zona. Al
mismo tiempo los descendientes de Toscano, se enfrentan a los del Cártel de
Sinaloa.
En mayo de 2015 fueron
capturados los Toscano, Alberto Ávila “El Chacal” cuñado de “El Mono”, y los
cuates Roberto Carlos (lesionado a balazos a finales de enero de 2016) y Marcos
Rafael Toscano Rodríguez –después liberados–, y hermanos del cabecilla
asesinado un mes antes.
En análisis policíaco se
asienta que la presentación pública de “El Karateca” se dio a través de un
narcomensaje colocado en un auto abandonado el 31 de julio de 2015, sobre la
avenida Internacional rumbo a Playas. No decía mucho, y las primeras versiones
fallidas indicaban que dentro del carro había una bomba.
En la cartulina se leyó:
“Luis tienes 24 horas para entregar la plasa si no eso
ba a seguir pasando” y lo firmaba “Cinta Negra”, los analistas indican que con este texto Garmiño le
pedía a los matones de los Toscano que abandonaran su lucha interna por el
territorio.
Y es de agosto de 2015 hasta
febrero de 2016 que en las detenciones los criminales empezaron a declarar
sobre la existencia criminal de “El Karateca” y/o “El Ninja”.
INFORMACIÓN SOBRE “EL KARATECA”
La secretaría de seguridad del estado informó
a través de un comunicado que en agosto de 2015 obtuvieron más datos sobre este
hombre identificado como mano derecha del actual líder del CAF.
Quien ofreció mayor
información fue Benjamín Orozco Montero, capturado el jueves 6 de julio de
2015, cuando fue intervenido por elementos de la PEP mientras circulaba a bordo
de un auto “Kia Sportage modelo 2001, azul, con placas extranjeras 6XVY532” en
el bulevar General Rodolfo Sánchez Taboada de la zona Río. En el auto también iban José Israel Villa
Quiñones de Sonora y Jorge Guzmán González de Tijuana.
Durante la revisión del auto
aseguraron 4 armas largas, 9 pistolas, todas abastecidas en total con 100
balas; 6 cargadores, abastecidos con 60 balas; 3 cartuchos calibre 12; 2
máscaras de tela color negro; y 1 radio de frecuencia Motorola RDV2020.
Indicaron que la información
se acumuló el 11 de enero de 2016 tras la detención de Adrián Medina Nieto, “El
Triunfo”, conductor de taxi libre, luego que al marcarle el alto cuando
circulaba a exceso de velocidad y sin placas, intentó huir por la carretera
escénica Rosarito-Ensenada.
En el interior del taxi
localizaron una granada de fragmentación con espoleta y cuatro armas de fuego
de distintos calibres.
LA CAPTURA DE GARMIÑO
Quienes conocen a Carlos Garmiño González de
manera personal comentaron: “…era un niño bien de Playas (delegación en
Tijuana), sin problemas”.
Agregaron, “…apenas hará unos
seis meses que se empezó a saber que andaba en cosas raras, después que se
murió su papá”. Hasta el viernes 26 de febrero, cuando vía boletín se informó
que “El Karateca”, identificado como mano derecha de “El Piloto”, sobrino de
los hermanos Arellano Félix y actual líder del CAF, fue detenido por la Policía
Federal con apoyo de la Policía Estatal.
Jose Israel Villa Quiñones,
de 31 años, Benjamín Orozco Montero de 29 años y Jorge Guzmán González de 18
años Detallaron que había sido consignado el jueves 25 de febrero en compañía
de su primo Alan Fernando Garmiño Moreno, y su escolta, Juan Alberto Juárez
Cabrera, alias “El Bananas”.
La detención, “fue sobre la
carretera federal número 2, San Luis Río Colorado-Mexicali, a la altura del km
47, en dirección a la capital de Baja California, zona en la que los detenidos
ofrecieron dinero y el vehículo que tripulaban, a cambio de su libertad”.
Abundaron:
“Al momento de ser detenidos,
los presuntos responsables se desplazaban en una camioneta marca General
Motors, tipo Sierra, color negro, en posesión de un arma larga calibre .223 mm
abastecida con 16 cartuchos útiles, tres armas cortas abastecidas con 26
cartuchos útiles, siete envoltorios con ‘ice’ y varios teléfonos celulares”.
