México, entre los 10 países con más robo de documentos
En Tijuana, una persona puede tener dos nombres y un acta de
nacimiento, o bien, dos actas y un nombre, lo que le ocasiona problemas
para tramitar documentos básicos como el pasaporte o la credencial
federal de elector. El trámite para la rectificación de acta de
nacimiento tarda de dos semanas a un mes, y tiene un costo de mil 200
pesos
Francisco Navarro Fausto
Según datos de la Oficialía 01 del Registro Civil en Tijuana, entre
2010 y 2012, se expidieron 82 mil 315 solicitudes de Clave Única de
Registro de Población (CURP), y en lo que respecta a la solicitud para rectificación de actas, en igual periodo, la cifra llegó a 2 mil 331 documentos.
Información de la dependencia establece que el tiempo
promedio para una corrección de documentos oficiales es de tres semanas,
aunque no es raro que ese plazo se extienda.
La elevada cantidad en los números de la dependencia
municipal, se debe a que en la ciudad, el Servicio de Administración
Tributaria (SAT) y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), son las
instituciones que con frecuencia solicitan a los ciudadanos cotejar la
información que aparece en la CURP (registro asignado a residentes y ciudadanos mexicanos del país), o bien, por errores que presenta el acta de nacimiento del interesado.
Es muy común que las letras del nombre estén cambiadas,
que haga falta un acento, que lo lleve de más, o que los nombres o
apellidos estén abreviados cuando deben ir con todas sus letras.
Situación que legalmente pone en aprietos al afectado, pues al no
coincidir la información, jurídicamente el ciudadano no existe, puede
existir dos veces, o incluso queda expuesto al robo o suplantación de
identidad, expresó un abogado consultado por ZETA.
Además,
en la mayoría de las ocasiones, los homónimos (personas que tiene el
mismo nombre) también son un problema. En Baja California, el apellido
más frecuente es García (140 mil 901 personas lo llevan), mientras que
los nombres más comunes son: García García José Luis; Hernández
Hernández José Luis; y Hernández Hernández Juan.
A nivel nacional, los apelativos más repetidos son Hernández, García y López; 7 millones 295 mil 884 ciudadanos lo portan.
Testimonios
Laura registró a su hijo hace más de 20 años, en
Acapulco y Tabasco. La primera vez, porque el progenitor cumplió con
dicho trámite, mientras que en la segunda lo hizo ella. Esto ha
ocasionado que su vástago tenga problemas con su identidad, por lo que
ahora requiere de una sola acta. De ahí que acudió al Registro Civil
para solicitar el trámite, pero éste ha tardado varias semanas.
Arturo y Martha están de visita en Tijuana, ella es
nacida en la Unión Americana e hija de padres mexicanos, por lo que
tiene derecho a la nacionalidad mexicana sin perder la estadounidense.
Es la segunda vez que acuden al Registro Civil, en espera de que les
digan cuándo les entregarán el documento.
Lorena vive en la Zona Este y es originaria de Chiapas,
hace un año llegó a Tijuana y usó el acta de nacimiento de su hermana
para buscar trabajo. Le borró el nombre y puso el suyo, y se colocó en
una empresa. En fechas recientes, el departamento de recursos humanos le
dijo que han detectado un problema en su documentación, por lo que
tendrá que corroborar la información de su acta de nacimiento en el
Registro Civil; al fin inició la diligencia la semana pasada.
“Ma. y María no es lo mismo”
De acuerdo a la Oficial del Registro Civil 01, Carolina
Murrieta Cano, en la dependencia se realizan 27 trámites diferentes. Los
más recurrentes son la expedición de copias certificadas, de actas por
computadora, de registro de clave CURP.
“Lo que se da también es la rectificación de actas,
porque al margen del libro le ponían acotaciones como ‘Ma.’ cuando se
llamaba María, y esto después ocasiona problemas, sobre todo a la hora
de tramitar el pasaporte mexicano, donde son muy escrupulosos. En 2012,
en reuniones plenarias que tuvimos con el Registro Civil del Estado, se
llegó al acuerdo que ‘Ma.’ y María no es lo mismo”.
La funcionaria citó que en algunas ocasiones, en las
actas se pone el nombre como el ciudadano se ha conducido a lo largo de
su vida, porque de otro modo, afectaría su situación jurídica.
