Conceden amparo a “Micky” Márquez; en 6 años recibió 41 millones de dólares
El gobierno de Calderón dio un golpe “a medias” a una red de blanqueo de capitales que operaba para el CAF. De 55 miembros de dos células criminales, solo el 20 por ciento de ellos fueron detenidos. Al casacambista Miguel Márquez Treviño le ofrecieron ser testigo protegido, y le sacaron una declaración en la que señaló a una empresa tijuanense de lavar 12 millones de dólares a la semana, a través de un banco de San Diego. El inculpado continúa en prisión
Investigaciones ZETA
A casi tres años y medio del encarcelamiento del empresario Miguel
Ángel Márquez Treviño “El Micky”, y al menos una decena de sus socios y
colaboradores, la acción de la justicia no ha llegado al resto de los
integrantes de la red de lavado de dinero establecida entre Tijuana y
Culiacán, que de acuerdo a la Procuraduría General de la República,
operaba para el Cártel Arellano Félix (CAF).
En la organización criminal se presume la intervención de 55
personas, desde personal directivo hasta empleados de casas de cambio y
de empeño, quienes realizaban grandes transacciones y colocación de
dinero en moneda nacional y divisas extranjeras, sin reportarlo a las
autoridades hacendarias.
A Márquez Treviño, en la Subprocuraduría Especializada en
Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) le prometieron fungir
como testigo protegido para obtener beneficios penales.
A final de
cuentas no le cumplieron y, según su dicho, llegó a declarar que estaba
dispuesto a denunciar a una empresa mexicana que a través de un banco de
San Diego, lavaba 12 millones de dólares a la semana, sin que se
tenga conocimiento de qué ocurrió con su señalamiento. Sigue preso en
el Centro Federal de Readaptación Federal Número 4 “El Rincón”, en
Nayarit.
Los antecedentes
“El Micky” Márquez, administrador de diversas negociaciones, fue
detenido la mañana del 25 de noviembre de 2009 durante una serie de
cateos realizados en Tijuana por la SEIDO. Meses atrás, en junio de ese
mismo año, la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público (SHCP) denunció ante la PGR las sospechosas
actividades y movimientos que realizaban casas de cambio y empeño
representadas por Márquez Treviño en Baja California y Sinaloa.
Durante los cateos, personal ministerial aseguró 3 millones 720 mil
993 pesos con 30 centavos, y 598 mil 206 dólares en efectivo. Además del
dinero, se localizaron en el domicilio del inculpado más de 100
cartuchos para arma de fuego sin licencia y de uso exclusivo del
Ejército, calibres 9 milímetros, 38 súper, 38 especial y 357 mágnum,
estos últimos con punta hueca. También fueron asegurados varios
vehículos dentro de la averiguación previa UEIORPIFAM/AP/115/2009.
En diez operativos simultáneos realizados por fuerzas federales en
esta frontera y en la capital sinaloense, se detuvo a José Abelardo
Méndez Contreras, Mauricio Gutiérrez Flores, Hugo Ramón Mora Orozco,
Rafael Aurelio Aguirre Niebla, Julio Amavizca Valenzuela, María del
Refugio Palazuelos Navidad, David Francisco Gallardo Gutiérrez, Aurelio
Aguirre Palazuelos, Luis Ángel Duarte Sarabia y Aída Rivera Gerardo.
Todos, a excepción de la última señalada, permanecieron arraigados en
la Ciudad de México hasta el 19 de enero de 2010, cuando se cumplimentó
la orden de aprehensión dictada en su contra por el Juez Tercero de
Distrito en Materia de Procesos Penales Federales, con residencia en
Toluca, Estado de México, en la causa penal 18/2010.
Márquez y coacusados fueron remitidos al penal federal de mediana
seguridad de Nayarit, donde vía exhorto, un Juez de Distrito de la
localidad les dictó auto de formal prisión el 29 de enero siguiente, por
su probable responsabilidad en la comisión de los delitos de
delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia
ilícita.
Asimismo, al “Micky” se le inició proceso por posesión de cartuchos para arma de fuego de uso exclusivo de las fuerzas armadas.
Falsa promesa
Al emitir su declaración ministerial, Miguel Ángel Márquez Treviño
negó su participación en los hechos imputados, y el pertenecer a alguna
organización criminal en el blanqueo de capitales. Aseguró que el dinero
en moneda nacional y en dólares, localizado durante los cateos, estaba
compuesto por el efectivo de tres negocios que se encuentran en un mismo
domicilio en Tijuana, además de que el origen del dinero deriva de
préstamos recibidos. De las balas, dijo que eran de uno de sus hijos.
Ante el juez, al rendir su declaración preparatoria, el casacambista
ratificó lo antes expuesto, argumentando que durante la etapa de arraigo
a la que estuvo sometido, el 12 de enero de 2010 lo trasladaron del
Centro de Arraigo de la colonia Doctores de la Ciudad de México, a las
instalaciones de la SEIDO, “para hacer una declaración como testigo
colaborador o protegido” a cambio de su libertad, según le dijeron de
palabra.
Márquez Treviño declaró que durante más de cuatro horas proporcionó “detalles de la situación extremadamente anormal donde se lava
prácticamente todo el dinero sucio de Tijuana”.
Inclusive manifestó que
desde el 14 de diciembre de 2009, ya estando arraigado, intentó
comunicarse con la Secretaría de la Defensa Nacional en Tijuana, al
teléfono (664) 685-0297, “para reportar a Inteligencia Militar la
denuncia de un banco americano con una empresa mexicana que estaban lavando 12 millones de dólares a la semana desde Tijuana, exportándolo a San Diego en servicio de traslado de valores”.