Precisamente es al padre de
“El Karateca”, fallecido de cáncer el año pasado, a quien las autoridades de
Baja California le endosan la relación primaria de esa familia con la guardia
del Cártel Arellano Félix (CAF):
“Operó con los hermanos, era
del viejo CAF, esos que se dedicaron al lavado de dinero y se quedaron con
negocios de yonques y venta de autos”.
Los Garmiño, tienen casas en
Estados Unidos, algunos nacieron en San Diego o Los Ángeles, y uno de sus lotes
de autos está cruzando la línea en California.
Respecto a estos viejos
miembros del CAF ejemplificaron con el policía municipal y el ex ministerial,
Luis Arturo y Carlos Cosme Espinoza, respectivamente, cuyo yonque ha sido
baleado en dos ocasiones. Y el ex agente municipal Blas Enrique Leyva Esparza,
asesinado en julio 2015 en el interior de su yonque.
Los tres estuvieron presos
por sus presuntos nexos con el Cártel Arellano y fueron liberados. La
indagatoria abierta alrededor de la gente de “El Karateca” permitió a las
autoridades involucradas darse cuenta que en los últimos años, los Garmiño
habían hecho amistad con policías estatales, ministeriales y municipales, a
quienes originalmente engancharon convirtiéndolos en clientes de su venta de
autos usados. Les vendían los autos con descuento.
AGENTES INVOLUCRADOS CON LA MAFIA
En su primera entrevista,
Carlos Garmiño González habló de estas relaciones. Por lo que la indagatoria
incluyó el nombre de Roberto Pérez García, un ex comandante de la Policía
Estatal Preventiva –actualmente en tropa– apodado “El Kilo Pelón”, como
presunto confabulado.
También revisan la relación
con el agente Salvador Díaz Castro “El Chato”, con quien incluso la tropa
menciona tenía mejor relación:
“Lo llevaba a las fiestas y
lo dejaba entrar a las oficinas de la PEP”, en este caso se refieren a Alan
Fernando Garmiño Moreno “El Fashion” y/o “La Barbi” y/o “La Muñeca”, primo de
“El Karateca”, capturado en el mismo operativo.
Al interior de la PEP
mencionan también como involucrados con esta célula delictiva a Rogelio Estrada
Pérez “El Barney”, y “El Máscara” Montes
López.
Sin embargo, los elementos
acumulados hasta el momento, solo ubican como presuntos asociados a Pérez y
Díaz, y como lo dicho por Garmiño se integró a otra investigaciones internas
que se seguían en los expedientes de los mencionados a ambos agentes, les
iniciaron un procedimiento, fueron notificados y retirados del servicio
operativo, enviados al área de custodios, y se les inició un proceso administrativo,
independiente de lo que arroje la indagatoria ministerial en el fuero federal.
Previo a la investigación,
uno de los agentes tomó vacaciones y otro se reportó enfermo, y al igual que
Estrada y Montes, iniciaron los trámites de un amparo.
Otros señalados fueron tres
agentes ministeriales de los que no se pudo conocer los nombres y dos jefes de
la policía municipal de Tijuana, incluidos los que hayan pasado por la zona
norte en los últimos 11 meses.
EXTENDIENDO EL TERRITORIO
Así como el contacto con los
policías “El Karateca” los hizo a través de Alan Fernando Garmiño Moreno, su
primo fue utilizado para negociar en el resto de los municipios
bajacalifornianos:
“Los amarres se hicieron a
través de ‘El Fashion’, pero el pleito territorial continúa. “Por eso los
asesinatos en Tecate. Ese Vázquez Ontiveros es de la gente de ‘El Karateca’”,
aseguró a ZETA un investigador del área de inteligencia.
“Para el CAF todo se complicó
en ese municipio tras la captura de ‘El Güero Leches’ Humberto Acosta”, detenido
el 21 de diciembre de 2015.
El 18 de febrero de 2016, la
SSPE informó que detuvo a Carlos Vázquez Ontiveros, ex policía municipal de
Tecate, en compañía de Efraín Díaz Flore y Joselyn Ayón Castro o Joselyn Ávila
Castro.
Los tres estaban en posesión
de un arma larga R15, una ametralladora Uzi y un arma corta 9 milímetros, dos
granadas de fragmentación, seis cargadores y balas.