“Cada estado tiene su propio código civil, lo
generalizado en el país, es que las correcciones se hagan por la vía
administrativa, aunque algunos lo hacen por la vía judicial, donde se
acude a un Juzgado para que el juez emita una resolución, y nosotros
acatamos la orden. Aquí son pocos los casos cuando no alcanza
rectificación expedida por nosotros, y entonces se tiene que ir al
Juzgado, que es cuando la persona se casó dos veces y hay que anular un
acta. O ciertas rectificaciones en las que hay mucha ambigüedad”.
— ¿Existe la forma de que algún funcionario pueda hacer cambios en los documentos oficiales sin que se den cuenta?, se le cuestionó.
“Al inicio batallamos, pero acoté todas las claves.
Desde que estoy, solo hay una clave y una persona se encarga de eso. El
sistema está vulnerable, pero te puedo asegurar que no salen esas actas,
aunque cualquier persona puede tener un acta y eso es un riesgo. En
Estados Unidos, te piden identificación si no eres el interesado”.
Claves repetidas: SAT
Los trámites más recurrentes en las oficinas de SAT en
esta ciudad, son cambios de domicilio, duplicidad en CURP o corrección
del RFC (cambio de letras o de nombres).
“Son gente que se inscribe y que sus actas no están
aquí. Entonces los mandamos al Registro Civil para que corrijan la
información, pero a veces se tarda, porque de aquí que les lleguen desde
su estado de origen los documentos oficiales, tienen que esperar”,
apuntó Ana Silvia, administradora local de Servicios al Contribuyente
del SAT.
— ¿Se han presentado personas con documentos adulterados?
“Sí, pero no es muy frecuente. Lo que hacemos es
denunciar ante el Ministerio Público, pero desafortunadamente no podemos
ejercer facultad alguna, porque no somos peritos. En consecuencia, el
trámite no se procesa. No somos autoridad que lo emitió, por lo que
rechazamos el trámite alterado. Recuerdo un caso en que un hombre
presentó como identificación, una cédula profesional. Validamos el
documento en la página de la Secretaría de Educación Pública, y en los
registros se trataba de una persona del sexo femenino. Ni ese detalle
cuidaron”, acotó.
La recomendación de la funcionaria federal, es que
quienes reciben asesoría de terceros para llevar a cabo algún trámite
ante la dependencia, verifiquen lo que están haciendo, porque
aparentemente les están solucionando un problema relacionado con su
registro personal; sin embargo, en realidad les están complicando su
identidad.
Problemas con los extemporáneos
De acuerdo a Martha Figueroa, encargada de la Unidad de Enlace de la SRE, ubicada en Plaza Oasis,
cuando un ciudadano acude a solicitar el pasaporte y los documentos no
están legibles, se le pide acudir al Registro Civil para que se hagan
las correcciones.
“En el caso de la extemporaneidad (personas registradas
mucho tiempo después de su nacimiento), es más complicado porque los
culpables del problema son los padres que los registraron después de
seis meses. Con nosotros se toma como extemporáneo después de tres años,
y un mes antes del que naciste”.
A su consideración, el problema es que en muchos de los
casos, las personas dicen haber nacido en 1970 a partir del año actual
(en curso), y entonces se toma en cuenta ese periodo, pero después las
fechas no coinciden
“Muchos ciudadanos no leen sus actas, no se dan cuenta
si los apellidos de mamá y papá coinciden con los de ellos propios. Uno
de los principales problemas, es que no escriben bien sus datos
personales. Nosotros pedimos el acta de nacimiento para ver si nació en
México, para estar seguros que sean quienes dicen ser. Que coincida bien
la información, porque éste es un documento con validez oficial”,
advirtió Figueroa, para después referir que han detectado documentos
falsos, como actas con papel membretado, sellos originales y donde
vienen asentados los datos, pero la información no es la verdadera.
En
dos años y medio que lleva laborando, la consultada solo se ha topado
con un par de casos de ese tipo, y de credenciales de elector falsas,
dijo no tener ese registro.
Pocos documentos adulterados
En torno al tema de identidad, el vocal del Registro
Federal del Electores en Baja California, Jorge Calderón León, expresó
que es raro que una persona lleve una identificación inválida para hacer
el cambio ante el IFE.
“Por supuesto que si la persona sabe que no es válida,
no la va a llevar a cambiar. Sin embargo, nos llegan reportes del
Ministerio Publico, de otros organismos, aunque son muy raras y
esporádicas. Las validamos, y al no tener ningún dato en nuestro padrón,
las remitimos al área jurídica del Ministerio Público Federal”, dijo.
