La pérdida nuevamente es millonaria en
la región de Guaymas-Empalme
De nuevo en la región se
registran pérdidas millonarias por la mortalidad del cincuenta por ciento en
los 7 estanques camaronícolas en su totalidad de producción, por el “síndrome
de mortandad temprana”, informó el gerente de la granja San Fabián.
Guadalupe Iñiguez, reveló que
esta situación inició hace tres años, cuando los productores cambiaron el tipo
de cepa que manejaban, para empezar a trabajar una que se importa de Ecuador,
la cual dijo; provoca problemas en el organismo de los camarones.
Esto refirió, no ha podido
ser comprobado por las autoridades sanitarias, ni criadores, lo cual dificulta
la prevención y el tratamiento, amén de someter las cepas a estudio de laboratorios
SPF, donde se ha clasificado libre de patógenos.
“Pese a que ya es mucho el
tiempo que se ha padecido ésta problemática en las explotaciones acuícolas, se
sigue trayendo este tipo de cepa y esto obliga a los trabajadores a reescribir
el protocolo de manejo de este producto buscando obtener mejores resultados y
mayores beneficios, ya que actualmente se maneja promedio del 50 por ciento en
mortandad, pero hay estanques que reflejan desde un 35 por ciento a un 85 por
ciento de mortalidad de larvas de camarón” indicó Guadalupe Iñiguez.
Comentó es un Vibrio, el que
desencadena un problema genético en esta especie al provocar necrosis aguda en
del hepatopáncreas y que lamentablemente se sigue transmitiendo a las nuevas
generaciones, tronando esta una situación complicada, dado que está arraigado
biológicamente en el microorganismo, evitando que el camarón haga digestión y
al final muera de hambre; diferente a los efectos que causan otros tipos de
patógenos.
Lo anterior resaltó, podrán
generar pérdidas millonarias, ya que de entrada; el costo del alimento se
incrementó un 60 por ciento y es sustentado en dólares.
El precio del alimento y la
mortandad temprana consideró, son factores que marcarán la pauta para que
algunos criadores puedan cultivar o no en el siguiente ciclo, el cual estiman
se inicie en el mes de octubre.
Un factor que dijo los ha
favorecido para mantenerse activos y seguir invirtiendo, ha sido el precio de
comercialización, siendo este en promedio de cien, hasta 120 pesos, según la
talla que registre la especie, pero de igual manera son más de 300 los trabajadores
que se sustentan de esta actividad, representando una inversión significativa
la que se aplica en cada ciclo, que se acompaña de una pérdida incuantificable
hasta que se opte por cambiar el producto madre o las autoridades encuentren
otra alternativa que disminuya los índices de mortalidad.
(DIARIO DEL YAQUI/ Ricardo López/ 18 DE JUNIO 2016)
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