De acuerdo a la balística el
rifle resultó positivo en tres homicidios recientes:
El de Alejandro Soriano
Sánchez “El Crespo”, ejecutado el 1 enero en el Infonavit El Paraíso; el de
Luis Fernando López Contreras “El Cholo”, asesinado el 6 de enero en la Colonia
Valle Verde; un hombre identificado como “El Randy”, asesinado el 13 de
febrero, y en el mismo operativo homicida resultaron lesionados por bala, Amado
Landeros Pérez, Ángel Hernández Anaya, y Hermilo Chávez Osuna.
En Ensenada, el Consejo
Estatal de Seguridad ubica como miembros de “El CAF y de ‘El Karateca’”, a los
atacados Gabriel Ayala Fonseca “El Tres Animales” y Sergio Poblano “El Bibi”, a
Ayala intentaron matarlo sin éxito el 23 enero en un palenque, de la balacera 4
personas resultaron asesinadas –dos menores de edad– y 20 lesionadas.
A Poblano lo asesinaron en
octubre de 2015 junto a 3 miembros de su familia, incluido un niño.
Pero estos ataques los
ordenaron los hermanos Arzate, Alfonso y René, del Cártel de Sinaloa, en el
caso del palenque, lo organizaron Miranda Ordaz “El Rulas”, “El Fénix” y/o “El
Marión”, Arturo Misael Frías Ochoa “El Misa” y lo ejecutaron los detenidos
Joaquín Arizmendi y Cuauhtémoc Acosta Beltrán “Temoc” a este último aún no le
fincan cargos por las muertes.
Como parte del grupo de
autores materiales, las autoridades tienen identificados también a un hombre de
apodo “El Primo”, “El Vaquero”, “El Gordo de Tijuana” y “El Payaso”.
Este último, aseguran, es el
mismo que asesinó el 18 de octubre de 2013 en Los Cabos durante su fiesta de
cumpleaños a Francisco Rafael Arellano Félix.
En cuanto a Mexicali, de
acuerdo a la versión oficial, al ser capturados Los primos Garmiño estaban de
visita en la capital el estado para afianzar sus relaciones y recuperar el
control criminal del territorio cachanilla a través de la gente que
antiguamente traficó para el CAF en la colonia Baja California y Los Palomera.
ASESINADO DEL CÁRTEL JALISCO
Pasadas las 12:00 horas del
lunes 29 de febrero, dos hombres a bordo
de una camioneta Trooper se detuvieron a la altura de la calle Rio Balsas,
entre Río Suchiate y Bulevar Sánchez Taboada; uno descendió y baleó a dos
hombres que estaban a bordo de un Jetta gris en el estacionamiento de la Torre
Cosmopolitan.
El homicida cubrió su cara de
la cámara con una gorra, se paró del lado del copiloto y disparó, el piloto
José Manuel Estrada Bañuelos murió en el lugar y su acompañante, el policía
comercial y escolta contratado, Rodolfo Gersais Vélez López, falleció la noche
del martes 1 de marzo en el hospital.
En el auto se localizaron el
arma corta y el arma larga del policía sin disparar, y en la escena, 14
casquillos calibre 9 milímetros y dos proyectiles deformados.
La camioneta usada por los
homicidas fue localizada en la calle Unión, frente al número 1253 de la colonia
Zona Este, en el interior encontraron un cuaderno en el que escribieron.
“Firmar todos los martes
juzgado común 2do clave 939152, firmar los martes cada 15 días Segundo Federal
1:00 9 – marzo – 16 firmar todos los viernes juzgado 5to Común clave 937272”.
También una Cédula de Notificación expedida por el
Juzgado Segundo de Distrito de Procesos Penales, a nombre de Jesús Humberto
Carranza. El Jetta en el que fueron asesinados pertenece a Gustavo Cortez,
dueño de varios inmuebles en la Zona Río y prestamista.
De Manuel Estrada, las
autoridades solo saben que es hermano del abogado Alejandro Estrada, y una de
sus tareas era fungir como encargado de la seguridad de su hermano y manejarle.
Algunos testigos dijeron a
los policías que había otro hombre con los sujetos asesinados y que lo vieron
salir del edificio después del ataque, sin embargo, pese a que hay una cámara
para corroborar dichas versiones, al cierre de esta edición la Procuraduría
General de Justicia del Estado no podía confirmar o negar tales datos.