Pero no se conoció del asunto de la supuesta declaración que habría
realizado el empresario como “testigo protegido”. El 31 de mayo de 2011,
el Cuarto Tribunal Unitario del Segundo Circuito en Toluca, confirmó el
auto de bien preso contra los procesados, en toca penal 55/2010.
Las operaciones
Estados financieros proporcionados a la PGR por las instituciones
bancarias donde se localizaron cuentas abiertas por Miguel Ángel y
socios, revelan que entre los años 2002 y 2008 se registraron depósitos
por 41 millones 508 mil 108 pesos con cinco centavos, y un millón 35 mil
353 dólares americanos con 75 centavos.
También se estableció que de dichas cuentas, se retiraron 41 millones
491 mil 690 pesos con seis centavos, y un millón 035 mil 253 dólares
con 34 centavos.
En las casas de cambio se efectuaban operaciones mayores a 10 mil
dólares, y se libraron al menos 16 cheques por esas cantidades a favor
de diversas personas identificadas por la fiscalía federal.
En coordinación con Hacienda, la SEIDO llegó a la conclusión de que
no obstante Miguel Ángel Márquez Treviño era accionista de ocho empresas
diferentes, no había “declaraciones anuales presentadas a su nombre
ante la autoridad tributaria”.
Dos células en la red
Por su parte, autoridades ministeriales determinaron en la
indagatoria que la organización de Márquez y socios estaba perfectamente
coordinada para delinquir, integrada en dos grupos. Uno conformado por
las personas que residían en Tijuana, y otro por los que vivían en
Culiacán, Sinaloa, quienes a su vez, tenían subdivisiones.
En la primera célula criminal se encontraban los sujetos que tenían
firmas autorizadas en las cuentas bancarias de las empresas en que se
efectuaron depósitos por elevadas cantidades de dinero en moneda
nacional y dólares americanos, además de que en una de las sociedades,
se realizó venta de divisas.
Algunos de los integrantes de la primera célula, eran los encargados
de transferir el dinero de procedencia ilícita al diverso grupo de
personas que residía en Culiacán.
La segunda célula “también estaba integrada por sujetos autorizados
para librar contra las cuentas de las referidas sociedades”. En ese
grupo se destacó la existencia de 55 personas que recibían depósitos
directamente de las cuentas bancarias, que eran los propios empleados de
las casas de cambio y de empeño.
A la fecha y a más de tres años de los hechos, se desconoce la
identidad de los sospechosos, nombres que obran en poder de la PGR y no
se les ha detenido.
Difícil resultará en la nueva administración,
informar oportunamente del estado del asunto, sobre las órdenes de
aprehensión cumplimentadas, y no se diga de las pendientes.
Le conceden amparo
Luego de que al “Micky” Márquez Treviño le fue confirmado el auto de
formal prisión, en 2011 interpuso un juicio de amparo ante el Primer
Tribunal Unitario de Toluca contra la resolución; protección que rindió
frutos recientemente, al concederle el amparo para efectos de reponer el
procedimiento por el tribunal que conoció de la apelación.
La magistrada María de Lourdes Lozano Mendoza concedió la protección
constitucional al quejoso porque, a su parecer, “el magistrado de
apelación omitió exponer los motivos por los cuales, a su juicio,
merecían eficacia demostrativa; menos aún indicó los indicios que de
éstas se obtenían en lo individual, y la forma en que se adminiculaban
entre sí”.
En su razonamiento, la titular del tribunal refiere que el juzgador
indicó que la intervención del inculpado se circunscribe a la
realización de operaciones y movimientos financieros utilizando diversas
empresas: canje de moneda nacional por dólares americanos, y depósitos
en diferentes cuentas y transferencias.
De acuerdo a la resolución del juicio de garantías, el cual resolvió
la apelación que confirmó el auto de bien preso, pasó por alto indicar
con qué pruebas se corroboraban dichos actos, qué indicios se obtenían
de cada una de ellas, y cómo se entrelazan entre sí.
La magistrada Lozano añadió que en el presente caso, su homólogo se
conformó con citar la valoración efectuada por el juez de origen, y
“quedó evidenciado que la misma es incongruente y carece de motivación”,
por lo que al conceder el amparo, ordenó dejar insubsistente la
confirmación del auto mencionado, que se entre al estudio de los
señalamientos y de cada prueba, para dictar una nueva resolución apegada
a derecho.
La copia de la causa penal, motivo de la violación de garantías, fue
devuelta al Cuarto Tribunal Tribunario en 23 tomos del proceso 18/2010, y
un tomo del toca de apelación 55/2010.
El magistrado que repondrá el procedimiento, ya notificó al tribunal
de amparo que dio cumplimiento a lo ordenado, dejando sin efecto la
confirmación que hizo en mayo de 2011, pero debido a lo voluminoso del
expediente y lo complejo de las imputaciones, solicitó una prórroga de
cuatro meses para emitir un nuevo veredicto.
La autoridad protectora estima procedente y razonable la petición del
magistrado, y concedió la citada prórroga, por lo que se dará
cumplimiento a la ejecutoria del amparo a más tardar en la primera
quincena de agosto de 2013.
El auto de formal prisión en contra de Miguel Ángel Márquez Treviño,
dictado por el juez federal de origen, persiste, lo que quedó sin efecto
fue la confirmación del mismo, por lo que “El Micky” no obtendrá su
libertad durante ese periodo.
(ZETA Investigacionesabril 22, 2013)
El Micky, murio de de cancer?
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