En cuanto a las actas de nacimiento, se da mucho el
cambio u omisión de nombres (por ejemplo tienen “Juan Perez García”, y
el nombre es Juan Manuel Pérez García). Error que se presenta debido a
que el ciudadano da el nombre que difiere en algo con el acta, “no son
tanto documentos apócrifos”, afirmó Calderón.
Robo de identidad en México
“He estado viendo que estamos dentro de los diez países
con mayor robo de identidad, entonces, yo, como el 80 por ciento de los
mexicanos, desconfío que nuestros datos estén resguardados de forma
segura, porque lo he visto. Por ejemplo, de repente me hablan vía
telefónica, preguntando si conozco a una persona y les digo que no,
luego les cuestiono quién les dio mis datos y se quedan callados”,
comentó el catedrático Francisco González Bermúdez, quien luego agregó:
“Este país no se caracteriza por cuidar la identidad de
sus habitantes, no tenemos una precaución en ese sentido. Los bancos han
abusado mucho de esto porque les interesa promocionar sus productos,
información que está a merced de otras empresas para que puedan hacer
negocio”.
Según la firma Card Protection Plan,
especializada en brindar asistencia a bandos y víctimas de fraude por
extracción de datos personales, México ocupa el octavo lugar en una
lista de diez naciones donde se da el delito de robo de identidad.
Incluso, es el único que figura en el listado.
No resulta extraño, entonces, que en Estados Unidos la
licencia de conducir es un documento con validez oficial, como lo podría
ser una credencial de identificación, mientras que en México no sucede
esto. Según González Bermúdez, el rechazo de la licencia para realizar
trámites implica el nivel de suspicacia que existe en torno a dicho
documento.
“Ellos desconfían de lo que están emitiendo, esto nos ha
llevado a hacer cada vez más credenciales o formas que intentan
asegurar datos y resguardarlos, cuando en la realidad no pasa eso. Sin
embargo, esta información es vendida por la misma autoridad para
beneficio de grandes empresas que de alguna manera quieren hacer negocio
con la gente. Ésa es la idea que tengo sobre el tema”, insistió
González Bermúdez.
El ilícito
Según datos de Symantec, compañía de seguridad en
internet, cada 5 segundos una persona es víctima de robo de identidad
en México. Aproximadamente 10 millones de ciudadanos ha sido afectados,
lo que ha provocado una tardanza de varios años para recuperar su nombre
e historial de crédito.
Todavía más: el Reporte de Crimen Cibernético 2011,
elaborado por dicha empresa, indica que 8 de cada 10 adultos han sido
víctimas de fraudes a tarjetas de crédito, robo de identidad, amenazas y
extorsiones.
Hay que mencionar que con la información personal de un
tercero, se puede arrendar una vivienda, obtener un trabajo y hasta
defraudar instituciones.
Por ejemplo, información de la Coordinación de
Investigación y Asuntos de Defraudación, del Instituto Mexicano del
Seguro Social (IMSS), que se encuentra en la portal del Instituto
Federal de Acceso a la Información (IFAI), establece que de 2000 a 2011
se formularon 96 querellas por hechos probablemente constitutivos del
delito de fraude genérico en modalidad de sustitución de persona.
El
monto del daño ocasionado por cobro indebido de incapacidades fue de 19
millones 248 mil pesos. Algunas de ellas estaban en aportación de
pruebas para acreditar el delito (18), en otras se ejerció acción penal
(13), y el resto se encuentra en trámite.
En otro rubro, acorde a estadísticas de la Secretaría de
Seguridad Pública Federal sobre combate al delito cibernético y
tecnológico, entre septiembre de 2010 y julio de 2011, la División
Científica de la Policía Federal atendió 5 mil 582 denuncias ciudadanas
sobre delitos cibernéticos.
Por su parte, la Comisión Nacional para la Defensa de
los Usuarios de las Instituciones Financieras (CONDUSEF) establece que
cuando una persona hurta información personal y financiera de otra, con
la finalidad de substituir su persona y así obtener beneficios de forma
fraudulenta, se comete robo de identidad. Los datos se pueden utilizar
para solicitar créditos o usar los que ya tienen de forma desmedida, e
incluso obtener, a nombre de otra persona, algún documento oficial.
ZETA conversó con un defensor de oficio de un
Juzgado federal en Tijuana, quien se ha topado con pocos casos donde la
persona presenta documentos falsos, y cuando lo ha visto, se trata de
licencias de conducir o cédulas de identidad americanas, y alguna que
otra credencial del Instituto Federal Electoral (IFE).
(SEMANARIO ZETA/ Francisco Navarro Fausto/
junio 17, 2013)
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