Las áreas de inteligencia del
Consejo Estatal de Seguridad de Baja California relacionan a los hermanos
Estrada Bañuelos con la defensa de criminales locales ligados al Cártel Jalisco
Nueva Generación que empezaron a tener enfrentamientos con el ala del Cártel de
Sinaloa, representado por Alfonso Arzate “El Aquiles” tras la captura de
Alfonso Lira Sotelo “El Atlante” en septiembre de 2014. Algunas líneas de
investigación también relacionan a los Estrada con gente de José Soto “El
Tigre”.
SECUESTRADORES “POR LA LIBRE”
El secuestrador que negoció
la liberación de la joven secuestrada el 17 de febrero y rescatada el 25 del
mismo mes, estaba “identificado” sólo por el modus operandi, en por lo menos
tres plagios más, el primero hace poco más de dos años.
Es un sujeto que escoge
únicamente mujeres, hábil para no ser ubicado y no agresivo; si bien son
aterrorizadas por la privación, sus víctimas no son golpeadas ni hambreadas,
nadie las toca y les dan facilidades para asearse.
Usualmente recoge los
rescates, da una hora y lugar para recuperar a la víctima y la entrega, pero
eso no sucedió esta vez.
Por ello las autoridades
consideran la posibilidad de que los cuatro delincuentes identificados de la
colonia Herrera que se asociaron con el secuestrador se habían ido “por la
libre”, cuando la familia pasó dos días esperando a la muchacha sin éxito. En
esas condiciones se realizó el operativo que culminó con el rescate de la
joven.
Los secuestradores materiales
viven entre la colonia Herrera y la colonia Unión de Tijuana, alguno de los
vecinos se dio cuenta que tenían a la joven plagiada, porque el 24 de febrero,
un día antes del rescate, hablaron al número de denuncia para dar el apodo de
uno de los captores -que sí corresponde a uno de los criminales- y reportó que
vivía en determinada zona; la Policía Estatal Preventiva realizó operativos sin
éxito.
La tarde del 25 de febrero
los agentes del Grupo Antisecuestros llegaron al número 5 de la calle Juan Tablada en la colonia Unión,
y en la primera casa que revisaron, encontraron a la joven secuestrada, con
ella tres hombres .
Abraham Uribe Conde “El Topo”
y Édgar Alejandro Martínez Amador “El Güerito”, que se habían integrado al
grupo delictivo apenas 48 horas atrás, les ofrecieron 2 mil dólares por
cuidarla pero no llegaron a pagarles.
Desde el martes 23 de febrero
no habían visto al resto de los delincuentes, el único que regresó fue Darío
Mojarro “El Killer” y/o “El Güero”.
Cuando los agentes entraron
los Uribe y Martínez se entregaron, pero Mojarro intentó huir cargando una
escopeta calibre 12 y retando con señas a los ministeriales que lo abatieron en
el interior de la casa marcada con el número 11 en la misma calle.
La Procuraduría ya identificó
a otros dos de los autores materiales del secuestro y tiene activados los
operativos de búsqueda porque no fueron localizados el jueves 25 en sus
domicilios.
Una vez hecho el peritaje de
las armas localizadas en las casas usadas por los presuntos delincuentes, la
PGJE pudo determinar que además de haber sido usadas para atacar a los agentes
del Grupo Antisecuestros el 20 de febrero en la colonia Herrera, las armas
resultaron relacionadas con otros seis eventos donde hubo lesionados por arma
de fuego, y cuatro homicidios.
“Es importante mencionar que
de las investigaciones y declaraciones de los hoy detenidos, en los que
refieren que Darío Mojarro, alias ‘El Killer’ y otro cómplice fueron
identificados como sicarios que se dedicaban a privar de la vida a personas a
cambio de dinero”, señaló la PGJE en el
boletín donde informó de la consignación de Uribe Conde y Martínez Amador, por
el secuestro.
HOMICIDIOS EN LOS QUE ESTÁN INVOLUCRADAS LAS
ARMAS
Arce Mayoral Pablo Francisco,
25 de febrero de 2014, colonia 17 de agosto, en Rosarito. Cristian Porras
Zatarain, 15 de julio de 2014, Fraccionamiento Palmeras, Tijuana. José
Ilisandro Chávez Soto, 24 de octubre de 2015, Colonia Xicoténcatl Leyva,
Tijuana. Edgar Leonel Palencia Osorio, 19 de agosto de 2014, Tijuana.
(SEMANARIO ZETA/ INVESTIGACIONES ZETA / LUNES, 7
MARZO, 2016 01:00 PM)
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